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Marcel Duchamp (AFI maʀsɛl dyˈʃɑ̃) (Blainville-Crevon, 28 de julio de 1887-Neuilly-

sur-Seine, 2 de octubre de 1968) fue un artista y ajedrecista francés.

Especialmente conocido por su actividad artística, su obra ejerció una fuerte


influencia en la evolución del dadaísmo. Al igual que el citado movimiento, abominó
la sedimentación simbólica en las obras artísticas como consecuencia del paso del
tiempo y exaltó el valor de lo coyuntural, lo fugaz y lo contemporáneo. Duchamp es
uno de los principales valedores de la creación artística como resultado de un puro
ejercicio de la voluntad, sin necesidad estricta de formación, preparación o
talento.1

Desde los años 1960 es considerado por numerosos historiadores y críticos de arte
como el artista más importante del siglo XX. André Breton lo calificaba de « hombre
más inteligente del siglo ». A través de invenciones como los ready-mades, su
trabajo y actitud artística siguen influyendo de forma considerable las diferentes
corrientes del arte contemporáneo.

Duchamp, que no pertenece a ninguna corriente artística precisa, tiene un estilo


único. Rompiendo los códigos artísticos y estéticos entonces vigentes, es
considerado como el precursor de algunos aspectos más radicales de la evolución del
arte desde 1945.
Índice

1 Biografía
1.1 Inicios artísticos en París
1.2 Etapa cubista
1.3 Viaje a Múnich y vuelta a París
1.4 Traslado a Nueva York
1.5 La Sociedad de Artistas Independientes y la Fuente de R. Mutt
1.6 La guerra
1.7 Buenos Aires y París
1.8 De vuelta en Nueva York
1.9 Veinte años (casi ininterrumpidos) en París
2 Obra
2.1 El ready-made
3 Véase también
4 Notas y referencias
4.1 Referencias
4.2 Bibliografía
5 Enlaces externos

Biografía

Nació el 28 de julio de 1887 en Blainville-Crevon, un pequeño pueblo francés donde


su padre, Eugène Duchamp, ejercía como notario y alcalde. Fue el tercero de seis
hermanos. Sus dos hermanos mayores, que adoptaron más tarde los nombres de Raymond
Duchamp-Villon y Jacques Villon, decidieron dedicarse al arte, quizás debido a la
influencia de su abuelo materno, que tras ganar una fortuna considerable como
agente marítimo se había retirado para dedicarse a sus principales aficiones, el
grabado y la pintura, llegando a exponer algunas obras en la Exposición Universal
de París (1878).

Como habían hecho sus hermanos mayores, a los que estaba muy unido, Marcel asistió
a clases de dibujo en el liceo. Su hermano Gaston (Jacques Villon) había alcanzado
cierta fama como pintor de carteles en París, en una época en la que descollaban
Henri de Toulouse-Lautrec y Alfons Mucha, y Marcel, que admiraba a su hermano,
trató de imitar su estilo en sus primeros dibujos.2. En el verano de 1902, con
catorce años, pintó sus primeros óleos, de influencia impresionista, en los que se
muestran paisajes de Blainville. También realizaría varios dibujos con diferentes
medios (acuarela, aguada, monotipo, lápiz) con un único tema: su hermana Suzanne,
dos años menor que él, que también se dedicaría a la pintura. En 1904 abandonó el
hogar paterno para marcharse al barrio parisino de Montmartre, donde vivió con su
hermano Gaston. Marcel, al igual que sus hermanos, disponía de una asignación
mensual que su padre le daba como adelanto de la herencia.
Inicios artísticos en París
M. Duchamp como Rose Selavy.

En 1904, Montmartre llevaba más de cincuenta años albergando a la comunidad


artística de París. Marcel se presentó al examen de la École des Beaux-Arts, que
suspendió. Se matriculó en una escuela privada, la Académie Julian, que abandonó
poco después por la vida en los cafés del barrio, donde, como era habitual en ese
momento, llevaba un cuaderno en el que dibujaba escenas de la vida cotidiana. Tras
su servicio militar en Eu, cerca de Ruan, volvió a París en 1906. Por aquel tiempo
realizó dibujos humorísticos, una actividad que gozaba de prestigio en la época. En
1907 se seleccionaron cinco de sus dibujos en el primer Salon des Artistes
Humoristes. En 1908 se eligieron, hoy en día desaparecidas, para el Salón
d'Automne, una importante exposición anual. Marcel pintó durante los años
siguientes con un estilo fauvista, del que Matisse era el abanderado. Aunque
Duchamp, muchas veces contradictorio en sus afirmaciones, en ocasiones rechazó la
influencia de Cézanne, en otras reconoció haber permanecido una larga temporada
bajo su influjo, bajo el que probablemente pintaría Retrato del padre del artista,
un retrato psicológico de su padre. Pintó más retratos por aquel tiempo, incluyendo
uno de su amigo el doctor Dumochel en el que exageró algunos rasgos físicos. A este
respecto, Duchamp comentó que fue un primer intento de dotar de humor a su obra.3
En 1910 pintó La partida de ajedrez, en la que aparecían sus dos hermanos jugando
al ajedrez en un jardín con sus mujeres abstraídas en sus cavilaciones. Al exponer
este cuadro junto a otros cuatro en el Salón d'Automne pasó a ser societaire, lo
que suponía el derecho a exponer sin ser examinado previamente por un jurado.

Aunque sus primeras pinturas mostraban talento, produjo pocas obras en comparación
a otros artistas. Fue ésta una época de titubeos y experimentación con varias
tendencias.
Etapa cubista

Era un tiempo de revoluciones artísticas: el collage de Picasso y Braque, el


futurismo, las obras de Alfred Jarry, la poesía de Apollinaire y el arte abstracto
de Vasily Kandinsky, Robert Delaunay y Piet Mondrian abrían al arte moderno. A
partir de 1911 Duchamp empezó a innovar más seriamente. Según Tomkins, el cuadro
que marca el inicio de esta etapa es Sonata.4 En la pintura, inspirada en el
cubismo de su hermano Jacques Villon, aparecen sus tres hermanas interpretando una
pieza musical y su madre, ajena. Tras experimentar con "un fovismo que no se basaba
únicamente en distorsión"4 en El matorral, pintó Yvonne y Magdaleine desmenuzadas y
Retrato (Dulcinea), en los que juega con los temas del movimiento y la transición,
temas mayores en la obra de Duchamp. En esta época tuvo una relación con Jeanne
Serre, según Gough-Cooper y Caumont la modelo de El matorral, con la que tuvo una
hija, aunque Duchamp no lo sabría hasta mucho más adelante.5 En aquella época quedó
cazado por el cubismo en sus visitas a la Galerie Kahnweiler, donde había lienzos
de Picasso y Braque. Como tanto Picasso como Braque rechazaron justificar el
cubismo con teorías o manifiestos, el grupo de nuevos cubistas en el que se
encontraban los hermanos Duchamp—con los que no se relacionaban Picasso ni Braque—
comprendieron su fundamento intelectual mediante las explicaciones de Jean
Metzinger. Este grupo se reunía en la casa de Villon en Puteaux los domingos por la
tarde, de ahí recibió el nombre de grupo de Puteaux. Entre otros temas, en las
discusiones del grupo que se hablaba de dos asuntos de importancia para Duchamp: La
cuarta dimensión y el arte interpretado por la mente en lugar de por la retina
(arte retiniano). Fruto de estas nuevas ideas, en 1911 acometió la tarea de
representar la actividad mental de una partida de ajedrez, esfuerzo que desembocó
en Retrato de jugadores de ajedrez. Aunque en su técnica no destaca sobre otras
obras cubistas, sí lo hace el intento de dar énfasis a la actividad mental en
detrimento de la imagen «retiniana».
Aunque hay ciertas similitudes entre ambos Desnudos Duchamp aseguró no recordar
haber visto este Desnudo bajando una escalera de Eadweard Muybridge.6
En cambio, sí reconoció la influencia de las fotografías de Étienne-Jules Marey,
que trataban de capturar el movimiento mediante fotografías repetidas, como estas.6

A partir de Retrato de jugadores de ajedrez, primera pintura innovadora, cada obra


de Duchamp era distinta a las anteriores. Nunca se detuvo a explorar las
posibilidades que abría una nueva obra, simplemente cambiaba a otra cosa. Por este
tiempo dejó de frecuentar tanto a sus hermanos y pasó a estar en contacto solo con
un grupo de amigos, en especial con Picabia. Entonces empieza a interesarse por la
plasmación pictórica de la idea movimiento. El primer intento de esta línea es
Joven triste en un tren, que Duchamp consideró un esbozo. Además de por la nueva
línea que abre, esta obra es notable por ser la primera vez en la que Duchamp juega
con las palabras en sus obras, pues según él eligió triste por su aliteración con
train.7 La siguiente obra de Duchamp continuó esta senda. Se trata de Desnudo
bajando una escalera, del que pintó dos versiones.

Desnudo, que empezó en diciembre de 1911, sorprendió en primer lugar por su título,
que pintó en el mismo lienzo.8 El desnudo era un tema artístico con unas reglas
fijas ya establecidas, que desde luego no incluían figuras bajando por escaleras.
Duchamp mostró la idea de movimiento mediante imágenes superpuestas sucesivas,
similares a las de la fotografía estroboscópica. Tanto la sensación de movimiento
como el desnudo no se encuentran en la retina del espectador, sino en su cerebro.
Aúna elementos del cubismo y futurismo, movimiento que atacaba al cubismo del grupo
de Puteaux. El cuadro debía exhibirse en la exposición cubista del Salon des
Indépendants, pero Albert Gleizes le pidió a sus hermanos que le dijeran que
retirara voluntariamente el cuadro, o que le cambiase el título, que les parecía
caricaturesco, a lo que estos accedieron. A propósito de este incidente, Duchamp
recordaría más tarde:

(...) no repliqué. Dije muy bien, muy bien, cogí un taxi para la exposición,
recuperé mi cuadro y me lo llevé. Fue un auténtico giro en mi vida. Me di cuenta de
que, después de aquello, nunca más volverían a interesarme demasiado los grupos
Tomkins (1996, p. 95)

Sin embargo, si Desnudo bajando una escalera animó a Duchamp a seguir su propio
camino sin adscribirse a teorías o grupos, fue otro cuadro pintado ese mismo año el
que marcaría el camino que acabaría años más tarde en la realización de El gran
vidrio (La marièe mise à nu pair ses célibataires): Molinillo de café, una pequeña
pintura para la cocina de su hermano. Según el propio Duchamp, pintó una
descripción del mecanismo, estructurada en dos partes, ideas presentes también en
el vidrio, aunque en aquella época no fue consciente lo que suponía.
Viaje a Múnich y vuelta a París
Picabia, amigo de Duchamp, en su estudio.

En aquellos años recibió, según Tomkins, la influencia de Jules Laforgue y Raymond


Roussel. Del primero le atraían su humor cínico, el desapego de sus personajes y
sus juegos verbales. Del segundo, su obra a base de juegos de palabras,
transliteraciones y retruécanos. Como más tarde reveló el propio Roussel, le atrajo
la «locura de lo inesperado» y el descubrimiento de una obra que parte únicamente
de la imaginación del autor, pues para Roussel las obras no debían contener «nada
salvo combinaciones de objetos totalmente imaginarios».9 Duchamp acudió junto a
Francis Picabiaa a la representación de Impresiones de África, que le impresionó
fuertemente. Una semana más tarde se encaminó solo a Múnich. Allí no realizó ningún
intento de conocer a Kandinsky, y de hecho la cuestión de la abstracción pura le
resultaba bastante indiferente, sino que se dedicó a trabajar. De esta época son
los primeros bocetos del gran vidrio y aparece el tema de las vírgenes y su
transición a novia, tema que trabajaría durante mucho tiempo. Empezó por los
dibujos de la Virgen, después continuó con la pintura El tránsito de la virgen a la
novia y culminó con Novia. Según algunos críticos, como Jerrold Seigel, los cuadros
no versan sobre la iniciación sexual, sino sobre transición al estado justamente
anterior, de inocencia expectante. En las dos últimas aparecen un artilugio que
también figurará en el Gran vidrio y de hecho, según el propio Duchamp, Novia no
era más que un ensayo para una obra de más importancia. En esta época estuvo
enamorado de Gabrielle Buffet-Picabia, esposa de Picabia. Tras dos meses de trabajo
visitó Viena, Praga, Leipzig, Dresde y Berlín y sus museos antes de volver a París.
En el viaje de vuelta escribió dos páginas de retrúecanos, fantasías y juegos de
palabras que describen un cuadro que no llegaría a pintar. Este texto está
considerado un precedente de las notas que más adelante incluiría en su Caja verde
y del lenguaje del Gran vidrio. Según declararía más tarde, en esta época había
abandonado el cubismo y la representación pictórica del movimiento, y se había
hartado de la pintura. Se embarcó en la creación de una obra diferente, de gran
envergadura, para lo que buscó un empleo de bibliotecario que le ocupara pocas
horas.
Cartel del Armory Show de 1913.

Sin embargo, la exposición de la Section d'Or, la exposición cubista más importante


celebrada antes de la guerra,10 trastocó sus planes por completo. De Duchamp se
expusieron seis obras, entre ellas Desnudo bajando una escalera. Nº 2. Las pinturas
muniquesas no se exhibieron, pues las consideraba meros estudios. Su obra tuvo poca
repercusión en general, pero recibió elogios de Guillaume Apollinaire, que
seguramente le prestó atención a causa de su amistad mutua con Picabia, y, lo que
resultó más importante, atrajo vivamente el interés de Arthur B. Davies, Walter
Pach y Walt Kuhn, que tenían proyectado organizar la Exposición Internacional de
Arte Moderno que pasaría a la historia con el nombre de the Armory Show. Después se
fue a viajar por países
Caricatura The Rude Descending the Staircase (Rush Hour at the Subway) de J. F.
Griswold que publicada el 20 de marzo de 1913 en la portada del Evening Sun.

El Armory Show puso en contacto al arte estadounidense con la vanguardia europea.


Entre las pinturas, esculturas y obras decorativas expuestas el Desnudo bajando una
escalera, nº2 de Duchamp provocó una gran reacción. Hubo colas de treinta y
cuarenta minutos para ver el cuadro y el American Art News ofreció diez dólares al
que diera la mejor explicación del cuadro.11 Aunque el arte moderno recibió burlas
en la prensa, atrajo a un grupo no muy numeroso de coleccionistas. A los tres
hermanos Duchamp les fue muy bien: Raymond vendió tres de cuatro esculturas
expuestas, Jacques Villon sus nueve pinturas y Marcel vendió sus cuatro lienzos por
un total de 972 dólares.

Duchamp pasó dos años realizando estudios para el Gran vidrio. El cambio en su obra
fue total. Aunque antes de su viaje a Múnich había mostrado su desprecio por el
arte retiniano, su arte seguía circunscrito en la tradición del arte occidental,
tanto en materiales, pues siempre pintaba en óleo sobre lienzo, como en conceptos.
Tras el viaje se aprecia como abandona el principio de la sensibilidad creadora y
lo sustituye por el dibujo mecánico, la escritura, la ironía y el empleo del azar.
Según Tomkins, no es casualidad que este cambio coincida con la mudanza de Duchamp
a Neuilly, donde viviría alejado del círculo artístico de Montmartre. Allí se
dedicó a trabajar en los preliminares de su nueva obra. Realizó dibujos
preparatorios y escribió notas. En algún momento se le ocurrió que realizaría la
obra sobre vidrio. De esta forma podría evitar la oxidación de los colores y
también podría dejar zonas sin pintar, lo que elimina la necesidad de llenar todo
el soporte. Había decidido que en su obra mostraría un movimiento psicológico, un
tránsito, como había hecho ya en El tránsito de la virgen a la novia. En este
tiempo estudió la perspectiva renacentista en detalle. Realizó un estudio en
perspectiva del panel inferior (la machine célibataire o la máquina soltera). Pintó
también un molinillo de café en perspectiva (Molinillo de chocolate (Nº 1)). Este
trabajo en óleo sobre lienzo es un estudio del elemento central del panel inferior.
Está pintado en un estilo muy diferente a sus obras anteriores, pues lo pintó con
toda la precisión de la que fue capaz. Al recurrir al dibujo técnico, Duchamp
intentaba eliminar la sensibilidad personal del artista al mecanizar el trazo. Más
tarde consideró que aquel trabajo fue el auténtico principio del Gran vidrio. En
sus notas preparatorias juega con la ironía y altera las leyes de la física y la
química. Así, se habla de la oscilación de la densidad, la inversión de la fricción
y la sexualidad como motor de dos tiempos en un coqueteo con la patafísica. Duchamp
dijo que buscó acercarse a la ciencia, pero no por amor a la misma, sino para
«desacreditarla ligeramente, de una manera leve, sin importancia».12 También se
aprecia el gran interés de Duchamp por la cuarta dimensión y la geometría no
euclidiana. Del grupo de Puteaux Duchamp fue el único que trabajó concienzudamente
para comprender estos temas. De hecho, Gertrude Stein dice de Duchamp tras
conocerle que «parece un joven inglés y habla con vehemencia acerca de la cuarta
dimensión».13

Tras eliminar el talento en la manufactura recurriendo al dibujo técnico, Duchamp


atacó a la intención consciente recurriendo al azar. Se le ocurrió cortar tres
hilos de un metro de longitud y dejarlos caer sobre tres lienzos. Calcó las líneas
resultantes y reprodujo tres veces cada una sobre un lienzo. Al resultado lo tituló
Red de zurcidos. Aunque otros artistas habían empleado el azar para escapar de sus
condicionantes, Duchamp lo empleó de una forma nueva, pues consideraba que, dado
que la suerte de cada uno es distinta, el resultado de su azar era una expresión de
su subconsciente.14 En algún momento de 1913, cuando exploraba esta vía, creó lo
que retrospectivamente consideró el primer ready-made: una rueda delantera de
bicicleta dispuesta bocabajo sobre un taburete de cuatro patas (Rueda de bicicleta
sobre un taburete). Duchamp dijo que había surgido como un divertimento, pues le
resultaba agradable observar como desaparecían los radios al girar la rueda.15 Más
adelante compró un portabotellas, artículo frecuente en los hogares franceses de la
época, sin la intención de usarlo para llenarlo de botellas, sino como escultura ya
hecha. En una nota de 1913, Duchamp anota la pregunta «¿Se pueden hacer obras que
no sean de arte?».16

También estuvo buscando el material con el que haría la en vidrio. Tras unos meses
en los que estuvo probando a corroer el vidrio con ácido fluorhídrico, abandonó la
idea porque le resultaba demasiado engorroso y peligroso, pues la reacción química
emitía gases tóxicos. Entonces se le ocurrió utilizar hilo de alambre que pegaría
al vidrio con gotas de barniz. El material era fácil de encontrar, maleable y muy
cómodo. Con alambre sobre vidrio creó Trineo. Aunque Francia entró en la Primera
Guerra Mundial el 3 de agosto de 1914 y sus dos hermanos fueron llamados al
ejército poco después, la opinión general en Francia es que la guerra duraría menos
de medio año. En estas circunstancias, Duchamp continuó trabajando en sus estudios
para el Gran vidrio. Lo siguiente que abordó fue otra obra en alambre sobre vidrio,
los Nueve moldes machos, recipientes tridimensionales que representan a los
solteros. Aunque en principio eran ocho, finalmente les agregó un noveno, el jefe
de estación. Para Duchamp el número tres representaba a la multitud. El tres y
múltiplos de tres aparecen con frecuencia en su obra. Para los Pistones de
corrientes de aire de la parte superior del vidrio Duchamp recurrió otra vez a la
suerte: dejó una gasa cuadrada ante una ventana y la fotografió tres veces mientras
el viento la sacudía suavemente. Las siluetas resultantes formarían los Pistones.
Traslado a Nueva York

Walter Pach volvió a París en busca de obras para organizar más exposiciones en
Nueva York sobre las vanguardias europeas. A raíz de esta visita, Duchamp y Pach se
hicieron amigos. Muchos de los artistas afincados en la capital francesa habían
sido llamados a filas. Duchamp fue eximido del ejército al detectarle un soplo
reumático en el corazón. Aunque no exhibía su actitud escéptica con la guerra e
impermeable al patriotismo, tuvo que aguantar los reproches de su cuñada y de los
desconocidos que le increpaban por la calle por no estar en el frente. Así las
cosas, escribió a Pach el 2 de abril de 1915 que estaba «totalmente decidido» a
marcharse de Francia.,17 y en una carta posterior aclaraba «No me voy a Nueva York,
me marcho de París, que es muy distinto». El 15 de junio zarpó en el Rochambeau en
dirección a Nueva York.

Ya en Nueva York se alojó inicialmente en la casa del matrimonio Arensberg. Walter


Arensberg, hijo de un magnate del acero, había quedado muy impresionado por el
Armory Show. Para cuando Duchamp llegó a su apartamento, Arensberg atesoraba obras
de Brancusi, Picasso, Braque, Matisse y los cubistas de Puteaux. Se ganó la vida y
aprendió inglés dando clases de francés a amigos de Pach y Arensberg, entre los que
se encontraba John Quinn, con quien trabó amistad. Tras dos meses en Nueva York,
los medios de comunicación descubrieron que se encontraba allí y se convirtió en
objetivo de los entrevistadores. Este les correspondía con ideas y opiniones
originales.b Sin embargo, ni habló de su obra ni se dedicó a pintar. En septiembre
se marchó del apartamento de los Arensberg. Tres meses más tarde se volvió a mudar.
El alquiler de su nuevo apartamento le obligó a buscar trabajo además de las
clases, así que por medio de Pach consiguió un empleo en el Instituto Francés.

Poco después de irse a vivir a su nuevo apartamento compró dos hojas de vidrio que
serían el soporte del Gran vidrio, en el que trabajaba dos horas al día, aunque no
todos los días. En invierno compartió piso con Jean Crotti, que hizo una pieza de
metal sobre vidrio que retrataba a Duchamp: Retrato de Marcel Duchamp, que adquirió
Arensberg y que más tarde desapareció. Fue en aquella época cuando Duchamp compró
una pala quitanieves, la colgó del techo mediante un cable, la tituló In Advance of
the Broken Arm y la firmó. Era un objeto elegido a través de la «indiferencia
visual y, al mismo tiempo, de la total ausencia de buen o mal gusto»18 Es el primer
auténtico ready-made: una obra creada por la elección del artista, no por su
habilidad. Poco después escribió a su hermana Suzanne para que convirtiese al
portabotellas en un ready-made en la distancia. Para hacer esto, solo tenía que
escribir una inscripción en él. Sin embargo, Suzanne ya había tirado el
portabotellas y la rueda de bicicleta. De todas formas, la idea de ready-made había
nacido. Duchamp diría mucho más adelante «No estoy seguro en absoluto de que el
concepto de ready-made no sea la idea más importante que haya producido mi obra».19
Marcel Duchamp, Francis Picabia y Beatrice Wood en Nueva York, 1917.

En aquella época se convirtió en el centro de atracción del grupo de Arensberg por


su ingenio. Bebía bastante, en palabras de Albert Gleizes, y según Gabrielle
Picabia, «todas sus alumnas caían en sus brazos», pues «había adquirido bastante
experiencia y sabía como comportarse en cualquier situación». En su círculo íntimo
se encontraban Picabia, el fotógrafo Man Ray y Henri-Pierre Roché, con los que
compartiría una larga amistad. Por otra parte, en esta época Duchamp jugaba todas
las noches al ajedrez en casa de Arensberg, que había formado parte del equipo de
Harvard.20

Además de en el círculo de Arensberg, Duchamp se movía también en el de Alfred


Stieglitz, que editaba la revista 291, donde Duchamp colaboró escribiendo poesía
abstracta en francés. También trató a Beatrice Wood. La chica, de 22 años, dijo en
su encuentro que le parecía que el arte moderno podía hacerlo cualquiera, a lo que
Duchamp contestó que por qué no lo intentaba. Cuando Wood le mostró su dibujo,
Duchamp le dijo que intentaría que su amigo Allen Norton lo publicase en Rogue y le
ofreció pintar en su estudio. Wood escribió de esta época «Salvo por el acto
físico, éramos amantes».20 Más adelante Wood se enamoró de Roché, quien escribió
una obra, Victor, que dejó inacabada y que según Tomkins está inspirada en este
triángulo amoroso. Sin embargo, según su propio testimonio, no se acostó con él
hasta 1917.21
La Sociedad de Artistas Independientes y la Fuente de R. Mutt

A partir de principios de 1917 los artistas del círculo de Arensberg fundaron la


Sociedad de Artistas Independientes, a imitación del Salon des Indépendants con la
intención de organizar exposiciones sin premio ni jurado. En dos semanas llegaron a
los seiscientos miembros. Duchamp fue nombrado responsable del comité de selección
y decidió que las obras se expondrían ordenadas alfabéticamente de acuerdo al
apellido del autor. En total se expusieron 2125 obras de 1200 artistas, lo que
convirtió la exposición en la mayor de la historia de los Estados Unidos. Duchamp
no presentó ninguna obra con su nombre, pero sí lo hizo con el seudónimo de R.
MUTT.

La obra en cuestión era un urinario que Duchamp había comprado con Arensberg y
Stella. Lo tumbó y pintó el nombre R. MUTT en él. R. Mutt aludía por una parte al
Mott y a la tira cómica Mutt and Jeff y por otra la R. hacía referencia a Richard,
«monedero» en jerga francesa.22 Lo envió a la organización con los dos dólares de
la inscripción y el título: Fuente. Según escribió Beatrice Wood, el objeto causó
mucho revuelo entre algunos organizadores, que consideraban que era una broma o una
indecencia. Se realizó una votación para determinar si habría que admitir el
urinario en la exposición, que perdieron sus defensores. Duchamp y Arensberg
dimitieron de la junta. El urinario se expuso en la galería 291 donde Stieglitz lo
fotografió. Se desconoce cuál fue el destino de la obra. También se desconoce por
qué Duchamp la presentó a la exposición. Según Tomkins, se podría tratar de una
provocación dirigida a la facción que se tomaba más en serio el asunto.

Por aquella época Duchamp, Roché y Wood publicaron The Blind Man donde reprodujo la
fotografía que tomó Stieglitz junto al editorial The Richard Mutt Case en el que se
hace énfasis en que el autor eligió la obra, lo que la convierte en arte.2324
Cincuenta años más tarde, Duchamp diría «Les tiré el urinario en la cara y ahora lo
admiran por su belleza estética».25
La guerra
Véase también: dadaísmo

En 1916 se originó el dadaísmo en Zúrich por un grupo de artistas que huían de la


Primera Guerra Mundial. Según uno de sus fundadores, Tristan Tzara, el dadaísmo no
era moderno en absoluto, y Duchamp lo asociaba a Jarry y Aristófanes. Declaraban
que toda obra humana es arte y consideraban que la vida era más importante que el
arte. Duchamp, que tampoco tenía ningún interés en ir a la guerra, compartía muchos
puntos con los dadaístas suizos, pero aseguraba que lo que él y su círculo hacían
en Nueva York «no era dadá». La diferencia estaba, según él, en que los dadaístas
«libraban una batalla contra el público. Y cuando se está librando una batalla,
resulta difícil reírse al mismo tiempo». El ambiente en Nueva York era más
jovial.26 Sin embargo, a Duchamp y su grupo se los conoce como los dadaístas de
Nueva York.

Por aquel tiempo empezó a dar clases de francés a Katherine Dreier, que estaría
presente en los siguientes treinta años de su vida. Dreier, hija de inmigrantes
alemanes adinerados, fue directora fundadora de la Sociedad de Artistas
Independientes de 1916, y había votado en contra de la Fuente, pero tras la
dimisión de Duchamp dijo que ella no le encontraba originalidad, pero que si le
hubieran ayudado a verla los que sí la hacían, habría podido apreciarla.27 Más
adelante le encargó un cuadro para su biblioteca. Duchamp tardó seis meses en hacer
su primera pintura desde 1914. El resultado, que tituló Tu m'2829 (que según
Tomkins suele leerse como Tu m'emmerdes, o «tú me aburres»), es un cuadro
retininano que al propio Duchamp no le gustaba. Fue el último lienzo que pintó en
su vida.

Poco más tarde se iría sin embargo a Buenos Aires acompañado de Yvonne Chapel. Las
razones, según una carta a Jean Crotti, parecen ser la tensión en el matrimonio
Arensberg y las restricciones a causa de la guerra.30 No se sabe por qué eligió
Argentina. Durante sus preparativos de viaje, Duchamp regaló sus obras a sus
amigos, incluido un estudio del Gran vidrio que regaló a Roché y una miniatura de
7×5 cm de Desnudo bajando una escalera que regaló a las hermanas Stettheimer.
Buenos Aires y París

Duchamp se embarcó junto a Chastel a bordo del Crofton Hall rumbo a Buenos Aires,
donde llegarían veintiséis días más tarde con la intención de quedarse algunos
años.31 A las tres semanas de su llegada le llegó la noticia de la muerte de su
hermano Raymond Duchamp-Villon, que se había alistado voluntario y contrajo una
fiebre tifoide con complicaciones en un hospital militar.

Según escribió a Crotti, a Duchamp Buenos Aires le pareció muy machista, pues la
sociedad porteña no aceptaba a las mujeres solas. Además, escribió a Ettie
Stettheimer «Buenos Aires no existe. No es más que una gran población provinciana
con gente muy rica sin pizca de gusto que todo lo compra en Europa». Pero al mismo
tiempo le gustaba, pues continuaba «Estoy muy contento de haber descubierto esta
vida tan distinta... en la que encuentro placer en el trabajo». Compró un vidrio y
empezó a trabajar en efectos que quería trasladar al Gran Vidrio.32 También trató
de organizar una exposición cubista para introducir a los porteños en el arte
moderno, para lo que pidió ayuda a su amigo Henri-Martin Barzun de París, que le
debía traer treinta cuadros cubistas, poemas de Mallarmé y revistas de vanguardia.
Barzun no colaboró y la exposición no prosperó.

Pero pronto dejó el trabajo de lado por el ajedrez. Compró revistas de ajedrez y
estudió partidas de José Raúl Capablanca. En 1919 se apuntó a un club de ajedrez y
empezó a jugar por correspondencia con Arensberg. Para Duchamp el ajedrez era «una
obra maestra del cartesianismo» y «tan imaginativo que, a primera vista, ni
siquiera parece cartesiano» y le atraía enfrentar las dos actitudes, la
ajedrecística y la artística.33 Yvonne Chastel acabó cansándose del ajedrez y
volviendo a París.

Katherine Dreier le hizo una visita y se volvió a Nueva York con dos obras de
Duchamp. La primera era Estereoscopía a mano (Stéréoscopie à la main), que jugaba
con el efecto estereoscópico: se trataba de dos fotografías en las que había
dibujado un poliedro que al verse con un estereoscopio parecía flotar sobre el
paisaje. La segunda era À regarder (de l'autre côte du verre), d'un oeil, de près,
pendant presque une heure o Para mirar (desde el otro lado del vidrio),34 con un
ojo de cera durante casi una hora, título que Dreier cambiaría por Equilibrio
alterado (Disturbed balance). Se trataba de un vidrio en el que había aplicado la
técnica de raspado del plateado, que consiste en raspar una base de mercurio para
obtener las formas que se buscan. En el vidrio hay elementos que acabarían en el
Gran Vidrio, como las láminas de oculista o las tijeras y otros, como la pirámide o
la lupa.

El único ready-made que ideó en Buenos Aires fue un regalo que envió por correo a
su hermana Suzanne con motivo de su boda con Jean Crotti. Les envió las
instrucciones para colgar un libro de geometría con un cordel de una ventana para
que el viento pasase sus páginas y aprendiese «por fin tres o cuatro cosas de la
vida». Lo llamó Le ready-made malheureux (Ready made desdichado).33

En 1919 se embarcó en el Highland Pride con rumbo a Southampton. Pasó un mes en


Londres, tras lo que visitó la casa paterna de Ruan, y de allí fue a París.
Encontró París poco cambiado, pese a la guerra. Los círculos artísticos jóvenes
gravitaban alrededor de Apollinaire, que había sido licenciado del ejército con una
grave herida en la cabeza que acabó por matarle antes del armisticio. Duchamp no
expuso nada en el Salon d'Automme de 1919, pero se preocupó de que se expusieran
diecinueve trabajos de Raymond, su hermano muerto. Fue en esta época cuando supo de
la existencia de su hija, que estaba siendo criada por su madre, Jeanne Serre, y
Henry Mayer, un financiero. No volvería a verla en más de cuarenta años.

Pero Duchamp tenía en mente regresar a Nueva York, cosa que hizo a finales de
diciembre. Sin embargo, le dio tiempo de crear tres nuevos ready-mades: el Cheque
Tzanck (Chèque Tzanck),35 L.H.O.O.Q.36 y Aire de Paris (Air de Paris).3738
De vuelta en Nueva York

A su vuelta a Nueva York encontró que los Arensberg habían dejado de ser lo que
eran, pues se encontraban en dificultades económicas. Junto a Dreier y Man Ray
fundaron la Société Anonyme, Inc.. Duchamp insistía en que el arte moderno debía
ser divertido, pues lo consideraba fundamental para reavivar el interés de Estados
Unidos por las nuevas tendencias. La Société Anonyme organizó en los veinte años
siguientes ochenta y cinco exposiciones e introdujo la obra de Archipenko,
Kandinsky, Klee, Léger, Villon, Eilshemius, Mondrian y Schwitters a pesar de la
falta de financiación.39

Duchamp hizo trasladar el Gran Vidrio a su nuevo apartamento, y el polvo se acumuló


en él. Man Ray hizo una fotografía del resultado que titularion Cultivo de polvo
(Élevage de puissière).40 Después fijó el polvo de los conos, limpió el resto,
pidió que plateasen la zona inferior y se dedicó a rasparla para obtener las tres
láminas de oculista. También construyó su primera máquina óptica Rotative plaque
verre (Optique de précision),41 que no consideraba arte. Esta exploración le llevó
a interesarse por la cinematografía. Realizó una película de la baronesa von
Freytag-Loringhoven afeitándose el pubis con efecto estereoscópico. La película se
estropeó y solo se salvaron dos tiras que encajaban. En esta muestra se apreciaba
el efecto estereoscópico. Por lo demás, jugaba mucho al ajedrez en el Marshall
Chess Club, donde logró ganar en dos ocasiones a Frank Marshall en las partidas
simultáneas que el maestro jugaba contra doce contrincantes.

En 1920 vio la luz por primera vez el alter ego de Duchamp Rose Sélavy. La elección
del nombre se debe a que Rose le pareció el nombre más bobalicón de la época, y
Sélavy un calambur de c'est la vie.42 Duchamp compró una french window (ventana
francesa), cubrió los vidrios de cuero negro y pegó el título: Fresh widow
copyright Rose Sélavy 1920 (Viuda fresca, copyright Rose Sélavy 1920).43 Man Ray
fotografió a Duchamp vestido con un abrigo de piel y un sombrero cloche, toma que
acompañaría a un frasco de perfume con la etiqueta Belle Haleine-Eau de Violette
(Precioso aliento-Agua de velo). Duchamp también empleó el nombre de su alter ego
femenino en un ready-made muy «rectificado»: Why Not Sneeze Rose Sélavy.44 Más
adelante le añadió una R adicional al nombre, que pasó a ser Rrose Sélavy.

En junio de 1920 visitó París. Allí encontró al grupo dadaísta, encabezado por
Tzara, Picabia y Breton y que incluía también a Jacques Rigaut, Louis Aragon, Paul
Éluard, Gala, Theodore Fraenkel y Philippe Soupault. Duchamp acudió a varios actos,
pero escribió a Ettie Stettheimer que «de lejos todos estos movimientos aparecen
realzados por un atractivo del que carecen a corta distancia».45 En esta visita
realizó un cortometraje junto a Man Ray que jugaba con efectos ópticos y creó un
ready-made: La trifulca de Austerlitz (La bagarre d'Austerlitz).46 La visita fue
breve, pues a principios de 1921 se embarcó de vuelta a Nueva York. Cuando le
preguntaron por qué prefería vivir en Nueva York, cuando muchos artistas
estadounidenses se estaba marchando a París, Duchamp respondió que los neoyorquinos
estaban más dispuestos a dejarlo en paz.47
Duchamp con el matrimonio Hartl.

Fue una época de desapego de amistades, relaciones amorosas y trabajo. Ni concluía


el Gran Vidrio ni empezaba obras nuevas y se negaba a repetirse. Editó una
antología de Henry McBride; compró junto a su conocido Leon Hartl un taller de
tintes, negocio que fracasó al cabo de seis meses, y ćonsiguió participar en unas
partidas simultáneas contra Capablanca.

A principios de 1923 volvió a París. En esta ocasión no dio ningún motivo. Tomkins
supone que Duchamp asociaba en este momento Nueva York a su sequía creativa. Antes
de marcharse realizó un último ready-made: Wanted/$2,000 Reward,48 un cartel de «se
busca» que había encargado a un impresor y en el que puso fotografías suyas de
frente y perfil. Para entonces había decidido dejar el Gran Vidrio inacabado.49

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