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CONSTITUCIÓN 

DE 1823
Cuando se comienza a hablar de la constitución de 1823 se tiene muchas nociones, una de
ellas es que esbásicamente considerada como la primera constitución del Perú, la cual fue
proyectada y elaborada por el Congreso constituyente que fue convocado por el General San
Martin. Esta constitución era básicamente de origen liberal que estaba basada en la soberanía
popular y esta establecía prácticamente que la soberanía reside esencialmente en la nación, y
el ejército de la misma en sus magistrados, a los cuales ha delegado sus poderes, esto fue
descrito en el artículo 3 de la constitución de 1823.

Esta constitución instauro muchos derechos y leyes los cuales fueron la abolición completa y
entera de la posición monarquita la cual había sido defendida antes por San Martin
estableciendo un sistema republicano de gobierno. También establecía que todos los hombres
libres que nacían en el territorio peruano serian ciudadanos, mientras que los otros no. Esto
era básicamente una ley discriminatoria impidiendo que las otras personas no tuviesen este
derecho. Según la constitución de 1823, la constitución seria dividida en 3 poderes del Estados
los cuales serían:

El poder Ejecutivo, Legislativo y  Judiciario (Judicial).

También instauraba y implantaba que el poder Legislativo seria representado por un Congreso,
el cual sería llamado Congreso del Perú y tendría solo una cámara, consiguientemente seria
unicameral y también tendría la iniciativa de dar leyes. El poder ejecutivo estaría a cargo de un
presidente de la república y por último el poder judiciario que sería conformado y constituido
por los tribunales de Justicia, juzgados subalternos, etc. Dentro de los derechos más
importantes incluidos e insertados en la constitución del 1823 los cuales son la inclusión de
todas las garantías constitucionales, sin incluir la libertad religiosa, sin embargo, el culto
privado era permitido. También se incluían los derechos en relación a la libertad civil, la
seguridad personal y de todo lo relacionado al domicilio, la igualdad ante la ley para el premio
o el castigo, al igual forma también reestablecía los derechos acerca de la buena opinión o
fama, mientras no se declarara delincuente de acuerdo a las leyes de ese tiempo . También se
incluía los derechos a la propiedad, el secreto de las cartas, el derecho a la libre imprenta,
también todo en relación a la libertad de la agricultura, minería, comercio y de la industria,
etc. Estos son básicamente los derechos principales y primordiales del Perú en relación a la
constitución de 1823.

LOS PRINCIPIOS DE LA CONSTITUCION DE 1823

La Constitución de 1823 se inspira en los más .puros y clásicos principios de la Democracia


Individual y del Liberalismo. Declaraba que todas las provincias del Perú reunidas en un solo
cuerpo formaban la Nación Peruana, que ella era independiente de la Monarquía española y
de toda dominación extranjera y que no podía ser patrimonio de ninguna persona ni en
ninguna familia y que la soberanía residía esencialmente en la nación ( Arts. 1°, 2" y 3")
llegando al extremo, en su fe doctrinaria liberal, apunta Basadre, de declarar que "la Nación no
tiene facultad para decretar leyes que atenten a los derechos individuales" y si "la nación
(debió decir el Estado) no conserva o protege los derechos legítimos de todos los individuos
que la componen, ataca el pacto social así como se extrae de la salvaguardia de este pacto
cualquiera que viole alguna de las leyes fundamentales ( arts. 4° y 5"). He aquí, agrega el autor
arriba citado, tácitamente reconocido el derecho del pueblo a la insurrección contra los
gobernantes despóticos. En cambio una proposición de Sánchez Carrión, estableciendo lisa y
llanamente el federalismo fue desechada en la sesión del 26 de noviembre de 1822. Designa
como religión del Estado a la católica, apostólica y romana con exclusión de cualquiera otra
(art. 8") a fin de que "convencida de la verdadera, procure mantenerla debiendo prestarle un
respeto inviolable cualquiera que habite en el Estado". Una adición presentada por el padre
del Oratorio, Méndez La dicha de "que nadie puede ser peruano, si no profesa la Religión
Católica" no fue considerada. Creó un Poder Electoral, ejercido por la nación misma y que "es
la única función del poder nacional que se puede ejercitar. Sin delegarla" (art. 309). La elección
de diputados se haría 'plantear este tema". Manuel Vicente Villarán.

La del Presidente de la República por el Congreso basándose en que una elección de tanta
trascendencia era necesario realizarla con acierto y que los pueblos suelen a veces,
equivocarse… Se prohibió la reelección presidencial inmediata y se estableció la
responsabilidad del gobernante por los actos de su administración.

El ejercicio de la Presidencia de la República nunca podía ser vitalicio ni menos hereditario.


Creó un Vicepresidente con las mismas calidades y requisitos que el Presidente de la República
y que administraría la Presidencia por muerte, renuncia o destitución del titular o por mandar
éste personalmente la fuerza armada. En defecto del Vicepresidente gobernaría el Presidente
del Senado hasta la elección ordinaria del nuevo Presidente. No existía relación legislativa
entre los Ministros y el Congreso. Consecuentes con esta idea privaron al Gobierno de toda
injerencia inmediata o remota en las funciones legislativas y en la actividad del Congreso: ni
concurrencia de los Ministros a los debates ni iniciativa en las leyes ni derecho a veto ni la
facultad de reglamentar las leyes.

El Ejecutivo era tan sólo, un fiel ejecutor de la voluntad legislativa. El clásico principio de
Montesquieu de la división de los Poderes les pareció un "celestial invento" aunque en
realidad, crearon el régimen del tipo convencional de absoluta subordinación del Ejecutivo al
Legislativo. “El Gobierno del Perú, decía el artículo 28, está confiado a los tres Poderes
-Legislativo, Ejecutivo y Judiciario en que quedan divididas las principales funciones del poder
nacional y ninguno de los tres Poderes podrá ejercer jamás ninguna de las atribuciones de los
otros dos. Crearon una Cámara Única a la que llamaron Congreso del Perú, compuesta por
representantes elegidos por las provincias (art. 51) renovándose por mitades, cada dos años.
Se señalaban con minuciosidad sus principales funciones en 31 incisos (art. 60"). Sólo los
representantes tenían iniciativa en las leyes (art. 61"). El Ejecutivo carecía de esa 8 "La
Asamblea Constituyente había concentrado todo los poderes públicos y en su estructura
constitucional dio al Legislativo, en forma permanente, la misma fuerza y amplitud que había
poseído en forma provisoria". Manuel Vicente Villarán. La Constitución de 1823. El Comercio,
Lima, 12 de noviembre de 1823. LA CONSTITUCIÓN DE 1823 23 facultad, a fin de garantizar a
los parlamentarios, a juicio de los constituyentes, la plena libertad de sus deliberaciones, y
tampoco podía expedir reglamentos o vetar las leyes. Las observaciones del Gobierno deberían
formularse dentro del tercer día. Las trasmitía al Senado, el que deliberaría sobre ellas
consultivamente pasando luego al Congreso para un nuevo debate. La función del Senado en la
preparación de las leyes se reducía pues a ser "un resorte des~ tinado a madurar, de modo
mecánico, las leyes". El Congreso elegía al Presidente entre los individuos propuestos por el
Senado y designaba senadores entre los propuestos por las provincias. Si la acción del Poder
Ejecutivo era la de una sombra, ha dicho Basadre, la del Presidente de la República era la de
una sombra de una sombra. Los Ministros deberían firmar todas las órdenes emanadas de sus
respectivos departamentos para ser válidas. En oposición a la Constitución de los Estados
Unidos, ha dicho el maestro Villarán, que sin embargo les había servido de derrotero y que
creó un Poder Ejecutivo fuerte y robusto, los constituyentes de 1823 se preocuparon ante
todo, de restringir la autoridad del Gobierno, en debilitar y sujetar el poder presidencial y por
natural reacción, robustecieron y exageraron la fuerza del Poder Legislativo y la extensión de
sus atribuciones. Bolívar, pasando al otro extremo, hipertrofió el poder del Presidente en su
Constitución de 1826 convirtiéndolo en un Monarca sin corona. Vicios contrapuestos, agrega el
doctor Villarán, condenaban ambos sistemas. Una constitución daba demasiado poder al
Gobierno, otra le privaba de casi todo poder. Una preparaba congresos impotentes, la otra los
creaba absorbentes y tiránicos. La Carta del 23 estableció un Senado conservador que
representaba a los departamentos. Duraban sus miembros en el cargo doce años,
renovándose por tercios, cada cuatro años. Sus atribuciones principales consistían en velar por
la observancia de la Constitución y de las leyes y por la buena conducta de los magistrados y
ciudadanos, proponer el nombramiento de los empleados de la lista civil de la República,
convocar al Congreso a sesiones, a falta de convocatoria del Ejecutivo, decretar si había lugar a
la formación de causa contra el ciudadano que ejerza el Poder Ejecutivo, sus Ministros o contra
los miembros del Tribunal Supremo, prestar su va~ to consultivo al Poder Ejecutivo en los
negocios graves del gobierno, especialmente para la declaratoria de guerra o la negociación de
la paz y "promover la civilización y conversión de !os infieles en el territorio nacional conforme
al espíritu del Evangelio" ( arts. 87 a 91). Sería este Senado, según una Declaración del Discurso
Preliminar "un centinela perpetuo del Poder Ejecutivo".

El Poder Judicial debía ser independiente, los jueces inamovibles y de por vida, salvo conducta
escandalosa o ilegal. Establecía, utopía que repetirán las Constituciones de 1826, 1828, 1834,
1839 y 1920, el juzgamiento por jurados en las causas criminales. Creaba la Corte Suprema
como Tribunal de Casación para conocer, entre otros fines, de los recursos de nulidad de las
sentencias dadas en última instancia por las Cortes Superiores para los solos efectos de
reponer y devolver ( inc. 69 , art. 100). También habría Cortes Superiores en los
departamentos y jueces de derecho en las provincias. La justicia se administraría a nombre de
la nación. Sólo el abogado con seis años de ejercicio podía ingresar a la magistratura por la
escala inferior de juez. Estos eran los únicos que podían promoverse a Vocales de una Corte
Superior y los de esta categoría a Vocales de la Suprema, o sea el régimen de captación más
cerrado. Abolía las penas de confiscación, de infamia trascendental y las crueles y limitaba la
aplicación de la pena capital a los casos que exclusivamente la merecieran. En los juicios civiles
no podía entablarse acción alguna sin haber agotado la vía conciliatoria ante los juzgados de
paz. Declaraba asimismo que nadie nacía esclavo en el Perú ni podía entrar en esa condición.
En lo relativo a la organización del régimen interior de la República la dividía en
departamentos, provincias, distritos y parroquias, creándose para su gobierno político superior
respectivamente, a los prefectos, intendentes y gobernadores. Funcionarían en las capitales de
departamento Juntas Departamentales, cuyos miembros deberían ser elegidos en la misma
forma que los diputados y quedaban establecidos como consejos del Prefecto debiendo éste
pedirles su dictamen en los negocios graves. Supervigilaban asimismo a las municipalidades,
cuidaban de la instrucción pública y de la prosperidad del departamento y velarían por la
buena inversión de los fondos públicos. Allí no terminaban sus atribuciones pues les
correspondía una función semielectoral ya que presentaban al Senado las ternas para los
funcionarios políticos de las provincias y distritos y remitían las listas de ciudadanos
beneméritos para los empleos y los nombres de tres ciudadanos elegibles Presidente de la
República. El llamado Poder Municipal surgía de los colegios electorales. De parroquia y tenían
el cuidado del orden, de la instrucción, de la beneficencia y salubridad y del ornato y recreo
locales así como el "desarrollo de la agricultura y de las industrias". Nadie podía eximirse de los
cargos municipales. Los alcaldes eran los jueces de paz natos de su circunscripción. La Carta de
1823 contenía además disposiciones de orden reglamentario, impropias de una constitución;
abolía los estancos, violenta reacción contra el sistema hacendaría colonial, creaba Bancos de
Rescate; las contribuciones se repartirían según reglas de igualdad; las Fuerzas Armadas
estaban integradas por el ejército de línea, la milicia cívica y la guardia de policía, siendo el
objeto de la milicia mantener la seguridad pública, dentro de los límites de su provincia. El
militar no era sino un ciudadano armado en defensa de la República.

La Constitución confundía lamentablemente política. Virtud y moralidad. Tiene un constante


sentido de moralización. " Quiere fundar una República de Catones y de Marco Aure!ios. En
oposición a Santo Tomás que creía que la ley es incapaz de evitar la maldad y la corrupción
humanas, quería hacer de cada ciudadano un ejemplo cívico. El propio Bolívar no fue ajeno a
este pensamiento de que la fuerza podía generar la virtud y en su proyecto de Constitución de
Angostura concibió un Poder Moral, un Areópago que purificase lo que estaba corrompido
"debiendo corregir las costumbres con penas morales como las leyes castigan los delitos con
penas aflictivas" (Discurso de Angostura). Eran, según la Constitución que comentamos indigno
del nombre de peruano (art. 14) el que no fuera religioso, el que no ame la Patria, el que no
sea justo y benéfico, el que falte al decoro nacional, el que no cumpla con lo que se debe a sí
mismo.

El peruano que se dedique al tráfico de esclavos perdía "los derechos de naturaleza". La


fidelidad a la Constitución, la observancia de las le~ 9 "La locura de la Revolución Francesa fue
querer instituir la virtud sobre la tierra. Cuando se quiere hacer a los hombres buenos y sabios,
libres, moderados, generosos, se marcha por una pendiente que conduce a matarlos a todos.

Robes Pierre era un optimista que creía en la virtud e hizo el terror. Se suspendía el ejercicio de
la ciudadanía y cuantos habrían tenido que abandonarla por ser deudor moroso al Tesoro
Público, por no tener forma de vivir conocida, los casados que sin causa abandonen a sus
esposas o que notoriamente falten a sus obligaciones de familia, los que por ser jugadores,
ebrios o ruanes ofendan la moral pública. Entre las atribuciones del Congreso Nacional estaba
la de instituir fiestas nacionales para mantener la unión cívica, avivar el patriotismo y
perpetuar la memoria de los sucesos más célebres de la vida nacional.

De allí al caldo de gallina de Enrique IV, a la República de Platón y al Paraíso, ha dicho


risueñamente Raúl Porras, sólo había un paso. Fueron generosos en la concesión del voto. Se
otorgó a 'los peruanos casados o mayores de 25 años que tuvieran una propiedad o ejercieran
alguna profesión o arte o se ocuparan de alguna industria, sin sujeción a otro en clase de
sirviente o jornalero. El requisito de saber leer y escribir sería exigido a partir del año 1840. El
voto sería secreto.

CONSTITUCIÓN DE 1834:

Cuando hablamos acerca de la constitución de 1834 podemos decir que esta fue promulgada
por Luis Orbegoso y se le asignó el carácter de Constitución Liberal. Esta constitución fue una
rectificación o reparación de algunos artículos para así llegar a facilitar la federación con
Bolívar y poder refrenar los excesos que había causa el caudillismo militarista. Una de las cosas
que se pueden resaltar de esta constitución es que hubo un aumento en el número de
senadores, los cuales serían 5 por departamento local se puede diferenciar con las
constituciones anteriores que solo eran 3. También podemos hablar acerca de las cámaras
legislativas en las cuales hubo reformas porque antes eran 3 pero en esta constitución son solo
2 (La cámara de senadores y la cámara de diputados), estos iban a ser renovados por
mitades cada dos años. También se dio una ley en que se omitirían las juntas departamentales,
también todo lo relacionado con los organismo que habían caído en desprestigio. En vez de
eso, se fortalecieron las municipalidades, que tendrían que existir en las capitales de
departamento de provincia. Otro punto que está relacionado con la constitución es que se
abolió y erradico el cargo de vicepresidente de la república para que así se impidiera que la
estabilidad del gobierno fuese separada por la competencia. Otra parte importante acerca de
la constitución de 1834 es que se inhabilito la reelección presidencial inmediata, estableciendo
que tenía que acontecer un periodo presidencial para poder volver a postular. También otra
cosa importante es el establecimiento del derecho del ciudadano peruano a reclamar ante el
Congreso o el Poder Ejecutivo de cualquier tropelía, inobservancia o transgresión
constitucional. También se hizo obligatorio el juicio de todo lo relacionado con la residencia
para todo funcionario del Poder Ejecutivo al terminar su cargo. Finalmente lo que se puede
decir y pensar acerca de esta constitución es que solo estaba escrita y no se realizaba en
la practica así que era meramente escritura y no se cumplía casi en absoluto yaqué los
gobiernos que seguían en el Perú en esos años eran de origen de facto, por imposición de las
armas.
Los legisladores que redactaron la Constitución liberal de 1828, habían acordado que
luego de cinco años debía reunirse una Convención Nacional con la misión de hacer una
reforma constitucional de manera total o parcial. En el mismo texto constitucional quedó
consignada tal disposición:
Art. 177º.- En julio del año de mil ochocientos treinta y tres se reunirá una Convención Nacional,
autorizada para examinar y reformar en todo o en parte esta Constitución.

La razón que arguyeron los legisladores de 1828 era que en el lapso de cinco años la
experiencia daría mejores ideas para administrar la República y por lo tanto al cumplirse
dicho período sería necesario realizar cambios o reformas. Aunque en realidad, el principal
interés de dichos legisladores era dar tiempo para la instalación de un régimen federal,
vista la factible federación con la república vecina de Bolivia. Debemos señalar que la
República Peruana nació bajó una estructura unitaria, aunque buena parte de sus primeros
legisladores simpatizaban con el régimen federal. El unitarismo se impuso por cuestiones
prácticas.

Reunión de la Convención Nacional (1833-34)


Culminado pues, el plazo de cinco años en 1833, el mandato de la reforma constitucional
debía ser cumplido. Gobernaba entonces el general Agustín Gamarra, cuyo período
presidencial ya vencía, por lo que las elecciones de los miembros de la Convención
Nacional coincidieron forzosamente con las elecciones para Presidente y para un
Congreso Extraordinario. Esto último conllevaba una complicación, pues simultáneamente
funcionarían dos cuerpos legislativos, cuya pugna sería inevitable. Sin embargo, mientras
que las elecciones de los convencionales se realizaron sin mayor problema, las elecciones
presidenciales y parlamentarias se frustraron por una serie de dificultades.
Quedaba pendiente el problema de la sucesión presidencial, pues el período de Gamarra
vencía el 20 de diciembre de ese año, y aunque los convencionales limitaron sus trabajos
al proyecto de Constitución, hubieron de entrar en pugna con el poder ejecutivo, en cuanto
reclamaron su derecho para intervenir en otras cuestiones de interés nacional. El conflicto
quedó resuelto cuando Gamarra comunicó el 18 de diciembre a la Convención Nacional su
propósito de abandonar el poder al día siguiente, por ser el último de su mandato. La
Convención Nacional procedió entonces a la elección de un Presidente Provisorio, siendo
el elegido el general Luis José de Orbegoso, quien era apreciado por su ánimo
caballeroso, pero cuyo débil carácter lo hacía susceptible a las influencias de los políticos
más experimentados. Se acordó también la prórroga de la Constitución de 1828, hasta que
fuese concluida su reforma.
El trabajo de la Convención Nacional
Las labores de la Convención Nacional debieron efectuarse en medio de una grave crisis
política, pues a poco de la elección de Orbegoso estalló la guerra civil de 1834. En esa
ocasión, los partidarios del general Gamarra, dirigidos por el general Pedro Pablo
Bermúdez y por La Mariscala, se alzaron contra el gobierno. Finalizó la guerra con
el abrazo de Maquinhuayo, en que ambos bandos se reconciliaron, quedando reconocida
la autoridad de Orbegoso.
Los convencionales orientaron su labor a prevenir, al menos en el papel, los excesos del
autoritarismo militar. El texto constitucional estipuló que el presidente no fuese reelegido
sino después de transcurrir un período, eliminó el cargo de vicepresidente y acentuó la
influencia del poder legislativo. Reflejó también el impacto producido por el levantamiento
del general Bermúdez, estableciendo en su artículo 173 que:
“Si alguno usurpare el ejercicio del poder ejecutivo por medio de la fuerza pública o de
alguna sedición popular, por el sólo hecho pierde los derechos políticos, sin poder ser
rehabilitado. Todo lo que obrare será nulo, y las cosas volverán al estado en que se hallaban
antes de la usurpación, luego que se restablezca el orden.”

Promulgación
La Constitución fue promulgada el 10 de junio de 1834. Era la cuarta carta política peruana
dada en once años y la tercera de carácter liberal (después de la de 1823 y la de 1828).
Pese al optimismo y algarabía con que los legisladores dieron por concluida su labor, hubo
quienes como Luna Pizarro no quedaron contentos del todo, pues consideraron que la
prisa con que se hizo los cambios constitucionales impidió dar un necesario pulimento a
los mismos.

CONSTITUCIÓN DE 1856:
Esta constitución tuvo una duración de 4 años. También fue considerada liberal, nació durante
el gobierno de Ramón Castilla. Esta es una de las constituciones más importantes. Dentro de
esta constitución se encuentran derechos muy importantes como la abolición de la pena de
muerte, lo cual causo una novedad, José Gálvez Egúsquiza fue quien defendió duramente esta
abolición en el parlamento, diciendo “la sociedad no tiene derecho a matar. También se dio
una ley para limitar las atribuciones del Poder Ejecutivo constituyendo e instaurando la
vacancia de la presidencia de la Republica por transgredir la forma de gobierno o disolver el
Congreso. También hubo un mejoramiento en las leyes la cual tuvo una clara evolución
volviendo al periodo presidencial de 4 años y no como en las anteriores constituciones que
tenían 6 años. También hubo la creación del consejo de ministros, lo cual fue una innovación
haciendo que nuestra estructura estatal sea más sólida. También en el ámbito del Poder
Legislativo, se le dio una atribución para poder dar, interpretar, modificar y derogar leyes, lo
cual regularía las relaciones entre el Poder Ejecutivo y el Poder Legislativo. Otra parte
importante que se debe considerar en este punto es que se estableció el derecho a la
ciudadanía para todos los los peruanos varones mayores de 21 años o casados y se producía la
perdida de la misma aceptando un título de nobleza. Además también se estableció el derecho
de sufragio popular directo para todos los peruanos que tuvieran la capacidad de leer, escribir
o que tuviesen propiedad raíz , este derecho se aplicaba de la misma manera si eran jefes de
taller o soldados y si eran marinos retirados. Se estableció el derecho de la educación primaria
en forma gratuita. También hubo un derecho a la prohibición de la expatriación y el
extrañamiento, cuando no hubiera una pena ejecutoria. Lo que no se pudo hacer en esta
constitución fue imponer la libertad de cultos, consecuentemente, el estado siguió amparando
a la religión católica no autorizando el ejercicio de otros cultos.
Castilla convocó a elecciones para la reunión de una Asamblea Constituyente
o Convención Nacional, cuyo misión sería reformar la Constitución conservadora de
1839. Por primera vez se convocó a elecciones con sufragio directo y universal: directo,
pues no se elegiría a los Colegios Electorales, sino directamente a los representantes del
nuevo Congreso; y universal, porque todos los peruanos votarían sin ninguna limitación,
sin importar ser analfabeto o no tener fortuna.
Realizadas las elecciones y elegidos los representantes de la Convención Nacional, esta
se instaló el 14 de julio de 1855. Su primera medida fue la ratificación de Castilla como
Presidente Provisorio; luego dictó un Estatuto Provisorio, promulgado por Castilla el 27
de julio de ese mismo año. En dicho Estatuto, que debía regir mientras se discutiera la
nueva Constitución, quedaron fijados las atribuciones del Jefe de Estado y señaladas las
garantías individuales y nacionales.
Reafirmado en el poder, Castilla, de naturaleza autoritaria, se separó de sus ministros
liberales y convocó a sus amigos. Se iniciaba así el rompimiento con el bando liberal.
En la Convención Nacional surgió una tensa disputa entre la mayoría liberal y la minoría
conservadora partidaria de Castilla. El más notable de los tribunos liberales era José
Gálvez Egúsquiza. La Convención, además de funcionar como asamblea constituyente,
ejerció el Poder Legislativo en toda su extensión, dictando leyes de carácter permanente y
también circunstancial. Por fin, después de grandes debates, en octubre de 1856 se
terminó de discutir la nueva Constitución, de marcado carácter liberal, que reemplazaba a
la Constitución conservadora de 1839.
El Presidente Castilla juró esta Constitución que fue promulgada el 19 de octubre de 1856,
pero expresó su disconformidad con ella, sobre todo por la disminución de las atribuciones
del presidente, aumentando así la situación de tirantez entre el Gobierno y el Congreso.
Para agravar las cosas estalló en Arequipa la revolución conservadora del general Manuel
Ignacio de Vivanco que derivó en la sangrienta guerra civil de 1856-58.
La Convención fue disuelta el 2 de noviembre de 1857 por una patrulla de soldados a
órdenes del coronel Pablo Arguedas, quienes aprovecharon que Castilla se hallaba
asediando la ciudad de Arequipa. Si bien Castilla condenó este acto, era evidente que tal
situación le convenía, tanto así que una vez que retornó a Lima no restituyó el parlamento
e incluso envió al destierro a los principales líderes liberales.
Constaba de 140 artículos, ordenados en 19 títulos.

 Título I: De la nación

CONSTITUCIÓN DE 1933:

La constitución de 1933, fue elaborada por un congreso constituyente y promulgada por Don
David Samanez Ocampo, el cual fue un presidente provisorio, esta fue interrumpida por un
estatuto revolucionario, la cual fue impuesta por las fuerzas armadas durante los gobiernos
militares de los generales Juan Velasco Alvarado (1968-1975) y Francisco Morales Bermúdez
(1975-1980). En esta constitución hubo una ley que se refería a la prohibición en el ámbito de
la reelección inmediata. En esta constitución no hubo ningún cambio en cuanto al periodo
presidencial. Sin embargo, en 1939 el periodo presidencial fue ampliado a 6 años con una
reforma constitucional. Entre los derechos más importantes se encuentran el del derecho de
sufragio para todos los ciudadanos mayores de 21 años que supiesen leer y escribir. El sufragio
irrestricto quedo rechazado. También se dio el derecho al voto directo y secreto. También se
dieron otros derechos fundamentales los cuales eran la prohibición de prisión por deudas, la
libertad de conciencia y de creencia, el derecho de petición, la inviolabilidad del domicilio y de
la correspondencia, el derecho a la libertad de reunión y de prensa y el derecho de no ser
expatriado. Esta constitución tiene una evolución muy grande ya que tiene muchos derechos
en los cuales hay beneficio para la población.
La constitución peruana de 1933, oficialmente Constitución Política del Perú, fue la
décima carta política de la República del Perú, que fue discutida y sancionada por
el Congreso Constituyente de 1931 y promulgada el 9 de abril de 1933 bajo el gobierno del
Presidente Constitucional de la República Luis Sánchez Cerro. Se la puede definir como
moderada, aunque en muchos aspectos fortalecía al Poder Legislativo disminuyendo los
privilegios del Poder Ejecutivo. Estuvo en vigencia hasta el 28 de julio de 1980.
La larga dictadura de Augusto B. Leguía de once años (el llamado Oncenio), finalizó con el
golpe de estado protagonizado por el comandante Luis Sánchez Cerro, el 25 de agosto
de 1930, en el contexto de una severa crisis económica mundial. Se sucedieron una serie
de juntas militares, entre ellas la presidida por el mismo Sánchez Cerro. Sin embargo,
estas Juntas no gozaron de apoyo nacional y la presión popular impuso al viejo líder
apurimeño David Samanez Ocampo como presidente de una Junta Nacional de Gobierno,
con representación de todo el país.
Samanez se avocó a la misión que le había encomendado la ciudadanía: conducir al país
en su retorno a la normalidad. Para ello, pacificó momentáneamente al país e inició los
preparativos para unas elecciones generales, en la que los ciudadanos elegirían al
Presidente de la República y a los representantes de la Asamblea Constituyente, cuya
misión sería redactar una nueva Constitución Política. La Constitución entonces vigente
era la promulgada por Leguía en 1920, por lo que se entiende la necesidad del cambio, ya
que existía una actitud política generalizada de acabar con todo lo que tuviera que ver con
el caído régimen leguiísta.
Las elecciones generales se realizaron el 11 de octubre de 1931. En ellas se enfrentaron
el comandante Sánchez Cerro, encabezando la Unión Revolucionaria, y Víctor Raúl Haya
de la Torre, joven líder del partido aprista, fundado unos años antes. Triunfó el primero.
Los apristas desconocieron el resultado y pasaron a la oposición, lo que constituyó el
germen de una guerra civil.
Previamente, la Junta de Samanez nombró el 7 de agosto de ese año una Comisión ad
honorem para que realizara un anteproyecto de Constitución. Presidía esa Comisión el
notable jurista Manuel Vicente Villarán y la integraban Víctor Andrés Belaunde, Diómedes
Arias Schreiber, Carlos García Castañeta, Carlos Doig y Lora, Jorge Basadre Grohmann,
José León Barandiarán, Toribio Alayza y Paz Soldán, Ricardo Palma, Luis E.
Valcárcel, Emilio Romero Padilla y César Antonio Ugarte.
La Comisión dio por finalizada su tarea el 5 de diciembre y publicó el resultado de su
trabajo junto con una notable exposición de motivos redactada por Villarán.

Constitución Política del Perú de 1993

Esta constitución fue elaborada por un Congreso Constituyente y promulgada por don David
Samanez Ocampo, Presidente Provisorio. Fue interrumpida por un estatuto Revolucionario,
impuesta por las fuerzas armadas. En esta constitución la pena de muerte se aplica ahora en
delitos de terrorismo, lo cual va en contra de los derechos humanos, pero a la misma vez es
algo justo a mi parecer. Se da el establecimiento de la defensoría del pueblo para defender los
derechos del pueblo y supervisar el cumplimiento de los deberes de administración estatal. Se
da el derecho de autonomía política, económica y administrativa a las municipalidades. En esta
constitución el estado se encarga de vigilar y facilitar la libre competencia, también legaliza la
libre tenencia de moneda extranjera y el libre cambio.
La Constitución Política del Perú de 1993 es la norma fundamental de la República del
Perú.2 Antecedida por otros 11 textos constitucionales, fue redactada a inicios del gobierno
de Alberto Fujimori por el Congreso Constituyente Democrático convocado por el mismo
tras la disolución del Congreso en el autogolpe de 1992, consecuentemente fue aprobada
mediante el referéndum de 1993, aunque los resultados han sido discutidos por algunos
sectores.3
Esta ley fundamental es la base del ordenamiento jurídico nacional: de sus principios
jurídicos, políticos, sociales, filosóficos y económicos se desprenden todas las leyes de la
República. La Constitución organiza los poderes e instituciones políticas, además de
establecer y normar los derechos y libertades de los ciudadanos peruanos. Prima sobre
toda ley y sus normas son inviolables y de cumplimiento obligatorio.
Cabe mencionar que, pese al autogolpe de 1992 y el subsiguiente Gobierno de
Emergencia y Reconstrucción Nacional (GERC), la constitución de 1979 siguió
teóricamente en vigencia hasta la expedición y promulgación de la Constitución de 1993.
Se considera, de acuerdo al Tribunal Constitucional, que la Ley de Bases del mencionado
GERC y los demás actos emanados del autogolpefueron ilegales e inconstitucionales de
origen, validados luego por las Leyes Constitucionales de 1993 emitidas por el Congreso
Constituyente Democrático, y por el referéndum del mismo año. En 2001, en una ley
promulgada por Alejandro Toledo Manrique, el Congreso del Perú retiró la firma
de Fujimori de la Constitución.1
La Constitución de 1993 es una de las normas fundamentales que más tiempo ha regido
en el Perú, siendo superada sólo por los textos de 1860 y 1933.
La Constitución Política del Perú es la Carta Magna sobre la cual reposan los pilares del
Derecho, la justicia y las normas del país. Esta controla, regula y defiende los derechos y
libertades de los peruanos; organiza los poderes e instituciones políticas. Fue redactada
por el Congreso Constituyente Democrático. Fue aprobada mediante el referéndum de
1993, durante el gobierno de Alberto Fujimori y como sabemos desde su establecimiento
como República, el Perú ha tenido 12 Constituciones. La Constitución prima sobre toda ley
sus normas son inviolables y de cumplimiento obligatorio para todos los peruanos.
Antecedentes
El 5 de abril de 1992, el Presidente Alberto Fujimori, quien había sido elegido en 1990 bajo
la entonces vigente Constitución de 1979, anunció en un mensaje a la nación el
establecimiento de un gobierno de emergencia y reconstrucción nacional, cuyo fin sería la
reforma institucional del país con la necesaria reforma constitucional. Entre las medidas
adoptadas, Fujimori dispuso disolver el Congreso e intervenir el Poder Judicial,
el Ministerio Público, la Contraloría, el Tribunal de Garantías Constitucionales y los
gobiernos regionales.
Este quiebre del orden constitucional, denominado “autogolpe”, contó con la aprobación
mayoritaria de la población peruana, debido en buena parte al descrédito en que había
caído la clase política y sus representantes en el parlamento, aunque hay que destacar
que el desprestigio de la “partidocracia” fue fomentado y estimulado desde muy temprano
por el mismo gobierno de Fujimori.
Si bien en el plano interno el “autogolpe” fue tolerado por la población, la comunidad
internacional en cambio mostró una posición de rechazo. Así por ejemplo, los países
miembros de la Organización de Estados Americanos, “deploraron” el autogolpe peruano e
instaron al presidente Fujimori a que buscara una fórmula para el retorno de la
democracia. En la reunión de cancilleres, el ministro peruano Augusto Blacker
Miller intentó justificar el autogolpe a partir del riesgo que significaba para el Perú la
subversión terrorista. Este argumento no convenció a los representantes de los países
más importantes de América. Se aprobó una resolución en la cual se exigía al gobierno
peruano dialogar con la oposición democrática y encontrar una senda para tornar a la
democracia; caso contrario, en la siguiente reunión de cancilleres se procedería a adoptar
sanciones contra el Perú.
En mayo de 1992, Alberto Fujimori asistió a la XXII Asamblea General de la Organización
de los Estados Americanos en Nassau, Bahamas; en la cual se comprometió a restablecer
los derechos constitucionales en el país, así como a convocar a un Congreso
Constituyente Democrático para garantizar el equilibrio de poderes y la efectiva
participación ciudadana en la elaboración de un nuevo contrato social.

CONCLUSIÓN:
Concluyendo con este trabajo acerca de la evolución de las constituciones del Perú a a través
del tiempo, se puede afirmar que el Perú ha tenido varias constituciones ya que no se han
dado leyes tan fuertes y dominantes para que los derechos de las personas y otros derechos
sean respetados, por ese motivos las constituciones han ido cambiando y renovándose. En
total, los peruanos hemos tenido 12 constituciones, sin contar la constitución de Cádiz. En
retrospectiva, si hubiéramos tenido una primera constitución con una buena base en lo
relacionado con los derechos, normas y leyes , no hubiéramos tenido que cambiar de
constitución tantas veces, eso se ve reflejado en el caso de Estados Unidos que solo tuvo una
sola constitución hasta ahora.

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