El estradiol se produce en los ovarios, junto con la progesterona. Pero no en
todas las etapas de la vida se produce de la misma manera. Antes de la pubertad los niveles de la hormona son muy bajos. Empieza a aumentar en la pubertad dando lugar a las características sexuales, el aumento del pecho, aumento del tamaño del útero, de los ovarios la aparición de la regla… Durante la edad fértil el estradiol está más alto, pero sufre variaciones según el ciclo menstrual. Durante la menopausia vuelve a disminuir. La producción de estradiol es algo compleja y está regulada por otras dos hormonas, la FSH y la LH que se producen en la hipófisis. Si el nivel de estradiol es suficiente se inhibe la producción de FSH y LH para evitar un exceso .
Funciones del estradiol
Papel fundamental en la pubertad con el desarrollo de los caracteres
sexuales secundarios: la aparición del pecho, el aumento del tamaño del útero, los ovarios y las trompas de Falopio, y aparición del vello púbico. Produce un aumento de las capas de la mucosa vaginal incrementando la producción de flujo vaginal.
Durante el ciclo menstrual: en la primera fase de ciclo, antes de la
ovulación los estrógenos producen un aumento de grosor en el endometrio, la parte más interna del útero para prepararlo para una fecundación.
Aumentan la líbido: se encarga de que las mujeres tengan deseo sexual.
El estradiol tiene un efecto a nivel del metabolismo de las grasas, regulando el
colesterol, aumentando el colesterol “bueno”. Tiene efecto sobre las paredes de las arterias de forma que las relaja y por tanto disminuye la tensión arterial. Estas dos funciones juntas mejoran la función cardiovascular y son la causa de la menor incidencia de accidentes cerebrovasculares e infartos en las mujeres en edad fértil respecto a los hombres.
Distribución de la grasa: además de tener un efecto beneficioso en el
metabolismo de la grasa el estradiol distribuye la grasa corporal con la típica forma de la mujer, más en caderas, muslos y pecho. Por eso al llegar a la menopausia se produce un cambio en la distribución de la grasa que es más en el abdomen, en forma de cinturón. Protección de los huesos: el estradiol ayuda a fijar el calcio en los huesos de forma que se refuerzan y se protegen de fracturas.
Efectos de la disminución de estradiol
Estos efectos son más notables en la menopausia ya que es el momento de la vida en que los estrógenos disminuyen más rápida y significativamente.
Con la llegada de la menopausia la hipófisis sigue produciendo FSH y LH,
pero los ovarios no responden produciendo estradiol. Por tanto, la hipófisis no tiene el freno natural del estradiol y produce niveles más altos de FSH y LH que dan lugar a los sofocos típicos de la menopausia.
Por otro lado, la vagina al no tener el estímulo del estradiol atrofia la
mucosa y deja de producir flujo por lo que se produce sequedad vaginal que dará dolor con las relaciones sexuales, picor y mayor frecuencia de infecciones de orina. La libido también baja con la menopausia por efecto de la disminución del estradiol. Es importante en esta etapa acudir a un especialista para realizar un seguimiento de los niveles de estradiol.
El riesgo cardiovascular aumenta con la bajada de estradiol ya que el
colesterol tiene más tendencia a subir y sobretodo el colesterol “malo” a pesar de que se realice una dieta más sana. La tensión arterial también sube ligeramente y por ello el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares como el ictus o el infarto aumenta con la disminución de estrógenos. La distribución de la grasa también se modifica dejando de ser tan clara en las caderas y aumentando en el abdomen.
Cuando el metabolismo óseo pierde el efecto protector de esta hormona
deja de fijar el calcio en los huesos produciendo una descalcificación progresiva que aumenta el riesgo de fractura con traumatismos mínimos o bien de fracturas espontáneas, es decir sin que se produzca ningún golpe.