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PADRE NUESTRO

1. SANTIFICADO: En este tiempo adoramos a Dios por lo que es y le


agradecemos por lo que ha hecho reconociéndolo en la hermosura de su santidad.

Salmos 95: 1-3

Venid, aclamemos alegremente a Jehová; cantemos con júbilo a la roca de


nuestra salvación. Lleguemos ante su presencia; aclamémosle con
canticos. Porque jehova es Dios grande, y Rey grande sobre todos los
dioses.

Salmos 95: 6-7

Venid, adoremos y postrémonos; arrodillémonos delante de Jehová nuestro


Hacedor. Porque él es nuestro Dios; nosotros el pueblo de su prado, y
ovejas de su mano.

Salmos 96: 9

Adorad a Jehová en la hermosura de su santidad; temed delante de él,


toda la tierra.

Salmos 96: 4

Porque grande es Jehová, y digno de suprema alabanza; Temible sobre


todos los dioses.

Salmos 145: 1-3

Te exaltare, mi Dios, mi Rey, y bendeciré tu nombre eternamente y para


siempre. Cada día te bendeciré, y alabaré tu nombre eternamente y para
siempre. Grande es Jehová, y digno de suprema alabanza; y su grandeza
es inescrutable.

Salmos 145: 10-11

Te alaben, oh Jehová, todas tus obras, y tus santos te bendigan. La gloria


de tu reino digan, y hablen de tu poder.

Efesios 1: 3
Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que nos bendijo
con toda bendición espiritual en los lugares celestiales en Cristo.

Salmos 100: 4-5

Entrad por sus puertas con acción de gracias, por sus atrios con alabanza;
alabadle, bendecid su nombre. Porque Jehová es bueno; para siempre es
su misericordia, y su verdad por todas las generaciones.

Salmos 103: 1-5

Bendice, alma mía, a Jehová, y bendiga todo mi ser su santo nombre.


Bendice, alma mía, a Jehová, y no olvides ninguno de sus beneficios. Él es
quien perdona todas tus iniquidades, el que sana todas tus dolencias; el
que rescata del hoyo tu vida, el que te corona de favores y misericordias; el
que sacia de bien tu boca de modo que te rejuvenezcas como el águila.

Salmos 103: 21-22

Bendecid a Jehová, vosotros todos sus ejércitos, ministros suyos, que


hacéis su voluntad. Bendecid a Jehova, vosotras todas sus obras, en todos
los lugares de su señorío. Bendice, alma mía, a Jehová.

Salmos 34:1-3

Bendeciré a Jehová en todo tiempo; su alabanza estará de continuo en mi


boca. En Jehová se gloriara mi alma; lo oirán los mansos, y se alegraran.
Engrandeced a Jehová conmigo, y exaltemos a una su nombre.

Jehová Rohi (pastor) salmos 23

jehová shamar (protección) sal.121:5

Jehová Shalom (paz) efesios 2:14

Jehová sabaot (Dios de los ejércitos)

Jehová Rafa (sanador) Isaías 53:4-5 el eyón (dios altísimo)

Jehová Nissi (estandarte) Isaías 45:2, el shaddai (todopoderoso)

Jehová Kadesh (santificación) levítico 21: 8 el olam (dios eterno)

Jehová Sidkenu (justicia) jeremías 33: 16

Jehová Sama (presencia) éxodo 33: 14

Jehová Jireh (proveedor) génesis 22:14


2. REINO: Este es un tiempo donde expresamos nuestra necesidad de ser
gobernados por Dios.

1 Corintios 4: 20

Porque el reino de Dios no consiste en palabras, sino en poder.

Romanaos 14:17

Porque el reino de Dios no consiste en comida ni en bebida, sino en


justicia, paz y gozo en el Espíritu Santo.

Mateo 6: 33

Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas


cosas os serán añadidas.

Daniel 4:3

¡Cuan grandes son tus señales, y cuan potentes sus maravillas! Su reino,
reino sempiterno, y su señorío de generación en generación.

Mateo 11: 12

Desde los días de juan el bautista hasta ahora, el reino de los cielos sufre
violencia y los violentos lo arrebatan.

Salmos 103: 19

Jehová estableció en los cielos su trono, y su reino domina sobre todos.

Salmos 22:28

Porque de Jehová es el reino, y el regirá las naciones.

3. VOLUNTAD: Este es un tiempo donde pedimos su guianza y renunciamos a


hacer nuestra voluntad para que se establezca la de Él.

1 Tesalonicenses 4:3

Pues la voluntad de Dios es vuestra santificación; que os apartéis de


fornicación.

Salmos 40:8

El hacer tu voluntad, Dios mío, me ha agradado, y tu ley está en medio de


mi corazón.
1 Juan 2:17

Y el mundo pasa, y sus deseos; pero el que hace la voluntad de Dios


permanece para siempre.

Romanos 12:2

No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la


renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cual sea la
buena voluntad de Dios, agradable y perfecta.

Salmos 5:8

Guíame, Jehová, en tu justicia, a causa de mis enemigos; endereza delante


de mi tu camino.

Salmos 27:11

Enséñame, oh Jehová, tu camino, y guíame por senda de rectitud a causa


de mis enemigos.

Proverbios 16:3

Encomienda a Jehová tus obras y el realizara tus proyectos.

Juan 16:13

Pero cuando venga el Espíritu de verdad, él os guiara a toda verdad;


porque no hablara por su propia cuenta, sino que hablara todo lo que
oyere, y os hará saber las cosas que habrán de venir.

Romanos 8:14

Porque todos los que son guiados por el Espíritu de Dios, estos son hijos
de Dios.

Éxodo 13:21-22

Y Jehová iba delante de ellos de día en una columna de nube para guiarlos
por el camino, y de noche en una columna de fuego para alumbrarles, a
fin de que anduviesen de día y de noche. Nunca se apartó de delante del
pueblo la columna de nube de día, ni de noche la columna de fuego.
4. PAN ESPIRITUAL: En este tiempo reconocemos la necesidad de alimentarnos
de su palabra y de su Espíritu.

Mateo 4:4

No solo de pan vivirá el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca
de Dios.

Juan 6:27

Trabajad, no por la comida que perece, sino por la comida que a vida
eterna permanece, la cual el Hijo del Hombre os dará; porque a este señalo
Dios el Padre.

Juan 6:33

Porque el pan de Dios es aquel que descendió del cielo y da vida al mundo.

Juan 6:35

Jesús les dijo: Yo soy soy el pan de vida; el que a mi viene, nunca tendrá
hambre; y el que en mi cree, no tendrá sed jamás.

Salmos 119:105

Lámpara es a mis pies tu palabra, y lumbrera a mi camino.

Juan 6:50-51

Este es el pan que desciende del cielo, para que el que de él come, no
muera. Yo soy el pan vivo que descendió del cielo; si alguno comiere de
este pan, vivirá para siempre; y el pan que yo daré es mi carne, la cual yo
daré por la vida del mundo.

2 Timoteo 3:16

Toda la escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para


redargüir, para corregir, para instruir en justicia, a fin de que el hombre
de Dios sea perfecto, enteramente preparado para toda buena obra.
Isaías 55:10-11

Porque como desciende de los cielos la lluvia y la nieve, y no vuelve allá,


sino que riega la tierra, y la hace germinar y producir, da semilla al que
siembra, y pan al que come, así será mi palabra que sale de mi boca; no
volverá a mi vacía, sino que hará lo que yo quiero, y será prosperada en
aquello para que la envié.

Hebreos 4:12

Porque la palabra de Dios es viva y eficaz, y más cortante que toda espada
de dos filos; y penetra hasta partir el alma y el espíritu, las coyunturas y
los tuétanos, y discierne los pensamientos y las intenciones del corazón.

Efesios 1:3

Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que nos bendijo
con toda bendición espiritual en los lugares celestiales en Cristo.

Salmos 42:1-2

Como el siervo brama por las corrientes de las aguas, así clama por ti, oh
Dios, el alma mía. Mi alma tiene sed de Dios, del Dios vivo; ¿Cuándo
vendré, y me presentare delante de Dios?

1 Pedro 2:2

Desead, como niños recién nacidos, la leche espiritual no adulterada,


para que por ella crezcáis para salvación.

Salmos 19:7-10

La ley de Jehová es perfecta, que convierte el alma; el testimonio de Jehová


es fiel, que hace sabio al sencillo. Los mandamientos de Jehová son rectos,
que alegran el corazón; el precepto de Jehová es puro, que alumbra los
ojos. El temor de Jehová es limpio, que permanece para siempre; los
juicios de Jehová son verdad, todos justos. Deseables son más que el oro,
y más que mucho oro afinado; y dulces más que miel, y que la que destila
del panal.

Juan 7:37-38

…Si alguno tiene sed venga a mí y beba. El que cree en mí, como dice la
Escritura, de su interior correrán ríos de agua viva.
Mateo 5:6

Bienaventurados los que tiene hambre y sed de justicia, porque ellos serán
saciados.

PAN MATERIAL: Este es un tiempo donde le manifestamos nuestra necesidad de


ser sustentados por El, en nuestro ser físico.

3 Juan. 2

Amado, yo deseo que seas prosperado en todas las cosas, y que tengas
salud, así como prospera tu alma.

Filipenses 4:19

Mi Dios, pues suplirá todo lo que os falta conforme a sus riquezas en gloria
en Cristo Jesús.

Mateo 7:7-8

Pedid, y se os dará; buscad, y hallareis; llamad y se os abrirá. Porque todo


aquel que pide, recibe; y el que busca, halla; y al que llama, se le abrirá.

Salmos 132:15

Bendeciré abundantemente su provisión; a sus pobres saciare de pan.

Salmos 37:25-26

Joven fui, y he envejecido, y no he visto justo desamparado, ni su


descendencia que mendigue pan. En todo tiempo tiene misericordia, y
presta; y su descendencia es para bendición.

Proverbios 10:22

La bendición de Jehová es la que enriquece, y no añade tristeza con ella.

Isaías 44:3

Porque yo derramare aguas sobre el sequedal, y ríos sobre la tierra árida;


mi Espíritu derramare sobre tu generación, y mi bendición sobre tu
renuevo.
Salmo 78:15-16

Hendió las peñas en el desierto, y les dio a beber como de grandes


abismos, pues sacó de la peña corrientes, e hizo descender aguas como
ríos.

Ezequiel 34:26

Y daré bendición a ellas y a los alrededores de mi collado, y hare descender


la lluvia en su tiempo; lluvias de bendición serán.

Lucas 6:38

Dad, y se os dará; medida buena, apretada, remecida y rebosando darán


en vuestro regazo; porque con la misma medida con que medís, os
volverán a medir.

Malaquías 3:10-11

Traed todos los diezmos al alfolí y haya alimento en mi casa; probadme


ahora en esto, dice Jehová de los ejércitos, sino os abriré las ventanas de
los cielos, y derramare sobre vosotros bendición hasta que sobreabunde.
Reprenderé también por vosotros al devorador, y no os destruirá el fruto
de la tierra, ni vuestra vida en el campo será estéril, dice Jehová de los
ejércitos.

5. PERDÓN: En este tiempo expresamos la necesidad de estar en paz con nuestro


Dios y con el prójimo, también es un tiempo donde nos humillamos delante de Él
reconociendo nuestros pecados.

Isaías 1:18

Venid luego, dice Jehová, y estemos a cuenta: si vuestros pecados fueren


como la grana, como la nieve serán emblanquecidos; si fueren rojos como
el carmesí, vendrán a ser como blanca lana.

Salmos 51:17

Los sacrificios de Dios son el espíritu quebrantado; al corazón contrito y


humillado no desprecias tú, oh Dios.

Proverbios 28:13

El que encubre sus pecados no prosperará; mas el que los confiesa y se


aparta alcanzará misericordia.
1 Juan 1:9

Si confesamos nuestros pecados, él es fiel y justo para perdonar nuestros


pecados, y limpiarnos de toda maldad.

Juan 1:29

He aquí el Cordero de Dios, que quita el pecado del mundo.

Miqueas 7:18-19

¿Qué Dios como tú, que perdona la maldad, y olvida el pecado del
remanente de su heredad? No retuvo para siempre su enojo, porque se
deleita en misericordia. El volverá a tener misericordia de nosotros;
sepultara nuestras iniquidades, y echará en lo profundo del mar todos
nuestros pecados.

1 Juan 1:7

Pero si andamos en luz, como él está en luz, tenemos comunión unos con
otros, y la sangre de Jesucristo su Hijo nos limpia de todo pecado.

1 Juan 1:10

Si decimos que no hemos pecado, le hacemos a él mentiroso, y su palabra


no está en nosotros.

Romanos 5:20

Más cuando el pecado abundó, sobreabundó la gracia.

Salmos 130:3-4

Jehová, si mirares a los pecados, ¿Quién, oh Señor, podrá mantenerse?


Pero en ti hay perdón, para que sea reverenciado.

Hechos 10:43

De éste dan testimonio todos los profetas, que todos los que en el creyeren,
recibirán perdón de pecados por su nombre.

Colosenses 1:14

En quien tenemos redención por su sangre, el perdón de pecados.


Números 14:19

Perdona ahora la iniquidad de este pueblo según la grandeza de tu


misericordia, y como has perdonado a este pueblo desde Egipto hasta
aquí.

Éxodo 34:6-7

Y pasando Jehová por delante de él, proclamo: ¡Jehová! ¡Jehová! Fuerte,


misericordioso y piadoso; tardo para la ira, y grande en misericordia y
verdad; Que guarda misericordia a millares, que perdona la iniquidad, la
rebelión y el pecado, y que de ningún modo tendrá por inocente al
malvado; que visita la iniquidad de los padres sobre los hijos y sobre los
hijos de los hijos, hasta la tercera y cuarta generación.

2 Crónicas 7:14

Si se humillare mi pueblo, sobre el cual mi nombre es invocado, y oraren,


y buscaren mi rostro, y se convirtieren de sus malos caminos; entonces yo
los oiré desde los cielos, y perdonaré sus pecados, y sanaré su tierra.

2 Crónicas 7:15-16

Ahora estarán abiertos mis ojos y atentos mis oídos a la oración en este
lugar; porque ahora he elegido y santificado esta casa, para que este en
ella mi nombre para siempre; y mis ojos y mi corazón estarán ahí para
siempre.

Salmos 79:9

Ayúdanos, oh Dios de nuestra salvación, por la gloria de tu nombre; y


líbranos, y perdona nuestros pecados por amor de tu nombre.

Daniel 9:9

De Jehová nuestro Dios es el tener misericordia y el perdonar, aunque


contra él nos hemos rebelado.
Salmos 51:1-4

Ten piedad de mí, oh Dios, conforme tu misericordia; conforme a la


multitud de tus piedades borra mis rebeliones. Lávame más y más de mi
maldad, y límpiame de mi pecado. Porque yo reconozco mis rebeliones, y
mi pecado está siempre delante de mí. Contra ti, contra ti solo he pecado,
y he hecho lo malo delante de tus ojos; para que seas reconocido justo en
tu palabra, y tenido por puro en tu juicio.

Salmos 51:7

Purifícame con hisopo, y seré limpio; lávame, y seré más blanco que la
nieve.

Salmos 51:9-10

Esconde tu rostro de mis pecados, y borra todas mis maldades. Crea en


mí, oh Dios, un corazón limpio, y renueva un espíritu recto dentro de mí.

Isaías 1:25

Y volveré mi mano contra ti, y limpiare hasta lo más puro tus escorias, y
quitare toda tu impureza.

Jeremías 33:8

Y los limpiaré de toda su maldad con que pecaron contra mí; y perdonaré
todos sus pecados con que contra mi pecaron, y que contra mí se
rebelaron.

Daniel 9:18

Inclina, oh Dios mío, tu oído, y oye; abre tus ojos, y mira nuestras
desolaciones, y la ciudad sobre la cual es invocado tú nombre; porque no
elevamos nuestros ruegos ante ti confiados en nuestras justicias, sino en
tus muchas misericordias.

Romanos 4:7-8

Bienaventurados aquellos cuyas iniquidades son perdonadas, y cuyos


pecados son cubiertos. Bienaventurados el varón a quien el Señor no
inculpa de pecado.
Joel 2:17-18

Entre la entrada y el altar lloren los sacerdotes ministros de Jehová, y


digan: Perdona, oh Jehová, a tu pueblo, y no entregues al oprobio tu
heredad, para que las naciones se enseñoreen de ella. ¿Por qué han de
decir entre los pueblos: Donde está su Dios? Y Jehová, solícito por su
tierra, perdonara a su pueblo.

Marcos 11:25

Y cuando estéis orando, perdonad, si tenéis algo contra alguno, para que
también vuestro Padre que está en los cielos os perdone a vosotros
vuestras ofensas.

Colosenses 3:13

Soportándoos unos a otros, y perdonándoos unos a otros si alguno tuviere


queja contra otro. De la manera que Cristo os perdonó, así también
hacedlo vosotros.

6. GUÁRDANOS: Este es un tiempo donde manifestamos nuestra necesidad de ser


guardados y protegidos por Dios.

Salmos 144:2

Misericordia mía y mi castillo, fortaleza y mi libertador, escudo mío, en


quien he confiado; el que sujeta a mi pueblo debajo de mí.

Salmos 31:1-5

En ti, oh Jehová, he confiado; no sea yo confundido jamás; Líbrame en tu


justicia. Inclina a mi tu oído, líbrame pronto; Se tu mi roca fuerte, y
fortaleza para salvarme. Porque tú eres mi roca y mi castillo; por tu
nombre me guiaras y me encaminaras. Sácame de la red que me han
escondido para mí, pues tú eres mi refugio. En tu mano encomiendo mi
espíritu; Tú me has redimido, oh Jehová, Dios de verdad.

Salmos 125:2

Como Jerusalén tiene montes alrededor de ella, así Jehová está alrededor
de su pueblo desde ahora y para siempre.
Salmos 31:14-15

Mas yo en ti confió, oh Jehová; Digo: Tú eres mi Dios. En tus manos están


mis tiempos; Líbrame de las manos de mis enemigos y de mis
perseguidores.

Salmos 121

Alzare mis ojos a los montes; ¿De dónde vendrá mi socorro? Mi socorro
viene de Jehová, Que hizo los cielos y la tierra. No dará mi pie al
resbaladero, Ni se dormirá el que te guarda. He aquí, no se adormecerá ni
dormirá El que guarda a Israel. Jehová es tu guardador; Jehová es tu
sombra a tu mano derecha. El sol no te fatigara de día, Ni la luna de
noche. Jehová te guardará de todo mal; El guardará tu alma. Jehová
guardará tu salida y tu entrada. Desde ahora y para siempre.

Colosenses 1:11

El cual nos ha librado de la potestad de las tinieblas, y trasladado al reino


de su amado Hijo.

Hebreos 2:18

Pues en cuanto el mismo padeció siendo tentado, es poderoso para


socorrer a los que son tentados.

Salmos 31:23

Amad a Jehová, todos vosotros sus santos; A los fieles guarda Jehová

Salmos 141:3-4

Pon guarda mi boca, oh Jehová, guarda la puerta de mis labios. No dejes


que se incline mi corazón a cosas malas, a hacer obras impías.

Salmos 141:9

Guárdame de los lazos que me han tendido, y de las trampas de los que
hacen iniquidad.

Salmos 144:11

Rescátame, y líbrame de la mano de los hombres extraños, cuya boca


habla vanidad, y cuya diestra es diestra de mentira.
Salmos 34:7

El Ángel de Jehová acampa alrededor de los que le temen, y los defiende.

Salmos 91:1-4

El que habita al abrigo del Altísimo morara bajo la sombra del


Omnipotente. Diré yo a Jehová: Esperanza mía, y castillo mío; mi Dios, en
quien confiare. Él te librara del lazo del cazador, de la peste destructora.
Con sus plumas te cubrirá, y debajo de sus alas estarás seguro; Escudo y
adarga es su verdad.

Salmos 91:11-12

Pues a sus Ángeles mandara acerca de ti, que te guarden en todos tus
caminos. En las manos te llevaran, para que tu pie no tropiece en piedra.

Salmos 17:8-9

Guárdame como a la niña de tus ojos; escóndeme bajo la sombra de tus


alas, de la vista de los malos que me oprimen, de mis enemigos que
buscan mi vida.

Santiago 1:12

Bienaventurado el varón que soporta la tentación; porque cuando haya


resistido la prueba, recibirá la corona de la vida, que Dios ha prometido a
los que le aman.

Isaías 26: 3

Tú guardaras en completa paz a aquel cuyo pensamiento en ti persevera;


porque en ti ha confiado.

7. GUERRA: Este es un tiempo donde pedimos ser librados por Dios; atamos las
fuerzas del mal, hacemos guerra espiritual y posteriormente declaramos la victoria de
Jesucristo en nosotros.

Zacarías 10:5

Y serán como valientes que en la batalla huellan al enemigo en el lodo de


las calles; y pelearan, porque Jehová estará con ellos; y los que cabalgan
en caballos serán avergonzados.
Jeremías 20:11

Mas Jehová está conmigo como poderoso gigante; por tanto, los que me
persiguen tropezaran, y no prevalecerán; serán avergonzados en gran
manera, porque no prosperarán; tendrán perpetua confusión que jamás
será olvidada.

Isaías 42:13

Jehová saldrá como gigante, y como hombre de guerra despertara celo;


gritará, voceará, se esforzará sobre sus enemigos.

Salmos 91:7

Caerán a tu lado mil, y diez mil a tu diestra; mas a ti no llegará.

Salmos 91:13

Sobre el león y el áspid pisarás; hollarás al cachorro del león y al dragón.

1 Juan 4:4

Hijitos, vosotros sois de Dios, y los habéis vencido; porque mayor es el que
está en vosotros, que el que está en el mundo.

Colosenses 2:15

Y despojando a los principados y a las potestades, los exhibió


públicamente, triunfando sobre ellos en la cruz.

Apocalipsis 12:11

Y ellos le han vencido por medio de la sangre del Cordero y de la palabra


del testimonio de ellos, y menospreciaron sus vidas hasta la muerte.

Mateo 4:10

Vete, Satanás, porque escrito esta: Al Señor tu Dios adorarás, y al solo


servirás.

Ezequiel 28:19

Espanto serás, y para siempre dejarás de ser.


Isaías 59:19

Porque vendrá el enemigo como río, más el Espíritu de Jehová levantará


bandera contra él.

Deuteronomio 28:7

Jehová derrotará a tus enemigos que se levantaren contra ti; por un


camino saldrán contra ti, y por siete caminos huirán de delante de ti.

Salmos 68:1-2

Levantase Dios, sean esparcidos sus enemigos, y huyan de su presencia


los que le aborrecen. Como es lanzado el humo, los lanzaras; como se
derrite la cera delante del fuego, así perecerán los impíos delante de Dios.

Jeremías 51:20

Martillo me sois, y armas de guerra; y por medio de ti quebrantare


naciones, y por medio de ti destruiré reinos.

Santiago 4:7

Someteos, pues a Dios; resistid al diablo, y el huirá de vosotros.

Mateo 18:18

De cierto os digo que todo lo que atéis en la tierra, será atado en el cielo; y
todo lo desatéis en la tierra, será desatado en el cielo.

Éxodo 14:14

Jehová peleará por vosotros, y vosotros estaréis tranquilos.

Salmos 18:37-40

Perseguí a mis enemigos, y los alcancé, y no viví hasta acabarlos. Los herí
de modo que no se levantasen; cayeron debajo de mis pies. Pues me
ceñiste de fuerzas para la pelea; has humillado a mis enemigos debajo de
mí. Has hecho que mis enemigos me vuelvan las espaldas, para que yo
destruya a los que me aborrecen.

Romanos 8:31

Si Dios es por nosotros, ¿quién contra nosotros?


Salmos 18:46-48

Viva Jehová, y bendita sea mi roca, y enaltecido sea el Dios de mi


salvación; el Dios que venga mis agravios, y somete pueblos debajo de mí;
el que me libra de mis enemigos, y aun me eleva sobre los que se levantan
contra mí; me libraste de varón violento.

Lucas 10:19

He aquí os doy potestad de hollar serpientes y escorpiones, y sobre toda


fuerza del enemigo, y nada os dañará.

Salmos 144:1

Bendito sea Jehová, mi roca, quien adiestra mis manos para la batalla, y
mis dedos para la guerra.

Salmos 37:20

Mas los impíos perecerán, y los enemigos de Jehová como la grasa de los
carneros serán consumidos; se disiparan como el humo.

1 Corintios 15:25

Porque preciso es que él reine hasta que haya puesto a todos tus enemigos
debajo de sus pies.

Efesios 6:11-12

Vestíos de toda la armadura de Dios, para que podáis estar firmes contra
las asechanzas del diablo. Porque no tenemos lucha contra sangre y carne,
sino contra principados, contra potestades, contra los gobernadores de las
tinieblas de este siglo, contra huestes espirituales de maldad en las
regiones celestes.

2 Corintios 10:4-5

Porque las armas de nuestra milicia no son carnales, sino poderosas en


Dios para la destrucción de fortalezas, derribando argumentos y toda
altivez que se levanta contra el conocimiento de Dios, y llevando cautivo
todo pensamiento a la obediencia a Cristo.
Isaías 54.17

Ningún arma forjada contra ti prosperará.

1 Juan 3:8

Para esto apareció el hijo de Dios, para deshacer las obras del diablo.

Romanos 16:20

Y el Dios de paz aplastará en breve a Satanás bajo vuestros pies.

Jeremías 1:10

Mira que te he puesto en este día sobre naciones y sobre reinos, para
arrancar y para destruir, para arruinar y para derribar, para edificar y
para plantar.

Nehemías 2:20

El Dios de los cielos, él nos prosperara, y nosotros sus siervos nos


levantaremos y edificaremos, porque vosotros no tenéis parte ni derecho ni
memoria en Jerusalén.

1 Corintios 15:57

Mas gracias sean dadas a Dios, que nos da la victoria por medio de
nuestro Señor Jesucristo.

2 Corintios 3:17

Porque el Señor es el Espíritu; y donde está el Espíritu del Señor, allí hay
libertad.

Isaías 45:2

Yo iré delante de ti, y enderezare los lugares torcidos; quebrantare puertas


de bronce, y cerrojos de hierro hare pedazos.

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