Está en la página 1de 6

REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

MINISTERIO DEL PODER POPULAR PARA LA EDUCACIÓN UNIVERSITARIA


UNIVERSIDAD NACIONAL EXPERIMENTAL RAFAEL MARÍA BARALT
PROGRAMA INGENIERÍA Y TECNOLOGÍA
PROYECTO INGENIERÍA DE GAS
ASIGNATURA: TALLER DE ACCIÓN ORIENTADORA II

HÁBITOS DE ESTUDIO

Realizado por:

 Aymara Santana C.I.: 26.906.779


 Erwin Medero C.I.: 13.372.582

San Francisco, mayo de 2021


¿Que son hábitos de estudio? y cual es la importancia de la misma en el
proceso de enseñanza-aprendizaje.
Son los métodos y estrategias que acostumbra a usar el estudiante para asimilar
unidades de aprendizaje, su aptitud para evitar distracciones, su atención al
material específico y los esfuerzos que realiza a lo largo de todo el proceso.
Los hábitos de estudio son el mejor y más potente predictor del éxito académico,
mucho más que el nivel de inteligencia o de memoria. Lo que determina un buen
desempeño académico es el tiempo que dedica el estudiante y el ritmo que le
imprime a su trabajo. Durante la educación secundaria, por lo general se van
incorporando unos hábitos de estudio de manera no sistemática, ya que no suelen
enseñarse directamente. Al iniciar la universidad no sólo se tiene más contenido y
niveles de exigencia, sino que se tiene menos control externo, porque el entorno
inmediato los supervisa menos, y porque el estilo pedagógico es diferente (menos
exámenes y controles periódicos). Así, comenzar la universidad exige a la mayoría
de la gente mejorar sus estrategias de organización del tiempo, su habilidad para
tomar notas, sus técnicas de búsqueda y selección de información, su atención y
concentración prolongadas.
Contar con buenos hábitos de estudio, posibilitarán que una vez que el alumno ya
no cuente con la guía permanente de sus docentes, pueda transformarse en
alguien capaz de estudiar por sí solo, que es lo que se denomina estudiante con
autonomía, además de que esos contenidos se acumulan en su memoria de largo
plazo.
Conocer y entrenarse en hábitos de estudio que potencien y faciliten su habilidad
para aprender, son pasos clave para sacar el máximo provecho y conseguir el
mejor rendimiento en sus años de formación académica.

Adquisición de los hábitos de estudio.


Los hábitos de estudio llegan a adquirirse con constancia y perseverancia,
organizándose mental y físicamente para lograr un fin determinado de modo
eficiente. Cuando el alumno acepta en forma voluntaria que desea estudiar,
mejora la concentración y la atención, rinde más. Por lo tanto, para convertirse en
un alumno eficiente es necesario que se programe el trabajo escolar.
Formación de los hábitos de estudio.
Para que se dé la formación de hábitos es evidente que el ejercicio es necesario;
pero la práctica no conduce al aprendizaje. Saber si lo que hace está bien o mal
incita al individuo a modificar su conducta para que sea más eficiente en sus
estudios.
Por ellos varios autores señalan diferentes posturas para la formación de hábitos
de estudios, los cuales son:
Maddox (2006): Señala que la motivación exige que cada respuesta sea reforzada
positivamente, de modo que sirva de preparación para la siguiente, y esta a su vez
para otra posterior; con el fin de que el nivel de expectativas se mantenga durante
el tiempo preciso. De esta manera la fuerza del hábito se vigoriza como un
ejercicio de repetición y fortalecimiento.
Mira y López (2006): Señalan que el docente debe iniciar a sus estudiantes la
práctica dirigida, es decir, el estudio debe ir bien orientado, o sea, hacerles ver en
todo momento los objetivos que pueden alcanzar con su actividad, y que
comprendan el propósito del estudio ya que este sin orientación es algo estéril. El
estudio no puede motivar al alumno si éste no sabe por qué y para qué lo realiza.
Lo indispensable para lograr desplegar eficazmente hábitos de estudio que
reflejen una mejoría en el rendimiento son la voluntad, la disciplina, la
planificación, organización de ideas, orden, ejercicio, etc.
Condiciones para desarrollar hábitos de estudio.
Es de suma importancia tener en cuenta algunas condiciones para desarrollar de
manera productiva los hábitos de estudio:
Para realizar el estudio se recomienda al estudiante escoger un lugar cómodo y
fuera de distracciones. Teniendo en cuenta estas recomendaciones se puede
lograr el estudio con éxito.
 El Ambiente Escolar: Un ambiente escolar tiene que facilitar una
comunicación directa con él, es importante que en primer lugar el ambiente
deba estar a gusto en la comodidad del estudiante. El ambiente debe de
contar con una comodidad psíquica, porque no solo depende de la
comodidad material.
 Condiciones personales: Cuida la alimentación y salud ya que muchas
veces es la causante de cansancio, fatiga y dolores de cabeza. El ejercicio
y aseo condiciones muy importantes para la comodidad. La predisposición
psicológica y la motivación también intervienen en el espacio que dedicado
a estudiar
 Planificación y Organización: Es necesario planificar un horario de estudio
semanalmente, considerando horas inamovibles de estudio y fechas
importantes como prácticas, pruebas, exámenes, reuniones, etc.
 Grupo de Estudio: La formación de grupos de estudio puede facilitar el
aprendizaje. El estudio grupal no reemplaza el estudio individual por lo cual
se recomienda considerar al grupo como un apoyo para reforzar los
conocimientos debiendo acudir a cada reunión con la lección aprendida.
 Organizar el Espacio: Es decir, organizar el lugar donde se va a estudiar
todos los días. Este debe ser libre de distractores, sin radio ni televisión
encendidos. Bien iluminado, silencioso, y en él se tiene que procurar no ser
interrumpido constantemente.
 Organizar el Tiempo: Cada alumno posee un ritmo propio de aprendizaje.
Por eso es importante, en primer lugar, llegar a conocerse bien; una
adecuada planificación del tiempo distribuida de acuerdo a nuestras propias
capacidades ayudará a rendir en forma satisfactoria.
 Horario: Es una distribución del tiempo diario en función de nuestras
actividades. Planificar las actividades en un horario permite crear un hábito
ordenado y responsable. Pero para organizar nuestro tiempo de estudio es
necesario considerar también los períodos dedicados al descanso, la
diversión, el deporte, las obligaciones familiares y sociales.
Orientaciones desde la práctica educativa
Es importante desarrollar buenas estrategias de estudio desde edades tempranas.
Para lograrlo es necesario un cierto entrenamiento en estas técnicas para
desarrollar las habilidades intelectuales correspondientes. Algunas de las
orientaciones y estrategias específicas que pueden ayudar para ser aplicadas en
el trabajo dentro y fuera del aula, son las siguientes:
 Estudiar no requiere sólo leer y releer los temas hasta memorizarlos.
 La base de todo estudio es comprender un tema o problema. Para lograr
esta comprensión los pedagogos preferimos las técnicas activas, que
obligan al alumno a enfrentarse con un tema, diseccionarlo y relacionar
cada una de sus partes, en un trabajo de reelaboración.
 Comprender implica supervisar lo estudiado, de forma que el alumno le dé
sentido a lo aprende, poniendo en relación lo que va aprendiendo en
diferentes áreas de aprendizaje con momentos de su vida cotidiana, de
forma que esto tenga un verdadero sentido para él.
 Entender implica pensar. Pensar en cómo estoy aprendiendo de forma que
se despierte en el alumno/o no sólo su curiosidad, sino también su
inquietud por la superación personal, que, desde la revisión y la
autoevaluación, ayudarán a centrar su atención y a marcar un objetivo a
alcanzar en su aprendizaje.
 Estudiar es planificar de forma ordenada el trabajo guiándolo hacia el
objetivo del éxito, estudiando las materias más complejas o con dificultades
y terminando el día con las más fáciles, en forma de refuerzo directo.
 Estudiar es motivación, ya que requiere verificar desde la práctica lo
aprendido. El éxito es la mejor herramienta de motivación personal, por ello,
la evaluación sistemática ayuda a la autoevaluación personal y a mejorar
las estrategias de los alumnos/as.

Maduración socio-personal
Desde este esquema se concluye que el éxito en el aprendizaje no sólo se logra
en el aula ordinaria con el éxito individual, sino cuando hacemos entender a
nuestros/as alumnos, que su éxito comienza con y por el grupo, de forma que
todos los alumnos/as con y sin dificultades de aprendizaje, colaboren en la
consecución de una misma meta: “El proceso de maduración socio-personal”. El
éxito académico debe ser entendido como el resultado de un trabajo bien
pensado, planificado, verificado en la práctica, en el que el alumno/a se sienta
partícipe, motivado y autoevalúe, como forma de superación personal y grupal.
Las 11 mejores estrategias para un buen rendimiento académico
1. Haz una lectura completa del material asignado antes de ir a clase; subraya
y resume el contenido.
2. Cuando leas, haz una lista de preguntas sobre ese material y luego
respóndelas. Anota tus dudas y consúltalas.
3. Busca las palabras y conceptos que desconozcas y escribe las definiciones
en tus apuntes
4. Asiste a todas las clases; presta atención y toma apuntes.
5. En clase, pregunta cuando no entiendas.
6. Trabaja con un tutor.
7. Entérate/familiarízate con los recursos disponibles en la biblioteca y en
Internet que puedan ser útiles.
8. Acércate a los profesores y pídeles lecturas complementarias y material con
ejercicios.
9. Forma grupos de estudio y haceros preguntas entre vosotros.
10. Acude a tutoría para comentar temas respecto a tu rendimiento con el
profesor.
11. Participa de los programas y talleres sobre hábitos de estudio y
organización del tiempo ofrecidos por el GPP.
Bibliografía
https://deconceptos.com/ciencias-sociales/habitos-de-estudio
https://www.ugr.es/~ve/pdf/estudio.pdf
https://ingenio.edu.pe/que-son-los-habitos-de-estudio/
https://www.monografias.com/trabajos83/habitos-estudio-influencia-rendimiento-
escolar/habitos-estudio-influencia-rendimiento-escolar.shtml#marcoteora
https://redined.mecd.gob.es/xmlui/bitstream/handle/11162/91668/00820113012996
.pdf?sequence=1

También podría gustarte