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Tema:

DINÁMICA DE LA CIC Y LA CIA, Y COMO INFLUYE EN EL PH EN UN


DETERMINADO SUELO

1. FRACCIÓN COLOIDAL

Los coloides del suelo están representados por la Arcilla (coloide


mineral y el Humus (coloide orgánico), partículas con un diámetro menor a 2µ.

1.1. características generales de los coloides del suelo


• Las partículas más grandes (no coloidales), como el caso de la arena y
limo, a causa de su pequeña área de superficie, son inactivas
químicamente.
• La arena y el limo, en su mayor parte, están conformados por minerales
primarios a base de sílice, finamente molidos y no modificados.
• En cambio, la arcilla está compuesta predominantemente por minerales
secundarios.
• La actividad química del suelo reside o radica en las partículas coloidales
(arcilla y humus).
1.2. La arcilla como coloide mineral y coloides orgánicos:

Los componentes arenosos del suelo están revestidos de una especie


de cola que los reúne en pequeños agregados y que determinan la estructura
del suelo, cuya forma y solidez dependen de la proporción de los componentes
que lo constituyen y principalmente de la pasta que se denomina genéricamente
coloides del suelo.

Entre estos coloides, algunos provienen de la alteración de la roca madre


(coloides minerales), como en e l caso de las arcillas. Otros se producen durante
la descomposición de la materia orgánica o coloides orgánicos, como el humus.
Dado que normalmente estos coloides se presentan mezclados, pero tienen
propiedades comunes, es posible presentar aquí algunas de sus características.
1.3. Propiedades de un coloide

Un coloide es una suspensión de partículas diminutas de una sustancia


(llamada fase dispersa) en otra fase (llamada fase continua) o medio de
dispersión. A esta suspensión se la denomina suspensión coloidal. La diferencia
entre solución verdadera y suspensión coloidal o falsa solución es que la
verdadera no presenta el efecto Tyndall, consistente en la dispersión de un haz
luminoso por las partículas coloidales de mucho mayor tamaño que los iones
independientes que conforman una verdadera solución (Figura 1). Además,
cuando el solvente de la solución verdadera se evapora, los cristales disueltos
(sales y otros solutos) recobran bruscamente el estado sólido. Los coloides del
suelo pasan por una serie de estados cuando se evapora el agua. Son fluidos en
presencia de una buena cantidad de agua, pastosos en el barro y sólidos en la
tierra seca.

Figura 1: El efecto Tymlall pone en evidencia la presencia de micelas


coloidales

Los coloides pueden estar dispersos o floculados. Las micelas (o


microcélulas) coloidales están rodeadas de una densa capa de cargas eléctricas
del mismo signo: negativas para los coloides electronegativos (arcillas, humus,
complejos Fe-Si) y positivas para los coloides electropositivos (óxidos de Fe,
óxidos de Al) (Figura 2)
figura 2: Dispersión y floculación de las micelas coloidales en un medio
líquido.

Esta densa capa está rodeada, hacia el exterior, de una nube cada vez
más laxa de capas de signo contrario constituidas por iones adsorbidos o fijados
por el coloide. Para la arcilla y e l humus, coloides electronegativos, estos iones
positivos pueden se r H+, los cationes metálicos Ca2+, Mg2+, K+ Y Na+, y el
catión NH+. (figura 3)

Figura 3: coloide mineral y orgánico


2. CAPACIDAD DE INTERCAMBIO CATIÓNICO (CIC)
Esta propiedad química del suelo se refiere a la cantidad total de cargas
negativas que están disponibles sobre la superficie de las partículas en el suelo.
También se puede definir como el número total de cationes intercambiables que
un suelo en particular puede o es capaz de retener (cantidad total de carga
negativa). Conocer la Capacidad de Intercambio Catiónico (CIC) de un suelo es
fundamental, pues este valor nos indica el potencial de un suelo para retener e
intercambiar nutrientes. Además, la CIC afecta directamente la cantidad y
frecuencia de aplicación de fertilizantes.
La mayor influencia sobre la CIC viene de las arcillas del suelo y de la
materia orgánica. La arcilla tiene una capacidad de 10-150 cmol(+)/kg, mientras
que la materia orgánica tiene una capacidad de 200-400 cmol(+)/kg, es decir la
materia orgánica tiene más alta CIC. Los cmol(+)/kg = meq/100g. Los aportes de
materia orgánica además de provocar un incremento en la CIC, también mejoran
las propiedades físicas del suelo, incrementa la infiltración de agua, mejora la
estructura del suelo, provee de nutrimentos a la planta y disminuye las pérdidas
por erosión.
2.1. CIC en diferentes tipos de suelos
Por lo general, los suelos con alta CIC, son aquellos con altos contenidos
de arcilla y/o materia orgánica. La alta CIC les brinda mayor capacidad para
retener nutrientes, eso normalmente los hace más fértiles. En el cuadro 1 se
pueden apreciar las CIC para diferentes tipos de arcillas, comparadas con la
materia orgánica y para diferentes texturas del suelo.
Los denominados cationes del suelo son el K+, Ca2+, Mg2+, Na+, Al 3+
y H+. Estos cationes son los predominantes en los suelos agrícolas y pueden ser
reemplazados por otros cationes presentes en la solución del suelo. El NH4+,
Fe2+, Mn2+ y Cu2+ son otros nutrientes que presentan carga positiva pero se
encuentran en cantidades muy pequeñas. En relación al contenido de estos
cationes intercambiables, la cantidad de estos en la solución del suelo es muy
pequeña comparando con la cantidad que se retiene en las arcillas. Entonces la
mayor proporción de cationes están adheridos a las superficies de las partículas
del suelo, y los cuales están en equilibrio con la solución del suelo. La CIC, por
lo tanto, proporciona una reserva de nutrientes para reponer los nutrientes que
fueron absorbidos por las plantas o lavados de la zona radical. (Figura 4)

Figura 4: tipos de coloides

2.2. Influencia de la CIC en suelos ácidos


Cuando en un suelo el pH es menor de 5.5 ocurre la presencia de
Aluminio (Al +++), elemento que es nocivo para las plantas, ya que afecta
fuertemente al sistema radical (Figura 3). A la suma del Al +++ e H+ se le
denomina acidez intercambiable. Por lo tanto, cuando está presente el aluminio
en el suelo, el % de saturación de bases (Ca, Mg, Na y K) es menor de 100. Por
otro lado, en suelos neutros y alcalinos la saturación lo dan el Ca, Mg, Na y K
(aproximadamente), ya que el Al no está en una forma asimilable por las plantas.
En otras palabras, en suelos ácidos el 100 % de la saturación es igual al % de
saturación de bases + % de acidez intercambiable.
Figura 5: efecto del contenido de Al sobre el potencial de rendimiento en
el cultivo del maíz.

2.3. CAPACIDAD DE INTERCAMBIO ANIÓNICO (CIA)

• Según Sanchez (1981), esta capacidad es importante en aquellos suelos


con altos contenidos de sesquióxidos de Fe y Al. Esto generalmente
ocurre en suelos tropicales.
• Moormann (1986) y Bohg et (1993) también han establecido que este tipo
de intercambio es de magnitud importante en suelos tropicales
fuertemente intemperizados, sobre todo pH bajo.
• La partícula y/o coloide retiene en su superficie cargas positivas (coloide
electropositivo)
• Los aniones y las moléculas de comportamiento aniónico mas importante
son:
Figura 6: elementos positivos en la superficie de un coloide.

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