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Módulo 1.

Política de Desarrollo Social con


enfoque de derechos.

Qué son los derechos.


Todas hablamos de la defensa de nuestros derechos, pero ¿a qué nos referimos
cuando hablamos de ellos?

Los derechos implican el reconocimiento de la facultad que se otorga a personas o grupos


para obtener y disfrutar de ciertos bienes o servicios, o bien de ejercer actividades o
conductas para beneficio propio, en razón de su nacimiento, nacionalidad, propiedades o
contratos, entre otras circunstancias que determinan su relación con las/los demás.

Así hay:
Cuando hablamos de los derechos que tenemos las personas por el solo hecho de serlo, así
como de los que son atribuibles a las/los ciudadanos al alcanzar esa condición, y en general a
todos los que corresponden o se asocian a la relación de los individuos con la colectividad y
con el Estado, estamos en el ámbito del derecho público. A éste corresponden los Derechos
Humanos y sus Garantías, consagrados en el Capítulo I del Título Primero de la Constitución
Política de los Estados Unidos Mexicanos, donde se establece que en México “todas las
personas gozarán de los derechos humanos reconocidos en la Constitución y en los tratados
internacionales de los que el Estado Mexicano sea parte, así como de las garantías para su
protección” (Artículo 1°).

Al respecto, para los efectos de este curso cabe destacar el derecho a la educación,
establecido en el Artículo 3°, que a su vez plantea la obligación del Estado (Federación,
estados, Ciudad de México y municipios) de impartir educación preescolar, primaria,
secundaria y media superior, considerando a los tres primeros niveles como obligatorios para
todas las personas. Dada esta obligatoriedad, a quienes habiendo cumplido 15 años o más
(edad en la que tendrían que haber terminado la educación secundaria), no saben leer
ni escribir y/o no han iniciado o concluido su educación primaria o secundaria, se les
considera en situación de Rezago Educativo.

Por su parte, entre otras libertades y garantías, el Artículo 4° establece que –en México– toda
persona tiene derecho a la alimentación nutritiva, suficiente y de calidad, así como a la
protección de la salud; asimismo, toda familia tiene derecho a disfrutar de vivienda digna y
decoros

Es importante destacar y retener estos derechos, en virtud de que son la base constitucional
desde la que se identifican los derechos para el desarrollo social identificados en el artículo
6° de la Ley General de Desarrollo Social (LGDS):
o educación,
o salud,
o alimentación,
o vivienda,
o el disfrute de un medio ambiente sano,
o el trabajo,
o la seguridad social y
o los relativos a la no discriminación.
Algunos de estos derechos serán recuperados en el artículo 36 de la misma Ley
como indicadores para evaluar la política social, dar cuenta de sus avances y realizar la
medición multidimensional de la pobreza.
¿Qué otros documentos conoces en los que podamos consultar nuestros derechos y
obligaciones?
Además de la Constitución y la LGDS, existen una serie de reglamentaciones y
documentos en los que se abordan asuntos específicos, es buena idea buscar asesoría
para conocerlos, de acuerdo con nuestra área de interacción.
Módulo 1. Política de Desarrollo Social con
enfoque de derechos.

1.2. Qué son las Políticas


Públicas
¿Cuáles son los indicadores que permiten generar acciones por parte del gobierno
para satisfacer las necesidades existentes?
De acuerdo con Bernard Crick(1), “la política es el resultado de la aceptación de la
existencia simultánea de grupos diferentes y, por tanto, de diferentes intereses y
tradiciones dentro de una unidad territorial sujeta a un gobierno común... es la actividad
mediante la cual se concilian intereses divergentes dentro de una unidad de gobierno
determinada, otorgándoles una parcela de poder proporcional a su importancia para el
bienestar y la supervivencia del conjunto de la comunidad.” 
Si la política es el resultado del conflicto en sociedades cada vez más complejas, diversas
y divergentes, e implica  su administración y conciliación en un contexto de participación
social, las políticas son las formas específicas con que lo hace cada gobierno.
Una política es un comportamiento propositivo, intencional, planeado… (que se) pone en
movimiento con la decisión de alcanzar ciertos objetivos a través de ciertos medios: es una
acción con sentido. Es un proceso, un curso de acción que involucra todo un conjunto
complejo de decisiones y operadores.”(2)
Ruiz López, Domingo y Carlos Eduardo Cadénas Ayala

A diferencia de lo que podríamos identificar como “políticas privadas”, como la política de


servicio postventa de una distribuidora automotriz, o la de reclutamiento y selección de
personal de una fábrica, las políticas como formas específicas de ejecutar acciones de
gobierno son consideradas públicas porque:
Así, las políticas públicas son “aquellas decisiones y acciones legítimas de gobierno que
se generan a través de un  proceso abierto y sistemático de deliberación entre grupos,
ciudadanos y autoridades con el fin de resolver, mediante instrumentos específicos, las
situaciones definidas y construidas como problemas públicos”(3)
Con base en estas definiciones, podemos continuar delineando el sentido de nuestro curso:
conforme a los datos que aporta el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de
Desarrollo Social (CONEVAL), en el año 2014 el 18.7% de la población se encontraba en
situación de rezago educativo; 18.2% carecía de acceso a los servicios de salud y 58.5%, casi
seis de cada diez mexicanos, no tenían seguridad social; 12.3% no tenían acceso a una
vivienda digna; 21.2% carecían de acceso a servicios básicos en la vivienda y 23.4% –28
millones de personas– sufrían carencias por acceso a la alimentación. Además, 22.1% de
las/los mexicanos conjuntaban al menos tres de esas carencias que, vistas desde su reverso,
son derechos a los que no tienen acceso(4). He aquí un conjunto de problemas de justicia
social, que pueden detonar conflictos y que requieren acciones de gobierno con participación
de las/los ciudadanos.

¿Además de la información proporcionada por el CONEVAL, en tu experiencia en campo,


qué otras áreas de oportunidad has observado que pueden ser pieza importante en el
trabajo de tu organización?
La información del CONEVAL es un importante indicador que nos permite relacionar un
amplio abanico de oportunidades para generar proyectos que podamos realizar con
nuestras organizaciones

Bibliografía 
 Crick, Bernard. “En Defensa de la Política”. Ed. Tusquets. Barcelona, 2001. Páginas 19 y 22.
(1)
(2)
 Ruiz López, Domingo y Carlos Eduardo Cadénas Ayala. “¿Qué es una Política Pública?” IUS
Revista Jurídica, Universidad Latina de América. Disponible
en:http://www.unla.mx/iusunla18/reflexion/QUE%20ES%20UNA%20POLITICA%20PUBLICA
%20web.htm
(3)
Arellano Gault, David y Felipe Blanco. “Políticas Públicas y Democracia”. Primera edición INE, 2016.
Pág. 36.
(4)
 CONEVAL. Porcentaje, Número de Personas y Carencias Promedio por Indicador de
Pobreza, 2012-2014. Disponible
enhttp://www.coneval.gob.mx/Medicion/MP/PublishingImages/Pobreza_2014.jpg
1.3 Qué es la Política Social.
¿Qué tan necesaria es la intervención del gobierno para la distribución más
equitativa de los bienes? 
El mercado es el conjunto de transacciones; es decir, de operaciones de compra-venta o
de intercambio de productos, mercancías o servicios, que se da entre individuos o grupos
de personas, donde unos ofrecen dicho bien o servicio porque lo tienen en demasía, o
porque lo adquirieron o produjeron para su venta (oferta), y otros lo requieren porque no lo
tienen, no pueden producirlo y lo necesitan (demanda). En una economía de libre
mercado, éste es el mecanismo por excelencia para producir y distribuir riqueza; sin
embargo, los actores que participan en los mercados no lo hacen sino con la perspectiva
del beneficio propio y difícilmente permiten el sacrificio de éste en aras del bienestar de la
comunidad, por lo que es fácil que el mercado se convierta también en un proceso
proclive a la especulación, la acumulación de riqueza y el reparto desigual de
oportunidades de desarrollo.
En razón de lo anterior, el Estado interviene, con una lógica diferente a la de las fuerzas del
mercado, buscando mejorar las condiciones de vida de quienes resultan afectados o excluidos
por dichas fuerzas y contener o reducir las diferencias o posibles confrontaciones entre los
diversos grupos sociales. El Estado, entonces, interviene en el mercado mediante políticas
distributivas que consisten, básicamente en la recuperación de una parte de la riqueza
generada en los mercados, a través de impuestos, cobros de servicios y contribuciones, y su
traslado a la colectividad mediante subsidios a productos de consumo popular, la regulación
de precios, o el otorgamiento de transferencias en dinero o en especie a las personas más
necesitadas, así como la producción y el ofrecimiento de servicios y bienes públicos. Este es
el origen de la Política Social.

La política social “comprende los fines y los objetivos de la acción social, las leyes, los
programas y las acciones evaluables del gobierno, tomadas por una serie de consideraciones
políticas para responder a un cierto número de carencias mediante mecanismos de
redistribución progresiva de los ricos a los pobres, según las necesidades” (1)
Elaine Carey Bélange
La política social es la suma de las políticas públicas destinadas a la redistribución de la
riqueza, el consecuente abatimiento de la pobreza y la construcción de bienestar social, y
está compuesta por aquellas políticas, estrategias, proyectos, programas y acciones
de gobierno, que se concretan en la oferta de bienes y servicios, en transferencias de
ingreso y en mecanismos de regulación, que buscan garantizar el pleno ejercicio de los
derechos sociales por parte de la población en su conjunto, mejorar las condiciones
de vida de la población y alcanzar el bienestar social, atenuando la pobreza y a la
desigualdad.
En sentido más amplio, se puede decir que la política social busca proteger a las/los
ciudadanos mediante la seguridad  social, que tiene como idea la solidaridad con
los individuos, familias y grupos en determinadas situaciones de dependencia o vulnerabilidad,
como la incapacidad para ganarse la vida por cuenta propia derivado de factores externos,
que no dependen de la voluntad individual; la vulnerabilidad asociada al ciclo vital del ser
humano –niños y ancianos, por ejemplo– y situaciones de riesgo como en caso de invalidez
por accidente, y realizar la promoción social mediante la generación de oportunidades y de
resultados para individuos y/o grupos sociales.

Es muy importante el trabajo que hacemos con grupos vulnerables, pero ¿Qué entiendes
por ello?
Son sectores o grupos de la población que por su condición de edad, sexo, estado civil y
origen étnico se encuentran en condición de riesgo que les impide incorporarse al
desarrollo y acceder a mejores condiciones de bienestar.

Bibliografía:
 Carey Bélanger, Elaine. “¿Qué Porvenir para la Política Social?”. Revista de Trabajo Social
(1)

editada por el Departamento de Servicio Social de la Facultad de Ciencias Sociales de la


Universidad de Concepción, Chile. Volumen 1. No. 2, diciembre de 1998-junio de 1999.
Disponible en:http://www2.udec.cl/~ssrevi/numero2/index.html
1.4 Qué es la política social
basada en derechos.
¿Cómo se articulan la política social y los derechos, para beneficio de la sociedad? 
La actual política social del Gobierno de la República, –en concordancia con los postulados de
la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y la Ley General de Desarrollo
Social (LGDS)– busca superar la pobreza y cerrar las brechas de desigualdad, mejorando
las condiciones de vida de las personas y grupos en condiciones de pobreza y/o
vulnerabilidad, a través de servicios públicos, programas, proyectos, acciones y, en general,
beneficios sociales ofertados por el Gobierno Federal y, en su caso, por la sociedad civil
organizada, en corresponsabilidad y con el fomento de éste, con un enfoque basado en el
reconocimiento y el ejercicio pleno de todos los derechos sociales para toda la población, la
democratización de la productividad y la creación de ciudadanía.

La política social mexicana ha transitado a lo largo de su historia desde la caridad, ejercida por
los particulares y las congregaciones religiosas para ayuda de los enfermos y los más
necesitados, en la época colonial y los primeros años del México independiente, a la
beneficencia como servicio público y responsabilidad del Estado en el gobierno del Presidente
Benito Juárez; la creación de instituciones de seguridad y bienestar social (salud, educación,
asistencia pública y privada, vivienda), marcada por un régimen corporativista, que privilegiaba
a los integrantes de los sindicatos, organizaciones campesinas y gremiales vinculados con el
Gobierno en el acceso a los beneficios sociales en el México postrevolucionario, y los
programas sociales, basados principalmente en la transferencia de recursos a las personas en
situación de pobreza o vulnerabilidad, en ocasiones manejada como dádiva gubernamental,
hasta llegar a la política social basada en derechos que postula el actual Gobierno.

Para llegar a esto ha sido necesaria una evolución legislativa en la que, en buena medida
gracias al activismo y la participación de la sociedad civil organizada, se han promulgado
diversas leyes que reconocen y garantizan diversos derechos sociales. Para los efectos de
este curso, importa destacar la Ley General de Educación (1993), la Ley General de Salud
(1984), las leyes del Seguro Social (1995) y del ISSSTE (2007), la Ley de Vivienda (2006) y,
en especial, la Ley General de Desarrollo Social (2004), cuyo artículo 6° identifica como
derechos para el desarrollo social a la educación, salud, alimentación, vivienda, el disfrute de
un medio ambiente sano, el trabajo, la seguridad social y los relativos a la no discriminación.
Algunos detalles y aplicaciones específicas de estas leyes serán revisados en las siguientes
unidades del curso.

Sin embargo, para explicar el poder y alcance del concepto de “Política Social basada
Derechos”, es importante partir de la plena inclusión de los Derechos Humanos en el
ámbito constitucional mexicano; en efecto, en junio de 2011 se concretó una reforma
constitucional que cambió el nombre del Capítulo I del Título Primero de la Constitución,
pasando de “Garantías Individuales” a “De los Derechos Humanos y sus Garantías”,
de manera que todos los contenidos de ese Capítulo fueron reconocidos
constitucionalmente como derechos humanos. De acuerdo con la definición de la
Comisión Nacional de los Derechos Humanos, éstos son:
“El conjunto de prerrogativas inherentes a la naturaleza de la persona, cuya realización
efectiva resulta indispensable para el desarrollo integral del individuo que vive en una
sociedad jurídicamente organizada.” (1)
Comisión Nacional de los Derechos Humano
Los Derechos Humanos protegen a todas las personas por el solo hecho de existir; son
universales e inalienables, todas/os, sin excepción ni discriminación, debemos ejercerlos y
tener pleno acceso a disfrutar de sus beneficios.

El propio Artículo 1° constitucional establece que en nuestro país:

Aplicando lo anterior, si como hemos dicho, el Artículo 3° constitucional establece el Derecho


Humano a la educación, en tanto que el Artículo 4° consagra los Derechos Humanos a la
alimentación la salud y la vivienda, entre otros, y –aunque en el Título Sexto–  el Artículo 123
plantea el derecho a la seguridad y la previsión social, se entiende que éstos son Derechos
Humanos que pueden y deben ser reclamados por todas/os los mexicanos; el Estado tiene la
obligación de procurarlos y garantizarlos, y su carencia implica una violación a éstos y un
incumplimiento constitucional que debe ser reparada por el mismo Estado.

¿Cuáles son los derechos humanos que garantiza constitucionalmente el Estado


Mexicano?
Entre otros, la salud, la vivienda, la seguridad, seguridad social, el trabajo, medio
ambiente sano, no discriminación, principalmente.
Referencias:

 Ver la páginahttp://www.cndh.org.mx/Que_Son_Derechos_Humanos
(1)
1.5 Derechos/carencias que
fundamentan la política social y
miden su avance.
¿Cuáles son los derechos que garantiza el Estado Mexicano? 

Los Derechos Humanos que por mandato constitucional el Estado Mexicano está obligado a
garantizar y, en su ausencia, a reparar, abarcan aspectos fundamentales para la convivencia
de las personas en una sociedad libre, justa y democrática:

Sin embargo, los específicamente identificados como derechos para el desarrollo social por


la Ley General en la materia (LGDS, artículo 6°) son: la educación, la salud, la alimentación, la
vivienda, el disfrute de un medio ambiente sano, el trabajo y la seguridad social, así como los
relativos a la no discriminación. El ejercicio pleno de estos derechos, junto con la
disponibilidad de los recursos económicos necesarios para solventar las necesidades
personales y familiares, debe ser suficiente para que las personas desarrollen sus
potencialidades y tengan acceso a oportunidades diversas para construir y realizar un
proyecto de vida; por el contrario, el déficit o la pérdida en el disfrute de estos derechos deja a
las personas en condiciones de vulnerabilidad social, carencia de oportunidades y pobreza.
Así, el reverso de los derechos sociales; esto es, las carencias sociales, son elementos
definitorios y constitutivos de la pobreza. 
“Desde una perspectiva multidimensional, puede entenderse la pobreza como una serie de
carencias definidas en múltiples dominios… El número y el tipo de dimensiones a considerar
están directamente asociados a la forma en que se conciben las condiciones de vida mínimas
o aceptables para garantizar un nivel de vida digno para todos y cada uno de los miembros de
una sociedad.”(1)
CONEVA
Al respecto, la propia LGDS, en su artículo 36, establece como indicadores para definir e
identificar la pobreza prácticamente los mismos derechos planteados en el artículo 6°.
Dichos indicadores son retomados por el CONEVAL en su Metodología para la medición
multidimensional de la pobreza, según se muestra a continuación: 
INDICADORES PARA DEFINIR
DERECHOS SOCIALES METODOLOGÍA PARA LA
E IDENTIFICAR LA POBREZA
MEDICIÓN MULTIDIMENSIONAL
Artículo 6° de la LGDS DE LA POBREZA DEL CONEVAL
Artículo 36º de la LGDS

  I. Ingreso corriente per cápita.


Línea de bienestar.(2)
II. Rezago educativo promedio en
La educación. Rezago educativo.
el hogar.
La salud. III. Acceso a los servicios de salud. Acceso a los servicios de salud.
El trabajo y la seguridad social. IV. Acceso a la seguridad social. Acceso a la seguridad social.
V. Calidad y espacios de la
Calidad y espacios de la vivienda.
vivienda.
La vivienda.
VI. Acceso a los servicios básicos Acceso a los servicios básicos en la
en la vivienda. vivienda.
La alimentación. VII. Acceso a la alimentación. Acceso a la alimentación.
El disfrute de un medio
   
ambiente sano.

La no discriminación.    

  VIII. Grado de cohesión social.


Grado de cohesión social.(3)
IX. Grado de Accesibilidad a
  Acceso a infraestructura social
carretera pavimentada.
básica.(3)
En este curso nos referiremos con detalle a los seis derechos/carencias destacados
con negritas y cursivas, en razón de que son aquellos en que es más viable la participación
de la sociedad civil con proyectos y acciones con impacto social verificable, aunque
finalizaremos el curso con una revisión del concepto de Cohesión Social que, desde nuestro
punto de vista, es resultado del acceso y disfrute de los derechos sociales.

¿Por qué piensas que en el curso enfocaremos los tema en algunos de los indicadores y
no a todos por igual?
Consideramos que es se tratan de identificadores en los que puede haber mayor
participación por parte de actores de la sociedad civil.
Referencias:
 CONEVAL. “Metodología para la medición multidimensional de la pobreza en México”. Ed.
(1)

Autor. México. Disponible


en: http://www.coneval.org.mx/Informes/Coordinacion/INFORMES_Y_PUBLICACIONES_PDF/
Metodologia_Multidimensional_web.pdf 

 Recursos para adquirir los bienes y servicios requeridos para satisfacer sus necesidades
(2)

alimentarias y no alimentarias.

 Desde la perspectiva del CONEVAL, éstos son criterios asociados al contexto territorial.
(3)

Como parte del acceso a la infraestructura social básica se considera la existencia de un


camino pavimentado a no más de tres kilómetros de distancia.

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