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413 Amurrio se encuentra dentro del valle de Ayala una zona que está
situada al noroeste de Álava, limitando con Bizkaia y Burgos. A ojos de
Galíndez representaría a la Euskadi más bucólica y más tradicional.
414 Iñaki Bernardo e Iñaki Goiogana, Galíndez: la tumba abierta. Guerra, exilio
416 Jesús Galíndez, La Era Trujillo, Santo Domingo, Editorial Letra Gráfica,
1999, p. 264.
417 Iñaki Bernardo e Iñaki Goiogana, Galíndez, op.cit., p. 50.
418 Ibid., p. 51 y ss.
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Pronto sacó rédito a su estancia en la República Dominicana,
convirtiéndose en uno de los máximos expertos en latinoamericanismo.
Fue invitado a numerosos congresos y mesas redondas y escribió
numerosos artículos en reputadas revistas como Vision, Hemispherica,
Revista de América, Ibérica y Cuadernos Americanos419. Galíndez, que tenía
«la biblioteca más completa sobre Trujillo existente en EEUU», se
especializó tanto en la materia que el profesor Frank Tannenbaum,
experto en historia de Latinoamérica, le animó a que realizara su tesis
doctoral sobre la dictadura dominicana420. Incluso, esta cuestión fue
el leitmotiv de su producción literaria: El Carnicero del Caribe, una
novela inacabada sobre Trujillo que fue presentada en el Círculo de
Escritores y Poetas Iberoamericanos (CEPI)421.
Fue una persona entregada a su trabajo, que compaginó sus
cargos docentes en Columbia con su actividad política. Su puesto de
profesor le sirvió tanto de «carta de presentación» ante algunos foros
diplomáticos americanos como de aval para participar en mítines del
Partido Demócrata en Nueva York. Incluso, se planteó dar el salto a
la política municipal en los distritos de presencia portorriqueña, a las
que estuvo muy vinculado. Pero, al margen de las labores de lobbying
político realizadas como delegado vasco en Nueva York y su papel
como observador en la ONU, Galíndez fue un dedicado académico.
Publicó regularmente en diferentes revistas y en numerosos
periódicos, dictó dos clases por semana en Columbia, participó en el
mencionado CEPI y promovió la organización de eventos literarios
como los juegos florales422.
American Civil Liberties Union, American Committee for Cultural Freedom, Inter-
American Association for Democracy and Freedom, International League for the Rights
of Man, AFL-CIO Latin American representative, Pan-American Women's
Association, Post-War World Council, Spanish Benevolent Society, Spanish
Confederated Societies of New York and Workers Defense League.
428 «New York University Faculty Protests Galíndez Murder», Boletín del
430 «Galíndez search by FBI is urged», The New York Times, 21-III-1956,
CUA, Tannenbaum Papers Galíndez, caja 9 (1934-1969). El subrayado es
mío.
431 Ibid.
432 Ibid. El trujillismo negó su implicación en: «Letters to the Times», The
New York Times, 28-IV-1956 y en «The Other Side of the Galindez Story»,
The New York World Telegram, 17-IX-1956.
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«Hoy se ha sabido que el Dr. Jesús Galíndez, profesor de la universidad
de Columbia, que desapareció el 12 de marzo, escribió una carta a la
policía para guiarles si era asesinado. La carta ha sido encontrada junto
con las voluntades de Galíndez. Ambas fueron dirigidas a la policía. Se
dice que en el caso de muerte violenta […] debían buscar a su asesino
entre los simpatizantes del Generalísimo Rafael Trujillo, que dirige la
dictadura de República Dominicana. No obstante, la carta no especifica
el nombre del probable asesino […]. Un oficial […] ha dicho que los
investigadores están convencidos de que Galíndez, un liberal anti-
comunista, fue raptado y asesinado»433.
433 «Missing Columbia Prof Left Letter Citing Suspects in Case of Murder»,
The New York Post, 4-IV-1956, CUA, Tannenbaum Papers Galíndez, caja 9
(1934-1969). El subrayado es mío.
434 «Galíndez search by FBI is urged», The New York Times, 21-III-1956,
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sobre su desaparición, poniéndose de relieve aquellos aspectos que
hacían a Galíndez más humano. En palabras de Tannenbaum:
«La tragedia no es sólo que haya desaparecido un ser humano, sino que
era una persona especialmente dotada por la experiencia y educación
para actuar como intermediario e intérprete entre los intelectuales de la
América Latina y de los Estados Unidos […] para Columbia […]
hubiera sido un excelente profesor de Derecho Comparado»436.
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lo habrían asesinado para culpar del crimen al gobierno dominicano […].
Pero lo que es realmente sorprendente es el hecho del testamento de
Galíndez, por el cual se distribuye su dinero […] ¿De dónde pudo sacar
dinero un simple lector de la Universidad de más bajos sueldos que hay en
los Estados Unidos? Es muy posible que Galíndez haya obtenido dinero
de fuentes políticas. Ello explicaría muy bien el hecho de los continuos
viajes de Galíndez (México, Cuba y Europa) […]. Puede ser entonces
que las mismas personas que le facilitaban dinero lo hayan eliminado
[…] tuvo que ser secuestrado por personas o grupos políticos que estaban
muy cerca de él […] pues el FBI norteamericano lo tenía registrado como
espía extranjero […] El hecho de disponer Galíndez de fuertes sumas
para poder viajar y llevar una vida superior a la de un simple profesor
daría motivo para pensar en tramas propias de una intrincada novela
policial»438.
«[…] deduzco que ese Sr. Waldo Ross debe ser un profesor de filosofía
chileno que frecuentó los medios democráticos hace unos dos años y que era
aspirante a un puesto en Columbia que nunca consiguió. Actualmente se
encuentra de profesor en la República Dominicana gozando del favor de
aquellas autoridades. Su posición actual la encuentro muy poco en
consonancia con los deberes de un caballero y con lo que expresaba en sus
conferencias y conversaciones. […] no debiera el periódico haber admitido
esa rotunda afirmación sin antes cerciorarse de la veracidad. […] nunca
440«La opinión del lector: Felipe Arana Comenta», El Diario de Nueva York,
20-IV-1956, CUA, Tannenbaum Papers Galíndez, caja 9 (1934-1969). El
subrayado es mío.
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Requena, asesinado en 1952, y Sergio Bencosme, muerto por disparo en
Manhattan en 1935»441.
Aparte de que la vinculación de la desaparición de Galíndez a
los asesinatos de los antitrujillistas Bencosme y Requena en Nueva
York ya había sido realizada anteriormente por Wenzell Brown y que,
por consiguiente, ponía al dictador dominicano en la diana, la
revelación de la existencia de varias copias en inglés de la tesis del
delegado vasco, así como el conocimiento de que La Era de Trujillo se
publicaría en español e inglés, hizo que la maquinaria de descrédito
contra Galíndez volviera a activarse. El 13 de junio de 1956, Alfonso
Naranjo, de la Editorial del Pacífico, en la que se publicaría el libro,
fue claro al respecto en sus declaraciones a la revista chilena Ercilla:
441 «Cops Seize Galíndez Book as ‘Evidence’», The New York Post, 23-IV-
1956, CUA, Tannenbaum Papers Galíndez, caja 9 (1934-1969). El
subrayado es mío.
442 «Editor responde ingenuos ataques al libro de Galíndez», Revista Ercilla,
«El Dr. Jesús Galíndez desapareció hace 4 meses y todavía no hay pista
alguna sobre su paradero. Pero ahora hay más razones para que las
autoridades incrementen las investigaciones sobre su desaparición con
mayor esfuerzo. Esto se debe a que las posibles explicaciones de su
ausencia se han incrementado alarmantemente por el archivo de sus
actividades de recaudación de fondos como agente registrado en este país
del Gobierno Vasco en el exilio. […] poca gente sabía que, en nombre
«De todas las hipótesis que se han formulado, la menos convincente es, a
mi juicio, la que relaciona su desaparecimiento con el gobierno de la
República Dominicana […]. El gobierno dominicano no tenía nada
que ganar con la desaparición de Galíndez […] En Nueva York Jesús
Galíndez dejó de ser ferviente admirador trujillista y entró en contacto
con individuos que se dedicaban al tráfico ilegal de armas, oportunidad
que le dio la posibilidad de enriquecerse rápidamente. Pero hay todavía
otro hecho revelador: a raíz de la última campaña electoral del estado de
Nueva York, el representante demócrata por Nueva York, James G.
Donovan, acusó a Galíndez de malos manejos de dinero y gestionó su
deportación ante las autoridades […] Es probable que lo hiciera
desaparecer alguien que tenía interés en asegurarse su silencio. En todo
caso, detrás de su desaparición hay móviles de dinero y no políticos»445.
Epílogo y conclusiones
448 «Report from 'Spirit World'. Tip on Galindez Comes from Mexicam
Medium», Columbia Spectator, 26-IV-1956, CUA, Tannenbaum Papers,
Galindez, caja 9 (1934-1969).
449 Iñaki Bernardo e Iñaki Goiogana, Galíndez: la tumba abierta, op. cit. p. 301.
450 Ibid.
451 Tim Weiner, Enemigos, op. cit., p. 604-605.
452 Carta de Louise Crane a Jacob K. Javits, fiscal general del Estado de
453John Gerstein, «'Sleeper’ case could torpedo Mueller report», Politico, 27-
VIII-2018, recuperado de https://www.politico.com/story/2018/08/27/
robert-mueller-special-counsel-report-sleeper-case-797373.
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