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Aceite de

argán
natural
es un producto excepcional para la piel
por su capacidad de nutrirla desde la
hipodermis (la capa más profunda de la
piel) a la vez que actúa para mejorar la
firmeza y la elasticidad y mejorar la
apariencia de estrías y cicatrices. Este
compuesto por aceites, en el caso de un
aceite corporal natural, se compone de aceites vegetales que, gracias a su
estructura, muy similar a los aceites naturales creados por la piel, penetran
en ella aportando un aspecto radiante.

Su fórmula está pensada para aplicar en todo tipo de pieles, incluso las más
sensibles. A diferencia de lo que tememos, los aceites que lo componen no
son grasos, son fáciles de extender y su absorción es rápida. Lo cierto es
que su aplicación no deja indiferente a nadie, el aceite corporal nos aporta
una sensación muy agradable a la vez que relajante.

¿Por qué deberías usar aceite de argán?


mejora la apariencia de estrías, manchas y cicatrices, combate la
deshidratación de las pieles más secas y actúa con antioxidantes para frenar
el envejecimiento de la piel. El aceite corporal contiene una alta
concentración de activos naturales y tecnologías clínicas que nutren e
hidratan las capas más profundas de la piel.
Combate la deshidratación de la piel
Nutre en profundidad frenando la deshidratación gracias a la alta
concentración de los mejores aceites vegetales nutritivos y su capacidad
por penetrar en las capas más profundas de la piel.

Reafirma la piel flácida


Su gran poder nutritivo proporciona elasticidad a la piel y un efecto
reductor con lo que consigues ganar firmeza y tersura en tu piel.

Frena el envejecimiento de la piel


Es regeneran té y protector. Su poder regenerador cutáneo y su
concentración en antioxidantes protege la piel de los agentes externos que
pueden acelerar el envejecimiento de la piel.

Máximo poder reductor


Estimula los mecanismos naturales de quema de grasa de la piel
traduciéndose en una reducción de la grasa y celulitis acumuladas.

Trata y previene la formación de estrías


Estas líneas visibles blanquecinas o amoratadas se producen por una rotura
de colágeno debido al estiramiento de la piel en etapas como el embarazo,
un cambio de peso o por musculación. El aceite de mosqueta, presente en la
mayoría de aceites corporales, es un buen aliado para tratarlas puesto que
está fuertemente vinculado con la síntesis de colágeno.

Es un magnífico tratamiento anticelulítico


Combate la celulitis. La celulitis representa un exceso de grasa medida por
la unión entre la dermis y la hipodermis. Para combatirla, se incorporan
activos naturales que activan el mecanismo quema grasas del tejido adiposo
y actúan como reductor y anticelulítico incrementando la elasticidad y la
firmeza.

Adiós a las cicatrices


De la misma manera que el aceite corporal trata las estrías trata también las
cicatrices. Mejora la apariencia de las cicatrices gracias a su poder
regenerador y unifica el tono con el resto de la piel.

Elimina la piel de naranja


La piel de naranja no es más que tejido graso acumulado en ciertas zonas
del cuerpo que al sobresalir entre las fibras, genera pequeños bultitos en la
piel. El aceite corporal actúa en las capas más profundas de la piel
generando un impacto también en disolver la piel de naranja.

Actúa con antioxidante


El aceite corporal contiene muchas vitaminas entre las que destaca la
vitamina E por su poder antioxidante y regenerador. Esta vitamina tiene
regenera la piel y la protege de los efectos externos como los radicales
libres. De esta manera, el aceite corporal actúa como antioxidante
previniendo el envejecimiento prematuro de la piel.

Por todos estos beneficios, el aceite corporal se ha convertido en un


perfecto aliado para cualquiera, siendo también apto para mujeres
embarazadas y en etapa de post-parto puesto que calma las pieles más
sensibles, atenúa rojeces, trata celulitis y estrías, estimula la producción de
colágeno y promueve la regeneración de la piel.

Pruébalo y veras la
diferencia

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