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Tarea

1. ¿Qué es el Tabernáculo o el Mizcam? En sus tres partes.

Para saber que es el Mizcam según la Biblia, la palabra nos enseña que fue un


santuario terrenal inspirado por YHWY y ordenado para su construcción a
Moisés, según el diseño que le mostró en el monte Sinaí (Ex 25:40; 25:8-9). Fue
hecho por una ofrenda voluntaria del pueblo, es decir, una ofrenda de corazón, ya
que Dios deseaba un corazón bien dispuesto (Ex 25:2). Su propósito era mostrar
el deseo de Dios de habitar en medio de su pueblo (Ex 25:8).

También era conocido como Tabernáculo de Reunión y el lugar donde la


congregación de Israel llevaba sus ofrendas y sacrificios para presentarlos a
hashem, generalmente era un cordero o un animal puro y sin defectos, podían ser
chivos, becerros o toros, se presentaban a Dios por expiación de los pecados. (Lv.
4:13, 14, 15).

El Tabernáculo fue el lugar donde se manifestaba la presencia de hashem y


daba dirección a su pueblo (Lv. 9:23; Ex 33:9-11; Ex 40:34; Nú 20:6), mediante
una nube de día y fuego de noche (Ex 40:34-38).
LAS TRES PARTES DEL TABERNACULO

El tabernáculo terrenal estaba formado por tres partes: el atrio, el lugar santo y el
lugar santísimo.

EL ATRIO

El Atrio era lo que rodeaba el tabernáculo o la tienda. Era como un patio cerrado
por cortinas. Sus medidas eran de unos 50 metros de largo por 25 de ancho.
Estaba formado por una valla hecha de cortinas de lino fino, sostenidas por 60
columnas de bronce y fijadas al suelo mediante estacas y cuerdas. Las columnas
estaban hechas de dos materiales, bronce y plata y las cortinas de lino fino.

Los únicos dos objetos ubicados dentro del atrio del tabernáculo eran el altar del
holocausto y la fuente de bronce.  Estaban en línea recta entre la puerta del atrio y
la puerta del Lugar Santo, visibles a todas las tribus, los rituales allí eran de
carácter público, mientras que los utensilios del Lugar Santo solo eran vistos por
los sacerdotes.

LA PUERTA DEL ATRIO


Solo había una entrada o puerta al atrio. Era una cortina de veinte codos con
cuatro colores: azul, púrpura, carmesí y lino torcido. La cortina, que era la puerta
del atrio, estaba apoyada en cuatro columnas con sus cuatro basas.

EL ALTAR DE BRONCE
Lo primero que se veía al entrar al atrio era el altar de bronce, también llamado el
altar del sacrificio.

Estaba construido de madera de acacia, conocida por ser una madera


incorruptible y estaba recubierto de bronce.

En cada una de las esquinas del altar había un cuerno recubierto de bronce. Estos
servían para atar al animal que sería sacrificado.

El fuego sobre el altar nunca se apagaba, el sacerdote quemaba leña todas las
mañanas para mantener encendido el fuego del altar y quemar sobre él la grasa
de las ofrendas de paz.

El altar del atrio era el lugar de sacrificio. La palabra altar viene de un vocablo que
quiere decir matar, o lugar de matanza.

En el altar se sacrificaban diariamente dos corderos de un año. Uno en la mañana


y otro al atardecer.

 Era un altar de sacrificio, continuo, permanente.

LA FUENTE DE BRONCE

La fuente era el segundo objeto ubicado en el atrio del tabernáculo. Estaba entre
el altar del holocausto y el Lugar Santo. Los espejos de bronce de las mujeres de
Israel fueron usados como materia prima para construir la fuente.

Antes de entrar al lugar Santo, los sacerdotes tenían que estar seguros de que
había pureza absoluta en su persona y en sus vestiduras.
La fuente estaba llena de agua, y allí los sacerdotes lavaban las manos y los pies
cuando entraban al santuario para servir. La negligencia de cumplir esta
purificación tenía como consecuencia la muerte.

EL LUGAR SANTO

En Lugar Santo, estaban ubicados a mano derecha la mesa con los panes, a
mano izquierda el candelero de oro, y en el centro delante del velo del Lugar
Santísimo estaba el altar del incienso.

Todos los utensilios dentro del Tabernáculo eran de madera de acacia recubierta
de oro, a excepción del candelero que era oro puro.

Al Lugar Santo solo tenían acceso los sacerdotes, si previamente se habían


lavado en la fuente de bronce y si tenían puestas sus vestimentas sacerdotales.

EL CANDELERO DE ORO

Su función era mantener alumbrado permanentemente el santuario.

El candelero de oro estaba colocado a la izquierda del santuario. 


Era un candelero de siete brazos. Estaba hecho de oro puro, de este salían
simétricos tres brazos a cada lado, que con el del centro formaban los siete brazos
que contenían siete lámparas que debían arder día y noche.

El sacerdote debía Llenarlo de aceite cada día y limpiar los restos de impureza.

LA MESA DE LOS PANES DE LA PROPOSICION

La mesa de los panes de la proposición o de la “presencia” estaba ubicada a


mano derecha en el Lugar Santo y era una mesa hecha de madera de acacia,
cubierta de oro.

En esta mesa había permanentemente doce panes, dispuestos en dos hileras de


seis, los cuales se renovaban cada sábado. Eran panes sin levadura y solo
estaban autorizados a comerlos los sacerdotes cuando eran cambiados cada
sábado.
EL ALTAR DEL INCIENSO

El altar del incienso, se hallaba situado  justo delante del velo que separaba el
lugar santo del santísimo. Estaba hecho de madera de acacia recubierta de oro.

Tenía argollas de oro en él para sujetar los palos de madera recubiertos de oro
que se usaban para llevar el altar y además tenía una corona de oro alrededor de
la parte superior y cuernos en cada esquina.

Sobre el altar había colocado un incensario dorado, que se usaba para poner el
incienso que quemaban delante de Jehová.

 Los sacerdotes quemaban el incienso aquí dos veces al día, por la mañana y por
la tarde, al mismo tiempo que volvían a rellenar el aceite del candelero y era
preciso que el incienso ardiese continuamente.

Este altar era solo para el incienso, no para el holocausto.

Dios prohibió ofrecer incienso extraño, diciendo: “No ofreceréis sobre él sahumerio
extraño, ni holocausto, ni presente; ni tampoco derramaréis sobre él libación”.

El término "incienso extraño" se refiere al incienso que no se quemaba conforme a


las instrucciones divinas.

Nadab y Abiú, hijos de Aarón, aunque eran sacerdotes consagrados, no


cumplieron el mandato de Jehová y perdieron su vida.
En Levíticos 10:1-2 leemos lo siguiente: Y los hijos de Aarón, Nadab y Abiú,
tomaron cada uno su incensario, y pusieron fuego en ellos, sobre el cual pusieron
perfume, y ofrecieron delante de Jehová fuego extraño, que él nunca les mandó. Y
salió fuego de delante de Jehová que los quemó, y murieron delante de Jehová.

Al parecer el fuego no procedía del altar de bronce, pues era importante que solo
se usase el fuego del altar de bronce para evitar que se tomase de un altar
pagano.

EL LUGAR SANTISIMO

Un velo separaba el Lugar Santo del Lugar Santísimo. Este velo era idéntico a las
dos cortinas anteriores: la del atrio y la del Lugar Santo.

Siglos después, cuando yeshua expiaba los pecados del mundo, al dar su último
aliento, la tierra no se pudo contener y un terremoto rasgó el velo del templo de
arriba abajo.

El único mueble que había en el Lugar Santísimo era el arca de la alianza o arca
del testimonio. Era una caja rectangular, hecha de madera que estaba cubierta de
oro por dentro y por fuera, y tenía anillos colocados en los ángulos, por los cuales
pasaban dos varas cubiertas de oro con que se transportaba.

Sobre el arca había una tapa de oro que se llamaba el “propiciatorio”, encima del
cual dos querubines de oro se miraban frente a frente, de pie, con sus alas
extendidas cubriendo el propiciatorio.

Dentro del arca se hallaban las dos tablas de la Ley, la vara de Aarón y una
porción de maná.

Algo milagroso es el hecho de que el maná si se dejaba de un día para otro se


dañaba, sin embargo, el que estaba dentro del arca nunca se dañó.
Al Lugar Santísimo solo el sumo sacerdote podía entrar una sola vez al año (el día
de la expiación). Se quitaba sus vestimentas oficiales y se vestía humildemente de
blanco; y como dato curioso debía llevar cuando estuviera ministrando campanillas
de oro para oír su sonido en el santuario. Cuenta la tradición que se le amarraba
una soga para halar al sumo sacerdote si moría en el Lugar Santísimo. Esta parte
no está registrada en la Biblia.

Después que se vestía para ministrar entraba llevando un incensario de oro y una
vasija con incienso. 

 Al poner incienso en los carbones encendidos, tomados previamente del altar,
una nube de humo cubría el propiciatorio del arca del pacto.

De la sangre del becerro sacrificado para expiación, el sacerdote tomaba con su


dedo y rociaba siete veces el propiciatorio, para purificar el santuario y expiar los
pecados del sacerdocio.

Luego, se echaban suertes sobre dos machos cabríos: uno era sacrificado, y con
parte de la sangre entraba el sumo sacerdote nuevamente en el Lugar Santísimo;
repetía la ceremonia del rociamiento y purificaba esta vez al pueblo. Después
ponía sus manos sobre la cabeza del otro macho cabrío, y el animal era llevado
lejos, a un lugar desierto, donde se le perdía.

2. Relación con el ser.


Cada uno de nosotros somos un tabernáculo, y tenemos la misma naturaleza
tripartita de nuestro Dios, así también nosotros somos de una triple naturaleza:
Los Atrios nos muestran la carne (el lugar de los gentiles), el lugar santo nos
muestra el alma, y el lugar santísimo nos muestra nuestro espíritu, pues es la
presencia de Dios, hechos a la misma imagen de Él (2ª Corintios 5.1-2

3. ¿Quiénes son las cosmocraturas?


κοσμοκράτωρ (kosmokratōr), ορος (oros), ὁ (ho): s.masc.; ≡ Strong 2888; TDNT
3.913-1. LN 37.73 el que gobierna el mundo (Efe 6:12+), para otra interpretación,
ver siguiente; 2. LN 12.44 poder sobrenatural (Efe 6:12+), para otra interpretación,
ver anterior

kosmokrator (κοσμοκράτωρ, G2888), denota un gobernador de este mundo


(contrastar con pantokrator, omnipotente). En la literatura griega, en los himnos
órficos, etc., y en escritos rabínicos, significa un gobernante de todo el mundo, un
señor del mundo. En el NT se usa en Efe 6:12 : «los gobernadores de las
tinieblas» (Besson: «potencias universales de las tinieblas»; RVR77: «los
dominadores de este mundo de tinieblas»). El contexto «No … contra carne y
sangre» muestra que no se trata aquí de potentados terrenos, sino de potencias
espirituales, que, bajo la voluntad permisiva de Dios, y como consecuencia del
pecado humano, ejercen una autoridad satánica y, por ello, hostil, sobre el mundo
en su actual condición de tinieblas espirituales y de alienación de Dios. La
traducción sugerida «los gobernantes de este tenebroso mundo» es ambigua y no
demandada por la fraseología. Cf. Jua 12:31; Jua 14:30; Jua 16:11; 2Co 4:4.¶

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