Nombre del Alumno: FERNANDEZ ABEL

Carrera: TECNICATURA EN EMERGENCIAS

Asignatura: Recursos Humanos
Instancia: Trabajo integrador

SISTEMA DE SALUD EN ARGENTINA

Análisis situacional

Analizando la situación actual en el contexto de pandemia por Covid-19 (SARS Cov2) todo el personal
de salud desde enfermeros, médicos y técnicos pasaron a ser los protagonistas principales en realizar
las acciones esenciales para afrontar dicha situación. Dada la complejidad y novedad de las
diferentes variables, tanto sanitarias como sociales se valora primordialmente la comunicación entre
los diferentes actores y la comunidad. También hay que reconocer el rol del técnico en emergencias
en los diferentes planes que buscaban detectar y atenuar los efectos del virus. Uno de esos proyectos
fue el plan DETECTAR que consiste en hisopar a la comunidad para la detección temprana de los
infectados y así reducir el contagio masivo por contacto estrecho. El voluntariado promovido por la
Universidad Nacional Arturo Jauretche en colaboración con el Hospital del Cruce y la Dirección
Nacional de Emergencia Sanitarias (DINESA), junto con el Ministerio de Salud demostró la capacidad
de respuesta ante esta situación sanitaria por medio de operativos tácticos de detención y
seguimiento de los casos positivos. Estos se realizaron a través de campañas de vacunación,
hisopados, testeos rápidos y seguimiento telefónico.
Siguiendo este punto de intervención de personal de salud vamos plantear diferentes herramientas
que nos ayuden a lograr un trabajo efectivo en el manejo de esta situación adversa tan compleja.

Plan de trabajo

Comunicación:
Hay dos actitudes que no pueden faltar en una comunicación efectiva y estas son la “escucha activa” y
la “empatía”. Los pacientes que atraviesan situaciones de estrés necesitan que el personal de salud
les brinde una contención emocional y verbal para que comprenda las recomendaciones otorgadas
por los profesionales.

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En materia de salud pública se habla de la medicalización y modelo biologisista de la atención medica
que consiste en tratar al paciente solo desde el aspecto biológico sin tener en cuenta que la salud
abarca un aspecto integral del individuo. Y en consecuencia no se puede generar un vínculo entre el
profesional y el paciente. Por eso la comunicación efectiva comienza con un interés profesional y
humano entre ambos.

Trabajo en Equipo:
El trabajo en equipo es esencial para resolver situaciones complejas y que demandan mucha labor de
parte de los profesionales. El trabajo en equipo es distinto a un grupo ya que tiene objetivos
marcados, responsabilidades y complementariedad de las competencias individuales. El trabajo en
equipo es fundamental en este tipo de emergencia sanitaria porque optimiza recursos tanto humanos
como físicos y puede prever la falta de suministro de algún tipo.

Inteligencia emocional:
En nuestro puesto de trabajo estamos constantemente expuestos a emociones que pueden afectar
nuestro desempeño laboral y emocional. Y cuando no se planifica la gestión de emociones puede
afectar, incluso, nuestra vida personal. El manejo de las emociones es una herramienta que debe
practicarse y desarrollar para utilizarla como estilo de vida. Un profesional de salud puede perder su
matrícula por dejarse llevar por la ira en una situación de mucho estrés. El autocontrol, la respuesta
pasiva y canalizar emociones son parte de la inteligencia emocional.

Liderazgo:
Creo que hay dos tipos de líderes: el natural o el autoimpuesto. El verdadero líder es aquel que a
través de ejercer su autoridad en el grupo puede influenciar de manera positiva el desempeño de
cada individuo. La idea de liderazgo no está representada por un orden vertical de órdenes
jerárquicas sino una interacción por medio de la motivación, comunicando cual es la visión y misión
del equipo con objetivos claros y bien definidos.
Su perfil es caracterizado por la amabilidad, optimismo, crítica constructiva y además debe reconocer
las competencias de cada individuo y fomentar el compañerismo.
En los tiempos de pandemia con cambios tan acelerados es preciso que el liderazgo acompañe estas
situaciones nuevas e inesperadas. Por eso todo líder responsablemente debe tomar una actitud de
cambio y planificar, coordinar y evaluar la metodología de acción. Por ejemplo en un hospital sanitario
los técnicos en emergencias encargados de la logística deben adaptarse a las diferentes situaciones de
cambio como la llegada de una vacuna de diferente tecnología que necesite otro tipo de conservación

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o temperatura para preservar la cadena de frio. Por eso este líder debe comunicar al equipo de una
manera efectiva y confiar en el talento de los subordinados para afrontar la exigencia de nuevos
desafíos.
El líder debe general una cultura de equipo utilizando la comunicación efectiva, inteligencia emocional
(escucha activa y empatía) y trabajo en equipo.

Negociación:
Es una disciplina necesaria en cualquier organización y no es una excepción en salud. La vemos
actualmente con la importación de vacunas de los diferentes países e internamiento con el Gobierno
Nacional y las provincias. Pero además llega a cada eslabón de la cadena de mando. Por eso el
negociador en ese intercambio debe buscar la solución más justa que pretendes los diferentes
actores.
Los modelos van variando según la necesidad en cada área pero creo que el mejor estilo y
conveniente es generando confianza a través de la honestidad. Es importante que en salud se genere
un vínculo de confianza mutua por medio de la negociación integrativa. Cuando nos toca lidiar con un
paciente difícil se debe evitar los conflictos manifestando los deseos y necesidades para llegar a un
acuerdo siempre respetando la integridad física y emocional del paciente.

Factores a mejorar

Para mejorar la comunicación propondría charlas continuadas a través de medios digitales como
Zoom, Google Meet para discutir los diferentes puntos de vista y las consideraciones sobre el trabajo
realizado en campo.
Se podrían implementar encuestas de satisfacción de los pacientes para evaluar la calidad de
atención. Esto sumado a una auto-evaluación del equipo interdisciplinaria nos dará información real
de como realizamos nuestro trabajo y permitir la mejora continua en la calidad asistencial.
El trabajo en equipo interdisciplinario puede reunirse en salas de simulación para mejorar la
practicidad y la división de roles según las capacidad individual. Esto perfeccionaría el accionar del
equipo en la escena de emergencia.
Creo que sería conveniente realizar terapia de grupo para aprender el manejo de las emociones por
medio de un psicólogo y personal entrenado que comparta su experiencia.
Para reforzar el liderazgo y coaching se proponen cursos de trabajo en equipo en situación real para
ejercer las habilidades todos los actores. Además de ejercer el dialogo y la cooperación del equipo.

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En el caso de la negociación considero que el conocimiento y la información como el capital humano
es una ventaja comparativa entre las diferentes organizaciones. Por eso como dice el dicho popular:
“el conocimiento es poder” toma gran valor a la hora de negociar estratégicamente.
Finalmente creo que para llegar a una meta y objetivos claros debe mejorar la actitud personal y
grupal por medio de todas estas herramientas. Y aunque pueden cambiar los métodos de
implementación debe conservarse el concepto de cada una de ellas respetando la libertad de
expresión de cada participante y apelar a la tolerancia y solidaridad grupal.

Objetivos

El objetivo principal que se desprende del análisis situacional debe contener las siguientes pautas.

 Trabajo en equipo interdisciplinario en contexto de pandemia.

 Comunicación efectiva entre todos los actores intervinientes. Desde el centro operativo como
las unidades móviles.
 Generar un ambiente de buen clima laboral desarrollando la inteligencia emocional de cada
individuo tanto sea en una sala de guardia como en la atención pre-hospitalaria.
 Liderar y fomentar el liderazgo entre los diferentes equipos para lograr una gestión y calidad
de atención óptima. Por ejemplo en el plan DETECTAR con la comunidad.
 Negociar conociendo las necesidades, expresando los objetivos, tolerando y respetando el
proceso y tiempo de negociación desde los recursos humanos con el hospital o la base de
despacho hasta los recursos materiales y económicos que provea el Ministerio de Salud u otro
organismo de financiación.