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La rosa
una bella flor
es mi corazón.
Delicada,
perfumada
con un bello color.
Me calienta el alma
con un fuego acogedor.
Tú, mamá,
siempre estarás,
y tendrás,
mi corazón.
¡Yo soy esa rosa
que necesita de tu cuidado
y bello cariño!
MAMITA
MAMA TE AMO
Mamá, te amo profundamente
por el amor con que me has criado,
porque, sin importar mis fallos,
siempre me has protegido y cuidado.
Te amo, porque tu me amas también
por tu cariño y por tus regaños,
porque tú también aprendiste a mi lado
Hoy sólo quiero decirte que te amo.
Le regalo a mi mamá
una sonrisa de plata
que es la que alumbra mi cara
cuando de noche me tapa.
Le regalo a mi mamá
una caperuza roja
por contarme tantas veces
el cuento que se me antoja.
Le regalo a mi mamá
una colonia fresquita
por no soltarme la mano
cuando me duele la tripa.
Le regalo a mi mamá
una armadura amarilla
que la proteja del monstruo
que espanta en mis pesadillas.
Le regalo a mi mamá
el lenguaje de los duendes
por entender lo que digo
cuando nadie más lo entiende
Le regalo a mi mamá
una chistera de mago
en la que quepan mis besos
envueltos para regalo
Quiero agradecerte
que estés en mi vida.
Sé que puedo contar contigo
en momentos difíciles,
sé que contigo puedo
compartir mis alegrías,
y sé que nuestra amistad
se sustenta en mutuo amor.
Gracias madre
Mi gran amor
El amor más grande de mi vida,
El amor más sincero de la vida,
El amor más delicado en la vida,
Es el amor que nunca se marchita.
Como el tuyo madre mía,
Es más grande por que nunca se olvida,
El más sincero por que es el único verdadero,
El más delicado por que se rasguña y se lastima
Tu amor madre mía, es el amor que nunca olvidaría,
No lo olvidaría, por que sería como olvidar mi vida,
Pero olvidar no podría, gracias a aquella palabra
Tan sencilla, amor, si amor mamá mía…
Mama querida
Mamá querida
Mamá cuánta alegría por tenerte a mi lado,
usted que me supo dar
todo cariño y guiar por la vida.
Usted que dio su tiempo
para hacernos crecer
con paciencia y amor.
Mamá dejame guiarte ahora
por la senda de mi camino,
déjame mostrar mi mundo con amor y valor.
Mamá,
aunque nunca te pueda pagar
por tanto amor,
te doy mi amor completo
y te enseñaré todo lo que conocí.
Gracias mamá por estar junto a mí,
que DIOS te bendiga eternamente.
Madre
“Eres tú la luz de mi existir,
faro sin igual en mi vivir.
Eres tú canción de amor,
que brota en flor,
no se podrá nunca medir tu corazón.
Madre como tú nadie jamás,
mi dulce quietud tú lo serás,
y por eso madrecita,
hoy te vengo a decir
esta oración que lleva
en ella mi gratitud.”
“FELIZ DÍA MAMÁ”
Dios te bendiga
Durante 9 meses
me acogiste en tu seno,
Sin importar el dolor
Que causaba a tu espalda.
Día y noche me cantabas,
DIA y noche me hablabas,
Y al sentir el latido de tu corazón
Con ternura me arrullabas
Cuando me sentí en tus brazos,
La emoción me embargaba,
Tome tu dedo con mi mano,
Te apreté tan fuerte
Para que jamás me dejaras,
Hoy ya no tomo así tu mano
Porque con la misma fuerza
Que me aferre una vez a ti
Te aferraste a mis sentidos
Y llenaste de ternura
Cada uno de mis latidos.
Gracias mama.
El consejo maternal
Ven para acá, me dijo dulcemente
mi madre cierto día;
(aún parece que escucho en el ambiente
de su voz la celeste melodía).
Ven, y dime qué causas tan extrañas
te arrancan esa lágrima, hijo mío,
que cuelga de tus trémulas pestañas,
como gota cuajada de rocío.
Tú tienes una pena y me la ocultas.
¿No sabes que la madre más sencilla
sabe leer en el alma de sus hijos
como tú en la cartilla?
¿Quieres que te adivine lo que sientes?
Ven para acá, pilluelo,
que con un par de besos en la frente
disiparé las nubes de tu cielo.
Yo prorrumpí a llorar. Nada, le dije;
la causa de mis lágrimas ignoro,
pero de vez en cuando se me oprime
el corazón, y lloro.
Ella inclinó la frente, pensativa,
se turbó su pupila,
y, enjugando sus ojos y los míos,
me dijo más tranquila:
– LLama siempre a tu madre cuando sufras,
que vendrá, muerta o viva;
si está en el mundo, a compartir tus penas,
y si no, a consolarte desde arriba…
Y lo hago así cuando la suerte ruda,
como hoy, perturba de mi hogar la calma:
¡ Invoco el nombre de mi madre amada,
y, entonces, siento que se ensancha el alma !