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“PROVERBIOS 8: 11

“Porque mejor es la sabiduría que las piedras preciosas; Y todo cuanto se


puede desear, no es de compararse con ella.”

“Vale más la sabiduría que las piedras preciosas, y ni lo más deseable se le


compara. NVI”

SIGNIFICADO DE SABIDURÍA:

la Real Academia Española (RAE) hace referencia al nivel más elevado del conocimiento.

Ese concepto es de la sabiduría del mundo, más no la que Dios nos da, siendo esta aquella que nos
permite tener temor a Dios (este es el principio de la sabiduría, el temor a Dios), el temor a Dios,
hace que los hombres nos apartemos del mal, le escuchemos y vivamos conforme a su voluntad,
hay personas que tienen mucho conocimiento, estudios, carreras universitarias, postgrados, pero
son insensatos.

“Efesios 1 : 17-18 para que el Dios de nuestro Señor Jesucristo, el Padre de gloria, os dé espíritu de
sabiduría y de revelación en el conocimiento de él, alumbrando los ojos de vuestro entendimiento,
para que sepáis cuál es la esperanza a que él os ha llamado, y cuáles las riquezas de la gloria de su
herencia en los santos.”

La sabiduría que Dios nos da es con el fin de que podamos comprender cual es su propósito con
cada uno de nosotros y el privilegió que tenemos por ser sus hijos, esa espectacular herencia que
nos da, una herencia que no se corrompe ni destruye, que es segura y preciosa, vida eterna y
salvación en Jesús, nuestro Dios.

Cuando nosotros tenemos claro que Dios nos llamó, porque el hecho de estar, por ejemplo en este
grupo de whatsapp, significa que Dios nos ha elegido, para ser hijos suyos, pero él también nos dio
libre albedrio, así que la decisión de amarle y seguirle es de cada uno de nosotros, cuando
entramos en la presencia de Dios, cuando le entregamos nuestro corazón, él nos da esa sabiduría
que necesitamos para que nuestras decisiones le agraden.

Salomon en ese versículo, nos dice que la sabiduría vale más que una piedra preciosa y que no la
podemos comparar con nada deseable, es decir, que es única y que es invaluable, no podemos
tazar el precio de ser sabios, no podemos medir la sabiduría, pero tampoco estamos llamados a
guardarla, “ mi mamá por ejemplo, cuando tiene piezas de oro, la guarda por allá en cajon bajo
llave y todo, para que no se le pierda y las usa únicamente cuando tiene algún evento y quiere
pues chicanear” pero nosotros no podemos hacer eso con la sabiduría, porque si Dios nos la dio es
para utilizarla, seamos sabios en nuestras decisiones, siempre enfocados en agradar a Dios, y el
resto vendrá por añadidura.

Pablo en 1 Corintios cap. 1: 26-29

Pues mirad, hermanos, vuestra vocación, que no sois muchos sabios según la carne, ni muchos
poderosos, ni muchos nobles; sino que lo necio del mundo escogió Dios, para avergonzar a los
sabios; y lo débil del mundo escogió Dios, para avergonzar a lo fuerte; y lo vil del mundo y lo
menospreciado escogió Dios, y lo que no es, para deshacer lo que es, a fin de que nadie se jacte en
su presencia.

No nos eligió porque fuéramos los mejores, los mas inteligentes, los más fuertes, Dios nos eligió
porque halló gracia en cada uno de nosotros, y los amigos o simpatizantes que están escuchando
podrían decir, nooo es que yo no he sido elegido aun porque ni siquiera me he bautizado o los
hermanos, podrían decir es yo no he sido sellado por el espíritu santo todavía, entonces Dios no
me ha elegido aún, pues amigo y hermano, te cuento que Dios ya te eligió, ahora elígelo tu a él,
agradale a él, buscale a él, créele a él, Dios no se equivoca, si te eligió es porque tiene un propósito
contigo, pídele sabiduría para sentirlo, para escucharlo, para ser un digno hijo de él.

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