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1988 La Violencia Política y La Guerra Como Causas Del Trauma RP1988 7-28-123 141
1988 La Violencia Política y La Guerra Como Causas Del Trauma RP1988 7-28-123 141
vn,N'28,123-141
UCA, Ssn Salvador. El Salvador, CA.
RESUMEN
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"guerra psicológica"); el otro En 1984, se pudo caracterizar
área se concentra en las se- la guerra civil salvadorei'la des-
cuelas psicológicas de la guerra de una perspectiva psicosocial
y se orienta hacia su prevención con tres notas fundamentales:
y tratamiento. (1) la violencia, que orienta los
mejores recursos de cada con-
Hay, sin embargo, un aspecto tendiente a la destrucción del
de la guerra de gran im- rival; (2) la polarización social,
portancia y que debe ser ana- es decir, el desplazamiento de
lizado por la psicología social: los grupos hacia extremos
su carácter definidor del todo opuestos, con el consiguiente en-
social. Por su propia dinámica, durecimiento de sus respectivas
una guerra tiende a convertirse posiciones ideológicas y la
en el fenómeno más englobante presión sobre las diversas ins-
de la realidad de un país, el tancias sociales para que se
proceso dominante al que tienen alineen con "nosotros" o con
que supeditarse los demás "ellos"; y (3) la mentira ins-
procesos sociales, económicos, titucional, que supone desde la
políticos y culturales, y que, de desnaturalización del objeto de
manera directa o indirecta, las instituciones hasta el ocul-
afecta a todos los miembros de tamiento ideológico de la rea-
una sociedad. lidad social (Martín-Baró,
1984).
Ese mismo carácter absor-
bente de la guerra puede llevar a En lo fundamental, esta
ignorar la manera diferencial caracterización psicosocial de
como afecta a los grupos y per- la guerra salvadoreña sigue
sonas: lo que para unos re- siendo válida en 1988, lo cual ya
presenta la ruina supone para es de por sí un hecho deplorable.
otros un gran negocio, y lo que a Con todo, conviene examinar
ciertos grupos pone al borde de la las modalidades que estas
muerte a otros abre la posi- características de la guerra
bilidad de una nueva vida. Una civil salvadorei'la han ido
es la guerra que tiene que sufrir adoptando como consecuencia
en carne propia el campesino y de la prolongación de la guerra
otra muy distinta la que en sus misma.
pantallas de televisión con-
templa el burgués industrial. 2.1. la polarización social
En El Salvador, quienes van al
campo de batalla son mayori- En el análisis de 1984 se in-
tariamente los pobres, los hijos dicaba que el grado de polari-
de los campesinos o de los mar- zación social de la población
ginados urbanos, no los hijos salvadorei'la había tocado techo
del patrón o del profesional. y que se observaban signos
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un partido que, hasta ese lados a ellos que ofrecen al pú-
momento, había tenido un blico una información mucho
comportamiento relativa- más cercanas a los hechos que
mente honesto y cuyo dis- la de la "historia oficial", así
curso moralizante y pre- como la oportunidad de conocer
suntamente de inspiración opiniones y juicios de todo tipo
cristiana es lo más opuesto de personas, sin excluir las más
al aprovechamiento privado críticas sobre el proceso. Cómo y
de los recursos públicos. El por qué esto ha sido posible,
abrumador contraste entre cuando hasta hace poco se dina-
el discurso político y el pro- mitaban radios y periódicos opo-
ceder real de los miembros sitores, y cuando aún se sigue
de la Democracia Cristiana interfiriendo sistemáticamente
en el poder establece un a las emisoras del FMLN, no es
nuevo nivel de engaño y del caso analizarlo aquí. Esto
mentira, tanto más hiriente no quiere decir que no existan
cuan to que se produce en presiones oficiales o para-
circunstancias de extrema- oficiales sobre estos programas,
da pobreza y dificultad para o que no se haga esfuerzos
la mayoría del pueblo sal- concertados por asimilarlos (co-
vadoreño. El juicio más optarlos) en beneficio del sis-
favorable que hoy se oye tema establecido. De hecho,
sobre la corrupción de los jun to a la aparición de estos
gobernantes democristia- programas se ha dado también
nos es que en nada difiere el establecimiento del Minis-
de la de gobiernos anterio- terio de Cultura y Comunica-
res a 1979 -precisamente ciones, claramente orientado a
aquellos gobiernos cuyo pro- la "guerra psicológica" y a con-
ceder contribuyó a precipi- trarrestar toda posible brecha a
tar la guerra civil. la "historia oficial".
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población que apoyan o sim- el número de víctimas, muertos
patizan con los insurgentes, o de y heridos, en la confrontación
quienes se sospecha que pueden militar es actualmente mucho
apoyar o simpatizar con ellos. más elevado que el de víctimas
de la represión; (b) el número de
En un primer momento, la víctimas de la represión se ha
guerra salvadoreña se carac- reducido, pero todavía es incluso
terizó por un mínimo de ac- más elevado del que se daba con
ciones militares abiertas y un anterioridad a la guerra y que
máximo de acciones paramili- fue condenado como inaceptable
tares encubiertas. Los "escua- por diversos organismos inter-
drones de la muerte" y no los nacionales.
batallones fueron los princi-
pales instrumentos bélicos del Este cambio en la dirección
gobierno para mantenerse en el de la guerra ha arrastrado un
poder frente al acoso popular y fenómeno paralelo en el orden
revolucionario. Sin embargo, social: se ha pasado de un orden
con la prolongación de la guerra mantenido por el terrorismo de
y las exigencias propias del pro- estado a un on:len militarizado.
yecto contrainsurgente promo- En El Salvador se ha producido
vido por Estados Unidos para El una militarización de la so-
Salvador, esta relación se ha ido ciedad y de la vida colectiva, y
invirtiendo y, mientras las ello tanto en las zonas con-
confrontaciones militares han troladas por el gobierno como en
ido adquiriendo una impor- aquellas controladas por el
tancia primordial, la represión FMLN -sin que con esto se
ha sido relegada a un plano pretenda soslayar las claras
menos relevante. Es un hecho, diferencias que hay entre ambos
continuamente aireado por el casos.
gobierno norteamericano, que
se ha producido una significa- La militarización del orden
tiva reducción en el número de social significa, por lo menos,
personas torturadas, asesinadas dos cosas: (a) los oficiales mili-
o "desaparecidas" atribuibles a tares tienden a ocupar la mayor
las fuerzas gubernamentales; parte de los puestos claves del
mucho más cuestionable es la ordenamiento institucional; (b)
afirmación de que las viola- la instancia militar se con·
ciones del FMLN a los derechos vierte en el criterio de validez y
humanos han ido en aumento y aun de posibilidad de cualquier
de que la mayoría de las vio- actividad. Dicho en otros tér-
laciones que hoy ocurren en El minos, difícilmente se puede
Salvador son causadas por desarrollar alguna actividad o
ellos. En todo caso, cabe hacer empresa de cierta importancia
dos afirmaciones factual es: (a) en el país que no cuente primero
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