PRINCIPIO 1: Los individuos se
enfrentan a disyuntivas
Para obtener lo que queremos, en
general tenemos que renunciar a algo
que también nos gusta. Tomar
decisiones significa elegir entre dos
objetivos.
PRINCIPIO 2: El Coste de
Oportunidad de nuestras decisiones.
El costo de oportunidad de una cosa
es aquello a lo que renunciamos para
conseguirla.
PRINCIPIO 3: Las personas
racionales piensan en términos
marginales.
El análisis marginal supone que las
personas toman sus decisiones
sopesando los beneficios adicionales,
frente a los costes adicionales, en el
momento en el que toma la decisión.
PRINCIPIO 4: Las personas se
mueven por Incentivos.
Un incentivo es algo que induce a las
personas a actuar y puede ser una
recompensa o un castigo.
PRINCIPIO 8: El nivel de vida de un país
depende de su capacidad para producir
PRINCIPIO 5: El comercio puede mejorar
el bienestar de todos:
Cada uno de nosotros ofrecemos bienes y
servicios que, mediante el intercambio,
estos bienes y servicios sirven para cubrir
las necesidades de otros miembros de la
sociedad.
PRINCIPIO 6: Los mercados normalmente
son un buen mecanismo para organizar la
actividad económica.
Uno se especializa para poder obtener lo
que necesita a cambio de lo que produce.
PRINCIPIO 7: El Estado puede mejorar, a
veces, los resultados de mercado.
Aunque los mercados son generalmente
una buena forma de organizar la actividad
económica, el estado puede intervenir
para que estos sean más equitativos y
eficientes
bienes y servicio que mejoren la calidad
de vida de las personas.
Dependiendo del tamaño de un país y su
cantidad de población, se produce una
cantidad de bienes y servicios, ya que la
producción va de la mano al consumo de
personas.
PRINCIPIO 9: Los precios suben cuando
el Gobierno imprime demasiado dinero.
Cuando el nivel general de precios sube,
con cada unidad de moneda se adquieren
menos bienes y servicios.
PRINCIPIO 10: La sociedad se enfrenta a
una disyuntiva a corto plazo entre la
inflación y el desempleo.
Al tener una tasa de interés alta, las
personas tienen menos dinero en el
bolsillo para hacer compras, agregarle a
esto que se resiente la demanda,
afectando de primera mano al sector
productivo.