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Ciencia Ergo Sum

Universidad Autónoma del Estado de México


ergo_sum@uaemex.mx
ISSN: 1405-0269
MÉXICO

2004
Mijaíl Málishev
AFORISMOS, MÁXIMAS Y PARADOJAS
Ciencia Ergo Sum, marzo-junio, año/vol. 11, número 001
Universidad Autónoma del Estado de México
Toluca, México
pp. 125-126
Mijaíl Málishev*

cautivos del tiempo

P e n s a m i e n t o s
E
l aforismo y vinculado estrechamente con es inherente un efecto de reconocimiento y un
él la paradoja es un genero de cámara que deseo involuntario en que el lector hace propia la
presupone en el lector concentración y es- idea ajena.
fuerzo intelectual y, probablemente, es por eso que El aforismo, junto con la ironía y paradoja, es un
tiende a ser considerado una lectura más filosófica enunciado accesible a cada ser humano que, par-
que literaria. tiendo del sentido común, es capaz de salir tempo-
Como en los proverbios y dichos, a la aforística, ralmente fuera de él; es, tal vez, una invitación a
aunque, indudablemente, en la menor medida, le vivenciar la aventura del pensamiento.

Al hombre le interesa el futuro pecharon que entrarían en la Víctor Hugo una vez observó:

d e s a l i ñ a d o s
porque en él va a vivir, y le ate- memoria de las generaciones el presente es el yunque en que
rroriza el futuro porque sabe venideras con tal grado de re- se forja el futuro. El sentido de
que en él va a morir. conocimiento. En cambio, más la expresión se puede invertir: el
frecuentemente sucede lo inver- futuro es el molde que da for-
Muchos hombres destacados de so: la época contemporánea rin- ma al presente.
la historia no tuvieron el reco- de homenajes inmerecidos a sus
nocimiento merecido en la épo- ídolos, cuyo laurel con el paso El futuro en el presente es for-
ca en que les tocó vivir. Esto del tiempo se marchita. jador de sueños, y el presente en
no es sorprendente, pues lo el futuro es el barrendero de ilu-
grande frecuentemente sólo se siones.
ve desde lejos. Los clásicos (ele- Quizá despreciaríamos menos a
vados a este rango en el trans- las autoridades infladas de nues- La historia enseña poco, porque
curso del tiempo) tampoco sos- tros contemporáneos, si supié- nos dice lo que pasó y no se abre
ramos de antemano que el fu- al abanico de todo lo que hubie-
* Facultad de Humanidades, Universidad
Autónoma del Estado de México.
turo destronaría sus pretensio- ra podido suceder. Conocería-
Teléfono: (722) 2 13 14 07. nes infundadas. mos mucho más sobre un acon-

CIENCIA ergo sum, Vol. 11-1, marzo-junio 2004. Universidad Autónoma del Estado de México, Toluca, México. Pp. 125-126. 125
tecimiento, si supiéramos qué alguna vez existió como posi-
hubiera sido, si éste no hubiera ble. Sólo en sus posibilidades
acontecido o hubiera aconteci- el hombre es en sentido autén-
do de otra manera. tico lo que será, y lo que él ha
sido en sus posibilidades, es su
verdadero pasado.
El desaire por el futuro trae
como consecuencia una visión
del pasado como algo acabado ¿Podría el hombre vivir igno-
lo cual falsea el sentido de la en nuestra pereza, inercia o ne- rando que lo que existirá será
historia. gligencia de nuestras obligacio- mejor que lo que existe?
nes, y es por eso que nos justifi-
camos ante el tribunal de nues-
Así como Dios mandó a Jesús a tra conciencia, relegando nues- Sabemos que algo sucederá,
salvar a la humanidad, el Tiem- tras promesas al futuro que a pero ignoramos dónde, cuándo
d e s a l i ñ a d o s

po mandó al Progreso a instituir veces se dilata hasta los límites y en qué circunstancias, es esto
su buena nueva: Mañana será de nuestra existencia. Se puede lo que nos hace creer en el des-
mejor que hoy. decir que ‘mañana’ es nuestro tino que hacía fallar los cálcu-
benigno confesor que perdona los exactos de nuestra razón o
nuestros pecados, si le prome- la pujanza indomable de nues-
Cuando el hombre alcanza una temos cumplir nuestras prome- tra voluntad.
edad determinada, no teme a las sas un ‘otro día’.
tentaciones; más bien las tenta- Para todos el paso del tiempo
ciones huyen de él. representa una tragedia. Pero
Para cada ser humano su esta- para los farsantes y simuladores
do anterior es al presente lo que el tiempo es una doble tragedia,
La historia es: o bien lo que ha el presente es al futuro. Y ya ya que tarde o temprano se re-
sucedido y pudiera no suceder, que ellos se preocupaban por velará su engaño y se les pondrá
o bien lo que ha sucedido y po- su futuro, sus sueños, proyec- en el lugar que merecen.
P e n s a m i e n t o s

drá suceder. Lo que demuestra tos y planes no son menos im-


que la historia es un drama como portantes que sus actos cristali-
o una novela aburrida. zados en el cuerpo de los he- Esperar es siempre desear algo
chos históricos. El buen histo- que está en el futuro y que no
riador sabe que lo irreversible está en la posesión de nuestra
Los genios se adelantan a su épo- voluntad. Cuando más se
ca, los talentosos marchan a su aproxima la llegada de un acon-
paso, y los demás sólo atinan a tecimiento que sabemos que va
correr detrás de ella. a suceder, menos lo esperamos.
Una mujer enamorada ama a
su novio y espera casarse con
‘Mañana’, ‘otro día’, ‘después’ él. Pero no está segura del sen-
son las palabras que, frecuente- timiento de su galán y espera
mente, nos sirven como pretex- que también la ame. Si estuvie-
tos para no cumplir los compro- ra segura que también le ama,
misos de hoy. No tenemos sufi- no esperaría sino prepararía su
ciente osadía para reconocernos boda.

126 M ÁLISHEV , M. A FORISMOS , MÁXIMAS Y PARADOJAS

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