Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Montessori.
El éxito para tener un Ambiente Montessori consiste más en cómo ir desarrollando el proyecto y
sostenerlo que simplemente llenar una serie de requisitos al iniciarlo. Es por eso que cuando una
persona inicia un proyecto de escuela debe tener muy clara la visión de hasta dónde quiere llegar,
cuántos grupos de cada nivel se desean tener, que edades quiere abarcar, con qué po de
alumnado se encuentra, caracterís cas y cuál es el entorno socioeconómico y cultural en el que se
desenvuelven esos niños y niñas que va a recibir etc. Los siguientes aspectos pueden ayudarnos a
establecer ciertos principios y lineamientos para iniciar un Ambiente.
ti
fí
ti
ti
ti
ti
ti
ti
ti
• Tener un ves bulo donde los niños puedan llegar y colgar sus sacos, suéteres. Este ves bulo
puede estar dentro o fuera del aula. Debe de tener ganchos y perchas en proporción al tamaño y
altura del niño. Si el niño trae comida a la escuela, tener un espacio exclusivo para que estos
pongan su bolsa de comida. Las puertas deben tener manijas al nivel de la altura de los niños, de
fácil manejo y discretas para que no hagan ruido al abrir y cerrar.
Espacios a considerar:
Mobiliario:
• Todas las mesas, sillas y estantes deben ser al tamaño del niño, considerando a los niños grandes
y a los pequeños. Asegurándose que los pies toquen el suelo. -Mesas para los más pequeños 45
cm de altura; sillas de 25 cm de altura. - Mesas medianas, 47 cm de altura; sillas de 28 cm de
altura. -Mesas para los grandes 50 cm de altura; sillas 30 de altura. Se necesitan más de las
mesas medianas y grandes. Pueden tenerse mesitas más pequeñas y bajas para escribir sentado
en el piso.
• Las formas de las mesas pueden variar: rectangulares, redondas, cuadradas, hexagonales,
elíp cas, trapezoidales, cortas y largas.
• Considerar mesas extras para el ejercicio de lavarse las manos, las ores, el refrigerio y la mesa
de observación.
• Asegurarse que las mesas y sillas sean fuertes y resistentes pero que al mismo empo sean
ligeras para que los niños puedan transportarlas.
• No colocar protectores a las patas de las mesas y sillas para evitar el ruido (cuando se produce
ruido es un control de error para los movimientos del niño)
• Si se enen entre 30 y 35 niños, se necesitan más o menos la mitad de mesas del total de niños,
sin embargo, si necesitan una silla por niño. Las sillas que no se u licen se guardan en una
bodega hasta necesitarlas.
• Considerar muebles especiales para los materiales Montessori especí cos. La papelería también
puede distribuirse alrededor del ambiente en los estantes.
• Una pizarra grande empotrada en la pared a la altura del niño.
• Estantes o cajoneras para las pertenencias de los niños y/o sus trabajos. Librero para la
Biblioteca.
• Estante para repuestos del área de Vida Prác ca, pizarras, alfombras y para las campanas.
• El mobiliario puede estar en color natural o blanco, ya que el color también sirve de control de
error.
ti
ti
tí
ti
ti
fl
fi
ti
ti
tí
Organización del ambiente:
Mantenerlo siempre ordenado y bien organizado. Cada cosa en su lugar y un lugar para cada cosa,
siempre el mismo para favorecer la autonomía y la con anza de los niños en el ambiente.
Recordemos la importancia del orden exterior para poder estructurar el orden interior del niño.
Plani car cada área, de cómo se van a acomodar las mesas, tomando en cuenta la posibilidad de
movimiento para propiciar independencia y de una forma que tanto la Guía como la asistente/
apoyo puedan tener una buena visión de todo el ambiente. Las mesas se pueden disponer de
alguna de las siguientes formas:
• Tener una mesa de observación, donde se puedan exhibir objetos de otras culturas u objetos
sobre un tema en especí co que se esté tratando, elementos naturales para explorar, su textura,
color, tamaño, temperatura...
• Cuando es un grupo nuevo no es necesario tener expuestos aquellos materiales que los niños
aun no van a usar, sin embargo, cuando se está organizando el ambiente se debe tomar en
cuenta el espacio que van a ocupar y donde van a estar colocados. Al principio el aula se verá
vacía, pero poco a poco se irá llenando conforme el grupo y los niños crezcan. Al acomodar los
materiales hay que tomar en cuenta la secuencia para que quepa en un solo estante. La
secuencia puede ser lineal o paralela.
• Los estantes pueden distribuirse alrededor del ambiente, pegados a la pared, si no disponemos
de estantes podemos usar las mesas colocadas debajo de las ventanas y pegadas a las paredes
de manera que rodeen la clase y también colocar algunos estantes perpendiculares a la pared o
los estantes para crear ciertas divisiones. Procurar acomodar los estantes buscando que se
formen pocos rincones para tener una buena visibilidad.
• Tener un rincón de lectura con una silla, banca o sillón pequeño (no mecedoras), un librero con
libros (no muchos libros solo unos 6 u 8) una lámpara pequeña, una planta y un cuadro ar s co
para crear una atmósfera de relajación y privacidad. Limitar el número de niños que pueden usar
la biblioteca o rincón de lectura. Solo uno o dos.
• Tener un rincón de música donde los niños puedan oír música individualmente con un
reproductor de CD o incluso desde el mismo ordenador puedan poner la música que tendremos
preparada en el escritorio y que ya les hemos presentado como hacerlo.
• Tener plantas dentro del aula. Traerlas una a una en el inicio del ciclo escolar. Colocar un espejo
completo y una mesa de cuidado personal. Algunos de estos espejos pueden estar colgados en la
pared para el ejercicio de pulir o simplemente para peinarse, o colocarse bien sus prendas de
ves r. El espejo es un recurso muy ú l sobre todo para paliar aquellos enfados o llantos de los
niños y niñas que pronto cuando se miran en el espejo desaparece ese comportamiento molesto
para ellos mismos y para el resto.
• Dejar que el ambiente sea el que ponga los límites y no el adulto. Limitar la can dad de papel en
los diferentes ejercicios, la can dad de refrigerio, de papeles para pegar o para pintar en
caballete, la can dad de fruta a cortar, etc.).
• Un reproductor de CD, no para u lizar de música de fondo durante el trabajo sino para
diferentes ejercicios de escuchar o reproducir ritmos para el ejercicio de la línea.
• Un reloj de pared con números.
• Un equipo de primeros auxilios.
• Tener pensado un plan de evacuación para casos de emergencia.
ti
fi
ti
fi
ti
ti
ti
fi
ti
tí
ti
• Tener un área para la Guía y la Asistente/apoyo donde puedan poner abrigos, bolsos, cosas
personales. No debemos sobrecargar las sillas con estos objetos, no favorece el orden ni el
cuidado esté co del ambiente.
• Tener una silla estratégicamente colocada en el ambiente para la Guía y la Asistente/apoyo. Así
como también un banco pequeño que pueda moverse para dar presentaciones. No quitar las
sillas de las mesas de los niños.
• Tener una silla para visitantes y observadores.
• Una vez que el ambiente está organizado y acomodado, evitar hacer cambios bruscos que
puedan perturbar el orden de los niños. Si hay necesidad de hacer un cambio entonces es
conveniente invitar a los niños a par cipar en hacerlo para que la adaptación sea más fácil.
• Buscar que el Ambiente tenga lugares que transmitan comodidad y calidez, organizar un lugar
donde los niños se sientan acogidos.
• Asegurarse que el material tenga las caracterís cas correctas.
Ambiente exterior:
ti
ti
ti
ti
ti
Registro y evaluación:
• Tener las evaluaciones y registros en un lugar privado.
• Tener registro y evaluación diaria, semanal y mensual de cada niño.
• Hacer un registro de presentaciones sencillo y claro para que lo puedas seguir cualquier persona
en un momento determinado
ti
ti
ti
tí
fi
ti
ti
fi
ti
ti
Los compañeros son ahora un importante referente y el ambiente no solo debe permi r, sino
fomentar, los trabajos en grupo. Es el momento de los “grandes trabajos” que implican extensos
proyectos y di ciles retos solo asumibles en compañía de otros. También las ac vidades deben
implicar razonamientos morales y experimentación con reglas sociales y decisiones é cas. El grupo
desea decidir sus propias reglas de convivencia y es por ello esencial la propia ges ón de un
órgano de gobierno del aula.
En esta nueva fase de su desarrollo intervienen cambios sicos que les dan una energía nueva; los
cambios psicológicos que ac van en él una curiosidad insaciable y “hambre” de conocimiento. La
enseñanza, y por lo tanto también el ambiente, enen que proporcionarle es mulos y respuestas
que les mo ven mucho. Lo que es importante, según la Dra. Montessori, no es tanto la precisión
del nivel de conocimientos alcanzables por los niños, sino la posibilidad de accionar y cul var en
ellos la chispa del “entusiasmo”, ese comportamiento fuertemente posi vo en relación al
conocimiento que les acompañará en todas las experiencias de aprendizaje.
Especialmente en relación a este úl mo punto, se introduce fuertemente en el currículum y en la
organización del aula el ámbito de la Educación Cósmica (la unión de las áreas de geogra a,
historia y biología). El núcleo fuerte del ambiente preparado que en el espacio 3 a 6 estaba
ocupado por las ac vidades de Vida Prác ca toma ahora la forma de laboratorio y lugar de
exploración de las leyes de la naturaleza.
Este laboratorio no requiere grandes recursos sicos más que una fuente de agua y estanterías con
los materiales necesarios para hacer experimentos de sica, química y ciencias naturales. Lo que
requiere principalmente es la rme voluntad del adulto de conver rlo en el corazón del aula; la
fuente principal de ac vidad y origen de preguntas y respuestas in nitas.
Esta explosión de curiosidad y esta nueva mente del niño provocan que los límites del aula, poco a
poco, se desdibujen y debamos abrir las puertas del aula hacia el mundo exterior.
El espacio sico debe mostrar al niño que las posibilidades de exploración son ilimitadas y que no
hay fronteras sicas que limiten su curiosidad.
Ofrecemos en este momento la posibilidad de las llamadas “salidas autónomas” en las que los
niños pueden salir al exterior de la escuela de forma autoorganizada y libre (aunque acompañados
“a distancia” por un adulto).
fí
ti
fí
fí
ti
ti
ti
ti
fi
ti
ti
fí
ti
ti
fí
fí
fi
ti
fi
ti
tí
fí
ti
ti
ti
ti
ti
ti
ti
ti
fí
tí
ti
ti
fi
ti
fi
fi
fí
ti
fí
ti
ti
fi
ti
fí
ti
ti