Ernesto lodazal un joven poco amistoso y con un espíritu bastante aterrador, su mirada era maléfica.

Sentía un escalofrío cada vez que pasaba por mi lado, o cuando me miraba; que por cierto no sé porque
me miraba tanto, y justo por eso me atemorizaba. En la tarde de enero del 1980, recuerdo
perfectamente ese día, fue cuando murió Ernesto Lodazal, muchos dicen que, por mi culpa o que yo fui
su asesina. Pero lo que no saben es que tres días antes de su muerte, cuando me dirigía al mercado me
lo encontré, me miró fijamente y con enojo se acercó hacia mi oído y me susurro te espero ... detrás de
la casa abandonada. Para mí fue una gran sorpresa, porque en todo el tiempo de conocerle, jamás se
dignó a hablarme, solo me miraba, me miraba como si me conociera o como si yo le hubiese hecho algo
terrible, realmente no lo sé, estaba aturdida y no sabía qué hacer, mi mente me mandaba miles de
imágenes de como el me mataría. Sin embargo, accedí a ir. Cuando iba camino a casa, pensé en ir pero
había un inconveniente, mi tío francisco, vivo con él y su familia, él es muy estricto y amargado, le
molestaba todo de mí, incluso le molestaba que yo riera, podría afirmar que le molesta verme respirar.
Aunque es normal, "todo le molesta" quizás tenga alguna enfermedad con su humor porque realmente
es horroroso. Por ello sabía que no me dejaría ir, y mucho menos si le dijese que era para encontrarme
con Ernesto lodazal. me imagino como me estuviese gritando ¡¡por nada del mundo iras, y con ese tipo
que ni siquiera conoces !! jamás y ándate a tu cuarto o quieres que te castigue niña estúpida !! ya me lo
imagino hablando esas serian sus palabras, ni hablar de los golpes que podría darme como acostumbra.
Era de madrugada o de noche, cuando decidí escaparme por el techo del patio estaba muy oscuro, solo
pensaba que el tío francisco me golpearía si se diera cuenta, pero me quedaba el consuelo que con los
golpes quedaría viva , en cambio de Ernesto lodazal, él podría matarme si no voy donde dijo. Que por
cierto es muy raro, la casa abandonada daba mucho terror, el mismo terror que daba el, así que no
pensé más nada solo camine y camine. Al llegar noté que no había absolutamente nadie, mi reloj de
mano marcaba las 2:00 am, así que me senté a la orilla de un árbol a esperar ... Pasaron como unos 10
minutes quizás una hora, pero estaba dormida no sentí el tiempo. Cuando llego Ernesto, enseguida me
comenzó a temblar todo, no tenía ni la más remota idea de que quería, o para que me cito hasta ese
lugar. Con la voz quebrada lo salude por primera vez. – Que tal, como estas. ¿Te han dicho que eres un
poco raro, y que tienes un espíritu o que no transmite nada bueno?

–Muchas veces, pero nadie me lo había dicho de frente como lo has hecho tu - dijo Ernesto lodazal¬

- porque me has citado aquí ? Yo no te he hecho nada ni siquiera te conozco, estoy muy asustada, mi
mente solo me pasa imágenes de los periódicos de mañana. –Dije

– Periódicos? ¡De que hablas! –Dijo Ernesto lodazal

– De mi muerte. –Dije

Sonrió y comenzó a platicarme el porque me cito aquí. Su sonrisa era hermosa, y su mirada era la más
tierna, bueno justo en ese momento era tierna. no preste atención a lo que dijo del porque me cito.¬

- puedes repetirme? –Dije

– En que piensas? –Respondió

Pienso el porque en el mercado tu mirada me parecía perturbadora, y no sentí nada agradable cuando
pasabas por mi lado, sintió que me querías matar. De hecho, por esa razón vine creí que si no lo hacía
podrías estrangularme.

– Claro que no!

¿Pero qué piensas ahora? –Dijo Ernesto lodazal

– No sé, pero siento que eres una persona increíble, es mas mucho gusto, Sé que tu nombre es Ernesto
por todos los comentarios que he escuchado. Pero sé que tú no sabes mi nombre nadie habla de mí, soy
katiuska.

- me puedes responder ¿Por qué me has citado en este lugar tan horrible y frio? ¬

_ya te lo dije, porque aquí puedo decirte las cosas que siempre te eh querido decir. Y además nadie nos
estará viendo, sabes que tu rostro es el más bello que eh visto. –Dijo

Estaba muy nerviosa, pero no por miedo ni nada por estilo, el terror hacia Ernesto ya no estaba. Ahora
sintieron que lo conocía, incluso sentó que podría enamorarme de él, algo estúpido él tenía 22 años y yo
18, no creo que él se fijase en mí, él solo sonreia una y otra vez .

Comenzó a llover, mire mi reloj y ya eran las 3: 30 recordé que mi tío se despertaba a las 5:00 sentí que
me iría muy mal si no llegaba a tiempo. Ernesto me tomo de la mano y casi que me arrastro hasta entrar
a la casa abandonada.

– ¡¡corre !! Vamos a entrar a la casa o vas a resfriarte. –Dijo

Al sentir su mano en la mía, sentí que podíamos ser sempiternos, no quería que su mano me soltara
nunca, me hizo sentir segura. Al entrar a la casa no sabía qué hacer, ¿Qué quieres de mí? Y me beso ...
me sorprendí demasiado, pero me gusto me erizo todo el cuerpo jamás había imaginado eso.

- te quiero a ti –dijo Ernesto

No se cómo paso, te miro en la plaza sonreír, siento que ya te conozco y me enamore de ti. solo con
verte, al pasar por tu lado, oler tu perfume de rosas, cuando temblabas al mirarme fijamente, reconozco
que mi mirada era terrorífica y que todos piensan mal de mí, pero justo para ganarme el respeto de
todos, lo hice. Pero necesito estar a solas contigo, para expresarte que siento amarte que justo ahora
quiero estar contigo.

Volvió a besarme, accedí al beso, admito que también sentí que lo podría amar, antes me asustaba, pero
desde las 3:00 am sentí amarlo. ¡¡Madre mía !! Son las 5: am mi tío francisco va a matarme y no lo digo
por decirlo de verdad va golpearme muy fuerte.

– Ernesto me voy, mañana hablamos. Dije

– No, quédate conmigo, –dijo Me besaba y me convenció de quedarme, había una sabana tirada, ahí
podría decirse que hice el amor. quien pensaría que en tres horas me enamoraría de alguien y justo de
Ernesto lodazal. ....