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Universidad del Valle

Doctorado en Filosofía
Seminario de Investigación
Profesor Francois Gagin
Estudiante Ysis Vélez
INVESTIGAR LOS ANIMALES
UN MODO DE VIDA ARISTOTÉLICO
SOBRE EL DE PARTIBUS ANIMALIUM 645 a

El presente escrito hará un comentario al pasaje del libro I, 645 a, De Partibus Animalium,
siguiendo la edición inglés-griego de Loeb Classical Library, London, 1961, traducido por
A-L Peck y la edición de gredos, Madrid, 2000, traducción de Elvira Jiménez Sánchez y
Almudena Alonso Miguel; entretanto, la lectura y reflexión sobre el siguiente pasaje tiene la
intención de mostrar el lugar que Aristóteles le da a la biología, considerando que la
investigación sobre los animales promueve un modo de vida teorético, que diferencia los
objetos de conocimiento y los vincula a través de la noción de El problema de los
animales en Aristóteles, supone hacerse preguntas tales como el ámbito desde el cual se
investiga sobre ellos, la manera como los percibimos y la contribución de este saber al cuerpo
doctrinal del estagirita. Por ello, el presente pasaje parte de una jerarquía de las ciencias en
Aristóteles, en la que la más sublime y perfecta es la metafísica y la siguiente, la filosofía
natural. Esta distinción está matizada por la naturaleza de los objetos que persigue y se
fundamenta en una gradación ontológica presente en sus disquisiciones acerca de la 
en el estagirita; la diferenciación no es caprichosa, se adscribe a la cosmovisión griega y a
las influencias de Aristóteles, tal es el caso puntual del presente pasaje 645 a, 5-20, en donde
la anécdota de Heráclito se constituye en palabra de autoridad de quien exhibe una vida
filosófica y fortalece la manera de entender el ejercicio del :

τὰ δὲ διὰ τὸ μᾶλλον καὶ πλείω γνωρίζειν αὐτῶν λαμβάνει τὴν τῆς ἐπιστήμης ὑπεροχήν, ἔτι
δὲ διὰ τὸ πλησιαίτερα ἡμῶν εἶναι καὶ τῆς φύσεως οἰκειότερα ἀντικαταλλάττεταί τι πρὸς
τὴν περὶ τὰ θεῖα φιλοσοφίαν. Ἐπεὶ δὲ περὶ ἐκείνων διήλθομεν λέγοντες τὸ φαινόμενον
ἡμῖν, λοιπὸν περὶ τῆς ζωϊκῆς φύσεως εἰπεῖν, μηδὲν παραλιπόντας εἰς δύναμιν μήτε
ἀτιμότερον μήτε τιμιώτερον. 4 Καὶ γὰρ ἐν τοῖς μὴ κεχαρισμένοις αὐτῶν πρὸς τὴν αἴσθησιν
κατὰ τὴν θεωρίαν ὅμως ἡ δημιουργήσασα φύσις ἀμηχάνους ἡδονὰς παρέχει τοῖς
δυναμένοις τὰς αἰτίας γνωρίζειν καὶ φύσει φιλοσόφοις. Καὶ γὰρ ἂν εἴη παράλογον καὶ
ἄτοπον, εἰ τὰς μὲν εἰκόνας αὐτῶν θεωροῦντες χαίρομεν ὅτι τὴν δημιουργήσασαν τέχνην
συνθεωροῦμεν, οἷον τὴν γραφικὴν ἢ τὴν πλαστικήν, αὐτῶν δὲ τῶν φύσει συνεστώτων μὴ
μᾶλλον ἀγαπῷμεν τὴν θεωρίαν, δυνάμενοί γε τὰς αἰτίας καθορᾶν. 5 Διὸ δεῖ μὴ
δυσχεραίνειν παιδικῶς τὴν περὶ τῶν ἀτιμοτέρων ζῴων ἐπίσκεψιν. Ἐν πᾶσι γὰρ τοῖς
φυσικοῖς ἔνεστί τι θαυμαστόν· καὶ καθάπερ Ἡράκλειτος λέγεται πρὸς τοὺς ξένους εἰπεῖν
τοὺς βουλομένους ἐντυχεῖν αὐτῷ, οἳ ἐπειδὴ προσιόντες εἶδον αὐτὸν θερόμενον πρὸς τῷ
ἰπνῷ ἔστησαν (ἐκέλευε γὰρ αὐτοὺς εἰσιέναι θαρροῦντας· εἶναι γὰρ καὶ ἐνταῦθα θεούς), 6
οὕτω καὶ πρὸς τὴν ζήτησιν περὶ ἑκάστου τῶν ζῴων προσιέναι δεῖ μὴ δυσωπούμενον ὡς ἐν
ἅπασιν ὄντος τινὸς φυσικοῦ καὶ καλοῦ.
En estos términos, Aristóteles se refiere a un modo de conocer, γνωρίζειν, el cual se
diferencia de πρὸς τὴν περὶ τὰ θεῖα φιλοσοφίαν; la escogencia del verbo en este apartado
del de Partibus Animalium, es concordante con la idea que sostiene el filósofo, pues se trata
del saber de la en cuyo caso γνωρίζειν significa tener conocimiento de las cosas
cotidianas y descubrirlas en su inmediatez y familiaridad. Esta idea se refiere a la botánica,
a la zoología y a la biología cuya connotación está desplegada en las expresiones
comparativas (..)τὰ δὲ διὰ τὸ μᾶλλον καὶ πλείω, (..)διὰ τὸ πλησιαίτερα ἡμῶν, así como,
(…)καὶ τῆς φύσεως οἰκειότερα, es decir, que una primera impresión del filósofo de la
naturaleza es que dicho conocimiento γνωρίζειν es más asequible, amplio y tiene una
familiaridad innegable; desde esta perspectiva, se debe hacer ciencia de las cosas inmediatas,
de las que tenemos experiencia, es una especie de llamado a no dejar intacto el mundo como
nos lo encontramos, sino que debe despertar en nosotros inquietudes válidas; desde aquí
conocer no implica un desprecio por lo que nos rodea, ni de aquello con lo que convivimos,
porque sin una actitud de curiosidad nos limitaríamos a llevar una vida impropia de la
filosofía; la idea concerniente a τὴν περὶ τὰ θεῖα φιλοσοφίαν, o la vida consagrada a la
sabiduría, , implica no sólo una aspiración, sino la cúspide del conocimiento y la
actividad a la que el filósofo no debe renunciar. Así el conocimiento del mundo inmediato,
se contrasta con el más complejo, el de la entidad suprasensible, de Dios, de las causas,
, que fundamenta o estructura todas las cosas, ello nos revela un modo de vida más
exigente, un conocimiento distinto al γνωρίζειν, diferenciado de la .No obstante, sería
un error ver una compartimentación entre lo divino y lo natural, quizá son dos maneras de
hacer ciencia, con ciertas conexiones metódicas y teóricas que promueven un modo de vida
teorético, en donde las ciencias se encuentran, a través de la aspiración a la 

En consecuencia, el filósofo considera que se debe investigar περὶ τῆς ζωϊκῆς φύσεως
incluyendo lo más humilde o elevado -ἀτιμότερον, τιμιώτερον- del . El filósofo no
debe ser presa de las apariencias y sus propios prejuicios, pues lo repugnante o sencillo (…)
Καὶ γὰρ ἐν τοῖς μὴ κεχαρισμένοις αὐτῶν πρὸς τὴν αἴσθησιν, no debe detener su
investigación, τὴν ζήτησιν. En tal respecto, Aristóteles nos exige un trabajo profundo sobre
nuestras propias percepciones acerca de los animales, dado que no sería adecuado alimentar
nuestras imágenes infantiles, sino por el contrario, esforzarnos en conocer a los vivientes;
bajo la idea de que la belleza de la no se halla en las formas aparentes sino en un
conocimiento más profundo, que nos revelará la esencia de los seres, y ello sólo es posible
cuando investigamos acerca de las causas, ἡ δημιουργήσασα φύσις ἀμηχάνους ἡδονὰς
παρέχει τοῖς δυναμένοις τὰς αἰτίας γνωρίζειν καὶ φύσει φιλοσόφοι. De esta manera, la
φύσις se comprende como principio de los seres y provoca admiración y deseo de
comprender a quien toma la investigación como un modo de vida. Aristóteles le reserva un
lugar de honor a la investigación sobre los animales, parte de la idea de una compensación o
intercambio, ἀντικαταλλάττεταί τι, con relación al escaso conocimiento metafísico, que es
posible equilibrar con la filosofía de la naturaleza, en especial con la indagación sobre los
animales; por ende, será conveniente el conocimiento de las causas, τὰς αἰτίας. Esta es una
manera de promover la vida teorética y sentar un currículo para el filósofo del Liceo,
estableciendo la orientación hacia la biología, con un tema nada despreciable y que
contribuye en general al saber científico, la investigación de los vivientes o animales; (…)
Διὸ δεῖ μὴ δυσχεραίνειν παιδικῶς τὴν περὶ τῶν ἀτιμοτέρων ζῴων ἐπίσκεψιν. Ἐν πᾶσι γὰρ
τοῖς φυσικοῖς ἔνεστί τι θαυμαστόν. Desde lo cual podemos afirmar que existe una
articulación entre lo divino y lo animal, en primer lugar porque se trata del ejercicio del
 el cual se expresa en el pasaje a través de las formas participiales θεωροῦντες,
συνθεωροῦμεν, para establecer un contraste entre la investigación: por un lado, Aristóteles
nos indica el examen de las imágenes de las cosas, τὰς μὲν εἰκόνας αὐτῶν; frente a las cuales,
nos maravillamos de las artes, como la pintura y la estatuaria, τὴν γραφικὴν ἢ τὴν πλαστικήν;
al comprender el principio creador δημιουργήσασαν τέχνην; por otra parte, debemos conocer
las causas de quien modela la naturaleza, ἡ δημιουργήσασα φύσις con mayor compromiso
pues se trata de conocer el principio productor de los vivientes. En esta perspectiva ,
Aristóteles se encontró con el legado de las artes, para examinar el problema de los animales,
pues hay belleza en las representaciones de la pinturas, la estatuaria, así como en las
descripciones de los pescadores, en los conocimientos médicos y aún en el sentido de las
fábulas de su tradición cultural; con todo, el llamado a la investigación sobre los animales,
consiste en la incursión a través de la filosofía de la naturaleza, en la biología, bajo la
confianza y el optimismo de un científico, que toma como punto de partida, una actitud de
apertura mediante el el cual se expresa en el pasaje mediante las formas verbales
tales como κεχαρισμένοις, χαίρομεν, ἀγαπῷμεν, que expresan el deseo, el amor por los
sentidos, las artes y la naturaleza, como criterios de la actividad científica; de este modo, a
través de la narración de Heráclito, quien exhibe a sus invitados la presencia divina en un
artefacto de la cocina, su horno, cómo en este lugar propio de esclavos y mujeres, el fuego o
el penetra lo cotidiano. Asimismo, al investigar sobre cada animal, podemos
encontrar lo natural y bello que se equipara con lo divino οὕτω καὶ πρὸς τὴν ζήτησιν περὶ
ἑκάστου τῶν ζῴων προσιέναι δεῖ μὴ δυσωπούμενον ὡς ἐν ἅπασιν ὄντος τινὸς φυσικοῦ καὶ
καλοῦ; en cuanto la forma de investigación teorética y la actitud hacia la biología, puede
contribuir a desatar la visión antropocéntrica o logocéntrica instalada en el pasaje, dando
lugar a una actitud de investigación profunda de los animales, una forma de  que nos
vincula con lo más elevado del cosmos.

Bibliografía

Aristóteles. (2000). Las Partes de los animales. Marcha y Movimiento. Madrid: Gredos.

Aristotle. (1961). Parts of Animals, Movement of Animals, Progression of Animals. Londres:


Harvard University Press.

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