El notario como agente de la función notarial, es el órgano encargado de la creación del

instrumento público. El notario es consecuencia del instrumento público, su razón de ser, ambos
están íntimamente relacionados y no se puede concebir a uno sin el otro. Como se apuntó
anteriormente ambos, el instrumento y el notario, son los cimientos del derecho notarial. Cabe
mencionar, que los siguientes conceptos que se examinarán definen al notario dentro del sistema
notarial latino, que es el que se utiliza en Guatemala. Doctrinariamente existen muchas
definiciones de notario, solo se revisarán las que a se ajusten más adecuadamente a lo que es un
notario en el país

Manuel Ossorio, manifiesta que Notario es: “En términos de la Ley Española del Notariado, el
Notario es el funcionario público autorizado para dar fe, conforme a las leyes, de los contratos y
demás actos extrajudiciales

Ossorio, Manuel. Diccionario de ciencias jurídicas, políticas y sociales. Pág. 650.

Según El Primer Congreso de la unión Internacional del Notariado Latino, celebrado en Buenos
Aires, Argentina, en el año 1,948; que dice: “Notario Latino es el profesional del derecho
encargado de una función pública consistente en recibir, interpretar y dar forma legal a la
voluntad de las partes, redactando los instrumentos adecuados a este fin y confiriéndoles
autenticidad, conservar los originales de éstos y expedir copias que den fe de su contenido. En su
función está contenida la autenticación de hechos

De la Cámara y Álvarez, Manuel. El notario latino y su función. Pág. 4

El Maestro Luis Carral y de Teresa expone la siguiente idea para dejar en claro la necesidad de la
intervención de los notarios en una sociedad: "La labor del notario, bien entendida y bien
desempeñada, constituye un verdadero apostolado y puede asegurarse que sin notarios
competentes y honorables, muchísimas personas, pero especialmente de humilde condición,
serían víctimas diarias del abuso y del engaño"

Carral y de Teresa, Luis. Derecho Notarial y derecho registral, Pag.93

Para el tratadista, Ramon Novoa Seone: “El Notario tiene el encargo técnico de velar por el
cumplimiento de las leyes en las relaciones pacíficas del derecho, purificar con su ciencia y
experiencia esas relaciones individuales, de defectos, tanto en su forma como en su fondo para
darles carácter permanente, evitando contiendas y dudas en la aplicación de lo convenido y el
encargo jurídico público de dar a esas relaciones credibilidad, y por tanto autoridad pública por
medio de la fe que le ha investido (el Estado

Novoa Seone, Ramón, El progreso del instrumento público, pág. 18

Existen determinados actos y hechos jurídicos que requieren de veracidad frente a terceros, por
esto surge la necesidad de crear una institución capaz de darles autenticidad;

El notario tiene la obligación de dar seguridad jurídica, esta afirmación es respaldada por el
artículo seis de la nueva ley de notariado que estipula textualmente: "Esta ley regula el tipo de
ejercicio profesional del derecho como oficio jurídico consistente en que el notario, en virtud de su
asesoría y conformación imparcial de su documentación en lo justo concreto del caso, en el marco
de la equidad y el Estado Constitucional de Derecho y de la legalidad derivada del mismo

Martínez Segovia expresa al respecto, “el conocimiento del proceso histórico, sobre todo a partir
de Roma, autoriza a decidir y afirmar que la necesidad social creó la función notarial y que ésta
precedió al órgano haciéndolo evolucionar, y terminó por diferenciarlo, especializarlo y
caracterizarlo.

Según el autor mexicano, licenciado José Arrache establece que “Una gran mayoría de notarios
acepta el término función, aunque no es lo mismo decir que hacer o actividades notariales. Se ha
discutido en muchas ocasiones si la función del notario es pública o no. Algunos autores opinan
que el notario es un funcionario público, otros afirman que es un profesional liberal, y otros que
61 desarrolla una función pública. De cualquier forma, la nueva Ley del Notariado para el Distrito
Federal indica en su artículo 27 que la función notarial es de orden e interés público. De manera
similar era contemplada la función del notario en la ley de 1999 en el artículo 1º estableciendo
que la función notarial pertenece al orden público, y dicha función sería encomendada a
particulares licenciados en Derecho”.

La función notarial tiene un carácter precautorio, debe ayudar, atender, colaborar y auxiliar a
aquellas personas que así lo soliciten en tanto se trate de cuestiones jurídicas. En este sentido, la
función notarial pretende otorgar seguridad jurídica otorgando fe a los actos en que intervenga el
notario.

Se dice que es el bastión de la seguridad en virtud de la investidura que el Estado le otorga a los
notarios, para que estos den autenticidad a los documentos que autorizan, siendo este la base
principal para que dichos documentos obtengan o adquieran la seguridad jurídica, para que
puedan surtir efectos jurídicos posteriores a su autorización o en el mismo momento.

Concepto legal de notario La legislación de Guatemala no brinda una definición como tal de lo que
es un notario, sin embargo el Código de Notariado, Decreto Número 314, en el Artículo 1º
establece: “El Notario tiene fe pública para hacer constar y autorizar actos y contratos en que
intervenga por disposición de la ley o a requerimiento de parte.” Este precepto legal si bien no
define en su totalidad al notario, es importante porque inviste de fe pública al notario
guatemalteco. Es la fe pública notarial la que hace del notario un funcionario 44 especial, que
aunque ejerce su profesión de manera liberal y particular, cumple en cierta forma con una función
pública delegada por la ley. Para ejercer el notariado en Guatemala, los aspirantes deben de
cumplir con ciertos requisitos habilitantes, contenidos en el Artículo dos del Código de Notariado,
Decreto Número 314, los cuales se clasifican de la siguiente forma: