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11G7 ;

Tesis sobre la estructura y organización


de los Partidos Comunistas

2
M 6' Ik ?

•(APROBADAS EN EL 3 « CONGRE80
DE LA INTERNACIONAL COMUNISTA)

BUENOS AIRES
1921
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TESIS SOBRE LA ESTRUCTURA Y ORGANIZACIÓN


BE LOS PARTIDOS COMUNISTAS

GENERALIDADES
1. L a organización del P a r t i d o de- de u n a importancia esencial p a r a el
be ser a d a p t a d a a las condiciones y movimiento comunista. E s esta simi-
a los fines de su actividad. E l P a r t i d o litud la que da la base común de orga-
Comunista debe ser la vanguardia, el nización de los P a r t i d o s Comunistas
ejército dirigente del proletariado du- de todos los países.
rante todas las fases de la lucha re- E s sobre esta base que es necesario
volucionaria de las clases y p a r a el desenvolver la organización del Par-
período de transición ulterior hacia la tido Comunista y no con la fundación
realización del socialismo, este primer de algún nuevo P a r t i d o modelo en lu-
grado de la sociedad comunista. gar del que ya existe o buscando una
2. Ko puede h a b e r formas de orga- forma de organización absolutamente
nización inmutables y absolutamente correcta o con estatutos ideales.
convenientes p a r a todos los partidos
comunistas. Las condiciones de la lu- 3. L a mayor p a r t e de los P a r t i d o s
cha proletaria de clases se transfor- Comunistas, así como la I n t e r n a c i o n a l
man sin cesar y, conforme a esas Comunista, como conjunto del prole-
transformaciones, las organizaciones tariado revolucionario del mundo en-
de vanguardia del proletariado deben tero, tienen de común en las condi-
buscar, t a m b i é n constantemente, las ciones de su lucha el tener que com-
nuevas formas convenientes. Las par- batir contra la burguesía t o d a v í a rei-
ticularidades históricas de cada p a i s ^ nante. L a victoria sobre ésta, la con-
determinan formas especiales de orga- quista del poder arrancado a la bur-
nización p a r a los distintos partidos. guesía, constituye p a r a estos P a r t i d o s
y p a r a esta I n t e r n a c i o n a l el fin prin-
P e r o esas diferenciaciones tienen un
cipal determinante.
cierto límite. L a similitud de las con-
diciones de la lucha proletaria de cla- Lo esencial, entonces, p a r a todo el
se en los distintos países y en las dis- trabajo de organización de los P a r -
t i n t a s fases de la revolución prole- tido Comunistas, en los países capi-
taria, constituye, a pesar de todas las talistas, es edificar u n a organización
particularidades existentes, u n hecho t a l que la victoria de la revolución
_ 4 —

proletaria sobre las clases poseyentes 5. L a dirección de la lucha revo-


y su estabilización sean posibles. lucionaria de clase supone en los Par-
4. E n las acciones comunes, es in- tidos Comunistas y en sus órganos di-
dispensable, p a r a el éxito, tener una rigentes la ligazón orgánica y la más
dirección; ésta es necesaria, sobre to- grande potencia de ataque y de adap-
do en vista de los grandes combates tación a las condiciones v a r i a n t e s de
de la historia mundial. L a organiza- la lucha.
ción de P a r t i d o s Comunistas, es la
orgaT>- ?ción de la dirección comunis-
L a dirección supone, además, p a r a
ta la revolución proletaria. ser eficaz, de la manera más absoluta,
el contaeto más estrecho con las ma-
- ,<-i-a guiar bien a las masas, el
sas proletarias. Sin ese contacto, la
P a r t i d o necesita una buena dirección
dirección no guiará nunca a las ma-
para sí mismo. L a t a r e a esencial de
sas; no podrá, en el mejor de los ca-
la organización que debemos impo-
nemos es la siguiente: formación, or- sos, más que seguirlas.
ganización y educación de un P a r t i d o Las relaciones orgánicas deben ob-
Comunista puro y realmente dirigen- tenerse en las organizaciones del Par-
te, p a r a guiar verdaderamente el mo- tido Comunista por medio de la cen-
vimiento revolucionario proletario. tralización democrática.

II
E! centralismo democrático
6. L a centralización en la organi- nización se subdividió en u n a masa de
zación comunista, es la centralización funcionarios activos y de administra-
de la actividad política y no la de dos pasivos. E l movimiento obrero re-
dominación y de potencia. E l P a r t i d o volucionario ha heredado inevitable-
Comunista no se presenta como poten- mente del medio burgués, e s t a ten-
cia de organización más que eontra dencia al formalismo y al dualismo.
los enemigos de la revolución proleta- E l P a r t i d o Comunista debe sobre-
r i a ; pero no contra el proletariado ponerse radicalmente a esos antago-
revolucionario. Es de suyo imposible nismos por un trabajo sistemático,
conciliar una especie de antagonismo político, organizador y por mejora-
de poder y de lucha por la domina- mientos y revisiones repetidas.
ción en el seno del P a r t i d o Comunista 7. Un P a r t i d o de las masas socia-
con los principios del centralismo de- listas, transformándose en P a r t i d o de
mocrático adoptados por la I n t e r n a - masas comunistas, no debe limitarse
cional Comunista. a concentrar en sus manos la direc-
E n las organizaciones del viejo mo- ción central, dejando subsistir p a r a el
vimiento obrero no revolucionario, t a l resto el antiguo orden de cosas. Si la
dualismo se desarrolló lo mismo que centralización no ha de ser letra
en la organización del E s t a d o bur- muerta, sino un hecho real, es nece-
g u é s ; nos referimos al dualismo entre sario que su realización se cumpla de
la burocracia y el " p u e b l o " . Bajo la modo que sea p a r a los miembros del
influencia desecante de la atmósfera P a r t i d o un refuerzo y un sostén, real-
burguesa, las funciones se aislaron en mente justificados, de su actividad y
cierto modo y la comunidad del tra- de su combatividad comunes. De otro
bajo fué reemplazada por una demo- modo aparecerá a las masas como una.
cracia puramente formal, y la orga- simple buToeratización del P a r t i d o y
—- 5 —

piovoeará u n a oposición contra toda no se agrega n a d a de acción comu-


centralización, t o d a dirección y toda nista y si en el trabajo de organiza-
disciplina estricta. E l anarquismo es ción del trabajo político, la pasividad
el contrapeso del burocratismo. de la masa de adherentes continúa,
L a democracia puramente formal en el P a r t i d o no ha cumplido con la me-
la organización no puede descartar ni nor p a r t e de lo que ha prometido al
las tendencias del burocratismo n i la aceptar un programa comunista, por-
anarquía, porque es precisamente so- que la primera condición de la reali-
bre la base de esta democracia que zación de ese programa, es el entre-
la anarquía y el burocratismo han po- namiento permanente de todos los
dido desarrollarse en el movimiento miembros en el trabajo cotidiano.
obrero. P o r esta razón, la centraliza- E l arte de la organización comunis-
ción de organización, es decir, el es- t a consiste en utilizar a todo y a to-
fuerzo p a r a obtener u n a dirección dos p a r a la lucha proletaria de clases,
fuerte, no puede tener éxito si se en- r e p a r t i r entre todos los miembros del
saya realizarlo sobre el terreno de la P a r t i d o todo el trabajo político y mo-
democracia formal. Es, entonces, in- vilizar, por su intermedio, las más
dispensable, ante todo, desarrollar y grandes masas del proletariado p a r a
mantener el contacto vivo y las re- el movimiento revolucionario; a la
laciones mutuas tanto en el seno del vez que mantener firmemente en sus
P a r t i d o , como entre los órganos diri- manos la dirección del movimiento,
gentes y los afiliados, y entre el Par- no por la fuerza del poder, sino por
tido y las masas del proletariado que la fuerza de la autoridad conquistada,
no le pertenecen. es decir, por la energía, la experien-
cia, la capacidad y la tolerancia.
8.—El P a r t i d o Comunista debe ser
10.—Todo P a r t i d o Comunista debe,
una escuela de trabajo marxista re-
entonces, por sus esfuerzos conquistar
volucionario. Es por el trabajo coti-
únicamente miembros v e r d a d e r a m e n t e
diano común en las organizaciones del
activos y exigir que cada uno de los
P a r t i d o que se estrecharán los lazos que militan en sus filas pongan a
entre las diferentes partes y entre los disposición de su P a r t i d o , su fuerza
distintos miembros. y su tiempo, en la medida que pue-
E n los P a r t i d o s Comunistas lega- dan disponer de ellos, según las cir-
les, falta todavía la participación re- cunstancias en que vivan y t r a b a j e n .
gular de la mayor p a r t e de sus miem- P a r a formar p a r t e del P a r t i d o Co-
bros en el trabajo político cotidiano. munista, es necesario, en general, a d a .
Ese es su mayor defecto y la causa más de la convicción comunista, se
principal de la incertidumbre de su entiende, cumplir con las formalida-
desarrollo. des de inscripción como candidato a
9.—Es siempre peligroso p a r a un adherente y luego como miembro; pa-
P a r t i d o obrero que da sus primeros g a r regularmente las cotizaciones es-
pasos hacia su. transformación comu- tablecidas, la suscripción al diario del
nista, conformarse con la aceptación P a r t i d o , etc.; pero lo más i m p o r t a n t e
de un programa comunista y el reem- es la participación de todos los afi-
plazo de la doctrina precedente por la liados en el trabajo político cotidiano.
del comunismo, limitándose a cambiar 11.—Todo miembro del P a r t i d o deba,
los funcionarios hostiles a esta dos- en general y p a r a el trabajo político
t r i n a por comunistas. L a adopción de cotidiano, pertenecer a un pequeño
un programa comunista no es más que grupo de trabajo — comité, comisión,
una manifestación de la voluntad en oficina, grupo, fracción o núcleo. Sólo
transformarse en comunista. Si a ello de esta manera el trabajo político
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puede ser repartido, llevado y cum- Los núcleos comunistas son grupos
plido regularmente. p a r a el trabajo comunista cotidiana
N o hace falta decir que es nece- en las industrias, en los talleres, en
sario que todos los afiliados deben to- los sindicatos, en las uniones proleta*
rnar p a r t e en las reuniones generales rias, en las secciones militares, e t c . ;
re los miembros de la organización es decir, en todas p a r t e s donde h a y a
locales. Es malo reemplazar esas re- afiliados o candidatos a afiliados del
uniones generales periódicas organi- P a r t i d o Comunista. Si h a y muchos en
zadas legalmente, por representacio- u n a misma industria, sindicato, etc.,
nes restringidas (por deelgados). Por cada uno de ellos d í b e convertirse en
el contrario, es preciso que todos los una fracción cuyo trabajo será diri-
miembros estén obligados a asistir re- gido por el grupo de los núcleos de
gularmente a esas reuniones. Pero es- esa industria o de ese sindicato.
to no basta. L a sola preparación de Si h a y que formar de inmediato
esas reuniones generales (asambleas una fracción más v a s t a de oposición
locales) supone un trabajo heclio p e r general, o si hace falta simplemente
pequeños grupos o por compañeros que
t o m a r p a r t e en una organización ya
han sido encargados especialmente
existente, los comunistas deben esfor-
t a n t o p a r a la preparación como p a r a
zarse por obtener la dirección p a r a su
la utilización práctica de esas reunio-
núcleo.
nes generales de obreros, p a r a la or-
ganización de mitins y demás accio- Esto depende de la observación es-
nes de masas del proletariado. L a s crupulosa de los peligros y v e n t a j „s
t a r e a s múltiples de esta actividad no que presenta la situación p a r t i c u l a r
pueden ser i n t e n t a d a s y realizadas p a r a la fundación de un núcleo co-
con intensidad si no intervienen en munista, p a r a su transformación o pa-
su preparación esos pequeños grupos ra su aparición pública en calidad de
(comisiones de p r o p a g a n d a ) . Sin u n comunista.
t r a b a j o semejante y constantemente 13. •— E s una t a r e a particularmen-
realizado por el conjunto de los miem- t e difícil p a r a un partido de masas
bros, repartido entre todos los peque- comunistas organizar estos pequeños
ños grupos de obreros (comisiones, grupos de trabajo y establecer el de-
grupos, etc.), los esfuerzos más acti- ber p a r a todos de t r a b a j a r en el par-
vos p a r a p a r t i c i p a r en la lucha de tido, y, ciertamente, no se conseguirá
clase del proletariado, no podrían me- esto en un día, sino que exigirá viva.
nos que t o r n a r vanas todas las tenta- perseverancia infatigable, una refle-
t i v a s p a r a influenciar esas luchas; xión m a d u r a y mucha energía.
esas t e n t a t i v a s no lograrían la con-
centración necesaria de todas las fuer Lo particularmente importante es
zas vivas revolucionarias en un Pítr que esa organización sea realizada
tido Comunista unido y capaz de desde el comienzo con el mayor
obrar. tino y reflexión. Sería muy fácil re-
p a r t i r todos los afiliados en pequeñon
12.—Hay que fundar grupos de nú- núcleos dentro de cada organización,
cleos comunistas p a r a el trabajo ca- según un esquema formal e invitarlo?
tidiano en los diferentes dominios de a obrar en la vida cotidiana del P a r -
la actividad política del P a r t i d o , pa- tido. Tal comienzo sería peor que la
r a la propaganda a domicilio, p a r a los inacción. Provocaría de inmsdiato Ta
estudios del partido, p a r a el servicio desconfianza de los afiliados del P a r -
de prensa, p a r a la distribución de las tido y r e t a r d a r í a entre ellos la com-
publicaciones, p a r a el servicio de no- prensión de la utilidad de esta trans-
ticias, p a r a el de relaciones, e t c . formación.
— 7 —

E s menester recomendar que los di rreno en que h a n de a c t u a r ; elegi-


rigentes del P a r t i d o elaboren de an- r á n y designarán los jefes de grupo
t e m a n o y luego de un detenido estu- y t o m a r á n las primeras medidas p a r a
d i o con los organizadores asiduos, los •esa transformación. E n seguida de-
principios detallados de las primer, is ben señalarse las t a r e a s bien defini-
líneas directivas de esta transforma das y concretas que corresponderán
ción. Los organizadores deben ser, al a las organizaciones, a los grupos de
mismo tiempo, comunistas absoluta- obreros, a los núcleos y a los dis-
m e n t e convencidos y entusiastas y d'- tintos miembros, haciéndolo en t a l
T>en estar absolutamente informados forma que -esas t a r e a s les aparezean
sobre el Estado del movimiento en útiles, deseables y prácticas. Si es
los diferentes centros importantes del necesario, puede además enseñárseles
país. Después que los organizadores con ejemplos prácticos, cómo debe
o los comités de organización h a y a n procederse p a r a ejecutar esas t a r e a s ,
recibido las instrucciones necesarias, y, al hacerlo, deberáse, sobre toda,
deben dedicarse a p r e p a r a r regular- señalar los errores de que deben guar-
m e n t e el t r a b a j o sobre el propio te- darse especialmente.

III
El deber de los comunistas
14. -— E s t e nuevo modelo de orga- pos obreros en todos los puntos vita-
nización h a y que realizarlo paso a pa- les de la lucha de clases proletaria,
so. No h a y que f u n d a r muchos nuevos h a s t a que cada miembro del P a r t i d o ,
núcleos o grupos de obreros en las or- capaz y consciente de su objetivo, to-
ganizaciones locales. Antes h a y que me p a r t e en el trabajo cotidiano re-
asegurarse •— basándose en los resul- volucionario y que esa participación
tados de una c a r t a p r á c t i c a •— qus se h a g a en los afiliados u n a cuestión
los núcleos formados en diferentes fá- de costumbre n a t u r a l . H a s t a ese mo-
bricas o talleres importantes, funcio- mento, el P a r t i d o no debe permitirse
n a n regularmente y que los grupos descanso alguno en sus esfuerzos ten-
obreros indispensables h a y a n sido dientes a l a conseeusión de ese pro-
creados en los demás dominios de la pósito.
a c t i v i d a d del P a r t i d o , y que se con- 15. •— E s t a t a r e a fundamental de
solidan en un cierto grado (por ejem- organización obliga a los órganos di-
plo, en el servicio de información, rigentes del P a r t i d o a vigilar conti-
de relación — o ligazón, de propagan- n u a m e n t e y a influenciar sistemática-
da a domicilio, de composición de es- mente el trabajo del P a r t i d o , de u n a
critas, de prensa, e t c ) . E n todo caso, m a n e r a completa y sin intermediarios.
n o se deben destruir ciegamente los Resulta, entonces, una obligación p a r a
moldes de la a n t i g u a organización, an- los camaradas que están a la cabeza
t e s de que la nueva se haya, por así de las organizaciones del P a r t i d o , la
decir, estabilizado. de emprender los trabajos más diver-
Mas, d u r a n t e todo este trabajo, la sos. E l órgano central dirigente del
t a r e a fundamental del t r a b a j o de or- Comunista debe no sólo velar p a r a
ganización comunista debe ser prose- que todos los camaradas, en general,
guida lo más enérgicamente posible estén ocupados, sino que también de-
h a s t a que haya, en realidad, u n a vas- be i r en su ayuda y dirigir su t r a b a j o
t a red de núcleos, fracciones y gru- según u n plan ordenado y adaptado al
fin que so persigue, orientando ese misiones especiales confiadas por el
trabajo por el buen camino y a traVés P a r t i d o . Conviene que esas rendicio-
do todas las condiciones y cireunstaa- nes de cuentas del t r a b a j o realizado
cias especiales. E l centro (órganos se h a g a n de una manera t a n sistemá-
centrales) debe, igualmente, t r a t a r de tica que arraiguen en el movimiento
encontrar los errores cometidos en el comunista como una d-e sus mejores
curso de la propia actividad y, ba- tradiciones.
sándose en la experiencia adquirida, 18. — Cada fracción del P a r t i d o
t r a t a r de mejorar los métodos de tra- debe dar regularmente un informe al
bajo, sin perder nunca de v i s t a el ob- Comité inmediatamente superior (por
jeto de la lucha. ejemplo, informe mensual del centro
16. — Nuestro trabajo político ge- a la Federación local o provincial é
neral, es la lucha práctica o teórica informe de ésta al G. E . ) .
p a r a la preparación de toda lucha. Cada núcleo, fracción o grupo obre-
L a especialización de este trabajo ha ro debe dar un informe al órgano del
sido muy defectuosa h a s t a el presen- P a r t i d o bajo cuya dirección efectiva
t e . H a y dominios del trabajo muy im- se encuentre. Los miembros, indivi-
portantes sobre los cuales el P a r t i d o dualmente reseñarán cada semana, por
no h a hecho h a s t a el presente más ejemplo, su labor, al núcleo o al gru-
que esfuerzos accidentales; así, por po de trabajo a que pertenecen (o a
ejemplo, casi n a d a se ha hecho en los su jefe jerárquico) p a r a el cumpli-
partidos legales en la lucha contra la miento de las misiones especiales de
policía política. L a instrucción de los que h a y a n sido encargados por él
camaradas del P a r t i d o no se ha pro- (núcleo, grupo o jefe).
porcionado más que de u n a manera E s t a clase de rendiciones de cuen-
accidental y secundaria y eso de u n a tas debe tener lugar en la primera
manera t a n superficial que la mayor ocasión que se presente, oralmente si
p a r t e de las decisiones más importan- el P a r t i d o o el mandato encomendado
tes del P a r t i d o , lo mismo que el pro- no exigen que sea por escrito. Los
grama y las resoluciones de la Inter- informes deben ser concisos y conte-
nacional Comunista son t o d a v í a , des- ner hechos. El órgano que los reeibe
conocidas por gran p a r t e de los miem- carga con la responsabilidad de la
bros del P a r t i d o . E l trabajo de ins- conservación de esas comunicaciones,
trucción debe ser ordenado y profun- las que no deberán ser publicadas. E3
dizado sin cesar, por todo el sistema igualmente responsable de la comuni-
de organizaciones del P a r t i d o , por to- cación, sin demora, al órgano dirigen-
das las comunidades de trabajo, a fin to del P a r t i d o , de todo informe im-
de obtener, por medio de esfuerzos portante.
sistemáticos, un grado cada vez más
elevado de especialización. 19- — E s innecesario decir que esos
informes del P a r t i d o no deben limi-
17. — E l deber de rendir cuenta de t a r s e a hacer conocer lo que el infor-
su obra es uno de los más indispensa- m a n t e ha hecho, sino que también de-
bles p a r a las organizaciones comunis- ben contener datos relativos a los he-
t a s . Se impone, también, a todas las chos observados durante su actividad,
organizaciones y a tocios los órganos que puedan ser importantes p a r a nues-
del P a r t i d o , lo mismo que a cada t r a lucha. Deben mencionar particu-
miembro individualmente. L a rendi- larmente las observaciones que pue-
ción de cuentas debe ser cumplida dan motivar un cambio o un mejora-
regularmente y a cortos intervalos. miento de nuestra t á c t i c a futura.
E s menester, en esos casos, hacer in- También es preciso que se h a g a n
formes sobre el cumplimiento de las proposiciones de mejoramiento allS
— 9 —

donde las necesidades se h a y a n hecho 21. •—• Las formas principales de


s e n t i r en el curso de la actividad. propaganda y de agitación comunistas
E n todos los núcleos, fracciones o son: conversaciones personales, parti-
grupos de t r a b a j o comunista, los in- cipación en los combates de los mo-
formes recibidos por esas organizacio- vimientos sindicales y políticos obre-
nes o los que ellos deban hacer, deben ros, acción por la prensa y la litera-
ser discutidos. E s t a s discusiones de- t u r a del partido. Todos los miembros
ben hacerse costumbre. deben, de una manera u otra, t o m a r
E a los núcleos y en los grupos de p a r t e regularmente en esta actividad.
trabajos, debe velarse p a r a que los L a propaganda personal, verbal, de-
miembros individualmente o en gru- be ser llevada, en primer lugar, en
pos, reciban regularmente la misión forma de agitación a domicilio, orga-
especial de observar e informar de lo nizada sistemáticamente y confiada a
quo pasa en las organizaciones del ad- grupos creados con ese objeto. N i u n a
versario y particularmente en las or- sola casa situada en la esfera de in-
ganizaciones obreras pequeño-burgue- fluencia de la organización local del
sas y en los P a r t i d o s social-demócra- P a r t i d o debe ser omitida. E n las ciu-
tas. dades más importantes, u n a agitación
20. — N u e s t r a t a r e a más importan- callejera organizada por medio de car-
t e ante la Eevolución mundial es la teles y de hojas impresas, puede, por
propaganda y la agitación • revolucio- lo común, tener buenos r e s u l t a d o s .
narias. E s t a actividad y su organiza- Además, en las f á b r i c a s y los talleres
ción se realizan en gran p a r t e toda.- debe organizarse una agitación perso-
v í a de la a n t i g u a manera formalista: nal regular, llevada por los núcleos o
por manifestaciones ocasionales y re- fracciones del partido y completada
uniones de masas, pero sin un conte- por la distribución de l i t e r a t u r a .
nido revolucionario concreto en los 22. — Cuando la propaganda comu-
discursos y en los escritos. nista se hace en países capitalistas en
L a propaganda y la agitación co- que la mayoría del proletariado no
munistas deben, ante todo, t e n e r pro- tiene aún ninguna inclinación revolu-
fundas raíces en los medios más ínti- cionaria determinada, h a y que ir cons-
mos del proletariado. Deben ser ins- t a n t e m e n t e al encuentro de las ideas
piradas en la vida concreta de los coneientes del obrero todavía no re-
obreros, en sus intereses más inmedia- volucionario, a fin de incitarlo a par-
tos y particularmente en sus luchas t i c i p a r en el movimiento.
y en sus esfuerzos. L a propaganda comunista debe ins-
Lo que da más fuerza a la propa- pirarse en este método, en las distin-
g a n d a comunista es su contenido, t a s situaciones, p a r a sostener en el
apropiado p a r a croar una atmósfera espirita del obrero que lucha por li-
revolucionaria. Desde este punto de berarse de las tradiciones y los prejui-
vista, es necesario considerar siempre, cios burgueses, las tendencias aún in-
lo más atentamente posible, las acti- concientes, vacilantes, semi-burguesas
tudes a tomar en vista de las cues- que recién nacen en él, pero que y a
tiones concretas de las diversas situa- constituyen un fermento revoluciona-
ciones. A fin de que el P a r t i d o pueda rio.
a d o p t a r siempre una posición justa, Al mismo tiempo, la propaganda
h a y que dar un curso de instrucción comunista no debe confinarse en el
prolongada y completa, no sólo a las cuadro de los reclamos o esperanzas
propagandistas y agitadores de pro- do las masas proletarias, tales como
fesión, sino también a todos los de- son hoy, es decir restringidas e inde-
más miembros del P a r t i d o . cisas. Los gérmenes revolucionarios
— 10 —

de esos reclamos y esperanzas no son reuniones de miembros, en discursos


más que el punto de p a r t i d a que nos sobre las reformas, y en esfuerzos pa-
es necesario p a r a influenciarlos. Sola- r a utilizar las imposibilidades parla-
mente aprovechando esa coyuntura, se mentarias. L a participación decidida
puede explicar al proletariado, de u n a y coneiente de t o d a la masa de afilia-
manera comprensible, el comunismo. dos de un partido en la escuela de I08
23. — H a y que llevar de t a l mane- combates y diferencias cotidianas en-
r a la agitación comunista entre las t r e los explotados y los explotadores,
masas proletarias, que los proletarios es la premisa indispensable, no sólo
militantes reconozcan a n u e s t r a orga- p a r a la conquista del poder, sino, en
nización comunista como la que debe una medida mayor, p a r a la realiza-
dirigir leal y valientemente, con pre- ción de la dictadura del proletariado.
visión y energía, su propio movimien- Solamente colocándose a la cabeza de
to hacia u n fin común. las masas obreras, en sus guerrillas
P a r a este fin, los comunistas deben constantes contra los ataques del ca-
tomar p a r t e en todos los combates pital, el P a r t i d o Comunista será capaz
elementales y en todos los movimien- de convertirse en la v a n g u a r d i a de la
tos de la clase obrera y t o m a r sobre clase obrera, aprender sistemática-
ellos la responsabilidad de salvaguar- mente a dirigir en los hechos al pro-
dar los intereses de los obraros en to- letariado y adquirir los medios p a r a
dos los conflictos con los capitalistas, p r e p a r a r concientemente la expulsión
respecto de la jornada de trabajo, de de la burguesía.
los salarios, de las condiciones de tra- 24. — Los comunistas deben ser
bajo, etc. Los comunistas deben, a movilizados en gran número p a r a to-
este respecto, ocuparse enérgicamente m a r p a r t e en el movimiento de los
de las cuestiones concretas de la vida obreros, sobre todo, durante las huel-
de los trabajadores, ayudándolos a gas, los " l o c k - o u t s " y los demás lla-
orientarse en estas cuestiones, atra- mados en masa.
yendo su atención sobre los casos de Los comunistas cometen u s a falta
abuso más importantes, indicándoles muy grave si, remitiéndose al progra-
cómo han de formular sus reclamos a ma comunista y a la b a t a l l a revolu-
los capitalistas y, al mismo tiempo, cionaria final, adoptan una actitud pa-
desarrollando en ellos el espíritu de siva y negligente u hostil frente a
solidaridad y la conciencia de la co- los combates cotidianos que los obre-
munidad de sus intereses con los de ros libran p a r a obtener mejoramien-
los obreros de todos los países, ya tos—aunque sean poco importantes—•
que son los intereses de su clase, y de sus condiciones de trabajo. Por
que unidos formarán una p a r t e del pequeños y modestos que sean los pe-
ejército mundial del proletariado. didos por cuya consecución los obre-
Sólo tomando p a r t e constantemente ros se hallan ya dispuestos a e n t r a r
en este menudo trabajo cotidiano, ab- en línea de combate contra los capita-
solutamente necesario, y aportándole listas, los Comunistas no deb en j a m á s
-

todo su espíritu de sacrificio en todos buscar pretexto p a r a substraerse de la


los combates del proletariado, el Par- batalla. N u e s t r a actividad de agita-
tido Comunista podrá desarrollarse y ción no debe dar lugar a que se crea
llegar a ser un verdadero P a r t i d o Co- que los Comunistas son instigadores
munista. Sólo con ese trabajo los Co- ciegos de huelgas estúpidas y de otras
munistas se distinguirán de esos Par- acciones insensatas, sino que debemos
tidos socialistas de propaganda p u r a merecer, en todas partes, el renombre
y de enrolamiento que han dejado y de los mejores camaradas de lucha.
cuya actividad no consiste más que en 25. •— L a práctica del movimiento
— 11 —

sindical ha demostrado que los nú- de fondos y este medio de distribuir-


cleos y fracciones sindicales son fre- los, preconizados por los jefes de
cuentemente confusos y n o saben Amsterdam, están en contradicción
obrar cuando se hallan frente a las con los intereses de las clases revolu-
más simples cuestiones del día. E s cionarias. E n lo que concierne a las
fácil, aunque bien estéril, predicar cajas sindicales de hospitalización,
siempre los principios generales del etc., sería conveniente que los comu-
comunismo; pero ello no conduce a nistas reclamasen l a supresión de las
otra cosa que a un sindicalismo vul- cuotas especiales y de toda contribu-
gar, en cuanto las primeras cuestio- ción de los sindicados p a r a formar
nes concretas se presentan. Con se- las cajas voluntarias; pero si impedi-
mejante acción no se hace más que mos a los adherentes aportar su dine-
facilitar el juego de los dirigentes de ro p a r a ayudar a las organizaciones
la Internacional amarilla de Amster- de socorro a los enfermos, u n a p a r t e
dam. de esos adherentes que continuará
Los comunistas deben, por el con- siempre asegurando, con sus donacio-
trario, determinar su actitud según nes, la existencia de esas institucio-
las circunstancias materiales de cada nes, no nos comprenderá si nos opo-
cuestión que se plantea. P o r ejem- nemos sin otra explicación. E s ne-
plo, en lugar de oponerse por prin- cesario, entonces, convencer a esos
cipio a todo contrato de t a r i f a obre- adherentes por medio de una propa-
ra, deberán, más bien, llevar la lu- g a n d a personal intensa, que les evi-
cha por las modificaciones materiales dencie su tendencia pequeño burguesa.
del texto de esos contratos, recomen- 26. — No h a y que esperar n a d a de
dados por los jefes de A m s t e r d a m . algunas conversaciones con los jefes
E s verdad que es necesario condenar de los sindicatos o con los de los par-
y combatir resueltamente todas las tidos obreros social-demóeratas y pe-
trafeas que impidan a los obreros es- queño burgueses. Contra ellos debe
t a r listos p a r a el combate, y no ol- organizarse la lucha con toda ener-
vidar que este es, justamente, el fin gía. E l medio seguro y victorioso de
que se proponen los capitalistas y combatirlos consiste solamente en des-
sus cómplices de "Amsterdam: ligar tacarlos de sus adeptos y mostrar a
las manos a los obreros por medio de los obreros el ciego servicio de escla-
cada contrato de t a r i f a ; por eso es v i t u d que sus jefes social-traidores
evidente que el deber de los comunis- rinden al capitalismo. Débese, enton-
t a s es exponer esa finalidad a los ces, en la medida de lo posible, po-
obreros; pero esa oposición consegui- ner a esos jefes en situación de te-
rá mejor su objeto, en regla general, nerse que desenmascarar, y luego ata-
proponiendo u n a t a r i f a o contrato carlos de la manera más enérgica.
que no ligue a los obreros.
No b a s t a de ningún modo lanzar
E s t a misma actitud es, por ejemplo, simplemente en cara a los jefes de
muy útil respecto de las cajas de Amsterdam la injuria de ' ' a m a r i l l o ' ' .
asistencia y de las instituciones de Su carácter de " a m a r i l l o s " debe ser
socorro de los sindicatos obreros. L a mostrado en detalle y por ejemplos
formación de fondos de lucha y la prácticos. Su actividad en las unio-
distribución de subsidios en tiempos nes obreras, en la Oficna I n t e r n a -
de huelga por las cajas mutuales, no cional del Trabajo de la Liga de las
son acciones malas en sí mismas y Naciones, en los ministerios y en la
oponerse en principio a este género administración burguesa, sus p a l a b r a s
de actividad será mal visto. Solamen- engañosas en los discursos pronuncia-
te hay que decir que esta formación dos en las conferencias y en los par-
— 12 —

lamentos, los pasajes esenciales de sus nes sindicales. Deben, por ejemplo,
numerosos artículos pacificadores en elaborar sus propias proposiciones,
cientos de diarios y r e v i s t a s ; pero, elegir sus informantes y los oradores
sobre todo, debe señalarse su manera p a r a defenderlas, proponiendo como
vacilante y oscilante de conducirse sandiadtos a camaradas capaces, ex-
cuando se t r a t a de p r e p a r a r y de lle- perimentados y enérgicos, e t c .
v a r a la práctica aún los menores mo- Las organizaciones comunistas de-
vimientos por aumento de salario o ben prepararse, igualmente, por me-
cualquier otra lucha obrera. Todo eso dio de sus grupos obreros y con el
ofrece cada día la o casión de expo- mayor cuidado para todas las asam-
ner la conducta desleal y traidora de nleas generales, asambleas electorales,
los jefes de A m s t e r d a m y de marcar- demostraciones, fiestas políticas obre-
los con el nombre de ' a m a r i l l o s " . T ras, etc., organizadas por los partidos
esto puedo hacerse presentando mo- políticos enemigos. Cuando se t r a t a
ciones o proposiciones o, simplemente, de asambleas obreras generales prepa-
por discursos pronunciados en cada radas por los mismos comunistas, loa
circunstancia. grupos deben concurrir en el mayor
Es necesario que los núcleos o frac- número posible y tanto antes come
ciones de P a r t i d o hagan sistemática- durante el curso de la asamblea, obrar
mente ataques prácticos. Los comu- <;on un plan uniforme, a fin de estar
nistas no deben dejarse a r r e d r a r por «seguros de aprovechar ampliamente
las explicaciones de la burocracia sin- estas asambleas, desde el punto de
dical inferior, que t r a t a de defender v i s t a de la organización.
su debilidad — que a veces aparece 28. — Los comunistas deben tam-
a pesar de su voluntad por ocultarla oién aprender cada vez más y mejor
— amparándose en los estatutos, en a atraerse p a r a la esfera de influen-
las resoluciones de las conferencias cia de su partido a los obreros no or-
y en las órdenes recibidas de sus co- ganizados e inconscientes. Nuestros
mités centrales. Los comunistas de- núcleos y fracciones deben hacer todo
ben reclamar constantemente de esta lo posible p a r a iniciar el movimiento
burocracia inferior contestaciones cla- entre esos obreros, a fin de hacerlos
ras y preguntarle qué h a hecho p a r a e n t r a r en los sindicatos y hacerles
suprimir los obstáculos en que se am- leer el diario del P a r t i d o . P u e d e n
p a r a a objeto de defenderse y si está utilizarse también p a r a ese objeto
dispuesta a combatir con los obreros otras agrupaciones obreras como in-
por la destrucción de los mismos. termediarias, a objeto de expandir
27. — Las fracciones y los grupos n u e s t r a influencia, (por ejemplo, las
de obreros deben prepararse cuidado- sociedades de instrucción y los círcu-
samente antes de la participación de los de estudios, las sociedades depor-
los comunistas en las asambleas y en tivas, teatrales, ligas de consumido-
las conferencias de las organizacio- res, e t e . ) .

IV
Propaganda y agitación
Allí donde el partido está obligado rigente del partido — ser formadas
a t r a b a j a r ilegalmente, tales uniones fuera del mismo y por iniciativa de
de obreros pueden — con la aproba- sus miembros (uniones de simpatizan-
ción y bajo el control del órgano di- t e s ) . Las organizaciones comunistas
— 13 —

de la J u v e n t u d y de las Mujeres pue- sean influencia sobre los pequeños


den, también, por medio de sus cur- algún acontecimiento político o eco-
sos, veladas de conferencias, excursio- nómico. Después de cada movimiento
nes, fiestas, pic-nics del domngo, etc., señalarles los enemigos más próximos,
atraer hacia ellas a muchos proleta- los que los explotados conocen como
rios que aún permanecen indiferen- a sus opresores por la propia expe-
tes a las cuestiones políticas, intere- riencia; h a y que señalárselos como
sarlos por una vida de organización personificando por entero al crimen
común y luego atraerlos p a r a siem- del capitalismo. Los propagandistas
pre, haciendo que realicen un trabajo y agitadores comunistas deben utili-
útil p a r a nuestro P a r t i d o , como ser el zar h a s t a el extremo y de una mane-
de distribuir hojas impresas, procla- ra comprensible p a r a todos, todos los
mas y otros elementos de propaganda, elementos y hechos cotidianos que po-
repartir el diario del P a r t i d o , folletos, nen a la burocracia de E s t a d o en
etc., etc. Es con esa participación ac- conflicto directo con los ideales de la
t i v a en el movimiento común que democracia peqneño-burguesa y el es-
esos obreros serán más fácilmente li- tado del derecho ( " l ' é t a t du d r o i t " ) .
brados de sus tendencias pequeño-bur- Todas las organizaciones locales de
guesas. la campaña deben r e p a r t i r exactamen-
29. — P a r a conquistar las catego> t e entre sus miembros las tareas de
rías semi-proletarias de la masa obre- la agitación a domicilio que debe rea-
ra y hacerlas simpatizantes del prole- lizarse en la esfera de su actividad,
tariado revolucionario, los comunistas en todos los pueblecitos, en todas las
deben oponer socialmente los intere- dependencias de las estancias (coura
ses de esas categorías a los de los de c h á t e a u ) , en las chacras y en las
grandes propietarios territoriales, de casas aisladas.
los capitalistas y del Estado burgués, 30. — E n cuanto a la propaganda
y poner .en evidencia las contradiccio- en el ejército y en la armada de un
nes que existen entre ellos. Deben, E s t a d o capitalista, h a y que estudiar
por medio de conversaciones conti- especialmente los métodos que sean
nuas, desembarazar a esas categorías más apropiados a cada país. La agi-
intermedias de su desconfianza hacia tación antimilitarista llevada en un
3a revolución proletaria. P a r a llegar sentido pacifista es, en rosúmen, pe-
a ese resultado, será necesario, posi- ligrosa por cuanto tiene otro resulta-
blemente, mucho tiempo. Es preciso do que el de empujar a la burguesía
d a r pruebas de un sensible interés a desarmar al proletariado. No es
por las exigencias de su vida; organi- contra la instrucción militar de la ju-
zar oficinas de información g r a t u i t a s ventud y de los obreros, sino contra
p a r a ellas y acudir en su ayuda p a r a el orden militarista y contra la auto-
que puedan salvar las pequeñas difi- cracia de la casta de los oficiales que
cultades que no puedan vencer por sí h a y que dirigir una agitación intensa.
mismas. H a y que a t r a e r l a s por medio P o r el contrario, h a y que defender
de instituciones especiales que sirvan enérgicamente el derecho del proleta-
p a r a instruirlas g r a t u i t a m e n t e , e t c . riado a usar igualmente las a r m a s .
Todas estas medidas aumentarán la
E n el comienzo del período de los
confianza en el movimiento comunis-
disturbios revolucionarios, la agita-
ta. Al mismo tiempo, hay que ser
ción en favor de la elección demo-
m u y prudente y obrar infatigable-
crática de todos los comandantes por
mente contra las instituciones y las
los mismos soldados y marineros, y
personas hostiles que tengan autori-
la constitución de consejos de solda-
dad en t a l o cual sentido o que po-
dos, puede tener un efecto excelente
— l e -

p a r a minar la supremacía de clase de pre la mayor y más escrupulosa a t e n -


los capitalistas. L a oposición de cla- ción, a la agitación en las tropas com-
se, que halla su expresión m a t e r i a l puestas por soldados de profesión, en-
en la preferencia acordada a los ofi- rolados por la burguesía, y, sobre to-
ciales en el t r a t o , en el aseguramien- do, en las organizaciones de volun-
to del provenir, ¡en los equipos, en tarios armados, donde es posible sem-
las habitaciones, debe ser constante- b r a r sistemáticamente, en el momento
mente demostrada a los soldados y a propicio, los gérmenes de la descom-
los marineros. H a y que p r e s t a r siem- posición social.

V
La Prensa del Partido
31. — L a prensa comunista debe de los periodistas virtuosos, y conver-
ser desarrollada y mejorada con una tirse en diarios de salón.
energía i n f a t i g a b l e . 33. — E l diario comunista debe,
Ningún diario ni revista que no ante todo, ocuparse de los intereses
se someta a las directivas del P a r t i - de los obreros oprimidos; debe ser
do, debe ser reconocido como órgano nuestro mejor propagandista agitador
comunista. e iniciador de la revolución proleta-
E l P a r t i d o debe preocuparse más ria.
de t e n e r buenos diarios que de tener Nuestro diario tiene la t a r e a de
muchos. Ante todo, cada P a r t i d o de- concentrar t o d a la actividad de los
be t e n e r un órgano central que apa- miembros del P a r t i d o , las experien-
rezca, si es posible, cada día. cias preciosas y, a su vez, p r e s e n t a r
32. •—• Un diario comunista no de- nuevas iniciativas a los -samaradas
be ser jamás u n a empresa capitalista, del p a r t i d o y hacer de la emulación
como lo son los diarios burgueses y, general la regla p a r a la revisión con-
frecuentemente, los sedicentes diarios t i n u a y el mejoramiento de los méto-
" s o c i a l i s t a s " . Nuestro órgano debe dos de trabajo. De ese modo, se con-
permanecer independiente de las ins- v e r t i r á en .el mejor organizador de
tituciones capitalistas de crédito. U n a nuestro t r a b a j o revolucionario. Sin
b u e n a organización del servicio de ese t r a b a j o de organización — resu-
los anuncios que pueden contribuir a midor consciente de su finalidad —
facilitar la existencia del órgano de del diario comunista y, sobre todo,
un p a r t i d o legal de masas, no debe, del diario principal, a penas si será
por lo t a n t o , hacerlo dependiente de posible operar la centralización de-
la gran clientela de ese servicio. Los mocrática de la repartición p r á c t i c a
diarios de nuestros partidos de ma- del t r a b a j o en el P a r t i d o Comunista
sas g a n a r á n mucho más la estimación y, por consiguiente, el cumplimiento
necesaria, si afirmaran pronto su po- de la t a r e a histórica del P a r t i d o .
sición independiente p a r a todas las 34. — E l diario comunista debe
cuestiones especíales que interesan a t e n d e r a convertirse en una empresa
los proletarios. Nuestros órganos no comunista, es decir, en u n a organi-
deben servir p a r a satisfacer el amor zación de combate proletario, u n a aso-
a las sensaciones o pasatiempo del ciación de trabajo de los obreros re-
público barroco. No tienen necesidad volucionarios, de todos aquellos que
alguna do escuchar las críticas de las escriben con regularidad p a r a el dia-
gentes de letras pequeño-burguesas o rio, que lo componen, lo imprimen, lo
— 15 —

administran, que lo distribuyen, re- nuestra estrecha ligazón con las nece-
unen el m a t e r i a l y deliberan sobre él sidades de la vida.
y t r a b a j a n su difusión en las fraccio-
nes comunistas. E l colegio de redacción debe j u s t a -
mente comentar con mucha atención
P a r a hacer del diario u n a organiza-
las comunicaciones llegadas por medio
ción real de tales condiciones y una
de los obreros y las organizaciones da
asociación do trabajo a fuertes pul-
obreros. Debe utilizarlas ya sea como
saciones, es necesario tomar una serie
noticias breves, p a r a dar al diario el
de medidas prácticas. Cada comunista
carácter de una verdadera asociación
se une fuertemente a su diario cuando
de trabajo a fuertes pulsaciones, o
llega a hacer por él grandes sacrifi-
sea sirviéndose do esas informaciones
cios y a t r a b a j a r p a r a él. E s su arma
como de ejemplos prácticos de la exis-
de todos los instantes, arma que debe
tencia obrera diaria y explicar por
estar siempre acerada y agudizada
ellos l a doctrina comunista. E s t e es
p a r a ser útil. Sólo con grandes sacri-
el camino más corto p a r a iniciar a
ficios continuados, materiales y finan-
las grandes masas obreras en las ideas
cieros, puede subsistir el diario. E s
comunistas. E l colegio do redacción
necesario que los miembros del P a r t i -
debe ponerse por todas partes, en las
do hagan llegar medios constantemen-
hoTas propicias del día, a disposición
te hasta él, p a r a que pueda realizar
do los obreros, a fin de comprender
los mejoramientos internos necesarios,
sus deseos y sus quejas sobre las mi-
h a s t a conseguir que se sostenga y
serias de la existencia, hacerlas n o t a r
pueda desarrollar — en los partidos
asiduamente y utilizarlas p a r a a n i m a r
legales — una actividad organizadora
el diario.
t a l que comience a convertirse él en
u n sostén material del movimiento co- Bajo el régimen capitalista, es evi-
munista. dente eme ninguno de nuestros diarios
No es suficiente, sin embargo, ser podrá convertirse en u n a perfe.cta
un activo enrolado y agitador, sino asociación comunista de t r a b a j o ; pero
que es necesario ser un colaborador es posible aproximarse a ella, aún si
útil. Todo lo que sea remarcable so- la situación es muy difícil. E s t o está
cial y económicamente, desde el ac- demostrado por el ejemplo de l a
cidente de trabajo a la asamblea de " P r a v d a " de nuestros camaraclas ru-
explotación, desde el m a l t r a t o de un sos durante los años 1912-1913. E s t e
aprendiz h a s t a el informe de la em- diario formaba, en realidad, una cons-
presa, debe ser comunicado al diario t a n t e organización activa de los obre-
lo más rápidamente posible por la ros revolucionarios conscientes en los
fracción comunista de la explotación. principales centros del Imperio ruso.
Las fracciones sindicales deben comu- Esos compañeros redactaron, publica-
nicar las decisiones y las medidas más ron y difundieron en común su diario,
importantes tomadas por las asam- continuando, la mayoT p a r t e de ellos,
bleas o los secretariados de sindica- simultáneamente con su t r a b a j o mer-
tos, así como, también, Telatar de una cenario y economizando de sus sala-
manera concisa y exacta las acciones rios el dinero necesario p a r a los gas-
características de los adversarios. L a tos de publicación. E l diario llenaba
vida pública de las asambleas propor- bien las condiciones de que ellos ne-
ciona muy frecuentemente a los tra- cesitaban entonces en los movimien-
bajadores atentos del P a r t i d o la oca- tos. Esto h a continuado siéndoles útil
sión de observar con espíritu crítico h a s t a hoy p a r a su trabajo y su lucha.
social, detalles cuyo empleo en el dia- Un diario así puede convertirse, en
rio demostrará aún a los indiferentes, realidad, p a r a los miembros del P a r t í -
— 16 •—

do y también p a r a muchos otros obro- cas o económicas, cuyos efectos se ha-


ros revolucionarios, en " s u d i a r i o . " gan sentir entre las masas obreras ba-
jo la forma de carestía de la vida,
35. — L a m a n e r a de reclutar sus- desocupación, etc., h a y que esforzarse
eriptores p a r a el diario debe ser for- por utilizar todas esas miserias con
mulada de acuerdo a un sistema. Pri- un fin de propaganda tendiente a li-
meramente, se t r a t a de utilizar cada gar, por medio de las fracciones co-
situación que determine a los obreros munistas y sindicales, a los numerosos
a un movimiento más pronunciado, en obreros de las diferentes ramas, or-
el cual la vida política o social se ganizar u n sindicato y hacer que el
halla más fuertemente excitada por grupo de trabajo pueda continuar, de
huelguista importante o después de al- una manera útil, la agitaeióü a domi-
gún acontecimiento, en el curso del cilio, por la prensa. La última semana
cual el diario ha defendido enérgica- anterior al fin de mes es la más apro-
mente los intereses de los obreros en p i a d a p a r a este continuo trabajo de
lucha, h a y que organizar, entre los reclutamiento. Cada grupo local que
huelguistas, el reclutamiento, hombre deja pasar esa semana sin utilizarla
por h o m b r e ; no sólo las fracciones p a r a la agitación en favor de su dia-
comunistas de las explotaciones, de rio — que no representará un mes del
los sindicatos y de las ramas intere- año — se hace culpable de una g r a n
sadas en ese movimiento huelguista negligencia p a r a la extensión del mo-
deben'proseguir la propaganda por su vimiento revolucionario. E l grupe de
diario en la esfera de su actividad, acción en favor de la prensa no debe-
por medio de listas y boletas de sus- r á dejar pasar ninguna asamblea obre-
cripción, sino que también deben ser- r a pública, manifestación, etc., sin.
virse p a r a este objeto de, las listas de ir a olla y t r a t a r de recoger suserip-
direcciones de los obreros que h a n toros a nuestro diario. Las fracciones
participado en la huelga, p a r a que los comunistas de los sindicatos tienen
grupos especiales de trabajo puedan los mismos deberes en sus organiza-
hacer por el diario u n a enérgica agi- ciones respectivas.
tación a domicilio. Es necesario, asi-
mismo, que después de u n a elección, Nuestro diario debe, también, ser
en la que los intereses de las masas defendido siempre por los miembros
h a y a n sido despertados, los grupos de del P a r t i d o , contra todos sus enemi-
t r a b a j o lleven una agitación a domi- gos. ,
cilio, casa por casa, en los barrios Todos los miembros del P a r t i d o de-
obreros, do acuerdo a un plan estable- ben llevar una campaña enérgica con-
cido. t r a la prensa capitalista, señalando y
estigmatizando su venalidad, sus men-
E n ocasión de latentes crisis políti- tiras y todos sus propósitos.

vs
De la estructura general de la organización
del Partido
36.—Para la extensión del P a r t i d o las vías de comunicación del país. E l
no debe adoptarse u n sistema de di- centro de gravedad debe esí-ar en las
visión geográfica, sino guiarse por la capitales y en los centros industria-
estructura económica y política real y les.
— 17 —

Desde el momento de su creación, De este modo, los comités directores


so nota en los nuevos Partidos u n a de los distritos (provincias), de acuer-
tendencia a extender de inmediato la do con el Comité Central, formarán
rod de sus organizaciones sobre todo realmente el órgano director de la or-
el país. Aunque las fuerzas de que se ganización general del P a r t i d o .
dispone sean muy limitadas, se las N a t u r a l m e n t e , el dominio de activi-
dispersa en todas direcciones. A cau- dad del P a r t i d o no se halla fijado por
sa de esto, la fuerza do reclutamiento límites geográficos. Lo importante es
se debilita y el desarrollo del P a r t i d o que e] Comité del distrito pueda di-,
se dificulta. Al cabo de pocos años, rigir de u n a m a n e r a uniforme todas
sucede con frecuencia que sólo se ha las organizaciones locales del distrito.
conseguido crear un sistema burocrá- Si eso no es posible, la subdivisión
tico desarrollado; pero el P a r t i d o no y la institución de nuevos comités del
ha podido implantarse en los centros distrito será necesaria. El P a r t i d o ne-
industriales más importantes del país. cesita a este respecto, especialmente
37.—Para llegar a un máximum de en los países extensos, órganos de re-
e-entralización de la actividad del Par- lación, t a n t o entre la Central y las
tido, no es práctico dividir la direc- direcciones de distrito (federaciones
ción del mismo, por una jerarquía es- provinciales, comités departamentales,
quemática, en muchos rangos comple- centros, etc.), como e n t r e éstas mis-
tamente subordinados los unos a los mas y las distintas organizaciones lo-
otros. E J necesario que cada gran ciu- cales, entre sí. Según las circunstan-
dad, que es u n centro económico y po- cias, podrá ser oportuno dar un rol
lítico, extienda a sus alrededores su dirigente a uno u otro de esos órganos
potencia de organización. El Comité intermediarios; por ejemplo, en una
del P a r t i d o de Ja ciudad más grande gran ciudad, con miembros muy capa-
de un distrito que, como cabeza de citados. Pero, corrientemente, h a y que
ese P a r t i d o , dirige enteramente el tra- evitar eso porque conduce a la des-
bajo de organización del distrito y centralización.
representa la dirección política, debe 38.—Las grandes unidades de orga-
estar íntimamente ligado con la masa nización del P a r t i d o (distritos,-pro-
do los militantes de esa gran ciudad. vincias) se constituyen por las orga-
Los organizadores de t a l distrito, nizaciones locales, por las de la cam-
elegidos por la asamblea o el congreso paña y de los pueblecitos, por los
del distrito y confirmados en su pues- grupos locales de circunscripción y de
to por la Central del P a r t i d o (entre barrio de las grandes ciudades.
nosotros el C. E . ) , deben ser obliga- Una sección local de P a r t i d o que
dos a participar regularmente en la sea t a n numerosa que no pueda t e n e r
vida del P a r t i d o en ese lugar (ehef- asambleas generales, debe ser dividi-
leu). E l Comité del P a r t i d o del distri- da.
to debe ser reforzado con militantes E n una sección local del P a r t i d o ,
de los suburbios, a fin de establecer los miembros deben ser repartidos,
un estrecho contacto entre ese Comité p a r a el trabajo cotidiano, en los di-
y la masa de los miembros en la je- ferentes grupos de trabajo. E n las or-
f a t u r a o centro del distrito. Con el ganizaciones más grandes puede ser
desenvolvimiento futuro de las formas conveniente reunir- los grupos de tra-
de organización, deben hacerse esfuer- bajo en diferentes grupos colectivos.
zos p a r a que el Comité director del P o r regla general, los miembros que
distrito represente, al mismo tiempo, deben encontrarse frecuentemente du-
la dirección política de la j e f a t u r a de r a n t e su trabajo o fuera do él, deben
ese distrito. ser reunidos en los mismos grupos. E l
— 1S —

grupo colectivo tiene por t a r e a la dis- * P e r o la Dirección Central debe, h a s .


tribución del trabajo del P a r t i d o en- t a donde sea posible, t e n e r u n a uni-
t r e los diversos grupos, la recepción dad de concepción, y debe, t a m b i é n ,
de los informes de los jefes, la edu- p a r a ser capaz de conducir firme y
cación de los candidatos al- P a r t i d o seguramente su acción, apoyarse no
en su medio respectivo, etc. sólo sobre su autoridad, sino t a m b i é n
3 9 . — E l P a r t i d o , en su conjunto, está sobre una m a y o r í a n e t a y numérica-
bajo la dirección de la I n t e r n a c i o n a l mente fuerte, de la dirección del con-
Comunista; las directivas y resolucio- j u n t o . P o r una constitución más am-
nes de la Dirección I n t e r n a c i o n a l re- plia, le será posible al P a r t i d o legal de
lativas a los asuntos de un P a r t i d o masas tener p r o n t a m e n t e las mejores
afiliado son enviados: l.o por la In- bases p a r a u n a firme disciplina y la
ternacional tí. la Dirección general del confianza i l i m i t a d a de la masa de sus
P a r t i d o ; 2.o por el P a r t i d o a la Di- miembros; de esta manera, se pueden
rección, central de las ramas especia- salvar, sin vacilaciones, los malen-
l e s ; 3.o a todas las organizaciones del tendidos o falsas suposiciones, que
Partido. pueden suscitarse p a r a con los funcio-
Las directivas y resoluciones de la narios del P a r t i d o , y Llevar de inme-
internacional son obligatorias lo mis- diato a los desviados ( " p e n c h a n t s " )
mo p a r a el P a r t i d o que p a r a cada uno a donde su cura es siempre dolorosa,
•do sus miembros. antes que se desarrolle el contagio.
40.—La Dirección Central del Par- 41. — Cada Comité Director del
tido — Comité Central o Comisión P a r t i d o debe operar en su seno u n a
Central — (en nuestro caso, C. E.) división del t r a b a j o a d a p t a d a a su
es designada por el congreso del Par- fin p a r a ser capaz de dirigir el t r a -
tido y es responsable a n t e él. L a Di- bajo del P a r t i d o de u n a m a n e r a efi-
rección Central elige de su seno la caz, en sus distintos dominios. Ha-
dirección más estrecha, que consiste ciendo ésto, pueden ser necesarias di-
en un organismo político y otro de recciones particulares en algunos do-
organización. L a política y los tra- minios del t r a b a j o , como, por ejem-
bajos corrientes del P a r t i d o son eje- plo, en la propaganda, el servicio de
cutados bajo la responsabilidad de u n a prensa, la lucha sindical, el servicio
dirección i n m e d i a t a y estrecha de esos de noticias, el servicio de comunica-
dos organismos. La Dirección superior ciones, etc. Cada dirección p a r t i c u l a r
debe convocar regularmente las sesio- está sometida o a la Dirección Central
nes plenarias de la Dirección Central del P a r t i d o o al Comité regional del
del P a r t i d o p a r a tomar las decisiones mismo.
de mayor importancia. A fin de cono- E n general, el control, lo mismo
cer a fondo la situación política de que la actividad y la b u e n a composi-
conjunto y p a r a tener un cuadro bien ción do todos los comités que le es-
vivo del P a r t i d o en toda su claridad t á n subordinados, pertenecen a un Co-
y su fuerza, es necesario tomar en mité regional dirigente del P a r t i d o y,
consideración las proposiciones hechas en última instancia, a la Dirección
por las distintas fracciones del P a r - Central. Todos los miembros funcio-
tirlo. P o r esta misma razón, las opi- narios están sometidos directamente
niones divergentes sobre la t á c t i c a no al Comité dirigente del P a r t i d o . P u é -
deben ser eliminadas de la Dirección dese cambiar de ocupaciones y de lu-
Central. P o r el contrario, debe darse gares de trabajo. A los camaradas
a esa oposición el derecho de ser re- funcionarios (por ejemplo, los redac-
p r e s e n t a d a en la Dirección Central tores, los propagandistas, los organi-
por su más caracterizado portavoz. zadores y otros) siempre que la acti-
— 19 —

vidad del Partido ae sea turbada en los demás miembros del Partido a pro.
forma muy sensible por esos cambios. curarse informacioii.es seguras j vera-
Los redactores y los propagandistas ces y a no tomar sus propias decisio-
deben participar constantemente en el nes sino después de madura reflexión.
trabajo regular del partido en uno Los miembros del Partido están
de los grupos de trabajo. obligados, en su acción, a obrar como
42. — La dirección Central del Par- miembros disciplinados de una orga-
tido e igualmente la Internacional nización combatiente. Si surgen di-
Comunista, están autorizadas, en todo vergencias de opinión sobre la mane-
momento, para exigir de todas las or- ra de obrar, estas divergencias deben
ganizaciones comunistas, de sus ór- ser discutidas todo lo que sea posi-
ganos y de sus miembros, informes de- ble, antes de la acción y en el seno
tallados sobre su actividad. Los re- de la organización del Partido, pero
presentantes y plenipotenciarios de la cada miembro debe obrar luego de
Dirección Central deben ser admitidos acuerdo a la decisión tomada. Lo
en todas las asambleas, con derecho mismo si la decisión de .la organiza-
a voz. La Central de la Dirección ción y de la Dirección del Partido
del Partido debe tener constantemen- parece errónea a ciertos miembros,
te a su disposición representantes de éstos no deben olvidar jamás, en sus
esa especie (comisarios), a fin de es- discursos o en sus escritos públicos,
tar en condiciones de informar y de que no hay peor delito y falta más
instruir a las direcciones regionales y grave que perturbar o entorpecer en
de cireunseripción, no sólo por circu- el combate la unidad de frente.
lares y correspondencias, sino verbal-
mente. Es deber supremo de cada miem-
bro del Partido, defender al Partid.»
Cada organización, cada órgano del
Comunista y, ante todo, la Interna-
Partido, como igualmente cada miem-
bro, están autorizados para comunicar cional Comunista. El que olvida ésto
directamente y en todo momento sus y ataca públicamente al Partido o a
iniciativas, sus observaciones o sus la Internacional, es un mal comu-
acusaciones a la Dirección Central nista.
del Partid» o a la Internacional,, res- 44. — Los estatutos del Partido de-
pectivamente . ben ser redactados de tal modo que
43. —• Las directivas y decisiones no constituyan una traba paTa los ór-
de los órganos dirigentes del Partido ganos dirigentes d;el Partido en el
son obligatorias para todas las orga- desarrollo constante de la organiza-
nizaciones dependientes y para todos ción general del Partido y en el mejo-
los miembros. ramiento incesante del trabajo de or-
La responsabilidad de los órganos ganización; por el contrario, deben
dirigentes, su deber de evitar las co- servirle de punto de apoyo.
misiones restringidas y el abuso de Las decisiones de la Internacional
su posición de jefes, pueden ser deter- Comunista deben ejecutarse sin demo-
minadas no formalmente, pero sí par- ra por todos los partidos afiliados,
cialmente. Cuanto menos sea su res- aún aquellas decisiones que hacen ne-
ponsabilidad — por ejemplo, sn los cesarias modificaciones a los estatu-
partidos ilegales — más obligados es- tos; esas modificaciones pueden efec-
tán a inquietarse por las opiniones de tuarse después.

• /
— 20 —

VII
Trabajo Segal e ilegal
45. -— E l P a r t i d o debe estar orga- sublevaciones revolucionarias, para
nizado en t a l forma que esté siempre las batallas o, en general, p a r a la ac-
en condiciones de a d a p t a r s e rápida- ción ilegal. H a n construido toda la
mente a las condiciones de la l u c h a . organización del P a r t i d o teniendo
E l P a r t i d o Comunista debe desen- muy exclusivamente en vista un lar-
volverse como organización de com- go período de legalidad y han dado
b a t e . Debe ser capaz, por una par- a esa organización una forma adapta-
te, de substraerse, en campo abierto, da a las exigencias de las condiciones
a u n enemigo que posea fuerzas su- legales.
periores y aplastantes que h a y a con- E n los partidos ilegales, por el con-
centrado tocia su potencia sobre un trario, ocurre muy a menudo, que se
punto, y, Ipor otra, de aprovechar la desconocen los medios de utilizar las
i n a c t i v i d a d de ese enemigo p a r a caer posibilidades de una actividad legal,
sobre él, aquí y allá, cuando él mo- y no se forma una organización liga-
nos lo espere. Tendría una gran la- da a las masas revolucionarias por
guna en su organización, si no estu- elementos activos. En este caso, el
viera pronto p a r a contar con una re- trabajo del P a r t i d o adquiere la ten-
vuelta o un combate de calle, o aún dencia de un trabajo estéril, de Sicy
con el estado de ánimo resultante de phe, o bien se limita a conjuros impo-
una cruel opresión. Los comunistas tentes.
deben hacer sus preparativos revolu- Esas dos tácticas son falsas. Cada
cionarios en todas las direcciones pa- P a r t i d o Comunista legal debe saber
ra estar siempre listos p a r a la lucha, obrar de manera que pueda estar se-
porque frecuentemente es casi impo- guro, — aún siendo apremiado p a r a
sible prever el retorno de los perío- el trabajo subterráneo, — que está
dos de calma o de revuelta. Aún en bien preparado p a r a la lucha y que
el caso de que t a l previsión fuese está, sobre todo, listo p a r a las re-
posible, no se podrá, en la mayor par- vueltas. Cada P a r t i d o Comunista ile-
t e de los casos, aprovechar el tiempo gal debe igualmente utilizar, con toda
p a r a reorganizar al P a r t i d o , porque energía, las posibilidades del movi-
esos cambios se producen ordinaria- miento obrero legal p a r a convertirse,
m e n t e en forma muy rápida, pues merced a un trabajo intenso de Par-
son, por lo común, el resultado de tido, en el organizador de las gran-
lo i m p r e v i s t o . des masas revolucionarias y ponerse
46. — Los Partidos Comunistas le- realmente a su cabeza.
gales de los países capitalistas, en ge- 47. — En la vida cotidiana, los cam-
neral, no han comprendido todavía bios de función de cada P a r t i d o Co-
fieientemente la t a r e a que incumbe munista deben corresponder a las di-
a los mismos de organizarse y prepa- ferentes fases, que varían en el curso
rarse en la forma necesaria p a r a las de la revolución. Sin embargo, na
— 21 —

h a y diferencias muy grandes entre caer y a desmoralizarse a causa" de la


la estructura que debe t r a t a r de dar- falta de trabajo inmediato.
se un partido legal y otro ilegal. 49. — E n general, nuestro t r a b a j o
N a t u r a l m e n t e , es de la mayor im- de p a r t i d o debe ser, entonces, repar-
portancia p a r a un p a r t i d o ilegal, pro- tido de t a l m a n e r a que, gracias a
teger a sus miembros y a sus órganos él pueda formarse y afirmarse antes
contra la posibilidad de ser descubier- de la revolución, la base de una or-
tos en el curso de su actividad. No ganización de combate qeu satisfaga
se los debe exponer a peligros por un las exigencias de l a lucha revolucio-
sistema imprudente de listas de nom- naria. Importa, sobre todo, que los
bres, de cotizaciones y de distribución dirigentes del P a r t i d o t e n g a n constan,
de materiales del P a r t i d o . E s por eso temente en cuenta esas exigencias, en
que no pueden emplearse las mismas el curso de su actividad directiva y
formas de organización abierta que que se esfuercen, t a n t o como sea po-
en un p a r t i d o legal. Sin embargo, el sible, por formarse de antemano una
P a r t i d o ilegal puede, a fuerza de idea clara. Es verdad que esta pre-
aprender, llegar gradualmente a su visión n o puede ser jamás muy exac-
finalidad. t a y clara; pero e s t a consideración
P o r otra p a r t e , un partido legal de no debe ser nunca un pretexto p a r a
masas debe estar constantemente pron- descuidar este punto v i t a l : la direc-
to p a r a el t r a b a j o ilegal y p a r a los ción organizadora de un P a r t i d o Co-
combates; debe, continuamente y ca- munista. Claro está que en el mo-
da vez mejor, prepararse p a r a todas mento en que la sublevación revolu-
las sorpresas, y debe dirigir en ese cionaria se declare, se provocarán los
sentido su actividad. Por ejemplo: más grandes cambios de funciones en
debe conservar en sitio seguro las di- la actividad del P a r t i d o Comunista
recciones reservadas, t o m a r por cos- —• aún el mejor organizado puede ser
tumbre la destrucción de las cartas, incomodado por problemas excesiva-
poner a buen recaudo los documentos mente difíciles y complicados. Será
necesarios, instruir a los miembros en- necesario, t a l vez, poder movilizar
cargados del servicio de relación en en pocos días — p a r a un verdade-
las reglas del t r a b a j o r e s e r v a d o . ro -— combate—a nuestro partido po-
lítico y no solamente a éste sino tam-
48. — E n los círculos de los P a r t i - bién a las reservas, las organizacio-
dos, t a n t o legales como ilegales, fór- nes simpatizantes, y aún puede ser
mase con frecuencia la idea de orga- que sea necesario todo el cuadro de
nizar el trabajo comunista ilegal de reserva, es decir, las masas revolucio-
una manera completamente privada, narias no' organizadas. E n un momen-
exclusivamente militar, fuera de la to, semejante, no podrá ser cuestión
organización y del t r a b a j o del con- de formar un ejército rojo. Debemos
junto del P a r t i d o . E s t e punto de vis- t r i u n f a r sin tener p a r a ello un ejér-
t a es erróneo como quiera que se cito organizado de a n t e m a n o ; debe-
le observe. P o r el contrario, la crea- mos vencer por las masas y bajo la
ción de nuestra organización de com- dirección del P a r t i d o . Y puede suce-
b a t e , debe — en el periodo ante-re- der que la batalla más heroica no
volucionario •— hacerse por el trabajo, nos- ayude en nada, si nuestro p a r t i d o
del P a r t i d o Comunista. E l P a r t i d o no está b a s t a n t e bien organizado con
debe estar formado en organizaciones anticipación.
de combate p a r a la revolución.
Las organizaciones militares revolu-, 50. — H a sido muchas veces remar
cionarias aisladas que surgen mucho eado que, en situaciones revoluciona-
antes de la revolución, tiennden a de- rias, los órganos centrales dfel P a r t i d o
no se han mostrado a la altura de su En todas esas fases de. actividad re-
misión. En tiempo de revolución, el volucionaria especial, cada Partido
proletariado puede hacer conquistas Comunista legal necesita preparativos
importantes en el dominio, de los pro- secretos. Se puede, en la mayoría de
blemas de organización de orden in- los casos, desarrollar el aparato ne-
terno. Entre tanto, en la mayor par- cesario en este dominio, por una acti-
te del tiempo, hay desorden, confu- vidad completamente legal, a condi-
sión y caos leu sus cuartelese genera- ción de que al organizar esa activi-
les. Falta, también, la distribución dad se tenga solamente en vista la
del trabajo sistemático más elemen- clase de aparato que debe ser crea-
tal, pudiendo verse, sobre todo, que do. Por ejemplo, puede crearse en
el servicio de información es, por lo sus partes esenciales, un aparato se-
común, tan defectuoso que resulta creto de relaciones o comunicaciones
más perjudicial que útil; no se puede (para el servicio de mensajes, etc.)
tener confianza en el servicio de re- repartiendo simplemente y con regula-
lación; el funcionamiento del correo, ridad los escritos legales, entre ellos,
de los transportes, la elección de lu- las publicaciones y las cartas.
gares de reunión, la instalación de 51. — A los ojos del organizador
imprentas, todo eso depende, por lo
comunista, todo miembro del partido
general, completamente, del azar en
y todo obrero revolucionario aparece,
lugar de ser todos servicios secretos.
en general, como en su rol histórico
En esas condiciones, la menor provo-
de futuro soldado de nuestra organi-
cación por parte de un enemigo or-
ganizado tiene las mayores posiblida- zación de combate para el momento
des de éxito. de la revolución; lo hace entrar de
antemano en el principal grupo don-
E l resultado no será nada mejor, de se hace el trabajo que mejor co-
especialmente si el Partida revolu- rresponderá a su futura situación y
cionario no organiza anticipadamente al rol que le será asignado. Al mis-
en su seno un órgano destinado espe- mo tiempo, la actividad de todo miem-
cialmente a esos fines. El servicio de bro, debe tener, desde ahora, el carác-
información militar exige una prácti- ter de un servicio, útil y necesario pa-
ca y una experiencia especial, lo mis- ra la lucha presente y no el de ser un
mo que el contraespionaje contra la simple ejercicio que el obrero practi-
policía política. El aparato de liga- ca desde hoy, pero que no compren-
zón secreto no puede funcionar segu- de ni justifica. Esta actividad co-
ra y prontamente sino a fuerza de rriente debe servir, entonces y en
haber sido puesto en acción regular- parte, como escuela para las exigen-
mente durante un tiempo prolongado. cias de la lucha final del mañana.
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