Manual

Afrontamiento
de la
Agresión

Elaboración:
Alejandra Isamar Ayala Barahona
Raquel Salgado Banegas
Clase:
Orientación
Sección:
1000
0
I PAC 2021
Afrontamiento de la agresión. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 2
Agresividad . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 2
Agresividad infantil . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .3
Factores que influyen en la conducta agresiva. . . . . . . . . . . . . . . . . . . 5
¿Como Determinar Si Un Niño Es Agresivo O No? . . . . . . . . . . . . 9
Tipos de Agresividad . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .11
Técnicas Para Afrontar La Agresividad . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 13
Hogar . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 13
Escuela. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 14
2 a 5 años . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .15
4 a 6 años. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 18
8 a 10 años . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 22
Otros. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 25
Referencias. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 28

1
 Afrontamiento de la
Agresión
AGRESIVIDAD
La agresividad es un factor interior en el ser
humano, Freud afirma que la agresividad es una Agresión: “Acto de
acometer a alguien para
disposición pulsional, una tendencia intrínseca de la matarlo, herirlo o hacerle
naturaleza humana, a la par de la sexualidad, y como daño. “ (Asociacion de
Academias de La Lengua
tal exige satisfacción (Freud, 1930). Dicho así,
Española (RAE), 1992)
podría parecer que la agresividad no puede ser
combatida ni retenida, ya que debe ser satisfecha,
sin embargo, ese no es el absoluto.

El ser humano, cuenta con la capacidad intrínseca de

poder autogestionarse, siempre y cuando cuente con la
motivación necesaria para imponer ese control sobre sí
mismo, pero, ¿qué es de los niños?, ellos aun no
aprendido a gestionar su sentir, mucho menos a regular
su conducta, por lo tal, puede que manifiesten
conductas agresivas con mayor facilidad que un adulto,
por lo que depende de los padres, tutor o docente
ayudarle a que pueda comprender, que se espera de su
conducta, así mismo, el cómo debe tratar con otros
cuando se encuentra inconforme.
2
 AGRESIVIDAD infantil
Hablamos de agresividad cuando provocamos daño a una persona u
objeto. La conducta agresiva es intencionada y el daño puede ser físico
o psíquico. En el caso de los niños la agresividad se presenta
generalmente en forma directa ya sea en forma de acto violento físico
(patadas, empujones,) como verbal (insultos, palabrotas,). Pero también
podemos encontrar agresividad indirecta o desplazada, según la cual el
niño agrede contra los objetos de la persona que ha sido el origen del
conflicto, o agresividad contenida según la cual el niño gesticula, grita
o produce expresiones faciales de frustración (Serrano, 1996).

Esto usualmente está ligado a lo que el niño ha aprendido, el ambiente

en el que se ha criado, así como las relaciones cercanas.

Usualmente, el niño es un imitador de las

conductas de los adultos o niños mayores a su
alrededor, incluso, el contenido al que puede
estar expuesto en la televisión, juegos, entre
otros tipos de entretenimiento, pueden ser
influyentes en manifestaciones agresivas en su
conducta, sin embargo, los padres deben ser
conscientes que el ambiente en el hogar es uno
de los factores más importantes en la
manifestación en su conducta, por lo cual, es
importante que los padres, adultos o mayores en
relación con el niño, sean capaces de gestionar
adecuadamente sus conductas.
3
El problema de la agresividad infantil
es uno de los trastornos que más
invalidan a padres y maestros junto
con la desobediencia (Serrano, 1996).
Por lo cual, es importante que el niño
sea observado y atendido con
detenimiento, las conductas no
simplemente aparecen, sino que
cuentan con un origen, por lo que
debe indagarse adecuadamente en el
niño o niña, sin olvidar la privacidad
del mismo, para poder encontrarlo.
Así mismo, debemos de recordar algo
importante, no toda conducta que se interprete
como agresiva, debe ser considerada negativa,
(Serrano, 1996) Ciertas manifestaciones de
agresividad son admisibles en una etapa de la
vida, por ejemplo es normal que un bebé se
comporte llorando o pataleando; sin embargo,
estas conductas no se consideran adecuadas
cuando el infante sea mayor, puesto que se
asume, que debería ser capaz de contenerse y
pensar; aunque si lo pensamos detenidamente, en
ocasiones como adultos, también contamos con
dificultades para hacer esto, por lo que para que
nuestra niña o nuestro niño puedan cumplir con
esta expectativa de regulación, los adultos deben
hacer el esfuerzo por cumplirlo.
4
 Factores
Influyentes
En La
Conducta Agresiva
Uno de los elementos más importantes del ámbito
sociocultural del niño es la familia.
Dentro de la familia, además de los modelos y refuerzos, son
responsables de la conducta agresiva el tipo de disciplina a que
se les someta. Se ha demostrado que tanto un padre poco
exigente como uno con actitudes hostiles que desaprueba
constantemente al niño, fomentan el comportamiento
agresivo en los niños. (Serrano, 1996).

Como se dijo anteriormente,

tanto los padres, como las
relaciones cercanas al niño son
influyentes en la posible
manifestación de la conducta
en los niños, esto incluye la
escuela (tanto sus compañeros
de grado, niños de grados
mayores o inferiores, así como
docentes y el personal de la
institución), y otros lugares en
los que el niño pueda tener
interacciones con otros. 5
 Las relaciones deterioradas entre los
propios padres provocan tensiones
Otro factor familiar
que pueden inducir al niño a
influyente en la agresividad comportarse de forma agresiva.
en los hijos es la (Serrano, 1996) Se reitera que el niño
incongruencia en el suele ser un imitador de las conductas
comportamiento de los de su entorno cercano, por lo cual,
padres. Incongruencia se da generalmente suelen reaccionar de la
cuando los padres manera en la que han visto a sus
desaprueban la agresión personas cercanas hacerlo.
castigándola con su propia
agresión física o
amenazante hacia el niño.
Asimismo, se da
incongruencia cuando una
misma conducta unas veces
es castigada y otras
ignorada, o bien, cuando el
padre regaña al niño, pero
la madre no lo hace.

Esto suele involucrar a sus mayores, ya sean padres, hermanos,

docentes o compañeros, en ocasiones, incluso a sus pares con los que
son cercanos, ya que al convivir constantemente con alguien que tiene
cierto tipo de conductas suele tener el efecto de “contagiar” sus
comportamientos en otros, por lo que, en ocasiones, puede ser que un
niño aprenda un comportamiento de un compañero de la escuela en
lugar de los padres o hermanos. Por ello, es importante ser observador
en las relaciones que los niños tienen con otros, aunque se aconseja no
interferir con demasiada insistencia en las relaciones de los niños con
la intención de separarlos de otro, puesto que puede tener el efecto
contrario, incluso afectar su juicio en cuanto a sus relaciones futuras.
6
Fuera del hogar, (M, 2008) Dentro
del factor sociocultural influirían
tanto el tipo de barrio donde se
viva como expresiones que
fomenten la agresividad "no seas
un cobarde". Esto es usual en
nuestro país, pues debemos
recordar lo que se espera,
particularmente en los niños, más
que en las niñas, por lo cual, los
padres deben ser cuidadosos de
alentar lo que se escucha fuera
del hogar y buscar
contrarrestarlo.
Algo que no debemos olvidar, (Vallejo,
1983) En el comportamiento agresivo
también influyen los factores
orgánicos que incluyen factores tipo
hormonales, mecanismos cerebrales,
estados de mala nutrición, problemas
de salud específicos. Por esto, no
debemos siempre considerar al niño o
al ambiente como responsable de la
conducta agresiva, siempre debe
estar presente este factor, puesto
que resulta dificultosa la regulación o
disolución de una conducta agresiva si
el organismo juega no a favor del niño.

7
Finalmente cabe mencionar también el déficit en habilidades
sociales necesarias para afrontar aquellas situaciones que nos
resultan frustrantes. Parece que la ausencia de estrategias
verbales para afrontar el estrés a menudo conduce a la
agresión (Bandura, 1973) Esto debe ser compresible de cierta
manera, usualmente cuando nos encontramos incapaces de
realizar algo, más cuando se nos insiste en ellos, o nosotros
mismos persistimos en ello, la frustración acumulada no muy
agradable, realmente, este tipo de agresión no está realmente
dirigida a otros, realmente se dirige al “yo mismo”, pero como
no podemos hacernos ese tipo de daño, se vuelve en contra de
otros.

Esto suele mostrarse en los niños, más comúnmente cuando se

encuentran incapaces de hacer la tarea, ya sea que no pueden
comprenderla, o la materia no sea de su agrado, esto
usualmente va ligado.

Piense detenidamente, cuando usted

acumula muchos fracasos en algo,
usualmente le tiene desagrado a la
actividad y busca evitarla a toda
costa, no es muy diferente en los
niños, debemos ser comprensivos,
sin embargo, no podemos permitir
que se salte la tarea, lo que
procedería seria encontrar una
manera en que pueda realizarla sin
que genere tanto malestar interior
en el niño.
8
¿COMO
¿COMO DETERMINAR
DETERMINAR SISI UN
UN
NIÑO
NIÑO ES
ES AGRESIVO
AGRESIVO OO NO?
NO?
(Serrano, 1996) Ante una conducta agresiva emitida por un
niño lo primero que haremos será identificar los antecedentes
y los consecuentes de dicho comportamiento.
Los antecedentes nos dirán cómo el niño tolera la frustración,
qué situaciones frustrantes soporta menos.
Las consecuencias nos dirán qué gana el niño con la conducta
agresiva. Trabajando de forma práctica, podemos decir que
nadie hace nada sin un motivo o un deseo que quiere alcanzar,
lo mismo funciona en la conducta agresiva, usualmente los
niños que manifiestan agresión, suelen tener deseo de algo, la
atención de alguien, evitar una situación o una persona,
etcétera; el resultado de ello, de la conducta agresiva, logra
dar una noción de si esto se emplea como una defensa o solo
como un mal comportamiento.

9
Pero sólo evaluando antecedentes y consecuentes no es suficiente para lograr
una evaluación completa de la conducta agresiva que emite un niño, debemos
también evaluar si el niño posee las habilidades cognitivas y conductuales
necesarias para responder a las situaciones conflictivas que puedan
presentársele (M, 2008). Con esto se refiere a que no se puede seguir una
fórmula que determine una conducta como agresiva o no, se deben considerar
otros aspectos, como ser la edad y las capacidades del niño, así como si este
presenta algún tipo de déficit orgánico que le dificulte la tarea de comprender
las normas que se le dan, así como la capacidad de regularse.

Se debe discriminar adecuadamente en las conductas del niño antes de

declarar que tiene una conducta agresiva. (Serrano, 1996) Para evaluar el
comportamiento agresivo podemos utilizar técnicas directas como la
observación natural o el autorregistro y técnicas indirectas como entrevistas,
cuestionarios o autoinformes. Una vez hemos determinado que el niño se
comporta agresivamente es importante identificar las situaciones en las que el
comportamiento del niño es agresivo. Para todos los pasos que comporta una
correcta evaluación disponemos de múltiples instrumentos clínicos que deberán
utilizarse correctamente por el experto para determinar la posterior
terapéutica a seguir (M, 2008). Nunca debemos decir con ligereza que el niño
es agresivo, puesto que el niño puede interiorizar esta etiqueta y no encontrar
la motivación necesaria para aprender a regularse o afrontar estos
comportamientos en su propia persona. En esto, los padres, así como los
docentes y orientadores deben tener especial cuidado, ya que pueden limitar
los esfuerzos del niño, incluso distorsionar su percepción de sí mismo en cuanto
a sus capacidades. 10
Tipos de agresividad
Es importante que sea consciente de los tipos de agresividad como un adulto

encargado de un niño o niños, ya que no se procede de la misma manera con

tal o cual. (Jara, 2007) La agresividad puede presentarse de dos maneras:

Directa e indirectamente.

Agresividad Indirecta:

La acción violenta se desplaza hacia otra

persona u objeto distinto del que la

Agresividad Directa:
desencadenó.
Acción violenta física y verbal que se

presenta en forma de amenaza dirigida

contra la persona, objeto o situación al

que se le considera el causante de la

frustración. 11
Usualmente, los niños suelen presentar la
manifestación directa con mayor frecuencia,
debido a que suelen reaccionar de inmediato
a lo que les incomoda, sin embargo, la
manifestación indirecta no es poco
frecuente, ya que se presenta cuando no
pueden hacer nada en contra de una
situación, persona u objeto, por lo que
desplaza su agresividad en alguien o algo, que
no implique un riesgo o no pueda defenderse
de su ataque. De esto, se debe considerar el
ambiente familiar, así como escolar del niño,
como son sus relaciones, si son saludables o
una cuestión de poder, ya que este último,
suele aumentar las tensiones en el niño
manteniendo una conducta defensiva que lo
puede llevar a ser agresivo. Puede ser complicado para un
orientador o docente enfrentarse a
una situación en la que el ambiente
familiar sea el causante de la conducta
agresiva, ya que no se puede cambiar el
hogar del niño, o en ocasiones,
convencer a los padres de lo que
pueden estar haciendo de una manera
inadecuada y como esto afecta al niño.
Caso menos dificultoso cuando son los
padres los que deciden cambiar la
situación, ya que simplemente podrían
cambiar al niño de institución,
creyéndolo lo más conveniente, aunque
casi nunca es el caso, ya que el niño se
moviliza con la misma problemática.
12
 HogaR
Es importante que el hogar sea el primer
regulador de la conducta en el niño, a su
vez, es importante recalcar, que no debe
esperarse del niño un comportamiento en
específico,

si los padres u otros miembros de la

familia no poseen ese
comportamiento en específico, más
aún cuando el niño aun no convive
demasiado tiempo en otros entornos.
13
 EscuelA
En la escuela, es importante que tanto los
docentes, así como los orientadores, puedan
tener conciencia, en la medida de lo posible,
de las situaciones de los niños que reciben.
Puede parecer una tarea titánica, mejor
dicho, parecería imposible, pero la
observación del comportamiento en los
salones y el contenido de la conversación
puedan dar una noción de lo que ocurre en
el hogar del niño, así como la importancia que
le den los padres a lo que ocurre con el niño
en la escuela. Esto contribuirá para tener
una idea de cómo se puede proceder para
que la conducta agresiva disminuya.

Antes de empezar con la descripción de las técnicas, es

importante destacar lo que puede considerarse como “esperado”
en el niño, así se sabrá proceder según su etapa de desarrollo. Las
técnicas son funcionales tanto en el hogar como en la escuela, solo
se necesita un colaborador dispuesto para ayudar al niño o niña a
aprender
14
 2 años a
5 años
La agresividad es manifestada como rabia modificada
y rabietas. Usualmente siente admiración o temor por
alguien en particular, (Con altas probabilidades de
que sean los padres). La finalidad de ello, es resolver
la confusión en su interior (comúnmente amor u odio,
agrado o desgrado) así como un deseo interno de
conservar el amor y la atención de los padres. Existe
en ellos el deseo de imitar a los padres e identificarse
con ellos, por lo que se inclinan a negar las malas
conductas y desplazar ese conflicto en otras
personas o en objetos. (Ramirez, 2002)

15
 Conectar Pensamientos y
Emociones
Bocadillos de Pensamientos: En este tipo de
registro de pensamientos, los personajes
humanos o animales expresan una emoción y
los niños rellenan las emociones con bocadillos
de determinado sabor que ligan con la
emoción, para evitar la confusión, se le
pregunta con anterioridad al niño que
sabores reflejan para él o ella, las cuatro
emociones básicas. (Jara, 2007)

Reconocer La Intensidad de Las

Emociones:
Señales de Transito: Usualmente los niños
reconocen los semáforos, haciendo uso de uno,
(de no hacerlo, se aconseja explicar la dinámica de
las luces) pudiendo ser físico o metafórico (Se
aconseja que sea un objeto que el niño pueda
tocar, incluso que pueda contribuir en su
creación, el cual dará alusión a que él/ella está
trabajando en sí mismo). El niño al mirar la luz roja
se detendrá porque se dará cuenta de que es una
emoción intensa. (Jara, 2007)
16
Identificación
Identificación de
de Las
Las
Emociones:
Emociones:

Leer Libros Ilustrados: Esto

consiste en mostrar a los niños
pequeños, diferentes tipos de
emociones, puede ser también en
películas, obras de teatro y
música y pedirles que
categoricen las emociones que
están experimentando los
personajes. (Jara, 2007)

17
 4 años a
6 años
Aunque puede incluirse en la sección anterior,
creemos que es importante incluir estos aspectos
en su propia categoría. (Ramirez, 2002) La
agresividad se da por enojo, celos o envidia.
Comienza la internalización de las normas morales,
tienen la tendencia a fantasear en cómo les
gustaría que fueran las cosas, prefieren las
expresiones verbales, los desplazamientos y los
juegos agresivos.

18
 Identificación de Las
Emociones:
Gráfico de Caras: Este
grafico muestra caras con
diferentes expresiones faciales, en
el caso de los niños de esta edad,
se puede trabajar con cuatro
emociones básicas (alegría,
tristeza, enojo y preocupación). Es
importante que ellos aprendan a
expresar como se siente en
diferentes circunstancias. La
técnica consiste en pedir al niño
que dibuje cuatro caras en un Alegría Tristeza Enojo Preocupació
espacio determinado para cada n
emoción, ellos decidirán los colores
y las facciones de la cara (Jara,
2007)

19
Reconocer La
Reconocer La Intensidad
Intensidad de
de
Las Emociones:
Las Emociones:

Termómetro Emocional: Son instrumentos ampliamente

utilizados para ayudar a los niños a identificar sus emociones,
ya que la mayoría saben para que sirven (de no ser el caso
debe explicarse), a diferencia del ejemplo anterior, este da
más opciones, puesto que la emoción puede ir ascendiendo
lentamente y da más espacios para que el niño se vuelva
consciente, que situaciones pueden alterarlo más que otras,
lo que le permitirá darse cuenta del límite y en qué lugar se
encuentra con respecto a ese límite, a su vez, puede darle
el espacio para meditar sobre lo que siente y que puede hacer
con ello (Jara, 2007)

20
Conectar
Conectar Pensamientos
Pensamientos
yy Emociones
Emociones
Cuentos: Un niño puede ser consciente de lo que siente
y piensa, en ocasiones, lo que se dificulta es darle un
nombre apropiado, por lo que, al narrar un cuento que
sea afín a su situación actual, se le puede consultar de
que piensa sobre lo que hacen los personajes, luego de
que responda sobre ello, se le consulta sobre una
reflexión de su propio pensamiento cuando manifestó
un comportamiento agresivo (esto incluye el antes,
durante y después de la conducta considerada
agresiva). En esta etapa toca ser comprensivos y buscar
hablar el idioma particular del niño, ya para él o ella,
ciertas palabras pueden tener significados diferentes
(Jara, 2007).

21
 8 años a
10 años
La agresividad se manifiesta por enojos, fastidios, disgustos,
envidia, codicia, celos y censura. Su admiración e imitación son
los padres, los hermanos e incluso ellos mismos. En esta etapa, la
violencia tiene un “propósito”, que es ganar, competir, asegurar
la justicia y dominar los sentimientos: la racionalidad, el
autocontrol cobran cada vez mayor eficacia, usualmente, los
niños pelean físicamente y las niñas verbalmente (Ramirez,
2002). Los padres suelen confundirse en esta etapa, puesto que
en ocasiones nada parece funcionar, pero realmente, el propósito
de esto, es que el niño busca un lugar al que pertenecer, donde
sentirse incluido y encontrar un rol, por lo que debe indagarse
con cuidado que pasa realmente antes de realizar cualquier
acción.

22
 Identificación de Las
Emociones
Collage: Se puede utilizar variaciones
con el uso de fotografías sacadas de
revistas, el niño recorta fotos de
personas que están experimentando
diferentes emociones, el niño pega las
fotos en una cartulina y escribe la
emoción correspondiente a cada
imagen. (Jara, 2007)

Conectar Pensamientos y
Emociones
Diario de Pensamientos – Jardín de
Flores: Consiste en hacer que el niño
dibuje flores, cuyos pétalos representan
emociones, los tallos son pensamientos y el
suelo es el acontecimiento que
desencadena las emociones y los
pensamientos. Los niños pintan los pétalos
de diferente color por cada emoción que
experimentan. (Jara, 2007)

23
Reconocer La Intensidad
Intensidad de
de
Las Emociones
Vincular Las Emociones a Sensaciones Físicas: Los
niños suelen captar fácilmente sus sensaciones
corporales, esas reacciones fisiológicas pueden ser
buenos puntos de referencia, así podríamos utilizar la
pregunta: “¿Qué sensaciones tienes en el cuerpo
cuando …?” Se debe tomar en cuenta que debe existir
una vinculación entre la pregunta y una situación
referente a la conducta en concreto. Un ejemplo sería:
“¿Qué sientes cuando escuchas a tus padres
gritándose entre sí?” o, “¿Qué sientes cuando vez que
tus compañeros se golpean?” (Jara, 2007)

24
25
26
Todas estas técnicas son funcionales, sin embargo, es
necesario recordar que, en primera instancia, se debe dar
al niño el espacio necesario para que pueda disminuir su
tensión antes de intervenirlo, padre, docente, orientador
o terapeuta deben dar ese momento, ya que, si se aborda
de inmediato, puede tener el efecto opuesto de lo que se
espera, ya que el niño no será un buen receptor de lo
que se le quiere enseñar.

Algo que también es importante recordar, es que el niño

es un reflector de la conducta de las personas de su
entorno, por lo que no debemos exigir del niño, lo que
como adultos no podemos brindar, ya que será
incongruente y tendrá consecuencias presentes y
posteriores en el niño y en sus interacciones.

27
 Referencias

Asociacion de Academias de La Lengua Española (RAE). (s.f.).

Asociacion de Academias de La Lengua Española (RAE). (1992). Diccionario de La Lengua
Española.
Bandura, A. (1973). Aggression: A social Learning Analysis. N.Y. : Ronald Press .
Freud, S. (1930). El Malestar en La Cultura.
Jara, J. P. (2007). Tecnicas Cognitivas en El Tratamiento de Niños Agresivos . Universidad del
Azuay.
M, A. (2008). Prevención Pedagógico Social de La Agresividad. Educadores.
Ramirez, F. C. (2002). Conductas Agresivas en La Edad Escolar. En F. C. Ramirez, Conductas
Agresivas en La Edad Escolar (págs. 52-55). Madrid: Piramide.
Serrano, I. (1996). Agresividad Infantil . Piramide .
Vallejo, J. (1983). Introduccion a La Psicopatologia y Psiquiatria. Salvat.

28