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República Bolivariana de Venezuela

Ministerio del Poder Popular para la Educación


Universidad Nacional Experimental de los Llanos
“Ezequiel Zamora”
Sanare-Edo-Lara.

DERECHO MERCANTIL

Integrante:
Cristina Inojosa
Cedula: 28.150.469
Derechos. 4to año
Profesor: Julio Flores.

Sanare, 2021.
Obligaciones De Carácter Mercantil:

a) Obligaciones de Los Comerciantes: La ley mercantil impone a todos los comerciantes, por el
solo hecho de tener tal calidad, diversas obligaciones, aunque en este apartado nos
referiremos casi exclusivamente a aquellas obligaciones impuestas por el Derecho Mercantil,
y no a las de tipo administrativo, fiscal, sanitario, etc., que también deben cumplir los
comerciantes.

 El artículo 16 del Código de Comercio establece las obligaciones (de manera general) a
las que está sometido en comerciante. A lo largo de este capítulo nos referiremos a estas y a
algunas otras obligaciones especiales impuestas por las leyes mercantiles a los comerciantes.

Publicidad Mercantil: Los comerciantes tienen el deber de participar la apertura del


establecimiento o despacho de su propiedad, por los medios de comunicación que sean
idóneos. Esta información dará a conocer el nombre del establecimiento o despacho, su
ubicación y objeto. El incumplimiento de esta obligación no tiene en términos generales
sanción. 

El Registro de Comercio: Los comerciantes deberán inscribir en el Registro de Comercio


aquellos documentos cuyo tenor y autenticidad deban hacerse notorios, así como: las
escrituras constitutivas de las sociedades mercantiles, la disolución de las sociedades
mercantiles, el nombramiento de los liquidadores de las sociedades mercantiles, los
acuerdos de fusión, transformación y escisión de las sociedades mercantiles, entre otras.

 La inscripción en el Registro de Comercio es potestativa para los comerciantes


individuales, por el contrario, dicha inscripción es obligatoria para las sociedades mercantiles

Registros Especiales: Además del registro de Comercio, existen regulados por nuestra
legislación otros registros especiales relativos a determinados actos o documentos de
carácter mercantil o que se relacionan con la materia.

Ejemplos de estos son: el registro público marítimo nacional, registro nacional de


inversiones extranjeras, entre otros.

Contabilidad Mercantil: Todos los comerciantes están obligados a mantener un sistema de


contabilidad de acuerdo con las disposiciones del propio Código de Comercio. El
comerciante está obligado a llevar y mantener un sistema de contabilidad adecuado. Este
sistema podrá llevarse mediante los instrumentos, recurso y sistemas de registro y
procesamiento que mejor se acomoden a las características particulares del negocio, pero
en todo caso deberá satisfacer los siguientes requisitos mínimos: a) permitirá identificar las
operaciones individuales y sus características, b)permitirá seguir la huella desde las
operaciones individuales hasta las cifras finales de las cuentas y viceversa, c) permitirá la
preparación de los estados que se incluyan en la información financiera del negocio. El
comerciante deberá conservar debidamente archivados, los comprobantes originales de sus
operaciones. Todo comerciante está obligado a conservar los libros, registros y documentos
de su negocio por un plazo mínimo de 10 años.

Sanciones: Excepto para el caso de que los libros de contabilidad se lleven en idioma
extranjero, no existe en nuestra legislación mercantil sanción directa para el incumplimiento
de las obligaciones de los comerciantes en relación con dichos libros.
Correspondencia: Los comerciantes están obligados a la conservación de la
correspondencia que tenga relación con su empresa. Los comerciantes están obligados a
conservar los originales de aquellas cartas, telegramas o documentos en que se consignen
contratos, convenios o compromisos que den nacimiento a derechos y obligaciones y
deberán conservarlos por un plazo de 10 años por lo menos.

Inscripción en la Cámara de Comercio o Industria.

Los comerciantes están obligados a inscribirse en la Cámara de comercio o industria que


corresponda, durante el mes de enero de cada año. La falta de cumplimiento de dicha obligación
es sancionada con una multa igual al monto de la cuota de inscripción que debió ser cubierta. 

Características De Las Obligaciones Mercantiles

Las Obligaciones Mercantiles se caracterizan por ser:

a. Actos de Comercio: Las Obligaciones Mercantiles son las prestaciones que resultan de los
Actos de Comercio objetivo o subjetivo. Por consiguiente, son mercantiles todas las
obligaciones que nacen de los Contratos Mercantiles, de las operaciones comerciales, de las
empresas mercantiles, de los títulos valores y aquellas obligaciones nacidas de causa
netamente mercantil reparadoras de daños y perjuicios.
b. Solidarias: La Solidaridad de los codeudores se presume en todas las obligaciones
mercantiles salvo prueba en contrario. La misma presunción se aplica a la fianza de una
obligación mercantil, aunque el fiador no sea comerciante. La solidaridad es Pasiva y Activa:
La Solidaridad Pasiva consiste en que cada codeudor responde enteramente por su
obligación y por las contraídas por todos los codeudores y, si uno Paga, todos quedan
liberados frente al acreedor. Y la Solidaridad Activa, consiste en la obligación contraída por
un deudor frente a varios acreedores. Si el deudor paga a uno de los acreedores la totalidad
de la deuda, se libera de la obligación.
c. Onerosas: La onerosidad de las Obligaciones Mercantiles es la antítesis de la gratuidad de
determinadas obligaciones civiles. En materia civil el préstamo o mutuo es gratuito sino se
pactan intereses. El deudor debe devolver la misma cantidad y calidad cualquiera que sea el
aumento disminución del precio (Art. 1739 Código de Comercio). En materia mercantil la
situación se plantea en otros términos. En el préstamo mercantil la exoneración de los
intereses es la excepción en cuyo caso debe constar por escrito. La regla es que las deudas
mercantiles de sumas de dinero líquidas y exigibles devengan en pleno derecho el interés
corriente en el mercado siempre que éste no exceda del 12 % anual (Art. 108 Código de
Comercio).

Solidaridad: En las obligaciones mercantiles los codeudores serán solidarios, salvo pacto
expreso en contrario. Todo fiador de obligación mercantil, aunque no sea comerciante, será
solidario con el deudor principal y con los otros fiadores, salvo lo que se estipule en el
contrato.

La Jurisdicción Mercantil: La jurisdicción mercantil vino impuesta por la necesidad de un


especial conocimiento de un nuevo derecho más ágil, vivo y adecuado a la buena marcha de
los negocios y de un procedimiento sumario y llano, sin dilaciones basado en la “verdad
sabida y la buena fe guardada”. Por tanto, lo que se buscaba fundamentalmente con esta
clase de jurisdicción era aclarar los hechos para después decidir, no con arreglo a normas
jurídicas, sino a los usos de comercio y de acuerdo con el estilo de conducta de los buenos
comerciantes.

 La prescripción de las obligaciones mercantiles se rige por el Código de Comercio (art. 844
y siguientes) y lo dispuesto en otras leyes especiales atinentes a la materia mercantil. En el art.
846 se establece que la prescripción ordinaria en materia comercial tiene lugar a los diez años,
siempre que en el código o en leyes especiales no se establezca una prescripción más corta.
Ello, dicho de otro modo, significa que todas las acciones, en materia comercial, se rigen por esa
prescripción decenal, salvo la existencia de previsiones comerciales en las que se establezca
expresamente un plazo menor.

Las “prescripciones más cortas” a que se refiere el precepto aludido sólo pueden ser
aplicadas a los casos que resultan inequívocamente comprendidos en la norma respectiva; son
de interpretación restrictiva. En efecto, siempre que para un caso no se encuentre previsto
especialmente un término más breve de prescripción en el Código de Comercio o en una ley
especial, o cuando existiere duda respecto de la aplicación de esas disposiciones específicas,
corresponde aplicar la prescripción general de diez años prevista en el art. 846, siendo
improcedente toda restricción del término por aplicación analógica.

Clasificación

Por su objeto, las obligaciones se clasifican en obligaciones de dar, de hacer, y de no hacer.


Las obligaciones de dar consisten en la traslación de la propiedad de cosa cierta y en la
enajenación temporal del uso o goce de cosa cierta y en la restitución de cosa ajena o en el pago
de cosa debida. En las obligaciones de hacer el deudor está obligado a realizar un hecho. En las
obligaciones de no hacer, el deudor debe abstenerse de realizar un hecho.

Modalidades.

Las obligaciones pueden estar sujetas a modalidades que son el término y la condición. El
término es un acontecimiento futuro y de realización cierta que suspende, sea la exigibilidad, sea
la extinción de una obligación y que produce sus efectos sin retroactividad. La condición es un
acontecimiento futuro y de realización incierta, que suspende, sea el nacimiento, sea la
resolución de una obligación y que produce sus efectos retroactivamente. El término puede ser
suspensivo o extintivo. La condición puede ser suspensiva o resolutoria; es decir que suspende
algo; y resolutoria, como resolver algo.

Obligaciones con Pluralidad de objetos: Estas obligaciones son de dos especies:


obligaciones conjuntivas y obligaciones alternativas.

Las conjuntivas: son aquellas en que el deudor se ha obligado a diversas cosas o hechos,
conjuntamente.
En las obligaciones alternativas el deudor se obliga a uno de dos hechos o a una cosa y
cumple prestando cualquiera de esos hechos o cosas.
Obligaciones con Pluralidad de Sujetos: Las obligaciones en que hay pluralidad de deudores
o de acreedores pueden ser de dos clases obligaciones mancomunadas y obligaciones
solidarias.

En la comunidad de deudores o de acreedores la deuda o el crédito se consideran divididos,


en tantas partes como deudores o acreedores haya y cada parte constituye una deuda o un
crédito distintos unos de otros; las partes se presumen iguales.

Las obligaciones solidarias pueden serlo por haber varios deudores o varios acreedores.
Hay solidaridad activa cuando dos o más acreedores tienen derecho a exigir cada uno de
por sí el cumplimiento total de la obligación.

El Contrato Mercantil: El contrato mercantil es un acto por el cual varias personas se obligan
entre ellas para dar, hacer o no hacer.  Este pacto genera derechos y obligaciones a las
partes y tiene como objeto actos de comercio.

Se consideran actos de comercio las acciones relacionadas con una adquisición de un


objeto que tiene como características diferenciadoras:

a. Finalidad de ganar dinero.


b. Estos bienes no son adquiridos para el uso propio sino para el intercambio posterior.
c. Estos actos son realizados por una empresa.
d. Los actos son masivos, ya que la finalidad no es el consumo propio sino el intercambio.

Características del contrato mercantil: Las características principales de los contratos


mercantiles van a depender de cuál sea el objeto del contrato, pero se pueden señalar:

a. Contratos reales, consensuales o solemnes.


b. Contratos unilaterales o bilaterales.
c. Siempre son contratos onerosos.
d. Contratos de ejecución inmediata o aplazada en el tiempo.
e. Contratos principales o accesorios.

Contratos mercantiles: Algunos contratos que son clasificados como mercantiles según la ley
son:

a. Contrato de compraventa mercantil.


b. Contrato de transporte terrestre.
c. Contrato de seguro.
d. La fianza mercantil.
e. Contratos de pagaré, letras y cheques.
f. Contrato de comercio marítimo.
g. Contrato de sociedad.
h. Contrato de comisión.
i. Contrato de agencia.
j. Contrato de depósito bancario.
k. Contrato de préstamo.
Aceptación de la oferta mercantil: La oferta mercantil puede ser aceptada formalmente de
forma expresa o tácitamente en los términos del artículo 854 del código de comercio. En el
caso de la oferta mercantil formulada verbalmente, la aceptación se debe hacer en el acto,
de forma inmediata. La oferta realizada por teléfono también debe ser aceptada o rechazada
de forma inmediata, como si se hiciera verbal y personalmente.

1º. Aceptación pura y simple: en virtud de ella el designado por el librador para el pago de la
letra, participa en el vínculo cambiario, obligándose solidariamente a su pago para el día de
vencimiento (art. 436 del Código de Comercio). Ocupa en el esquema caratular la posición de
deudor principal, por vía directa. En defecto de pago el portador tiene frente a él la acción de
cobro más rigurosa del derecho cambiario (art. 451 del C. de Comercio); ya que su obligación no
se subordina (como la de regreso) ni a la presentación puntual de la letra en el lapso legal ni a la
formalidad del protesto; sólo a la prescripción de tres años (art. 479 del mencionado código).

2º. Rechazo: es la situación que se conforma con el rechazo de aceptación. En la aceptación


rige el principio de libertad. El librado aun siendo deudor del librador, o habiéndolo previamente
autorizado a librar aquella letra en su contra, no resulta por ello obligado a aceptarla. Su rechazo
no le acarrea sanción cambiaria alguna.

3º. Plazo de reflexión: el art. 432 del Código de Comercio da la facultad al librado de pedir una
segunda presentación al día siguiente de la primera. “el portador no está obligado a dejar en
poder del librado la letra presentada a la aceptación. El librado puede pedir que se le haga una
segunda presentación al día siguiente de la primera. Los interesados no podrán alegar que no se
ha procedido conforme a derecho en cuanto a esta petición, sino cuando ella haya sido
mencionada en el protesto”.

4º. Aceptación condicionada (no pura y simple); modificada: el art. 434 del Código de Comercio
dispone que “la aceptación es pura y simple, pero puede también limitarse a una parte del valor
de la letra. Cualquiera otra modificación hecha en la aceptación de la letra equivale a falta de
aceptación. Sin embargo, el aceptante es responsable en los términos de su aceptación”. Por
interpretación en contrario queda claro que la aceptación condicionada y la modificada son nulas
por contravenir una prohibición legal.

5º. Aceptación parcial: es cuando se acepta la letra pero por debajo de su suma valor.

6º. Aceptación tachada: la aceptación es irrevocable pero la tacha de la firma colocada por el
aceptante no vulnera ese principio siempre que la cancelación sea anterior a la devolución de la
letra. En ese supuesto la aceptación se reputa rehusada porque el librado es dueño de aceptar o
no y aún puede arrepentirse, si lo hace antes de restituir el título. Art. 437 del Código de
Comercio “si el librado que ha puesto su aceptación en la letra, la tacha antes de devolver el
título, la aceptación se reputa rehusada; sin embargo, es responsable en los términos de su
aceptación si la ha tachado después de haber hecho saber por escrito al portador o a un
signatario cualquiera, que la había aceptado”.

7º. Aceptación fechada: el art. 433 del Código de Comercio expresa que cuando la letra es
pagadera a un cierto plazo vista o cuando debe ser presentada a la aceptación en un término
fijado en virtud de estipulación especial, la aceptación debe ser fechada el día que ha sido
hecha, (el día de la presentación si en ese acto tuvo lugar la aceptación) a menos que el
portador exija que sea fechada el día de la presentación.

A falta de fecha, el portador puede, para conservar su derecho de dirigirse contra el librador y los
endosantes, hacer constar esta omisión por un protesto presentado en tiempo útil.

Efecto De La Aceptación: El Aceptante pasa a ser el deudor principal: art. 436 del Código de
Comercio “Por la aceptación, el librado se obliga a pagar la letra a su vencimiento”. En
defecto de pago, el portador, aun siendo el librador, tiene contra el aceptante una acción
directa, derivada de la letra de cambio, por todo aquello que es exigible.

Oferta revocable: conforme a lo dispuesto en el tercer aparte del art 1.137 Código Civil
Venezolano “el autor de la oferta puede revocarla mientras la aceptación no ha llegado a su
conocimiento”, con lo cual se estable el principio de revocabilidad de la oferta, pues si el
contrato” se forma tan pronto como el autor de la oferta tenga conocimiento de la aceptación
de la otra parte”, la oferta es revocable hasta el instante anterior de la formación del contrato.
Previsión legal, es la que estableció nuestro legislador, remediando el supuesto de que en
principio la oferta, es irrevocable, esto lo encontramos en el mismo art 1.137 Código Civil
Venezolano del en su cuarto y quinto aparte:

a) Prometer la oferta a un plazo determinado.

b) La irrevocabilidad de la oferta si de la naturaleza del negocio se deduce un término.

c) Presumir conocida la aceptación desde el instante en que ella llegue al domicilio del
oferente, a menos pruebe haberse hallado, sin su culpa, en la imposibilidad de conocerla.

Pruebas de Las Obligaciones Mercantiles:

La “forma” hace referencia al medio concreto y determinado con que debe exteriorizarse la
voluntad contractual; en este sentido, la forma constituye un elemento absolutamente necesario,
porque la voluntad contractual no alcanza plena validez y eficacia jurídica si no aparece
expresamente revestida de alguna forma, aun cuando sea la más elemental de todas: la forma
verbal. La “prueba”, en cambio, es un medio de demostrar la existencia del contrato, de lo que
resulta que sólo es menester utilizarla cuando se cuestiona la realidad del mismo; así pues, no
es necesaria para la validez ni para la eficacia del negocio.

Los medios de prueba que el Derecho Civil tiene establecidos son los que regula el Código de
comercio en sus artículos 1214 a 1253 bajo el nombre “de la prueba de las obligaciones”.
Derogados en su mayoría por la Ley de Enjuiciamiento Civil. Los medios previstos en el Código
de Comercio son:

Libros de los empresarios

Los artículos 25 a 33 del Código de comercio son obligatorios para todos el “libro de inventarios y
cuentas anuales” y el “libro diario”. El valor probatorio de los libros de los empresarios será
apreciado por los tribunales conforme a las reglas generales del Derecho. Por éstas habrá que
entender: la que impone la valoración conjunta y objetiva de los medios de prueba y las
comprendidas en la Ley de Enjuiciamiento Civil sobre el valor probatorio “de los documentos
privados”.

Prueba De Testigos

Tanto el Código de comercio como el Código civil evidencian un cierto recelo hacia la prueba de
testigos. El Código de comercio en su artículo 51 dispone que “la declaración de testigos no será
por sí sola bastante para probar la existencia de un contrato cuya cuantía exceda de mil
quinientas pesetas (9,2 euros), a no concurrir con alguna otra prueba”.

Por lo demás, la prueba de testigos tiene el valor que le reconoce la Ley de Enjuiciamiento Civil
(artículo 376).

Correspondencia Telegráfica (Artículo 51 Del Código De Comercio)

El mensaje telegráfico puede constituir ciertamente un medio de prueba; pero en el Derecho


Mercantil su eficacia depende de dos condiciones: 1) que los contratantes, previamente o por
escrito, hayan admitido la correspondencia telegráfica como instrumento para intercomunicarse
la oferta y la aceptación; y 2) que los telegramas mutuamente cursados se atengan a las
contraseñas o signos convencionales eventualmente preestablecidos.

Libros y pólizas de los agentes mediadores (artículos 58 y 93 del Código de comercio)

El segundo artículo menciona también las “pólizas de los agentes colegiados” y declara
expresamente “el carácter de notarios” que a éstos corresponde en materia de actos de
comercio. A tenor del artículo 93 del Código de comercio, tanto los libros como pólizas “harán fe
en juicio”; lo que viene a confirmar su condición de documentos públicos que hacen prueba, aun
contra terceros, del hecho que motiva su otorgamiento y de la fecha de éste.

Libros de contabilidad del capitán del buque

Prescrito en el artículo 612 del Código de comercio, los libros de contabilidad del capitán del
buque constituyen un elemento probatorio de obligaciones mercantiles. Según el artículo 634,
este libro, llevado en regla, “hará fe en las cuestiones que ocurran entre el capitán y la tripulación
sobre las contratas extendidas en él y las cantidades entregadas a cuenta de las mismas”.

Contratos de embarque (artículos 706 a 718 del Código de comercio)

El artículo 709 del Código de comercio declara que “hará fe entre todos los interesados en la
carga y entre éstos y los aseguradores, quedando a salvo para los últimos la prueba en
contrario”. Para los interesados en la carga, el “conocimiento” constituye una prueba
incontrovertible respecto de los aseguradores marítimos, su fuerza demostrativa es la de una
presunción iuris tantum.

La factura mercantil.

Como documento expedido por un empresario, la factura hace prueba contra éste por cuanto
hay que presuponer su previa conformidad con el contenido del documento. Con relación al
consumidor o usuario, la factura por sí sola carece de significación probatoria; no es más
que un documento en el que se relacionan los productos o servicios adquiridos y se indica lo
que corresponde a abonar por ellos. Sólo cuando el adquirente acepta expresamente la
factura, puede ésta constituir un elemento probatorio respecto de la obligación de pagar su
importe.

La Perfección Del Contrato Mercantil

El contrato mercantil se perfecciona mediante la prestación del consentimiento recíproco, que a


su vez se manifiesta por la concurrencia de la oferta y la aceptación sobre los demás elementos
esenciales del contrato: el objeto y la causa.

¿Qué Es El Velo Corporativo En Derecho Mercantil?

El velo corporativo es la separación del patrimonio y responsabilidad de los socios, del


patrimonio y responsabilidad de una sociedad. ... El velo corporativo va directamente relacionado
con la responsabilidad de los socios en el negocio, principalmente en la sociedad anónima

Prescripción De Las Obligaciones Mercantiles:

El régimen de la prescripción mercantil es, pues, el siguiente: Si el Código Civil y el Código


de Comercio disponen un término para una acción determinada, obviamente debe aplicarse el
plazo que establece la ley mercantil que, como es lógico, priva sobre el civil. Cuando no hay
previsiones en el Código de Comercio o en una ley especial de la materia se aplican los términos
previstos en las disposiciones civiles, aunque, en verdad, ello sucede en muy contados casos
pues las acciones comerciales tienen generalmente previsto expresamente un término especial
de prescripción en el Código de Comercio o en las leyes especiales mercantiles. Desde luego, si
no existe tampoco previsión civil al respecto, la solución debe buscarse en el art. 846 del Código
de Comercio, y el término de prescripción aplicable será indudablemente el ordinario decenal.

La Compraventa Mercantil

Es un contrato por el cual una persona, sea o no propietaria o poseedora de la cosa objeto
de la convención, se obliga a entregarla o a hacerla adquirir en propiedad a otra persona, que se
obliga por su parte, a pagar un precio convenido, y la compra para revenderla o alquilar su uso.

Obligaciones del comprador

El comprador deberá honrar el compromiso acudiendo al lugar y en la fecha acordada con el


vendedor, en función a los acuerdos establecidos en el contrato de venta. En los casos que ese
lugar no esté estipulado en el contrato, entonces el comprador cancelará en el lugar donde se
llevará a cabo la tradición.

Obligaciones del vendedor

Entregar el bien al comprador en el lugar y en el momento convenidos. Garantizar al


comprador una posesión útil. Garantizar al comprador una posesión pacífica. Responder a la
evicción.

La resolución de los contratos.

En palabras sencillas, la resolución de un contrato es la figura producto de la voluntad de las


partes o la declaración judicial mediante el cual se deja sin efecto un contrato (cualquiera que
sea), que por lo general tiene efectos retroactivos y por supuesto cesa todo efecto futuro del
contrato por cuanto este se deshace.

La resolución del contrato implica la extinción del mismo, su desaparición, por lo tanto se hace
inoponible por la ausencia de todo vínculo jurídico que pudo derivarse de su existencia.

El Cumplimiento de los Contratos Mercantiles

El Código de Comercio dispone que las obligaciones en las cuales no se hubiere fijado un
término por las partes o por el mismo código, serán exigibles a los 10 días después de
contraídas si producen acción ordinaria y al día inmediato si llevaren aparejada ejecución.

Compraventa con reserva de dominio

Es una modalidad del contrato de compra y venta que lleva incorporada una garantía para
que el comprador pague el precio aplazado. Esta garantía consiste en dejar establecido que la
propiedad de la cosa vendida, aunque se entregue al comprador desde el perfeccionamiento del
contrato, queda en favor del vendedor hasta el pago del total precio fijado; es decir, la titularidad
dominical sobre la cosa que se vende y entrega es retenida por el vendedor (reserva de
dominio). Si el comprador no paga, el vendedor podrá recuperar la cosa cuyo dominio se ha
reservado, mediante el ejercicio de la acción reivindicatoria. Esta modalidad garantizadora de la
compraventa se aplica en la venta de bienes muebles, puesto que en el caso de adquisición de
inmuebles con precio aplazado se cuenta con la garantía hipotecaria.

Venta con reserva de dominio.

Modalidad de ese contrato que se da a veces cuando la compra no se hace al contado, sino con
el pago del precio a plazos. Consiste esta cláusula en mantener el vendedor su propiedad sobre
la cosa vendida hasta obtener el pago total por parte del comprador, no obstante la entrega a
éste de la cosa vendida.

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