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Boris Javier & Andrea Barrera.

Índice

Introducción
Prólogo

CAPITULO I Un Nuevo Comienzo.


¿Qué se consumó?
El pago más grande de la historia del planeta.
El significado del madero
Tú También puedes Comenzar de Nuevo

CAPITULO II La Revolución (Primero en el corazón)


¿Cómo se propaga?
Bajo el “efecto”
Viviendo parcial o totalmente bajo el “efecto”
Cabeza o cola o ni cabeza ni cola

CAPITULO III El Poder del Espíritu Santo es para efectuar la “Revolución”


Se debe atacar la raíz, no las ramas.
La solución: Comienza por Fe y termina por Fe.
“Consumado es” significa Victoria para ti
El sistema inmunológico del Creyente

CAPITULO IV La Batalla Decisiva


Los Yugos
Todos tenemos sentidos espirituales
La etapa de la Lactancia espiritual
Superando la etapa de la Lactancia
Cuando sientas Hambre de Dios ¡Regocíjate!, es porque Él quiere darte Más.
¡El hambre es una señal de que estas vivo!
Decidir y escoger
Ver Su Rostro.
El Sistema Vano
El Propósito Glorioso
La Verdadera Realidad
Todo lo bueno viene del Cielo

CAPITULO V Puertas espirituales y Llaves espirituales


¿Cuáles son estas llaves?
Primera Llave: Consumado Es
Segunda Llave: Política Mundial
Tercera Llave: Educación Mundial
Cuarta Llave: Medios de Comunicación
Quinta Llave: Las Artes
Conclusión

Dedicatorias

Agradecimientos

Introducción

Para cuando termines de leer este libro tendrás una fiesta en tu espíritu
porque sabrás en quién eres y cuánto vales, además tendrás la certeza del
amor del Rey hacia ti y la convicción de que Jehová cumplirá su propósito en
Ti.
No pasarás de largo por esta existencia porque Jesús HOY te mira con sus
ojos dulces, con esos mismos ojos con los que te vio desde antes de que
nacieras, con esos ojos cargados de amor y pasión por Ti, porque vio tu rostro
en la cruz y HOY te dice: Consumado Es.

Prólogo.

Escribir este libro fue una labor de muchas horas e intentos, por supuesto la
razón principal es que no somos escritores, pero nos inspira el significado de
"Consumado Es", el poder glorioso que vive tras estas palabras, y también
porque nuestro anhelo es que tus ojos se puedan abrir ante esta verdad que te
pertenece por derecho, por SU gracia. Muy bien, ¿qué significa esto?
significa que cuando creíste en tu interior que Jesús es el Hijo de Dios, que
resucitó de los muertos y que vive... eres automáticamente propietario de
todo lo bueno que Dios quiere para sus hijos. ¿Qué es eso que el Hijo de Dios
adquirió para ti cuando dijo "Consumado Es"?

Este libro nació gracias a una visión que tuvo mi padre, Jairo. En un instante
Dios Espíritu Santo le permitió ver la revelación tan profunda de aquel
Gólgota y de esa Cruz.
Esa sublime cruz que para muchos representa terror y muerte en ese momento
y en esa visión parecía contener TODA LA VIDA Y TODO EL PODER*.
Lo grandioso y tal vez extraño para muchos es que Dios le mostró a mi padre
la belleza de la cruz y el poder de cada brizna de sangre que ella absorbió, y
mientras le mostraba y él me contaba a cientos de millas de distancia, el
Espíritu Santo me lo mostró a mí también.

Fue como si Dios Espíritu Santo nos hubiese tomado de la mano a mi padre y
a mí y nos hubiese llevado físicamente al Gólgota para ver de primera mano
la Belleza de la cruz y el poderoso significado de las palabras “Consumado
Es”.

Fue esta visión la inspiración y el llamado de Dios para escribir este libro.

*Poder por la Sangre de Cristo derramada en ella.

CAPITULO I
Un Nuevo Comienzo.

Comenzaremos en el lugar donde todo terminó: el Gólgota. ¿Por qué?


Porque a partir de las palabras que pronunció Jesús: CONSUMADO ES,
hubo un nuevo comienzo glorioso y sin defecto para el pueblo de Dios, un
plan magnífico y perfecto del cielo que afectaría al resto de la humanidad.

Los creyentes son los primeros que deben saber la sustancia de estas dos
palabras, porque nosotros (los creyentes) somos cercanos, y el orden de Dios
es que por el testimonio de sus cercanos, otros lejanos se hagan cercanos, es
decir, el resto de la humanidad que no conoce a Cristo. Primero la iglesia, su
pueblo, los creyentes, para que los que no creen vean la gloria de Dios sobre
su pueblo y quieran ser parte de el. Quizá dirás, Jesús hizo tantas señales
extraordinarias, milagros, liberaciones, multiplicación, resurrecciones... o tal
vez pensarás que sus enseñanzas fueron tan poderosas que, ¿por qué
referirnos solamente a estas dos palabras que sus labios pronunciaron en el
momento más gris de la historia?

Prepárate porque lo mejor para ti y para la tierra se selló con las palabras de
Jesús: "Consumado es".

¿Qué se consumó?

Maravillosos hechos y grandes señales rodearon la vida de Jesús en la tierra,


pero en realidad el tesoro más preciado estaba tras estas dos palabras. Un
tesoro que te garantiza vivir y disfrutar para siempre y en cada momento de tu
vida del amor y poder de Dios en Jesucristo, para que literalmente ¡NADA
TE SEA IMPOSIBLE!

Lo que ocurrió realmente en los tres últimos años de nuestro Señor Jesucristo
fue un preludio de los gigantes regalos que nos iban a ser entregados. Ese
preludio de poderosos hechos estaba lleno de amor, grandes sanidades,
señales de sobreabundancia, promesas, palabras proféticas como nunca antes
se había visto y aunque todo esto estuviera pasando y el pueblo en ese
entonces estuviese disfrutando de este privilegio aún la bendición no se había
desatado completamente. Era necesaria primero la pronunciación de las dos
palabras que fueron la autorización final del regalo eterno y permanente que
contenía tu salvación como comienzo de una victoria que te seguiría todos los
días.

Es un paquete eterno porque no quiso que solo esa generación lo disfrutara


sino que fuese aún para generaciones que jamás le hubiesen visto. A esas
generaciones principalmente se refirió Jesús cuando le dijo a Tomás
"Bienaventurados los que no vieron y creyeron". Por que su Regalo era
también para todas las generaciones que vendrían. La realidad de esto se
consolidó a partir de las palabras de Jesús "CONSUMADO ES".

Aunque las cosas aparentemente marcharan igual, un cambio y una


revolución gloriosa ocurrieron a partir de la milésima de segundo siguiente a
las palabras CONSUMADO ES.
Para Jesús no fue fácil despojarse de quien es Él, hacerse hombre siendo Dios
y expresamente venir a pagar un precio inmenso y lleno de doloroso
sacrificio.

Pero oficialmente el precio comenzó a cancelarse completamente sin dejar


NADA por fuera a partir del momento en que le echaron mano después de
orar en el huerto de Getsemaní. Si, allí donde vinieron con palos y alboroto
como si fuera Él un perro. Su dolor fue el pago, el pago ineludible de una
inquebrantable redención para un pueblo que sería cabeza en las naciones
para SU Gloria.
Y todo sometió bajo sus pies, y a El lo dio por cabeza sobre todas las cosas a
la iglesia,
Efesios 1:22

El dolor que sufrió Jesús fue como dinero con el cual se canceló una deuda,
fue expresado en sangre y esa sangre es la señal contundente de que TODO
fue consumado, es decir, cancelado.

El pago más grande de la historia del planeta.

Cada gota de sangre, cada lágrima derramada en su rostro, cada gota de sudor
por causa del intenso dolor, cada suspiro repleto de angustia, cada latir de su
corazón cada vez más rápido y cansado a causa de una tortura salvaje fue
parte de un precio, alto precio de una deuda que solo Él podía pagar. Pero
mas que su sufrimiento lo que realmente asombra es su amor. Muchas
personas han sufrido porque no tenían opción, pero que alguien por su propia
decisión asuma tal dolor basado en amor solo podía ser Dios y así fue en
realidad, Él era Dios. Si, Jesucristo, el que padeció en el Calvario aquella
eterna agonía, no en muchas horas, pero que parecían eternas y que fueron
parte de un pago de libertad, amor, solución, salida, vida eterna, sonrisa,
sanidad, sobreabundancia, reconciliación para así poder después decir
¡CONSUMADO ES!

El significado del madero


Para nosotros -los creyentes- la cruz significa darlo todo (hasta la vida
misma) por causa del Reino de Dios y tampoco dejó de ser lo mismo para
nuestro Señor Jesucristo.
Una madrugada mientras hablaba con mi papá vino el Espíritu Santo sobre él
y en un tiempo corto le mostró en visión ciertos detalles reveladores del
momento de la crucifixión.

El quedó atónito mientras me contaba lo que veía, ambos estábamos


maravillados. En verdad con Dios todo tiene significado de bendición,
profético y de enseñanza para toda la humanidad.
Lo que mi padre vio fue la cruz de Jesús por sus cuatro frentes, era un madero
ordinario y rústico, de la madera más seca, envejecida y áspera al tacto que se
pueda uno imaginar. Esta se desenterraba y la parte que estaba clavada en
tierra salió dejando tras de sí muchas partículas.

La interpretación de esa visión también la proveyó el Espíritu Santo. Cada


astilla de ese madero significaba cada pecado, atadura, dolor, fracaso,
maldición, desobediencia, rebelión contra Dios, que causaron dolor sobre el
cuerpo ya maltratado del Cordero de Dios. Pero también cada una de esas
partículas de tierra representaba un propósito conquistado y cumplido de
parte de Dios sobre la tierra. La sangre de Jesús cayó y tocó la tierra (pues fue
desangrado brutalmente) y esta es la señal de la reconciliación de Dios con
nosotros, también con la tierra y con todo lo que habita en ella.

Sabemos que la cruz significa morir -por causa del Evangelio- y Jesús fue
clavado en aquella cruz, fue adherido a ella de tal manera que lo traspasaron
en carne viva en sus manos y pies. Lo que hizo Dios fue tomar literalmente
nuestro lugar. Mas aún, todas las astillas que se pudieron clavar en su piel, Él
es ese sacrificio vivo y dejó allí clavada toda la maldición, pecado,
inmundicia, enfermedad, condenación y muerte de la tierra entera y la
humanidad.

La cruz por sí sola nada puede hacer, se necesitaba del cuerpo santo del Hijo
de Dios clavado en ella como sacrificio perfecto para destruir totalmente la
maldad y el dominio de Satanás. Solo Jesús, el Hijo de Dios, sin mancha y
sin pecado podía tomar ese lugar y así eliminar las tinieblas que estaban
señoreando el planeta sin opción de salvación para nadie, sin oportunidad de
tener una relación cercana con Dios.

Tú También puedes Comenzar de Nuevo

Las Escrituras dicen que Dios ha elegido a los suyos. Hay quienes son
predestinados para salvación y quienes no lo son. ¿Es esto una injusticia de
parte de Dios? De ninguna forma! Si tu estás leyendo estas líneas es porque
Dios te ha escogido Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado á
su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas
tenga vida eterna. Porque no envió Dios á su Hijo al mundo, para que
condene al mundo, mas para que el mundo sea salvo por él. El que en él
cree, no es condenado; más el que no cree, ya es condenado, porque no
creyó en el nombre del unigénito Hijo de Dios. Juan 3:16-18

Dios sabe quién aceptará a su Hijo y quién no lo hará, mas si Dios te eligió
serás salvo y tienes derecho a TODO aquello por lo cual Jesús pagó cuando
pronunció las palabras Consumado Es.
Todo lo que debes hacer es CREER y DECLARAR, porque si confiesas con
tu boca que Jesús es el Señor, y crees en tu corazón que Dios le levantó de
los muertos, serás salvo. Porque con el corazón se cree para justicia; más
con la boca se confiesa para salvación.
(Romanos 10:9-10)

Si crees, háblale a Jesús en privado, dile que crees en Él, crees que es el
Hijo de Dios, crees que Dios lo resucitó como dice la Escritura, crees que
está vivo y que escucha tus palabras. Dile que lo aceptas como tu Señor y
único Salvador, y si es así, dile que de hoy en adelante lo buscarás y
obedecerás hasta que Él mismo venga por ti.

Si hiciste esta oración ahora no temas confesarlo en presencia de quienes te


rodean, lee la Biblia diariamente pidiendo orientación del Espíritu Santo a
quien el Padre envió para estar contigo siempre y busca una congregación
donde puedas alimentarte de su palabra y conocer a otros que comparten tu
fe. Ellos son tu familia en Cristo.
CAPITULO II
La Revolución (Primero en el corazón)

Cuando Dios habla de revolución no habla de traer algo nuevo. La cruz de


Jesús implica una total revolución, la cual nunca pretendió traer o mostrar
algo distinto, sino ser el cumplimiento de “algo” que estaba escrito. Sabemos
que ese “algo” es la Restauración de la amistad del Hombre con Dios.
Establecer de nuevo el plan y orden de Dios que bendeciría a la Tierra
abriendo una puerta real de esperanza y restitución en medio de una
maldición inminente a causa del pecado.
Sabiendo entonces qué significa “Revolución” para Dios, podemos entender
que para que esta fuese una realidad se debía romper una gran maldición que
la impedía, y no era a cualquier precio, era a precio de la sangre del Hijo de
Dios, es decir, sangre sin pecado alguno. Pero esta revolución se da con un
orden: Comienza en el corazón de cada hombre y mujer que accede a creer
que Jesús deshizo sus pecados y maldiciones en la cruz, de ahí que pase de
ser una persona desesperada a una persona llena de paz, que pase de ser una
persona religiosa y amargada a una persona espiritual y dulce.
Si quieres ver revolución a tu alrededor, en tu familia, finanzas, en la obra de
tus manos, en tu universidad o en tu país debes cerciorarte de que esta
revolución primero ocurra en ti, en tu mente y corazón. Este orden no se
puede alterar, los profundos y benditos cambios no se dan sin Jesús de por
medio, muchos políticos y líderes, aún grandes artistas han tenido buenas
intenciones para provocar cambios sanos y edificantes para su comunidad o
generación, pero estos bellos planes se frustran ya que en sus propios
corazones no ha sucedido la revolución de Dios. Tampoco en sus manos hay
unción para restauración. Necesitas la unción si quieres ver cambios reales en
tu entorno.

La palabra unción viene de untar, en el pasado, cuando Dios enviaba a un


profeta judío a nombrar un nuevo Sacerdote, a un Rey o a un Profeta, lo
ungía derramando aceite sobre su cabeza. El aceite tiene la propiedad de
impregnar la piel, penetra y difícilmente se puede remover, por eso los
perfumes finos tienen bases oleosas, debido a la propiedad del aceite de
permanecer.
El aroma de un perfume con base alcohólica o de agua no duraría mucho
tiempo en la persona, un perfume con base oleosa permanece. Así es la
unción del Espíritu Santo, permanece, penetra, impregna.

Muchos fracasan en sus intentos por cambiar su entorno o se cansan y


simplemente se dejan arrastrar por la corriente común, desequilibrada, sin
esperanzas, sobre todo sin grandes expectativas ni satisfacciones para nadie
por que no tienen la Unción del Espíritu Santo.
Las buenas intenciones no son suficientes, aquí es donde debemos aplicar lo
que hemos llamado “lógica espiritual”. Si quieres provocar o ver grandes
cambios y una revolución de bendición para tu entorno, primero ésta debe
ocurrir en ti. ¿Por qué? Porque Dios quiere hacerlo a través de ti. De otro
modo Él no hubiese enviado a su amado Hijo a tomar nuestro lugar. Ellos
(Dios) hubiesen obrado por sí mismos, en su posición de Dios, sin tenernos
en cuenta, pero Dios en su gran amor trajo esta revolución, es decir, el
cumplimiento de su palabra, promesas y profecías del Antiguo Testamento a
través de su Hijo, quien tomó nuestra forma humana, pagó el precio en la
cruz para hacerlas realidad. Acabó con todo lo que se oponía, rasgando el
velo que separaba al hombre de Dios para que todo aquel que se acerque y se
atreve a creer tome de lo que fue cancelado, lo lleve consigo y lo propague,
contagie a su nación, trabajo, familia o ministerio de esa total y hermosa
restauración.

¿Cómo se propaga?

Esta revolución es por naturaleza contagiosa. Ya sabemos lo que realmente


significa revolución, ahora podemos analizar su propagación y propósito.
Sabemos que esta santa revolución, esta bendita epidemia, se origina en el
espíritu de un hombre o mujer que se rinde a creer en el poder de la sangre de
Jesús, su sacrificio y victoria sellada con las palabras “Consumado es”.
Cuando alguien está bajo la influencia de la sangre de Jesús y de sus palabras
¡Consumado es! No puede pasar desapercibido. Su entorno y las personas a
su alrededor lo advierten y de forma involuntaria y automática son
contagiados. Las barreras mentales de algunos podrán generar algo de
oposición consciente, y su comportamiento es de resistencia, pero en el fondo
saben que algo poderoso está ocurriendo en él.

La mejor manera en que podemos saber si estamos bajo el manto de la sangre


de Jesús -que pagó para luego decir ¡CONSUMADO ES!-, es si tu entorno
está siendo afectado para bendición.

Si alguno sufrió en su pasado un dolor intenso o un trauma y no es sanado,


muy probablemente afectará a otros en su entorno de forma negativa, cuánto
más afectará su entorno alguien afectado positivamente y ¡vaya que positivo!
nada mas y nada menos que por Cristo Jesús, por lo tanto, ni el ni su entorno,
ni familia, ni aún su nación volverán a ser los mismos. Porque esta revolución
es, por naturaleza, contagiosa.

Bajo el “efecto”

Es increíble ver lo que produce estar bajo el “manto” que proporcionó


bendición para el mundo, un “manto” que descendió después de que el Hijo
de Dios pronunció las palabras ¡Consumado es!
A pesar de que la Tierra, la naturaleza y la humanidad lloraron por el
sufrimiento que padeció Jesús en la cruz, a la vez, junto con el “sello y la
firma” llamados ¡Consumado Es!, un bello “manto” llamado Vida Eterna
cayó del Cielo a la Tierra, un “manto” hecho de Gloria, Victoria, Retribución,
Salvación, Perdón, Sanidad y los Talentos –que Dios le había dado a la gente
pero que habían sido robados por Satanás para traerles frustración-.
Este “manto” trae además Restauración, Libertad y lo más especial,
Reconciliación para tener una amistad sin obstáculos con nuestro Padre
eterno. Este “manto” cuenta con todos estos ingredientes y con muchos mas y
es íntegro. Si aún los impíos reconocieron en la túnica de Cristo un objeto
valioso y único y no lo rompieron sino se lo echaron a suertes, de la misma
forma, este “manto” glorioso no se recorta por pedacitos.

Tal como la túnica de Cristo era tan bella, tal como sus mismas ropas, que
contenían su gloria y poder y eran tan solo una muestra tangible de la gloria
que estaba a punto de cubrir la tierra, como si Él mismo quisiera revestirnos
ahora de su gloria que no tiene límites. Su contenido de poder era TODO Y
PARA TODOS.

Si aquellos soldados, los que se repartieron Sus ropas hubiesen sabido que
esto no era necesario, que un “manto” MUCHO MAS GLORIOSO en las
próximas horas iba a descender, no se hubiesen esforzado tanto por echar
suertes sino por correr al borde de la cruz donde habían clavado al Maestro y
tan solo abrazar Sus pies destrozados, entonces habrían obtenido un “manto”
que nunca les hubiera sido quitado. Un “manto” que está disponible para
todos, pues nuestro Padre no le da a algunos un trozo mas grande y a otros un
poco menos, ¡no! El “manto” es intocable y eterno, porque Jesús, el Hijo de
Dios lo trajo con su propia Sangre. Es el mismo “manto” para todos.

Los soldados se quedaron con la prenda, pero Jesús quiere que tú vayas más
allá de una prenda. Jesús no solo quiere que conserves ciertas cosas que te
parecen buenas de Él, alguna frase, el título de maestro o un milagro, Él
quiere que te quedes con Él y quiere darte todas las cosas incomparablemente
valiosas que contiene el “manto”: Vida Eterna. Él quiere que tú también vivas
bajo su “efecto”.

Viviendo parcial o totalmente bajo el “efecto”

Este “manto” es la porción –la herencia- para todo aquel que le diga SI a
Jesús, crea que es el Hijo de Dios y se arrepienta de sus pecados.
Automáticamente dicha persona queda bajo la cobertura de ese precioso
“manto” y su todo. El que invoca el nombre del Señor queda bajo este
“manto”. ¿Por qué entonces tantos creyentes mueren en fracaso, soledad,
tristeza y frustración sin haber cumplido el propósito de Dios en sus vidas,
sin ver bendición, en derrota, pobreza y tragedia? Simplemente porque no
comprendieron que aquellos ingredientes que componen el manto, TODOS
ELLOS, sin excepción, son una realidad para ellos, no eran solo algunos a los
que tenían derecho, ¡no! Dios no quiere seguir viendo gente salva y frustrada,
gente salva y de mal humor, gente salva y llena de miedo, gente salva y
quejumbrosa, con un grado de lenguaje pesimista. Este tipo de creyentes lo
único que logran es avergonzar el nombre de Cristo dando un testimonio
equivocado con su propia vida. Por eso Dios dice: ¡No más! Él quiere que
esta “revolución” se propague, que el mundo comience a vivir YA bajo el
efecto de este “manto”. Pero ¿Cómo? Si el orden que Él estableció es que
este efecto toque primero a la iglesia y a partir de ahí al resto de la humanidad
y la iglesia aún no vive bajo el efecto del “manto”.

Cabeza o cola o ni cabeza ni cola

La iglesia es la primera que debe y necesita vivir esta revolución, pero ¿cómo
afectar a otros si nosotros mismos no fuéramos afectados? ¿Con qué
respaldo, unción y poder? Por eso Pablo decía que el Evangelio no se trata de
palabras sino del Poder en acción del Espíritu Santo. El Espíritu Santo está
aquí. Y creo que desde hace ya bastante tiempo, desde aquella fiesta de
Pentecostés en Jerusalén narrada en Hechos 2. Además Él es el mismo ayer,
hoy y siempre (Hebreos 13:8), porque Él es Dios, su poder está ahí. ¿Lo has
recibido?

Cuando el Espíritu de Dios golpeó aquel aposento lleno de unas personas


comunes pero con hambre –de Dios-, afectó sus vidas de tal manera que la
gente de afuera se agolpó para ver lo que sucedía. ¿Eso ocurre contigo en tu
familia, en tu ministerio? ¿Es tan evidente la Presencia del Espíritu Santo
sobre ti? ¿Estás tan afectado que otros así no lo quieran también son
afectados?
Las Escrituras narran cómo cuando alguien es afectado por el Poder del
Espíritu Santo -que vino después de que el Señor Jesucristo pagó el precio en
la cruz, con su sangre y sellándolo con las palabras ¡Consumado Es!- no
siempre provoca reacciones amables de parte de su entorno, de hecho tendrá
mucha oposición, tal como Jesús advirtió cuando dijo: “es necesario que
vengan tropiezos”. Así que si eres lleno del Espíritu Santo, le amas, su
unción y Poder están sobre ti, pero sientes que se levanta oposición contra ti,
no temas porque vas en el camino correcto, de cierto estás afectando tu
entorno. No te rindas, pronto verás los frutos de victoria aunque parezca todo
lo contrario.

La Presencia de Dios en tu vida no se califica por el bienestar o adversidad


que te pueda rodear, la presencia de Dios en la vida de alguien, su relación
con Dios no se puede juzgar por las circunstancias externas como la
enfermedad o una calamidad. Nunca juzgues a alguien, nunca juzgues su
espiritualidad por lo que le sucede externamente. Sólo Dios, quien ve dentro
del hombre podría juzgar su condición espiritual, porque la llenura del
Espíritu Santo comienza desde el espíritu, luego afecta el alma, luego el
cuerpo y por último toda su vida y su entorno. Cuando el Espíritu Santo llena
a una persona eventualmente TODO cambia para bien y este es un proceso
cuya velocidad no puede ser calculada con fórmulas matemáticas, depende de
él y de Dios.

De lo que el hombre está lleno, es lo que expresa, si está lleno de basura,


basura hablará y pensará, pero si está lleno del Espíritu Santo, no importa la
adversidad, irradiará amor, santidad y victoria. Así se puede discernir quién
es espiritual y quién no.
¿Por qué Jesús dijo que nos convenía que Él se fuera?,
¿Para qué el Espíritu de Dios?,
¿Para qué su poder y por qué?

CAPITULO III
El Poder del Espíritu Santo es para efectuar la “Revolución”

Él va a efectuar aquello por lo que Jesús ya pagó y a lo cual tú tienes derecho.


El poder de Dios se manifiesta en su iglesia, este es el propósito de Dios,
particularmente para ésta generación.

El poder del Espíritu Santo es el que cambiará las cosas, pero Él determinó
que ese glorioso poder obrara a través del Cuerpo de Cristo, su iglesia, tú.

Jesús nos comparó a los hijos de Dios con una lámpara que irradia luz en
medio de la obscuridad, esto es poder del Espíritu Santo, que la luz de Jesús
opere de tal manera a través de la iglesia que destruya las tinieblas a su
alrededor, ¿Es esto lo que está ocurriendo? Si no es así existe una falla y no
es del Espíritu Santo que obra a través de esa luz para acabar con la
obscuridad. La falla está indudablemente en la lámpara, tú y yo. ¿Y qué
provoca esa falla?, ¿Qué es lo que la estropea?, ¿Cuál es la causa de el daño
en las “lámparas”?

El poder del Espíritu Santo es luz brillante que corta con las tinieblas, lo
único que puede hacer la obscuridad es huir, de manera que gobiernos
corruptos caigan y un equipo espiritual, temeroso de Dios sea colocado en su
lugar; que los medios de comunicación sean dirigidos por personas llenas del
Espíritu Santo, que la educación, la economía, tecnología, artes, ciencia, sean
encabezadas y administradas por hijos de Dios, trayendo bendición
sobreabundante a su generación. El poder del Espíritu Santo es para que la
iglesia de Cristo sea cabeza en todo y nada ni nadie le pueda arrebatar su
lugar porque Jesús con su propia sangre pagó por ese lugar y lo selló con las
palabras ¡Consumado Es!

Y esto es lo que hace a través de la luz de Jesús: Grandes Milagros, tierras


estériles ahora fructíferas, naciones anti-cristianas y ocultistas ahora
apasionadas por Jesús, y esto solo será el comienzo de esta gran revolución.
Nada ni nadie puede detenerla a menos que tú y yo –lámparas de la luz de
Dios- permitamos que un agente dañino pueda causar un corto circuito. El
Espíritu Santo busca vasos a través de los cuales obrar con libertad, pero una
lámpara dañada no puede irradiar su luz.
Nada ni nadie podría detener la luz de una “lámpara” irradiante; nada ni nadie
podría dañarla a menos que tú se lo permitas.

¿Cuál es ese agente dañino al que muchas veces le permitimos la entrada y


nos limita para ver la gloria de Dios?

El Temor
Si. Corta palabra, pero tan dañina que puede descomponer al punto de
inutilizar la mejor de las lámparas.
Cuando del temor se trata:

Se debe atacar la raíz, no las ramas.

Hemos aprendido que las cosas sutiles pueden ser las que ocasionan las más
grandes destrucciones y tragedias, por eso no subestimes nada.
La mayoría de las personas se dan cuenta de la gravedad de su mal solo
cuando los síntomas son fuertes y muchas veces incontrolables. Esto ocurre
tanto en el cuerpo como en el alma. No es suficiente atacar los síntomas y
aliviar el dolor, es necesario ir a lo que lo origina para erradicarlo.

Algunos de los síntomas que se pueden manifestar cuando existe una raíz de
temor son la irritabilidad, perfeccionismo al punto de la tiranía, y estrés.

A menudo nos encontramos con cristianos cansados, religiosos, riendo por


fuera y llorando por dentro, hablando la palabra de Dios y a la vez con
pensamientos de fracaso, que dicen andar y estar en la gracia que es en Cristo
Jesús pero por dentro se sienten los más indignos y culpables, creyentes con
dudas acerca de su salvación. Muchos ni son carnales ni son espirituales, y no
porque deseen ser tibios sino porque están llevando una carga que no les
corresponde, por ejemplo, la santidad por sus propias fuerzas.

Estos son los síntomas de las enfermedades en el alma -en la mente- que
muchos creyentes en las hileras de la iglesia están padeciendo, aún ministros
de Dios quienes se sobre exigen al punto de la tortura. La solución no se trata
de tener una vida de oración diaria, aunque es lo primero y eso es claro, no se
trata de lo que hagas sino de lo que creas y permitas que el Espíritu de Dios
haga en ti a través de tu relación con Él.

Muchos creyentes tienen una vida de oración diaria, hasta de largas horas,
ayunan, tienen hambre de Dios, y se la manifiestan en la búsqueda de su
presencia diariamente, tratando de tener una relación con Dios, pero ¿lo dejan
obrar?

Tu fe es lo que permite que Él obre, tu fe en Jesús, en sus promesas, en su


gracia y amor. Esa fe que produce únicamente descanso, paz y verdadera
santidad: libertad del pecado. Esto es independiente de las horas de
devocional que tengas a diario, imagínate si en ese tiempo que tienes con
Dios cambias lo que tú haces por lo que Él haga. Se trata de creer y si se lo
pides basado en que crees, te garantizo que lo vas a obtener.
Pero el obstáculo y muralla que en ocasiones estorba de manera tormentosa
es el temor. El temor es igual a timidez e inseguridad. Produce apocamiento,
trae y se manifiesta a través de complejos, culpabilidad y confusión.
Cuando veo una persona extremista en cualquier área (o en todas, en el peor
de los casos), obsesiva, religiosa, legalista y que juzga, es notorio que hay
una raíz de temor en su vida. Hasta que no se deshaga de ella nunca podrá
vivir en el gozo y la paz del Espíritu Santo.

La solución: Comienza por Fe y termina por Fe.

Pero hay esperanza, primero debes y necesitas creer antes de seguir leyendo,
pídele a Dios en el nombre de Jesús que coloque fe en ti, no importa si al
principio es tan pequeña como un grano de mostaza.
No vale la pena sólo llenarte de información, el propósito es que la revelación
de Dios sea para edificarte, restaurarte, liberarte y si hay alguna raíz de temor
en ti, puedas ser libre ahora de ella. La substancia llamada fe es relevante
para comprender y vivir lo que Jesús hizo en la cruz sellado con las palabras
Consumado Es.

Entra ahora en tu secreto, cuéntale a Dios tus temores, se consciente de ellos y cómo han afectado tu
vida. ¿Te das cuenta que le estás contando esto al dueño del Universo? ¿Qué es lo que te atemoriza?
¿Falta de dinero?, ¿enfermedad? Acaso no dijo Dios ¿“Yo soy Jehová tu Sanador”? (Éxodo 15:26),
acaso no dijo Dios: ¿“No os afanéis por vuestra vida, qué habéis de comer o qué habéis de beber…
porque los gentiles buscan todas estas cosas; pero vuestro Padre celestial sabe que tenéis necesidad de
todas estas cosas”?

Ahora, en la intimidad de tu secreto, teniendo la atención de Dios solo para ti,


renuncia al temor y a todo lo que ha traído: desesperanza, incredulidad,
pecado. Confiésalo ahora delante de tu Dios, su palabra dice que Si
confesamos nuestros pecados, Él es fiel y justo para perdonar nuestros
pecados, y limpiarnos de toda maldad. 1 Juan 1:9
Estás en la gracia, ¿lo crees?

Tu Padre tiene cosas más importantes para ti y te revestirá del Poder para
cumplirlas, Él te creó con un propósito profundo, tienes una misión, entrégate
a ella y renuncia al temor que te ata a las necesidades presentes.

Si has hecho esto tus pensamientos, tus acciones, tus prioridades van a
cambiar: ¡TU VIDA VA A CAMBIAR!

Continuar igual que antes sólo significaría que no has creído en Dios y ésta
actitud no te llevará a ningún lado excepto a tu propia destrucción:

“Pero sin fe es imposible agradar a Dios: porque es necesario que el que se


acerca a Dios crea que le hay, y que es galardonador de los que le buscan.”
Hebreos 11:6.

“Consumado es” significa Victoria para ti

Cuando tú entras bajo la atmósfera de la victoria, toda tu vida, aún los


tropiezos, dolor y dificultades son triunfo y ganancia. ¿Qué estilo de vida
como creyente llevas? Le llamo estilo de VIDA porque si eres creyente es
porque aceptaste y creíste de corazón que Jesús es la vida.

Cuando Jesús pronunció las palabras finales Consumado es, desde aquel
momento reposó una atmósfera de victoria y triunfo sobre aquella cruz, pero
no una victoria solo para Jesús, fue una victoria que Él fue a pagar y adquirir
para ti. El que se cobije bajo esta infalible y poderosa atmósfera llevará una
vida de victoria. Victoria no significa ausencia de inconvenientes, no
significa nunca sentirse triste o con miedo, Victoria significa que tú siempre
vas a obtener el triunfo frente a todo tropiezo o adversidad, ¿sabes por que?
Porque Jesús pagó por la victoria frente a todos tus problemas, necesidades,
pecados y debilidades en tu carácter, mente y comportamiento. Y solo aquel
que repose bajo esta atmósfera que representa que todo ha sido concluido y
cancelado puede vivir, absorber y tomar la victoria absoluta que Jesús ganó
para él específicamente. Jesús en la cruz pagó por cada persona
individualmente, su sacrificio no fue un sacrificio general, fue específico. Él
sabía quien eres, tu nombre, tus pecados, tu pasado, tus desafíos, tu dolor,
tristeza y soledad y específicamente pagó por ti, para obtener tu victoria. Una
victoria plena sobre todas estas adversidades.

Jesús también pagó por la victoria de cada nación, por pequeña y


subdesarrollada que sea, Jesús pagó en la cruz por la restauración,
fructificación y avivamiento de cada país por árido que sea. ¿Pero en verdad
estamos bajo esta gloriosa atmósfera? Cuántos creyentes caminan con sus
caras largas y cansadas luchando por obtener logros. Es ilógico que los
cristianos anden fatigados tratando de ver algo bueno en sus vidas.

No se trata de dejar de moverse en lo natural para obtener las cosas, sino


de no moverse dando golpes al aire.

Si es acerca de luchar, pelearás como un guerrero que tiene sus pies sobre el
camino de la victoria y sabemos que ese camino es Jesús.

No te puedes dar el lujo de ser un creyente que lucha y pelea pero aún lo
rige el temor. Temor al fracaso, a la soledad, al rechazo o a la muerte.

Un creyente verdadero no puede estar llevando una vida así, esa sería la razón
por la cual no se propaga un impacto de avivamiento en tu entorno, Porque
entonces, ¿En dónde está la diferencia entre un hijo de Dios y un incrédulo?
Es increíble ver a veces a los impíos manejar más seguridad y convicción
acerca de sus logros y metas por cumplir que los mismos hijos de Dios, claro,
los impíos hablan con jactancia, arrogancia y mucha ignorancia, pero tú como
hijo de Dios puedes hablar de sueños, realizaciones y victoria con amor, paz,
fe y confianza en aquel que no falla, en el alfa y omega, principio y fin. Si
Jesús es todo esto, ¿no crees que haya una puerta de victoria en medio de
toda turbulencia? Imagínate ver a alguien, a un grupo, una iglesia o una
ciudad que hable y viva en victoria, pero no con un color de prepotencia sino
con el color del amor que es en Jesús, con fe, esperanza, misericordia,
fidelidad y limpieza de corazón.
Jesús en la cruz dejó para ti gracia y favor cuando pronunció las palabras
¡Consumado Es!

Tú puedes hablar y vivir en victoria porque Jesús ya pagó por este derecho
para ti: hablar en victoria es un hábito del creyente. Algunas veces las
circunstancias te golpean al punto que sientes desfallecer, en esos momentos
¿dónde están tus palabras de victoria?
Mantén tu confesión de victoria, refúgiate en Dios y Él te llevará a la victoria.

La palabra de Dios dice:


Porque participantes de Cristo somos hechos, con tal que conservemos firme
hasta el fin el principio de nuestra confianza;
Hebreos 3:14

Y también,
Por tanto, teniendo un gran Pontífice, que penetró los cielos, Jesús el Hijo de
Dios, retengamos nuestra profesión.
Hebreos 4:14.

El sistema inmunológico del Creyente

Jesús a través de su sacrificio también nos equipó con un fabuloso “sistema


inmunológico” que te protege de todo lo que te pueda detener en tu marcha
victoriosa hacia el cumplimiento de tu propósito en Cristo.

Las Escrituras dicen en 2 Pedro 1:3-9:


“Como todas las cosas que pertenecen a la vida y a la piedad nos han sido
dadas por su divino poder, mediante el conocimiento de aquel que nos llamó
por su gloria y excelencia, por medio de las cuales nos ha dado preciosas y
grandísimas promesas, para que por ellas llegaseis a ser participantes de la
naturaleza divina, habiendo huido de la corrupción que hay en el mundo a
causa de la concupiscencia;
vosotros también, poniendo toda diligencia por esto mismo, añadid a
vuestra fe virtud; a la virtud, conocimiento; al conocimiento, dominio
propio; al dominio propio, paciencia; a la paciencia, piedad; a la piedad,
afecto fraternal; y al afecto fraternal, amor. Porque si estas cosas están en
vosotros, y abundan, no os dejarán estar ociosos ni sin fruto en cuanto al
conocimiento de nuestro Señor Jesucristo. Pero el que no tiene estas cosas
tiene la vista muy corta; es ciego, habiendo olvidado la purificación de sus
antiguos pecados.”

Aquí encontramos ocho ingredientes que forman parte de los agentes que
protegen y también sirven como armas espirituales para el creyente, estos
son: Fe, Virtud, Conocimiento, Dominio Propio, Paciencia, Piedad, Afecto
fraternal y Amor. Aquí también explica Pedro, que si alguien estando en
Cristo no cuenta con este sistema inmunológico es muy débil y por
consiguiente está expuesto a ser arrastrado por todo tipo de mal, confusión,
engaño, depresión, miedo o temor. Porque a quien no cuenta con este
“sistema inmunológico”, la vista se le acorta, es decir, pierde la visión acerca
del propósito y regalos de Dios para su vida, incluyendo aún la redención de
sus pecados y al suceder esto está expuesto a caer repetidamente en los
mismos pensamientos y actos de los que ya había sido redimido, por lo tanto
su lámpara no da luz. Está detenido en su propósito.

Estas armas de ataque y de defensa nos han sido dadas para la guerra. Cuando
de preparar un ejército se trata, un buen comandante general debe
aprovisionar para sus tropas la mejor alimentación, la mejor dotación
personal, el mejor equipamiento y armamento de guerra. Cuánto mas Jehová
Sebaot (Jehová de los Ejércitos) nos dio en Cristo todo el equipamiento
necesario para librar nuestras batallas espirituales a nosotros por quienes vino
y dio su vida.

Jesús con su sacrificio nos dio, además de la salvación para nuestra alma
otros “beneficios”, entre ellos el equipamiento necesario para vencer.

Estas herramientas están disponibles para todo creyente y son necesarias para
no caer en manos del enemigo. A menudo las personas anhelan sólo conocer
de la palabra de Dios y en ocasiones se conforman con esto. Es necesario que
el conocimiento engendre, por la acción del Espíritu Santo, frutos reales en la
vida del creyente, por que en la hora difícil “saber” no es suficiente.

Otros ingredientes que conforman este maravilloso sistema inmunológico


están listados en Gálatas 5:22:

“Mas el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad,


bondad, fe, mansedumbre, templanza; contra tales cosas no hay ley.”

Estos frutos del Espíritu tienen un doble propósito, por un lado, son el olor de
Cristo hacia fuera, son armas de conquista y de ataque, son herramientas de
impacto en un mundo que necesita de ellos para poder vivir. De otro lado, e
igualmente importante, Dios quiere hacernos fuertes y totalmente “inmunes”
contra cualquier ataque que nos quiera hacer tropezar, en palabras de Pedro:

“Por lo cual, hermanos, tanto más procurad hacer firme vuestra vocación y
elección; porque haciendo estas cosas, no caeréis jamás.”
2 Pedro 1:10

Veamos un ejemplo, la paciencia. La paciencia es un fruto del Espíritu Santo.


No un fruto que aparezca espontáneamente, necesita una rama, un tallo y una
raíz que lo produzcan y lo sustenten. Todos sabemos que la paciencia es una
virtud del cristiano, pero todo cristiano será probado en su paciencia para ver
si realmente ésta es un fruto en su vida. Cuando las circunstancias de la vida
apremien, los afanes o algún tipo de opresión, un cristiano que no está
revestido de paciencia va a perder la visión que el Señor le ha dado –incluso
si tiene muy claro que la paciencia es un fruto del Espíritu Santo-. Note que
cuando el diablo pretende destruir a un cristiano lo primero que ataca es su
vista (Pero el que no tiene estas cosas tiene la vista muy corta; es ciego). Si
logra hacer que el hijo de Dios baje la mirada, es decir, renuncie a la visión
que Dios le había dado, dañará su confesión, al dañar su confesión malogra
todo su carácter y en últimas, destrozará su vida. Ha descompuesto la
lámpara que debería estar irradiando la luz de Cristo y reemplazarla por un
hoyo negro.

En la misma situación Dios te ha revestido de paciencia y esta te hace


resistente contra todo aquello que pretenda obstaculizarte y detenerte en el
camino rumbo al cumplimiento del sueño de Dios contigo. Dios no te da la
paciencia para probarte en el tiempo, esta es para madurarte y protegerte, este
es el objetivo de los frutos del Espíritu Santo, NO SON PARA DARTE
AGUANTE, SON PARA REVESTIRTE, CUBRIRTE, PROTEGERTE.

En el Salmo 15:1-5 David adora a Dios con estas palabras:


Jehová, ¿quién habitará en tu tabernáculo?
¿Quién morará en tu monte santo? El que anda en integridad y hace justicia,
Y habla verdad en su corazón. El que no calumnia con su lengua,
Ni hace mal a su prójimo,
Ni admite reproche alguno contra su vecino. Aquel a cuyos ojos el vil es
menospreciado,
Pero honra a los que temen a Jehová.
El que aun jurando en daño suyo, no por eso cambia; Quien su dinero no
dio a usura,
Ni contra el inocente admitió cohecho.
El que hace estas cosas, no resbalará jamás.

Nota que hay una relación recíproca entre la comunión con el Espíritu Santo
y los frutos del Espíritu Santo. Es Dios quien los produce, y al mismo tiempo,
al hacerse efectivos su efecto es comunión permanente –habitar, morar- con
Él. Así mismo, la promesa No resbalará jamás es lo que constituye nuestro
sistema inmunológico. Hay un componente de la voluntad humana: la fe.
Quien cree en Dios milita para Él, hace lo que a Él le agrada, lo busca.
Cuando Cristo confesó “Consumado Es”, nos dio pleno acceso al Padre y al
Espíritu Santo, lo tenemos por medio de creer en Él y obedecerlo.

Sí es posible pensar en no caer jamás, lo digo porque la Biblia lo dice. Dios


por eso está deseoso de que cada oveja cuente con estos “frutos”.
Ningún fruto proviene de ti, todos provienen del Espíritu Santo, tu no los
puedes crear con tus fuerzas, tu no puedes fabricar el gozo, ni la fe, ni la
paciencia, ni el amor, ni tampoco esa paz que sobrepasa todo entendimiento,
por eso Jesús dijo que nos convenía que El se fuese para que viniera el
Consolador, Ese maravilloso Consolador es el Espíritu Santo quien imparte
en nosotros todos estos grandiosos frutos que nos hacen efectivos, maduros y
firmes en nuestro caminar con Cristo.

Jesús también pago por esto en la cruz, por su sacrificio podemos contar con
lo mas grandioso, la presencia del Espíritu Santo, con Su poder, con Sus
frutos y con Su amistad, El es la fuente de los regalos que Jesús dejo para ti y
para mi.

Los frutos del Espíritu Santo son agentes protectores que actuaran en tu favor
siempre y aun más cuando más lo necesitas.

CAPITULO IV
La Batalla Decisiva

Las Escrituras hablan de una batalla entre la carne y el espíritu al interior del
hombre. Esta es la batalla decisiva:

Porque el deseo de la carne es contra el Espíritu, y el del Espíritu es contra


la carne: y estos se oponen entre sí, para que no hagáis lo que quisiereis.
Gal 5:17
Para que el Espíritu de sus frutos la carne debe ser derrotada. No basta con
doblegar la carne, debe morir:

De cierto, de cierto os digo, que si el grano de trigo no cae en la tierra y


muere, él solo queda; mas si muriere, mucho fruto lleva.
Juan 12:24

Hoy puedes morir a la carne: la carne es la mente, tus juicios, tus


pensamientos, tus conceptos, tus deseos incluso tus sentimientos deben morir,
¿por que? Porque la gran mayoría de ellos no fueron puestos por Dios en tu
mente, han contaminado tu vida por años, haciéndote errar, vagando por el
mundo en ignorancia pensando aún que haces lo correcto.
Si lo haces, Jesucristo, quien es la resurrección y la vida te dará una nueva
mente en la cual tus pensamientos, tus deseos, tus conceptos y juicios serán
los de Dios, entonces llevarás mucho fruto.

Si hoy estás listo ora a tu Padre, renuncia a tu carne, marca la fecha de


hoy en tu calendario como la fecha en que has muerto. Declara que todo lo
que tú eras murió y encomiéndate a Dios. Pídele al Espíritu Santo de Dios
que llene tu morada y que desde hoy puedas decir como Pablo:

Con Cristo estoy juntamente crucificado, y vivo, no ya yo, mas vive Cristo en
mí: y lo que ahora vivo en la carne, lo vivo en la fe del Hijo de Dios, el cual
me amó, y se entregó á sí mismo por mí.
Gal 2:20

Los Yugos
Existen dos tipos de creyentes: El creyente subyugado y el creyente de cuello
erguido. Un creyente subyugado es uno que tal vez lee La Palabra y aún acata
los “mandamientos” para conservar una buena conducta, esto aparentemente
es lo correcto, aún admirable, pero déjame decirte que no es suficiente,
veamos por que, y para ello echémosle un vistazo a un creyente de cuello
erguido, este creyente COME, VIVE, DUERME Y MEDITA en la Palabra.

Sin Cristo vivimos bajo yugos que hacen que arrastremos grandes cargas,
mas nuestro Señor vino para cambiar Su carga por la nuestra, (suena un poco
raro) pero tiene todo el sentido porque Su carga es fácil y ligera.
¿Quieres saber cuál es Su “carga” para nosotros? Tan solo creerle a
Él y a Su Palabra.

¿Por qué es tan importante Su Palabra? Porque cuando te afianzas en Ella,


los yugos que mantenían tu cabeza inclinada se desharán para que ahora
puedas mirar con la cabeza en alto TODO aquello que Dios esta por traer a tu
vida, por eso dice que Sus mandamientos NO son gravosos. Lo difícil es
llevar esos pesados yugos de trabajo sin salario, yugos que traen escasez,
injusticia y depresión, lo peor es que puedes cargar con ellos toda tu vida.
Al Espíritu Santo le preocupa ver a los creyentes recibir su palabra y
alegrarse por un momento, pero luego ceder nuevamente y bajar su mirada
bajo la presión de sus yugos, yugos de afán y depresión entre otros. ¿Qué es
lo que producen estos yugos en el creyente? Los hace insípidos, es decir, sin
la sal de Cristo.

Un creyente de cuello erguido es una persona que tiene la sal de Cristo y por
esta causa sobresale, déjame explicarte este punto: En este mundo la gente,
sea rica, pobre, afamada, hermosa, no importa, camina cargando estos yugos,
le guste o no. Cuando un creyente con corazón de niño entiende que es libre
de estos yugos y anda con su cabeza erguida causa curiosidad entre las demás
personas, de pronto ven a alguien que es como ellos quisieran ser. ¡Esa es la
sal de Cristo!, ¡Esto es realmente marcar la diferencia!

El creyente de cuello erguido es como intocable, su rostro es como de


pedernal, contra todo. ¿Por que solo un creyente de cuello erguido puede
cumplir su propósito? Porque está mirando las Alturas de Dios que Cristo
pagó para su vida y no importan los vientos que vengan contra él. No lo
moverán ni harán que su rostro decaiga ni su vista se acorte, porque su cara
es como un pedernal.

He aquí yo he hecho tu rostro fuerte contra los rostros de ellos, y tu frente


fuerte contra sus frentes. Como diamante, más fuerte que pedernal he hecho
tu frente; no los temas, ni tengas miedo delante de ellos, porque son casa
rebelde. Y me dijo: Hijo de hombre, toma en tu corazón todas mis palabras
que yo te hablaré, y oye con tus oídos. Y ve y entra a los cautivos, a los hijos
de tu pueblo, y háblales y diles: Así ha dicho Jehová el Señor; escuchen, o
dejen de escuchar.
Ezequiel 3:8-11

Mientras haya un yugo sobre ti, no habrá firmeza en la palabra ya que ella
proclama bendiciones que están en las Alturas, es decir, bendiciones
enormes, y mientras un yugo esté sobre tu cuello te costará trabajo mirar
hacia arriba, que es en donde está todo lo que habla la palabra de Dios. Cosas
más grandes que nosotros, que no podrás contemplar mientras ese yugo esté
sobre ti. Tu posición natural será mirar hacia abajo porque así te “sientes
mejor”, cuando tratas de mirar hacia arriba el yugo te aprieta e incomoda al
punto de hacerte sentir dolor. Por eso bajas la cabeza.
El que está sin Cristo siempre tiene ese yugo, por eso siempre mantiene su
cabeza inclinada, por lo tanto no sabe que hay ALGO arriba, solo se guía por
lo que sus ojos pueden ver: el suelo. Mas al creyente Jesús le muestra las
gloriosas bendiciones que tienen las alturas, es decir, como cabeza y no como
cola.

Es triste ver creyentes subyugados, aunque suene un poco ilógico, su tortura


es peor que para un no converso porque al final un no creyente no sabe que
hay algo arriba, mas el creyente subyugado, sabiendo que hay ALGO
poderoso arriba que le pertenece, no puede tomarlo, ni siquiera mirarlo
porque su yugo no se lo permite, y cuando trata de hacerlo se lastima.

Por eso ¡suelta el yugo! Y, ¿cómo? Donde está el Espíritu de Dios, allí hay
libertad, su presencia trae unción y esta pudre el yugo. Su presencia también
trae revelación de SU PALABRA, tu puedes leer la Biblia muchas veces,
pero solo la amistad con el Espíritu Santo te hará entenderla. La palabra de
Dios es el alimento espiritual enriquecido con todo tipo de vitaminas y
nutrientes óptimos para tu espíritu. ¿Ya lo probaste?

Es tan fácil como observar, tomar y comer. Pero muchos se quedan en el


observar y otros en el tomar y es imposible llegar a comer si primero no lo
observaste y tomaste.
¿Qué significa comer? Cuando comes algo haces que la materia que
constituye el alimento se haga parte de ti. Así, el comer la Palabra de Dios es
que Ella misma (La persona de Cristo) se haga parte de ti. Uno contigo.
¡Vive la Palabra!
¡Observa!
¡Toma!
¡Come!

Muchos creyentes, aquellos creyentes que viven subyugados están en


enemistad con Dios, sabemos que todo aquel que es amigo del mundo, es
decir de Egipto, se constituye enemigo de Dios, y en Egipto se vive con
yugos opresores, por lo tanto si hay creyentes con algún yugo opresor es
porque aún tienen parte con el mundo (Egipto en la Biblia, lee Números 11:5
por ejemplo) ya que este y sus afanes lo producen. Es por esto que a un
creyente que tenga parte con Egipto le es muy difícil vivir en la plenitud de
bendición y cumplimiento del propósito en Cristo Jesús en su vida, y estos
yugos se reflejan en pensamientos de iniquidad, temor y amargura.
Hay yugos que se transmiten de generación en generación, son pensamientos,
más aún, una interpretación del mundo errada inculcada por los padres en los
hijos desde temprana edad. Aún sin proponérselo ellos aseguran los maderos
del yugo al cuello de sus propios hijos, pero Jesús selló y firmó para ti la
libertad con las palabras ¡Consumado Es!
Tu comunión con el Espíritu Santo es el regalo de Cristo, y Él es el único que
puede destruir todo yugo.
Es tiempo de deshacernos de los pesados yugos que hemos llevado para
poder vivir con el cuello erguido, es decir, en Victoria. Como dice la palabra
de Dios:

Acontecerá en aquel tiempo que su carga será quitada de tu hombro, y su


yugo de tu cerviz, y el yugo se pudrirá a causa de la unción.
Isaías 10:27

La unción es el Poder de Dios a través de su Espíritu Santo, la Palabra de


Dios dice que la misma unción te enseñará, es decir, el Espíritu de Dios te
instruirá a través de la revelación de su Palabra.

Pero la unción que vosotros recibisteis de él permanece en vosotros, y no


tenéis necesidad de que nadie os enseñe; así como la unción misma os
enseña todas las cosas, y es verdadera, y no es mentira, según ella os ha
enseñado, permaneced en él.
1 Juan 2:27

Es necesario que te sumerjas en la palabra, no solo que la mires de lejos sino


que la observes, la tomes y la comas.

La fe viene por el oír, pero ¿oír qué? La palabra de Dios. Tu fe viene por oír
su Palabra, por eso Jesús dice: El que tiene oídos para oír, oiga. En otras
palabras: ¡Come la Palabra de Dios!, cuando la oigas o la leas, no actives solo
tus sentidos físicos como la vista y el oído, sino activa también tus sentidos
espirituales para poder digerirla y hacerla parte de ti.

Todos tenemos sentidos espirituales


¿Para qué son?, ¿Qué hacen?, ¿Cómo se activan?

POR LA FE

Los sentidos espirituales te permiten estar vigilante a la realidad espiritual.


Esto es necesario si quieres andar conforme al Espíritu. Pero estos sentidos
también tienen enemigos comunes que impiden que se desarrollen, estos son
los argumentos que tratarán de demostrar lo opuesto a lo que Dios te dice y
tratarán de hacerte creer lo opuesto a los planes de Dios.
Los argumentos impiden que el creyente desarrolle sus sentidos espirituales.
Debes eliminarlos.

Derribando argumentos y toda altivez que se levanta contra el conocimiento


de Dios, y llevando cautivo todo pensamiento a la obediencia a Cristo.
2 Corintios 10:5

Muchos creyentes, aún de años, están tomando leche, como decía el apóstol
Pablo, no pueden resistir alimento sólido, porque son bebés que no pueden
dar nada, son dependientes de otros, en muchas ocasiones llorones, con
pataletas y mente estrecha, por lo tanto es imposible que sirvan a Dios y a su
prójimo, por eso el apóstol pone como ejemplo una comparación entre el
creyente que toma leche y aquel que puede comer vianda, y los que viven de
la leche son los bebés, son vulnerables, delicados, débiles y sin autonomía. Es
necesario que la iglesia se levante de ese estado de lactancia espiritual y que
este proceso en los nuevos creyentes no tarde más de lo necesario. Si el
nuevo creyente permanece en ese estado se hace vulnerable a los argumentos
diabólicos y carnales.
La etapa de la Lactancia espiritual

Todo periodo de lactancia es bueno y útil para el recién nacido, pero nunca es
una etapa larga, al contrario, es la etapa más corta en cuanto a la
alimentación. Los componentes de la leche disipan el hambre y suplen las
primeras necesidades del organismo del bebé, pero después de un corto ciclo,
la leche ya no es suficiente ni alcanza a cubrir los requerimientos del cuerpo.
Los hechos naturales son inspirados por la realidad espiritual y en esto se
incluye aún nuestro proceso de crecimiento y alimentación espiritual. Tal
como sucede en el ámbito físico, así también en el espíritu. Por ejemplo, si un
niño supera la etapa límite y sigue alimentándose solo con leche comenzará a
presentar problemas de carácter como irritabilidad y también enfermedades
como desnutrición, baja de peso, bajas defensas que lo hará vulnerable a
peligrosas enfermedades aparte de estar en un estado de debilidad. Todo esto
pasa porque está alimentándose de nutrientes que ya no son suficientes ni le
aportan lo adecuado para el buen desarrollo en su nueva etapa. Esto ocurre
muchas veces por escasez, ignorancia o negligencia. Así mismo ocurre en el
ámbito espiritual, muchos creyentes están en este estado de desnutrición y
desnivel espiritual, pero el Espíritu Santo dice hoy ¡Basta! Es tiempo de
iniciar una nueva etapa de alimentación, no seguir más en estado de
dependencia e incredulidad. No más creyentes que no pueden soportar algo
más porque piensan que es muy difícil. No más pusilánimes o creyentes de
doble ánimo, que les cuesta permanecer firmes en la palabra de Dios.
Todas estas son características de un creyente que se está alimentando solo de
leche cuando su espíritu ya esta requiriendo vianda. Los vemos llorones,
quejumbrosos, inconstantes, postrados, no pueden caminar por sí solos,
necesitan que alguien los cargue (y no hay nada mas pesado y grotesco que
cargar con un niño grande), por eso vemos a muchos creyentes sufriendo, y la
mayoría de ellos es por ser lactantes en una etapa donde ya requieren
alimento sólido.

Superando la etapa de la Lactancia

“Debes buscar tu propio alimento”

Este no es tiempo de estar en pañales. Es el tiempo en que la iglesia necesita


comer vianda y no seguir alimentándose de leche.
La necesidad de cambio es la señal que nos indica que es hora de escalar un
nuevo peldaño.
El cambio es necesario para superar cada etapa.
El cambio viene únicamente por la Palabra y por el Espíritu de Dios. Esta es
la verdadera sabiduría que te va a hacer crecer. Si no estás en su palabra, si
sigues tu propio camino, estarás permanentemente en estado de enano
espiritual.

Hoy el Espíritu de Dios hace un llamado claro a la iglesia, es imperativo


superar la etapa de la lactancia, es necesario conocer qué es lo que en verdad
Dios quiere y obedecer, ya no mas estancamiento, ya no mas niños llorones,
basta ya de los pusilánimes, la iglesia ya puede dar un paso mas allá hacia
TODO lo que Cristo gano para ella en el Gólgota cuando pronunció las
palabras ¡Consumado es!
Es tiempo de desechar los argumentos y paradigmas que nos impiden crecer,
que nos bloquean, tú y yo debemos entender que es para nosotros, es para
cada oveja, para cada miembro del cuerpo de Cristo.

Pero entonces ¿como te das cuenta de que se acabo un ciclo y necesitas mas?
Veámoslo con el ciclo de la lactancia. Existe la necesidad de un “cambio”.
Cuando el niño de pecho supera la etapa de la lactancia es porque su cuerpo
le exige un CAMBIO de alimento, así mismo, necesita ropa más grande, pues
ha crecido.
De la misma forma ocurre en el espíritu, los cambios no son conscientes, pero
tú puedes percibir síntomas que te indican cuando necesitas un CAMBIO. Un
cambio según Dios está siempre ligado con superar una etapa. Uno de los
síntomas claves es el hambre. Cuando necesitas más de su presencia, de su
palabra, de lo que Él te da.
También cuando ves que las cosas te están quedando pequeñas, cuando ya no
es suficiente con el patrón espiritual que llevas.
Con la excepción del Espíritu Santo, nadie está mejor calificado que tu
mismo para reconocer cuando necesitas un CAMBIO. Un cambio no
significa variabilidad o inconstancia. Cuando Dios llama a un cambio, es para
hacerte avanzar persistentemente hacia un nuevo estado.

Cuando sientas Hambre de Dios ¡Regocíjate!, es porque Él quiere darte


Más.

Sabemos que uno de los síntomas de que necesitamos un cambio es el


hambre, pues bien, esta te lleva a buscar y a escalar peldaños en cuanto a
cercanía, revelación y conocimiento de Dios, así que si sientes hambre no
importa cuál sea tu “nivel” de intimidad con Dios es porque Dios tiene MAS
para ti. Por eso acude a Su Presencia porque Él promete saciarte.
¡El hambre es una señal de que estas vivo!

Es triste ver que muchos creyentes prefieren y aun se acostumbran a vivir con
un “hambre” que no buscan saciar. ¿Cuales son los síntomas de una persona
hambrienta que no ha podido “saciar” su hambre? Irritabilidad y debilidad,
estos mismos síntomas nos ayudan a identificar a un “creyente lactante” que
a pesar de tener hambre no ha comido alimento espiritual en la Presencia de
Dios. A éste creyente Dios esta llamando a subir un nuevo peldaño.
Dios llama a nuevos tiempos a través del hambre en tu espíritu. Y muchos no
acuden a este llamado tal vez por incredulidad, temor, pereza, negligencia,
apocamiento… Sea lo que sea debes destruir esas fortalezas que atacan tu
intimidad con Dios Espíritu Santo, porque cuando estás hambriento eres
vulnerable y el diablo aprovechará estos momentos para impedir que seas
saciado. A él no le conviene que existan creyentes “de avanzada”, son una
grave amenaza.
En los momentos en que estás hambriento, como estás vulnerable, el diablo te
puede ofrecer platillos tentadores como la mediocridad, pensamientos de que
no lo mereces, ¡es imposible tanta gloria de Dios para mí! O, ¿es conmigo?,
platillos que muchos creyentes comen y por eso se ven en un gran
estancamiento y errantes de aquí para allá.

Decidir y escoger

Tal vez tu piensas que Dios no es justo al hacernos vulnerables en estos


momentos, pero Él nos hace “vulnerables” para que podamos tomar todo lo
que nos tiene preparado, es tu decisión si en los momentos de hambre
escoges tomar lo que Dios tiene, que es bueno y no añade tristeza consigo o
decides tomar lo incorrecto, lo que te dicta tu carne, tu razón o el diablo. El
mismo proceso aplica con el hambre física, en ese momento eres vulnerable.
Sabemos que hay alimentos buenos y otros que hacen daño, pero es tu
decisión escoger lo que le vas a dar a tu cuerpo, algo que te alimente o algo
que te puede hacer daño.
Existen muchas clases de comidas pero ¿cuál es la nutritiva?
En esos momentos de hambre espiritual busca el alimento correcto y éste se
encuentra en Su Presencia.

Muchas veces los alimentos nutritivos y de calidad cuestan un poco más en


dinero y en esfuerzo de preparación que la comida chatarra, pero vale la pena
darle a tu organismo un alimento de buena calidad. Así ocurre en lo
espiritual, tal vez cuesta más creerle a Dios, descansar y confiar en Él que
dejarse arrastrar por la razón, el diablo y sus argumentos de limitación y
apocamiento.

¡Tú decides y escoges!

Es glorioso cuando le permitimos a Él saciar nuestra hambre, ¡créeme! es


más fácil ser saciados por Él que tratar de buscar en lugares, cosas o personas
equivocadas esa satisfacción, y mucho menos dejar que el diablo influya con
sus telarañas de mentiras y desánimo.

Cuando una persona tiene largos periodos de inapetencia dos cosas pueden
pasar: está enferma o está muerta. Por eso, cuando estás hambriento
regocíjate, porque éste es el mejor indicio de que estás vivo y que Dios quiere
darte más. Si por alguna razón te encuentras en un estado de inapetencia
espiritual entonces puedes pedirle al Señor que te de hambre. Echa fuera la
culpabilidad, temor, pereza o negligencia y pídele a Dios hambre y sed de Él.
Hoy es un día especial, diseñado y anhelado por Dios para ti. Él quiere
visitarte y quedarse contigo desde este mismo instante. Él está allí a tu lado a
pesar de que lo sientas o no. Si le pides hambre por Él, Él no te la negará sino
que te la dará y también te saciará. Hoy hay poder de sanidad y resurrección
para tu espíritu. Tú decides. Si tú sientes hambre, no te llenes con basura,
chatarra, mentiras del diablo, banalidad. No acudas al lugar equivocado y
tampoco ignores esa hambre. ¿Acaso has de morir por inanición espiritual?
¡Esta es una de las peores muertes!
Dios quiere saciar tu hambre y sed, Él tiene la comida, el alimento espiritual
que te llevará en avanzada.

Allí hallarás tu propio alimento,


Allí saciarán tu hambre y tu sed.

En el lugar secreto existe un pozo de aguas vivas, aguas que sacian y que no
se hallan en ningún otro lugar. Es cierto que hay pozos de esta misma agua
del Espíritu en otros lugares como en la iglesia, en los servicios, programas
de televisión ungidos o escuchando predicaciones y enseñanzas, pero nunca
estos pozos de bendición para el espíritu se igualarán al pozo que está en el
lugar secreto. Es el lugar a solas para Dios y para ti. Es bueno escuchar a los
profetas, es indispensable congregarse, es refrescante, edificante y bendito,
pero no suficiente para tu espíritu. Es completamente necesario beber del
pozo “especial” que se halla en el lugar secreto porque DESDE ALLÍ nuestro
Señor Jesucristo te quiere pastorear. En esa exclusiva privacidad le
conocerás a Él como persona, su divinidad, su amor, te dará fortaleza.
Cuando te encuentras en prolongados tiempos de estancamiento y bloqueo la
raíz y causa de este inconveniente es no beber de las aguas del pozo que solo
se encuentran en el lugar secreto. El lugar individual para cada oveja con el
Pastor, nuestro Señor Jesucristo.
¿Por qué son de tanta importancia las aguas que fluyen en el lugar secreto?
Porque cuentan con un “componente especial”. Un “componente principal y
poderoso” que siempre te hará crecer.

Ver Su Rostro.

De la manera que ves su rostro a solas en tu lugar secreto, en otro lugar no lo


podrás ver. El lugar secreto es el mejor sitio, es el lugar donde conocerás al
Espíritu Santo personal y directamente. Dios quiere, más que querer…
¡sueña! con que el hombre le conozca de frente y sepa a quién adora y sirve.
De hecho un adorador en espíritu y en verdad es el que conoce a Quien adora.
Tú puedes ver su rostro de una manera especial en el lugar secreto, donde le
rindes tu mejor tiempo.

Cuando tú buscas a Dios en el secreto siempre pasa algo, no es posible que le


busques y sigas en estado de estancamiento espiritual porque si realmente le
has buscado ya le has hallado. Aquí es donde se cumple la palabra de Dios:
Porque todo aquel que pide, recibe; y el que busca, halla; y al que llama,
se le abrirá. (Lucas 11:10). Esto es seguro. Dios está allí en tu lugar secreto,
porque es necesario que el que se acerca a Dios crea que le hay, y que es
galardonador de los que le buscan. (Hebreos 11:6).
En el Lugar Secreto Dios abre una ventana especial y única que no abre en
otro lugar: La Ventana de su Corazón, que te llevará a cumplir su propósito
para ti. Esta es la adquisición que Jesús nuestro Señor pagó, porque sabía que
sólo en Su Presencia, a solas, con una conexión directa y personal podríamos
cumplir con el propósito de Dios para nuestras vidas.
Esta fue una de las principales razones por las cuales Jesús fue y pagó el
precio por nosotros. Porque sólo el contacto directo con nuestro Padre
celestial a través del lugar secreto por la sangre que derramó Jesús en la cruz
haría que el sueño específico de Dios para nuestra vida se cumpliera. Aparte
de cumplir nuestros sueños conforme a su voluntad, que son de bendición y
bienestar para nosotros.
No estoy diciendo que solo puedas hallar a Dios en el lugar secreto, pero sólo
allí Él se mostrará a ti de una manera poderosa, directa y clara; exclusiva para
tu vida, y que te llevará a cumplir su propósito. Jesús pagó para que no
pasaras una existencia sin sentido y sin dejar huella. Él pagó por este
hermoso regalo y privilegio que muchos miembros de la iglesia han
desperdiciado, ignorado, menospreciado por temor, incredulidad, complejo.
Se fueron a la tumba sin haber cumplido y realizado el fin con el que Dios les
creó. Jesús rompió con esa maldición, la maldición de no cumplir el
propósito.
Jesús pagó para romper un sistema vano y darle lugar a través de su paga con
su sangre al propósito Glorioso. Esta es la única manera de que el hombre
cumpla el verdadero propósito con que nació en Cristo Jesús.

El Sistema Vano

Consta del ciclo biológico (nacer, crecer, reproducirse y morir) mas las
actividades naturales que el orden o cultura reinante han impuesto –cuya
autoría intelectual es del diablo-. A él se refiere la palabra de Dios cuando
ordena:

Y no os conforméis á este siglo; mas reformaos por la renovación de vuestro


entendimiento, para que experimentéis cuál sea la buena voluntad de Dios,
agradable y perfecta.
Romanos 12:2

En el Lugar Secreto el Espíritu Santo te reformará hasta que renueves tu


forma de pensar con el fin de que encuentres y cumplas el propósito de Dios.

El Propósito Glorioso

Consta obviamente del ciclo biológico acompañado del Poder y la dirección


del Espíritu Santo que te llevará a cumplir el verdadero propósito para el cual
naciste y que sólo puedes realizar en Cristo Jesús, ya que sin Él sólo somos
pámpanos desarraigados de la vid, o sea, somos nada, por más que hagamos
cosas “importantes”.

YO soy la vid verdadera, y mi Padre es el labrador. Todo pámpano que en mí


no lleva fruto, le quitará: y todo aquel que lleva fruto, le limpiará, para que
lleve más fruto.
Juan 15:1-2

A partir del sacrificio de Jesús y de su muerte y resurrección, se desató un


plan y sueño del Cielo, no simplemente para cumplir un ciclo biológico y que
las cosas naturales ocurran y lo acompañen hasta el final. Antes de la hora de
Jesús en la cruz este sueño poderoso del Cielo, de amistad de Dios con el
hombre estaba quebrado a causa del pecado y el hombre estaba reducido
escasamente a llevar a cabo su ciclo biológico y a someterse al sistema
reinante, el cual siempre era –y es- un sistema limitado, vacío y sin sentido.
Pero Jesús a través de su sangre despertó, resucitó nuestros sentidos
espirituales para conectarnos nuevamente con la dimensión sobrenatural –el
Cielo-. Esta es la verdadera realidad.

La Verdadera Realidad
Lo espiritual

Sabemos que esta realidad “material” es un producto y reflejo de una verdad


espiritual, todo lo tangible y evidente fue creado primero en lo invisible.
Todo lo físico y naturalmente perceptible partió de una realidad espiritual
primero.
Jesús a través de su sacrificio en la cruz rompió con el velo que nos
desconectaba de esta verdadera realidad espiritual y sabemos que la Verdad
es Jesús porque todas las cosas fueron hechas en Él, por medio de Él y para
Él. Quiere decir que todo lo que vemos y veremos fue creado previamente
por y para Jesús, y Él quiere colocar a sus hijos por cabeza.

Esta verdadera realidad espiritual es el lugar donde se creó todo para después
pasar al ámbito natural. Si estuviéramos conectados con esta verdadera
realidad tendríamos una llave poderosa hacia la sobreabundancia a través de
ideas, talentos, inventos, descubrimientos e innovaciones en todas las áreas.
¿Te imaginas la revolución que habría si la iglesia fuera la que gobierna? y
todo por el simple hecho de que sus hijos, el cuerpo de Cristo está conectado
con esta verdadera realidad espiritual donde se encuentra el poder de hacer
las riquezas.

El velo se rasgó por varias razones, para que el hombre pudiera tener una
amistad directa con Dios, pero también el rompimiento de aquel velo era una
muestra de que Dios, sus planes secretos e ideas fueran revelados a los
creyentes y de esta manera colocarlos a la cabeza, ya que todo lo bueno
proviene del cielo.

¿Por qué es trascendental y cómo afectaría a la iglesia conectarse con esta


realidad espiritual?

Todo lo bueno viene del Cielo

Debemos tener claro que TODO lo bueno viene del cielo, en todas las áreas:
medicina, economía, ciencia, tecnología, artes, etcétera. Y las innovaciones
que se den en las diferentes áreas dirigidas al progreso, cuidado y bienestar
de la humanidad son parte de “Todo lo bueno viene del Cielo”.
Debes tener claro que todo esto proviene de Dios y todo esto y más fue
creado para y por nuestro Señor Jesucristo.

Él es la imagen del Dios invisible, el primogénito de toda creación. Porque


en él fueron creadas todas las cosas, las que están en los cielos y las que hay
en la tierra, visibles é invisibles; sean tronos, sean dominios, sean
principados, sean potestades; todo fue creado por él y para él.
Colosenses 1:15-16

Él quería entregarle la administración de esto a sus hermanos, personas de


confianza, gente que se conecta directamente con Dios para recibir las llaves
que abren las puertas de todos estos territorios (cine, medios, tecnología,
gobierno, economía, educación la bendición para tu propia casa). Él quería
darle esas llaves a su familia, que somos tu y yo, pero para que esta conexión
se diese se necesitaba romper el velo y además de reconciliarnos por su
sangre también en dicha posición de privilegio, de cercanía y amistad con Él,
quería entregarnos las llaves de gobierno y de todas las cosas, incluyendo
hasta la salud, ya que todo fue creado en Jesús y por medio de Él incluyendo
las victorias de nuestras batallas.

O sea todo fue creado para honrarle, TODO, si aún todo no le honra es
porque aquellos territorios todavía no están en las manos correctas.

Jesús por su sangre recuperó todos los territorios buscando a quién


entregarle las llaves. Estas son solo para las manos de su iglesia, los
hijos de Dios.
CAPITULO V
Puertas espirituales y Llaves espirituales

Hoy, 14 de abril de 2007 aproximadamente a las 2:00 de la mañana, pude


comprender un poco más el plan de Dios para su iglesia a través de una dulce
visión en el Espíritu:
Veía muchas llaves, llaves de oro, otras con piedras preciosas y Jesús
sostenía una. Eran llaves grandes que se debían asir a dos manos. No podía
comprender claramente cuál era la función de aquellas llaves pero solo era
cuestión de segundos para que el Espíritu Santo me lo hiciera comprender.
Es glorioso revivir y poder tocar ese momento cuando Dios me mostró estas
bellas e importantes llaves.
Son un “juego” de llaves perfecto y sincronizado. Supuse que por ser llaves
antiguas también las puertas que abren lo son.
Pero además eran de oro puro y macizo, cada una de ellas pesaba demasiado
pero no todos podían tocarlas y mucho menos usarlas, pues no son simples
llaves. Son las llaves más importantes del universo y Dios las hizo para
bendición y victoria, para todo aquel que es de Jesucristo.
Estas llaves fueron diseñadas para ser manipuladas por el hombre y así como
ellas son especiales quienes las podrán tomar también lo son, esto es: los
hijos de Dios por Cristo.

Cuando Adán y Eva fueron expulsados muchas posesiones, bendiciones y


autoridad quedaron en el aire pero no por mucho, el diablo invadió
ilegalmente todos estos tesoros y territorios tras esas puertas. Los usurpó y
los contaminó creyendo que era el legítimo propietario. Pero en realidad el
“reinado” sobre lo que nunca le perteneció ni a él ni a sus hijos fue
victoriosamente y rotundamente arrebatado de sus manos. Huyendo como
siempre, por la puerta de atrás.
Así se evadió Satanás cuando escuchó las palabras que al día de hoy no ha
podido olvidar, de hecho son su peor tormento y pesadilla. Palabras que
marcaron su destino eterno, bajo y ridículo. Una vergüenza cual nunca ser
humano, ni aún toda la humanidad junta podría llegar a sentir. Las palabras
que le infligieron tal derrota son:

Consumado Es.

Era necesario que Satanás soltara TODO y entregarlo a los hijos de Dios en
Cristo siete veces más. Lamentablemente lo que hemos visto a través de los
siglos es que muchas llaves de esos preciosos territorios y posesiones
quedaron abandonadas.

Un territorio abandonado por años puede ser invadido por animales y gente
indeseables. Sucio y abandonado, lleno de desechos en putrefacción. La
propiedad que nos fue otorgada con sangre, la Sangre del Único Hijo de Dios
está invadida y sucia. Y esas llaves preciosas empolvadas, ocultas en medio
de la oscuridad y las telarañas ahora nos están siendo recordadas de nuevo.
Es necesario tomarlas para entrar a estos territorios dados por Dios, ganados
por Jesús en la cruz.

Las llaves estuvieron por siglos y generaciones tristemente olvidadas, pero


Jesús debe regresar pronto por su novia y realmente no está lista para
presentarse a la boda con su Rey, aún está en harapos y con mucho que
aprender y crecer para hermosearse como esa novia perfecta, sin mancha ni
arruga que estará en las bodas de su AMADO REY, ESPOSO Y DUEÑO:
EL CORDERO DE DIOS.

Esas llaves y territorios son muy importantes. Claves para el hermosamiento


y levantamiento de la novia.
Por esta razón, Dios en su amor ha otorgado este regalo más para la postrera
generación: nosotros. Él mismo ha tomado esas llaves y las ha alistado,
limpiado, brillado y pulido tal como estaba al principio en el jardín del Edén,
para que nosotros las tomemos y las usemos con esa misma pasión del
corazón de Dios, temiéndole y amándole por encima de TODO y AMANDO
AL PROJIMO con la misma pasión. Sin acepción de personas.

¿Cuáles son estas llaves?

Estas llaves sabemos que son de territorios, y según la llave es, el territorio
también es muy especial porque vaya que son llaves especiales.
Dios creó la tierra, la naturaleza y todo lo que contiene, pero sus actos
creadores NO se quedaron allí. Él trajo un modelo de su propio reino celestial
para implementarlo aquí. Su sueño.

Todo Reino tiene una organización perfecta para gobernar. ¿Gobernar qué?
Gobernar LA TIERRA.

Estos territorios hacen parte de ese gobierno celestial y son lugares


estratégicos para atacar y conquistar.

Esto estaba planeado desde el Jardín del Edén, pero como sabemos, el pecado
truncó el plan de Dios permitiendo al Adversario usurpar y ensuciar todos
estos poderosos lugares.

Uno de los más grandes temores de Satanás es que estos territorios le fueran
quitados, pues sería su fracaso más vergonzoso, que le quitaran los terrenos
que tramposa y astutamente había invadido colándose por sobre el vallado.
No entró por la puerta, no abrió con la llave. Las llaves nunca le fueron
concedidas porque estas llaves fueron diseñadas para los hijos de Dios. Por lo
tanto han estado archivadas, sin que nadie las reclamara, y Dios el Padre las
llama LLAVES DE VIDA.

Para esto vino nuestro Señor Jesús, para que supiésemos y pudiésemos tomar
y usar estas llaves, expulsando a los intrusos. Para conquistar lo que nos
pertenecía por derecho desde el principio por su Amor y su Gracia y así
gobernar la tierra.

Primera Llave: Consumado Es


Consumado Es, significa la más sagrada e importante de todas las llaves. Por
ella podemos tomar y aprovechar las otras. Pero siempre debes tener claro en
tu espíritu y tu mente que ésta es la primera llave, sin la cual no podríamos
tomar el resto, ni territorio alguno.

“Consumado Es” es la Primera, la más grande y más importante de


todas estas llaves

Gózate, alégrate, seca tus lágrimas, respira, confía, descansa, vuelve a soñar,
levántate porque llegó esa poderosa llave a tu vida, y si la tienes, lo tienes
todo… Todo.

Esta llave es el único requisito para poder acceder a las demás benditas llaves
que han estado esperando por ti, para que las tomes.

Recuerda: Las llaves que Dios le entrega a su iglesia en esta hora son de
gobierno y para Gobernar.

Segunda Llave: Política Mundial

Nuestro Padre celestial dejó una llave de gobierno espiritual y político en la


tierra.
Es una llave para la iglesia, es una unción de rey para gobernar desde la
política, y es de alcance mundial.
La política tiene que estar sujeta a Dios a través de la iglesia. Por ahí abundan
los “cristianos” que dicen que el pueblo de Dios no debe incursionar en
política porque ésta le pertenece al diablo.
¡Nada más lejos de la verdad!

¿Por qué no habría de estar la política sujeta a Cristo, cuando Dios declaró
que todas las cosas le fueron sujetas a Él?

Porque todas las cosas las sujetó debajo de sus pies. Y cuando dice que
todas las cosas han sido sujetadas a él, claramente se exceptúa aquel
que sujetó a él todas las cosas. 1Co 15:27

Tercera Llave: Educación Mundial

La iglesia debe tener la principal y única influencia en la educación de niños,


jóvenes y adultos en todo el mundo.

Es un territorio de gran importancia y mucho poder y la creación GIME para


que la iglesia se levante y tome dominio sobre este territorio.
Hasta ahora la educación está en cuidados intensivos y solo los hijos de Dios,
con las llaves dadas por gracia, pagadas a precio de la preciosa sangre del
Cordero de Dios pueden salvar de la muerte a todos los afectados por un
sistema educativo tumoral, contaminado, terminal.
El veneno diabólico que ha enfermado a generación tras generación de
hombres y mujeres en todas las nacionalidades ha sido esparcido por mucho
tiempo a través del tóxico sistema educativo que se ha impuesto.
La llave está a tu alcance, y al alcance de todos los hijos de Dios. Debemos
tomarlas y tomar posesión legítima de este nuestro territorio.

Cuarta Llave: Medios de Comunicación

En los días de Pablo había muchos juglares recorriendo reinos, de un pueblo


a otro, contando historias y entreteniendo, pero solo Pablo y algunos otros
valientes tenían el mensaje transformador más importante de la historia de la
humanidad: El Evangelio.
Las generaciones posteriores a la primera generación de discípulos
abundaban en escribanos, pero el Nuevo Testamento fue el texto más
copiado.
Desde los días de Gutenberg y hasta hoy el libro más impreso del mundo es
la Biblia.
¿Por qué hoy la poderosa tecnología capaz de llevar un mensaje hasta el
último habitante de la tierra transporta mensajes de intrusos más que la
Palabra de Dios?
Estas tierras ya los han vomitado.

Ahora estas heredades necesitan ser restauradas, limpiadas, sanadas,


perdonadas por toda inmundicia y este es el trabajo de la iglesia.

Los medios de comunicación no son la excepción a la regla. Este es un


territorio estratégico. El conducto para esparcir sanidad para esta tierra.

Dios ha dicho que ha escuchado el clamor de su pueblo, el clamor en el coro


de esta canción:

Señor sánala
Padre Sánala
Oye el clamor
Y vuelve nuestra nación a Ti.

Al caer, al rosar la primera gota de la preciosísima sangre de Nuestro Jesús


con la Tierra, ésta comenzó a ser sanada y pasó de un diagnóstico terminal a
un diagnóstico dado y dicho por los labios del Maestro:

CONSUMADO ES

Así que el precio por la sanidad de tu nación ya fue pagado en la cruz y en el


Gólgota. Es tiempo de que los hijos de Dios se paren y tomen los regalos que
traerán sanidad para tu casa, tu nación, tu continente y el mundo.

Iglesia de Jesucristo: Ven a tomar tu sanidad y llévala

Estas llaves representan el antídoto de la enfermedad mortal que ha


carcomido estas generaciones.
La sanidad está aquí.

Quinta Llave y Quinto Territorio: Artes


En el corazón de Dios este territorio tiene un lugar amado ya que Él creó las
Artes. No habrían suficientes “estatuillas de la Academia” ni lugar para
almacenarlas cuando se trata de aclamar y celebrar su obra, su producción.

¡Tú! Iglesia de Jesucristo tienes un papel principal en esta obra maestra re-
escrita con sangre por nuestro Salvador. Y decimos re-escrita porque el
primer piloto comenzó en el huerto del Edén. Los protagonistas: Adán, el
primer hombre y Eva. Esta primera escena del hombre viviendo tan cerca de
Dios tuvo que ser pospuesta por la irrupción venenosa del Adversario:
Satanás, quien se encargó de disuadir a nuestros protagonistas de seguir su
anti-guión.
Pero el único director, el Rey de reyes y Señor de señores inmediatamente
declaró un nuevo guión, y en su nueva obra el Autor y Consumador de todo
se aseguró el desenlace que quiso desde el principio, uno en el que el
hombre camina en la presencia del Dios Altísimo.

Y verán su rostro, y su nombre estará en sus frentes. No habrá allí más


noche; y no tienen necesidad de luz de lámpara, ni de luz del sol,
porque Dios el Señor los iluminará; y reinarán por los siglos de los
siglos. Apocalipsis 22:4-5

Despiértate, tú que duermes,


Y levántate de los muertos,
Y te alumbrará Cristo.
Es la hora de cumplir esta orden, porque la promesa de ésta es gloriosa.
Jesús nos alumbrará por su sangre a vista de las naciones para la salvación de
preciosas y amadas almas del mundo entero.

¡Son Almas incontables las que nos anhelan y están esperando para que les
entreguemos el mensaje más importante!

Jesús decidió brillar y alumbrar a toda la humanidad a través de TI, Iglesia.

Recuerda que la iglesia no es un templo, no son unos muros adornados, no


son vitrales, ni siquiera un altar, la iglesia es nada más y nada menos que el
Cuerpo de Cristo y la Esposa del Rey.

LA ESPOSA DEL REY ES SU PUEBLO, SUS HIJOS, SUS REDIMIDOS:


ERES TÚ.

Esta importante heredad, las Artes, son las siguientes disciplinas, todas las
cuales son de vital importancia en la visión de Reino:

· Cine y Televisión, teatro, actuación, danza y artes escénicas en


general.
· Artes plásticas (Pintura, Escultura obviamente no con fines
idólatras, dibujo, ilustración, caricatura)
· Música
· Literatura en todas sus expresiones (Prosa, verso, periodismo)
· Artes industriales (Diseño, Cerámica, Joyería, Alta costura)
· Arquitectura
· Gastronomía
Todas las citadas disciplinas influyen -y de qué manera- en la forma de
pensar de esta generación, todas se caracterizan por ser vehículos
empoderadores de un mensaje y todas le pertenecen a Cristo.

Conclusión

Como no queremos que Tú, que abordaste este viaje cuando comenzaste a
leer la primera página de este libro, te pierdas del camino, vamos a hacer unas
pocas aclaraciones prácticas sobre cómo tomar estas llaves.

1. Santidad:
Déjalo Todo por causa del Reino de Dios. Este requisito no es
negociable en Cristo. Deja el pecado, liviandad y excusas, deja la
incredulidad y el pasado. Ten en cuenta incluso que el Reino de
Dios es antes que familia, trabajo, pareja, padres y hasta la vida
misma. Si verdaderamente le buscas verás que no es tan difícil
como parece y Si es muy posible.

2. Ten Fe,
Renuncia al temor y sobre todo practica el Amor: el genuino e
interés y preocupación por las personas.

3. Comunión:
Haz un Lugar Secreto para intimar con Dios y frecuéntalo todos
los días. Aquí está la fuente de Toda visión, en tu Amistad con
Dios Espíritu Santo pero sobre todo en tu obediencia y rendición a
la maravillosa persona del Espíritu Santo.

4. Si realmente, totalmente quieres tomarlas y ser la persona que


Dios planeó que fueras. Guarda tu Visión con las Armas
espirituales del creyente.

5. Mantente Bien alimentado con la Palabra de Dios. Observa,


Toma y Come diariamente.

6. Mantente enfocado en tu Realidad Espiritual y tu Propósito


Glorioso Todos los días.

7. Sigue las instrucciones de Dios, las llaves te han sido


otorgadas. ¡Toma los Territorios!

Estos son los ingredientes que necesitas para tomar las llaves pero que te
quede claro:

¡DIOS ES EL ÚNICO QUE LAS DA!

¡Dios te las da en Su Presencia!

Cree en Jesús y en que estas mega-poderosas palabras “CONSUMADO ES”


Son la llave.

¿A quién Dios le concede estas llaves?


A sus amigos, que le creen,
A sus amigos que le aman,
A sus amigos que le adoran,
A sus amigos, aquellos que pase lo que pase nunca venderán su Amor por Él.

Amigos de su Santo Espíritu: Ciertamente les espera lo mejor de lo mejor,


porque

CONSUMADO ES

Dedicatorias

Dedicado a mi Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo, a mi esposo, a mis padres y


hermanos y a todos aquellos que sin importar su condición quisieron
atravesar aquel velo rasgado. A todos aquellos que en medio de sus lágrimas,
su dolor y sus luchas nunca han desfallecido en su amor por Dios.
A todos los que aún no han visto nada pero así se levantan cada mañana
añorando a su maestro.
A todos aquellos que en la desesperación no han negado su voz.
A aquellos para quienes lo único que tiene sentido es Dios y lo único que
anhelan hasta con la última célula de su cuerpo es Que Jehová Cumpla su
Propósito en Ello. A ellos Jesús les dice hoy:
“No temas, Jehová cumplirá su propósito en Ti”

Agradecimientos

Al Dios que me vio nacer, al Dios que me amó cuando no valía nada, al Dios
que me vio grande cuando yo decía que era pequeña, a Aquel Padre que toda
niña sueña tener, a mi hermoso y verdadero Padre Celestial, quien me ordenó
escribir este libro pensando en ti, amado lector. Tú eres su Tesoro.

Gracias a Dios, que vio un diamante en un pedacito de carbón inservible. Me


vio cuando otros no lo hicieron, me abrazó cuando nadie más lo hizo y me
cuidó en espíritu, alma y cuerpo toda la vida.

Gracias a mi esposo, Javier, a Aaliyah Salomé, Caleb y Juan Nicolás, a mi


padre Jairo y Glenda mi madre, a Jorge Humberto y Luz Marina, mis
suegros. A mis hermanos quienes son fieles amigos y a “mi niño” Tomate, mi
mascota, porque Dios lo ha usado como un instrumento de restauración y
hasta como un maestro, que fielmente nos ha acompañado.

Y muchas gracias a Ti, amadísimo lector.

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