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Ensayo sobre el peligro y riesgo

Los peligros y riesgos laborales existen, y por ello, nuestro objetivo principal debe
ser reducirlos o incluso evitarlos a través de la prevención.

El peligro es el potencial o la capacidad que tiene una fuente, material o situación


de causar una lesión o enfermedad, un daño a la propiedad y/o paralización de un
proceso. Si hablamos de los peligros en el trabajo, podríamos decir que son todas
aquellas conductas, elementos o situaciones que pueden llegar a causar un
incidente y un posible daño a la salud del trabajador. Los peligros son identificables.

Por otro lado, el riesgo es la combinación de la probabilidad de que ocurra un evento


peligroso, en este caso en el trabajo, y las consecuencias y gravedad de no
controlarlo. Algo característico de los riesgos es que a éstos se les evalúan para
posteriormente clasificarlos. Nosotros podemos clasificarlos como riesgos altos,
intermedios o bajos.

Por ejemplo, un peligro podría ser el uso de una escalera en mal estado. La escalera
en sí es un peligro y nosotros fácilmente podemos identificarlo. ¿Y cuál sería el
riesgo? En este caso sería la probabilidad de que alguien se cayese y las
consecuencias que le sucederían tras ese penoso acto.

Si hablamos en el ámbito de la Odontología, podemos afirmar que es una profesión


sanitaria no exenta de riesgos para la salud de las personas que la ejercen. Como
se sabe, los odontólogos están constantemente expuestos a la sangre y los fluidos
del paciente, y, aunque sean conscientes de que los pacientes son potencialmente
una fuente de contaminación por diversos virus, bacterias y otros microorganismos,
no deja de ser un peligro potencial en el ejercicio de la profesión.

Antiguamente el principal ‘’peligro’’ ante un pinchazo accidental era la inoculación


del virus de la hepatitis B. En la actualidad, el mayor ‘’peligro’’ ante un pinchazo
accidental con sangre contaminada es la ‘’posibilidad’’ de adquirir el virus de la
hepatitis C.
La ‘’posibilidad’’ de contraer el VIH ante una inoculación accidental es remota,
dependería de la carga vírica del paciente y de nuestro estado inmunitario.

Para prevenir esos y más factores de riesgos laborales, debemos observar todas
las precauciones universales de la ADA (Asociación Dental Americana), es decir,
considerar a todos los pacientes como potencialmente infecciosos y utilizar medidas
de barrera (bioseguridad).

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