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La necesidad de desarrollar el pensamiento crítico en los estudiantes desde los

primeros años de escuela.

Las habilidades de pensamiento constituyen hoy en día una de las prioridades y retos

de la educación en el contexto de un mundo convulso y en constante cambio, que

demanda profesionales capacitados y en donde es necesario formar a los estudiantes en

los conocimientos, habilidades y actitudes necesarios para lograr un pensamiento lógico,

crítico y creativo que propicie el aprovechamiento y generación de conocimientos, la

resolución de problemas y una actitud de aprendizaje continuo que permita que cada

individuo se autoforme a lo largo de toda la vida.

Lo anteriormente mencionado implica la total participación, por parte de los

estudiantes, en la práctica de ejercicios básicos, actividades de autoevaluación y de

reflexión, que les permitirán desarrollar y potencializar habilidades de pensamiento con

mente abierta, disposición, compromiso y autoconfianza, para lograr el objetivo de este

proceso debe haber un total compromiso tanto del educando como del alumnado. Uno

de los desafíos más interesantes es enseñar a aprender a pensar, para lograr aprendizajes

más efectivos. Esto parte de la premisa de que es posible enseñar habilidades para

desarrollar el pensamiento, lo que constituye una necesidad urgente de resolver para

asumir los vertiginosos cambios que enfrenta el presente y el futuro de la sociedad.

No es un mito que cada estudiante puede convertirse en un profesional competente,

de primer orden; sus dotes hereditarios pueden permitirlo perfectamente, pero en la

ausencia de un desarrollo y entrenamiento adecuados, puede que nunca se haga realidad.

De ahí la importancia de desarrollar habilidades de pensamiento crítico desde los

primeros años de escuela. Estas destrezas deben permitir al estudiante relacionarse con

la diversidad cultural, evaluar, analizar y autorregular los procesos o fenómenos que se

le presentan, darle una mayor capacidad para lograr los objetivos que pretenda; adquirir
la madurez, en donde sea capaz de realizar propuestas, presentar alternativas de solución

con originalidad y creatividad y resolver problemas; que puedan responder a los

constantes cambios de este mundo complejo y multicultural.

El aprender a pensar de manera analítica, crítica, creativa y además ser consciente de

ello, es una habilidad que se aprende y que es posible perfeccionar con el apoyo de

estrategias y de la práctica constante. Todo el mundo piensa; es parte de nuestra

naturaleza; pero, mucho de nuestro pensar, por sí solo, es arbitrario, distorsionado,

desinformado o prejuiciado. Sin embargo, nuestra calidad de vida y de lo que

producimos, hacemos o construimos depende, precisamente, de la calidad de nuestro

pensamiento. El pensamiento de mala calidad cuesta tanto en dinero como en calidad de

vida. La excelencia en el pensamiento, sin embargo, debe ejercitarse de forma

sistemática.

Según [ CITATION Fac07 \l 3082 ], con respecto al del pensamiento crítico, plantea:

Enseñe a las personas a tomar decisiones acertadas y las equipará para mejorar su
propio futuro y para convertirse en miembros que contribuyen a la sociedad, en lugar de
ser una carga para ella. Ser educado y hacer juicios acertados no garantiza, en absoluto,
una vida feliz, virtuosa, o exitosa en términos económicos, pero ciertamente ofrece
mayor posibilidad de que esto se logre. Y es definitivamente mejor que afrontar las
consecuencias de tomar malas decisiones y mejor que agobiar a amigos, familia, y al
resto de nosotros con las consecuencias indeseables y evitables de esas decisiones
desacertadas.
El resultado de convertirnos en pensadores críticos es tener la capacidad de formular

problemas y preguntas vitales, con claridad y precisión, acumular y evaluar información

relevante y usar ideas abstractas para interpretar esa información efectivamente. Llegar

a conclusiones y soluciones, probándolas con criterios y estándares relevantes. Pensar

con una mente abierta, reconocer y evaluar, según sea necesario, los supuestos,

implicaciones y consecuencias prácticas y sobre todo ser un gran comunicador. Por

ende, como conclusión, y desde el punto de vista de esta autora, la necesidad de

desarrollar el pensamiento crítico en los alumnos desde los primeros años de escuela es
un objetivo primordial, no solo para el progreso y bienestar de una sociedad o nación;

sino para el mejoramiento y calidad de vida de cada uno de los individuos que la

conformamos.
Bibliografía
Facione, P. (2007). Pensamiento crítico. ¿Qué es y por qué es importante? California: California
Academic Press.
UNIVERSIDAD CATÓLICA DE CUENCA.

MATRIZ.

UNIDAD ACADÉMICA DE PEDAGOGÍA, PSICOLOGÍA Y EDUCACIÓN.

PSICOLOGÍA CLÍNICA.

BLOQUE No. 4

CON DOCENCIA ASISTIDA.

“Necesidad de desarrollar el pensamiento crítico en los estudiantes desde los primeros

años de escuela.”

Materia: Desarrollo del pensamiento.

Docente: Hugo Alvarado.

Estudiante: Claudia Fuentes Rodríguez.


Paralelo: 1B

2015.

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