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ALFRED KORSYBSKI - SCIENCE AND SANITY (1933)

LIBRO I. PRELIMINARES (Páginas 109 y 110)

LIBRO I

UNA INSPECCIÓN GENERAL DE LOS FACTORES NO ARISTOTÉLICOS.

PRELIMINARES

Corpus Errorum Biologicorum1

Pero el trabajo distintivo de la ciencia es exactamente la modificación, la reconstrucción, el


abandono de las viejas ideas; la construcción de otras nuevas sobre la base de la observación.
Esto, sin embargo, es una operación angustiosa, y muchos se niegan a someterse a ella; incluso
muchos cuyo trabajo es la práctica de la investigación científica. Las viejas ideas persisten junto
con las nuevas observaciones y forman la base, a menudo inconsciente, para muchas de las
conclusiones que son extraídas.

Esto es lo que ha ocurrido en el estudio de la herencia. Una carga de conceptos y definiciones ha


descendido desde los días pre-experimentales; el vertido del nuevo cableado de conocimiento
experimental sobre ella ha resultado en confusión. Y esta confusión es peor confundida por la
fuerte y extraña propensión de quienes trabajan en la herencia a burlarse, negar y despreciar las
observaciones de quienes trabajan en la acción ambiental; la misma fuerte y extraña propensión
que tienen los estudiantes de los efectos ambientales para burlarse, negar y despreciar los
trabajos sobre la herencia.

Si uno acepta los resultados de afinidad entre ambos conjuntos, sin atribularnos por sus
negaciones, sin atribularnos por definiciones que provienen del pasado, resulta un cuerpo de
conocimiento simple, consistente y útil; aunque con demandas menos pretenciosas que las
establecidas por cualquiera de los dos conjuntos.

Nuestra primera falacia surge de la situación que acabamos de describir. Ésta es:

I. La falacia de los juicios no experimentales, en materia de herencia y desarrollo...

Nuestra segunda falacia general es la que aparece en la interpretación de los resultados de la


observación y de los resultados experimentales; subyace a la mayoría de las falacias especiales
observadas en la biología genética. Esta es la falacia que Morley en su vida de Gladstone afirma
que es la mayor aflicción de los políticos, de hecho, es una plaga común de la humanidad. Ésta es:

II. La falacia de atribuir a una única causa lo que se debe a muchas causas…

III. La falacia de concluir que debido a que un factor juega un papel, otro no; la falacia de sacar
conclusiones negativas de observaciones positivas...

IV. La falacia de que las características de los organismos son divisibles en dos clases distintas;
unas debidas a la herencia, las otras debidas al entorno...

1
“Corpus Errorum Biologicorum”: Errores del Corpus de la Biología.
VII. La falacia de basar conclusiones en premisas implícitas que, cuando se declaran
explícitamente, son rechazadas...

Muchas premisas que influyen en el razonamiento son de este tipo oculto, inconsciente. Tales
premisas fantasmales afectan en gran medida el razonamiento biológico sobre los temas aquí
tratados; subyacen a varias de las falacias ya mencionadas, y varias por venir...

VIII. La falacia de que probar que una característica es hereditaria muestra que no es alterable por
el entorno...

IX. La falacia de que mostrar que una característica ha de ser alterada por el ambiente prueba que
no es hereditaria...

De hecho, parece probable, a partir del actual estado del conocimiento y la actual dirección del
descubrimiento, que las siguientes afirmaciones precipitadas resultan finalmente justificadas:

(1) Todas las características de los organismos pueden alterarse cambiando los genes;
siempre y cuando podamos aprender a cambiar los genes adecuados.
(2) Todas las características pueden alterarse cambiando las condiciones ambientales bajo las
cuales se desarrolla el organismo; siempre que aprendamos qué condiciones cambiar y
cómo cambiarlas.
(3) Cualquier tipo de cambio de características que pueda ser inducido por la alteración de
genes, también puede ser inducido (si sabemos cómo) alterando las condiciones. (Esta
declaración está abierta a más dudas que las otras dos, pero es probable que
eventualmente se encuentre correcta.) ...

X. La falacia de que, dado que todas las características humanas son hereditarias, la herencia es de
suma importancia en los asuntos humanos, por lo tanto, el entorno carece de importancia...

XI. La falacia de que todas las características humanas importantes son ambientales, por lo tanto,
el entorno es todo lo que importa, la herencia no tiene importancia en los asuntos humanos. (241)
H. S. JENNINGS

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