El movimiento indigenista, a diferencia del indianista, ha recibido casi toda la atención por parte de los investigadores que se han ocupado de los "movimientos indígenas" contemporáneos. El trabajo más consagrado a este respecto es Oprimidos pero no vencidos (1984) de Silvia Rivera y contiene el planteamiento de memoria larga, concepto que ha sido asumido por muchos de forma acrítica y que ha contribuido a encubrir el trabajo de "alargamiento de la memoria" operado por los indianistas. Por otra parte, Indigenista “El katarismo” (1986) de Javier Hurtado (1954-2012) es la investigación que mejor trabaja sobre este movimiento, en particular sobre la trayectoria sindical del katarismo desde los años 70 hasta inicios de los 80, cerrando la investigación cuando esta corriente entra en crisis. En el caso del movimiento indianista, éste fue objeto de investigación para una tesis de licenciatura en Antropología (UMSA) y que corresponde a Diego Pacheco. Este trabajo se publicó el año 1992 con el título de El indianismo y los indios contemporáneos en Bolivia y está basado en una recopilación abundante de documentos, cuyos datos y relaciones son expuestos de manera muy caótica.