Paso 2 Silencio Pedir y Recibir

Como abrirte para recibir las respuestas y los dones de tu ser divino. En este ejercicio
aprenderás como abrirte para recibir las respuestas y los dones de tu ser divino. En este
ejercicio aprenderás como recibir los dones de tu ser divino para que con esta
consciencia divina puedas crear las cosas y situaciones que deseas y que son para tu
crecimiento.

Entra en tu pilar de luz e inicia el contacto con tu ser divino en este momento. Enfoca toda
tu consciencia en la radiante fuente de luz que forma el núcleo de tu ser. Puedes percibir
que desde lo profundo de ti emerge una luz superior, la luz del ser divino que va más allá
de la mente. Te haces consciente de esta luz que hace brillar tus pensamientos, que trae
nuevas ideas calmando tu mente, silenciando tu mente de los pensamientos de todos los
días que provienen de las consciencias de masas, de los deseos, del mundo material y de
los sentidos físicos. Permite que esta luz del ser divino resplandezca en tu mente con
tanta intensidad que todos esos pensamientos que no te permiten ver y conocer tu
verdadera identidad se disuelven, desaparecen de tu mente. Tu atención se concentra
ahora en la luz de tu ser. Tu mente se hace cada vez más calmada, mas llena de luz y el
amor de tu ser divino. A medida que irradias tu mente con la luz de tu ser divino, permite
que todos los pensamientos se vayan, déjalos ir, disolviéndolos en la luz radiante dentro
de ti. Pide ahora a tu ser divino que calme todas tus emociones. Ábrete a recibir la paz
divina, la tranquilidad, el sentido de bienestar y serenidad. La paz que estas pidiendo es
una energía muy real, es una consciencia que impregna tu ser; ábrete a recibirla ahora.
Este es quien tú eres, un ser calmado, sereno, lleno de paz y de luz. Te encuentras en un
espacio donde reina el silencio y la calma del ser y a medida que entras en este espacio,
estableces una conexión más profunda con tu ser divino. Este ser divino que tu eres se
conoce en el silencio de la mente y de las emociones.

Es en el silencio y en el vacío que las respuestas son dadas. Cuando no hay

pensamientos ni emociones, solo la paz y el silencio, la serenidad y el silencio, la calma y
el silencio. Es en este estado conocido como la consciencia en reposo donde tu ser divino
despeja tu camino, transforma tu consciencia y trae las respuestas para tu mayor
crecimiento. A medida que entras en el silencio que va mas allá de los pensamientos, en
lo paz profunda del ser, estas encontrando con tu ser divino. Un encuentro que no tiene
lógica ni razón para la mente consciente. Y es a través de este contacto que podrás
recibir las revelaciones, las ideas y los nuevos pensamientos. El silencio se incrementa
más y más dentro de ti. Liberas la necesidad de pensar en este momento. Liberas toda la
actividad mental. Ahora que te encuentras en este estado de paz donde has podido
silenciar todos tus pensamientos, aunque sea solo por unos segundos, te encuentras listo
para recibir la consciencia de tu ser divino. Conviértete en el silencio. Transfórmate en el
silencio. Entra en el estado de la consciencia en reposo. Pide a tu ser divino que traiga
para ti lo que sea que considere que es para tu mayor beneficio. Declara mentalmente: yo
estoy abierto a recibir en este momento. Y después de pedir, permítete entrar
nuevamente en el silencio, convirtiéndote en la consciencia misma del silencio, pues el
silencio es una consciencia viva de la creación. Ábrete al contacto con tu ser divino,
permaneciendo en el silencio ahora y recibiendo todos los regalos de consciencia de tu
ser divino, entrando en el vacío, en el silencio absoluto, el estado de la consciencia en
reposo. En este estado de silencio han ocurrido muchas cosas, aunque no estes
conscientes de ellas. Cada momento de silencio le permite a tu ser divino establecer
contacto contigo a través de los regalos de consciencia de paz, abundancia y amor que
tiene para ti.

Pide a tu ser divino en este momento que te ayude a tener más de estos momentos de
silencio interno y espontaneo. Estos momentos de silencio son los que te permiten recibir
todos los dones de la consciencia divina. En el silencio tus peticiones te son respondidas.
Todo lo que tienes que hacer es pedir y luego entrar en el silencio, en el estado de la
consciencia en reposo. Coloca tu consciencia en reposo nuevamente, en este momento.
Pide a tu ser divino asistencia con algún asunto que requieras solucionar en algún
aspecto de tu vida. Piensa en esta área de tu vida en este momento. Pide poder ver la
verdad que se encuentra en esta situación. Pide conocer su propósito divino. Entra ahora
en el silencio y recibe lo que has pedido. Pide ahora algo en lo que no has pensado en
pedir antes, algo que cambiaria tu vida para mejor si lo tuvieras. Tu ser divino te ofrece
todo lo que tiene porque es tuyo. Y una vez que lo pidas, entra en el silencio. Ábrete a
recibir la consciencia divina. Entra en el estado de la consciencia en reposo. Pide a tu ser
divino que te muestre ahora algo que puedas pedir, alguna cualidad de consciencia. Algo
que valga la pena pedir porque es para tu bienestar y crecimiento. Establece tu intención
de abrirte a recibirlo. Permite que venga a tu mente. Algo que tu ser divino te está
mostrando que puedes pedir. Ahora entra en el silencio, en un estado de paz y
receptividad. Entrando en el vacio para recibir la consciencia divina. Entra en el estado de
la consciencia en reposo. Pide a tu ser divino asistencia, que fortalezca tu motivación
para sentir paz en todo momento. Afirma que estás listo para vivir en paz, en armonía, en
la tranquilidad y acepta esto como tu estado natural de ser. Pide esto ahora si lo deseas.
A través de tu sentido de paz, serenidad podrás continuar manteniendo un estado de
apertura, el cual te permitirá recibir los dones de la consciencia divina, de tu propia divina
presencia.

Imagina como seria tu vida si sintieras paz a lo largo de toda tu vida, día a día. Pídele
ahora a tu ser divino que te ayude a fortalecer y a profundizar tu habilidad para entrar en
el estado de la consciencia en reposo. Pide asistencia para entrar en el silencio, para
aquietar la mente, para colocarte en un espacio donde te puedas hacer receptivo a los
regalos de tu ser divino. Pide a tu ser divino algo que necesitas que es una prioridad para
tu crecimiento, tal vez una cualidad de consciencia, tal como amor incondicional, verdad,
tolerancia, perdón, alegría, creatividad, inspiración. Escoge una cualidad que tu pienses
que te ayudara a crecer más y que es una prioridad en estos momentos en tu camino.
Pide y recibe. Pide y entra en el silencio. Ten presente que la respuesta de tu ser divino
siempre vendrá en forma de consciencia divina, pues es la consciencia que puedas
encarnar, lo que creara mejores oportunidades en situaciones en tu vida. Ahora vas a
regresar. Entrando en el silencio una vez más, colocando tu consciencia en reposo,
abriéndote a recibir todo esto que has pedido en este día. Consciencia en reposo.