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Según 2 de Timoteo 2:1, Pablo como padre, podemos ver el lado paterno de pablo, y me ve a
Timoteo como a un hijo amado, y anima que se esfuerce en la gracia de Cristo.
Según 2 de Timoteo 2:2, ejemplo en la enseñanza. Pablo era ejemplo para los de fuera, y
quería que muchos sean como él y que enseñen las buenas nuevas a otros, Timoteo debe
compartir lo que él ya aprendió de Pablo
Según 2 de Timoteo 2:3, soldado aprobado, Pablo era un soldado de Jesucristo, se requiere
entrega y mucho esfuerzo.
Según 2 de Timoteo 2:4, honradez en el trabajo. Nos enseña a ser honrados y leales al
servicio que somos encomendados.
Según 2 de Timoteo 2:5, ministro esforzado, Ejemplo de ser un atleta victorioso, pero
debemos ser justos y debemos luchar legítimamente, no debemos hacer trampa para obtener
el premio.
Según 2 de Timoteo 2:7, toda la sabiduría proviene de Dios, Pablo le quiere decir que
considere sus palabras, pero sobre todo Dios le de sabiduría para saber escuchar y actuar.
Según 2 de Timoteo 2:8, Jesucristo como centro, Pablo dice a Timoteo que siempre siempre
tenga presente a Jesucristo. Como parte principal de su evangelio.
Según 2 de Timoteo 2:9, entrega total a la obra de Dios, no es fácil ser cristiano, va ha ver
sufrimiento y mucho dolor, pero la palabra de Dios es Viva y nunca será presa, así que
seguirá por todas las generaciones.
Según 2 de Timoteo 2:10, amor por el prójimo, nos enseña a tener amor por nuestro prójimo,
para que ellos también puedan obtener la salvación en Cristo.
Según 2 de Timoteo 2:11-13, ser fieles al llamado, Pablo nos enseña que debemos
permanecer fieles a la palabra de Dios, pues si fuéramos infieles, él permanece fiel, es la
confianza plena que debemos tener en cristo.
Según 2 de Timoteo 2:15, ministro aprobado, Pablo dice a Timoteo que se mantenga
integro, y que procure presentarse a Dios aprobado, que debemos usar bien la palabra de
Dios.
Según 2 de Timoteo 2:16-18, ministro reservado, que sea coherente al anunciar la palabra de
Dios, lo que dice con lo que hace. Y que enseñe la verdad.
Según 2 de Timoteo 2:20 -21, ministro transparente, Pablo nos enseña que el creyente en su
pasado sin Dios fue un vaso para usos viles; pero ahora no, y cada vez debe limpiarse para ser
usado honrosamente, será santificado y útil al Señor y dispuesto para toda obra buena. Si
queremos ser vasos honrosos y útiles al Señor debemos vivir en limpieza.
Según 2 de Timoteo 2:22, ministro integro. El pastor debe huir de las pasiones juveniles,
pero debe perseguir la justicia, la fe, el amor, la paz, junto a todos que con corazones limpios
invocan al Señor. La justicia implica el velar por el bienestar integral de sus ovejas; el pastor
no ministra solo para el alma del creyente, ministra para el hombre total.
Según 2 de Timoteo 2:24, ministro amable para con todos, La razón que Pablo da para que
el pastor se esfuerce a no meterse en disputas necias, sin sentido, es porque el siervo de Dios
no debe ser contencioso. Pablo llama al pastor siervo de Dios. Nunca debemos olvidar que
somos siervos de Dios y que la obra es de Dios y no nuestra.
Según 2 de Timoteo 2:25, ministro manso para corregir, El siervo del Señor corrige con
mansedumbre a los que se oponen. La corrección la hace con suavidad, sin recurrir a la
violencia o dar lugar a las explosiones temperamentales ya que el propósito de Dios es que
los oponentes conozcan la verdad y posiblemente Dios les permita que se arrepientan.
Pablo como Profeta. 2 Timoteo 3:1-17
Pablo señala aquí una responsabilidad pastoral que consiste en reconocer el peligro de la
apostasía manifestada en la propagación de falsos maestros con sus perversas y erróneas
enseñanzas.
Según 2 de Timoteo 3:1, pablo anuncia tiempos peligrosos, la advertencia es clara, que en
los postreros días vendrán tiempos peligrosos.
Según 2 de Timoteo 3: 10-17, vida llena de peligro en los últimos tiempos, Pablo pasa a
señalar primero el ejemplo que Timoteo debe seguir y luego le exhorta a permanecer firme en
sus convicciones bíblicas. El ejemplo de Pablo mismo es el que Timoteo debe seguir, una
vida entregada a la causa del Señor, llena de peligros, pero siendo liberado por el Señor.