LUNA GRIS

Me enviaron a recolectar información sobre la desaparición de una niña, los testigos detallan
que fue vista por última vez cerca de un bar, Luna Gris, en altas horas de la noche. Me voy a
encontrar con una persona que dice que vio todo.

Detective (Samuel): Disculpe, Señor. Me podría ayudar a encontrar el bar, Luna Gris, por
favor.

Transeúnte: Claro, está a dos cuadras del parque Rosa Azul girando a la derecha va a ver un
enorme letrero a punto de caerse, ese es el bar, Luna Gris.

Detective (Samuel): Es muy amable, sin mucha molestia, ¿Sabe algo de una niña que
desapareció hace una par semanas?

Transeúnte: Oí algo, pero creo que son rumores, dicen que el padre de esa niña le debía
mucho dinero a la familia Correa, y a cambio de su vida el padre dio a su hija. Pobre niña
(suspirando) el único que error que cometió fue en confiar en su padre. Que tenga una
buena tarde, señor.

El detective pensativo camina unos cinco metros y sin darse cuenta tropieza con una mujer de
apariencia muy extravagante, la mujer con una reacción muy rápida, abofetea al detective.

Verónica: ¡Usted quien se cree para empujarme de esa manera! ¿Cree que no me puedo
defender?

Detective (Samuel): Mil perdones, tenía la cabeza en otra parte mientras caminaba. Trato de
llegar al bar, Luna Gris.

Verónica: Espero con esa bofetada lo halla traído de nuevo a la realidad. (Con el rostro serio)
Bueno tampoco debí reaccionar de esa manera, va al bar, ¿no? Lo puedo llevar como
muestra de mi disculpa

Detective (Samuel): Es muy gentil. Disculpe ¿Cuál es su nombre?

Verónica: No sabe que antes de preguntar el nombre a alguien, primero tiene que
presentarse.

Detective (Samuel): (con una sonrisa) Soy Samuel Besko, trabajo para el departamento de
policía.

Verónica: Verónica (Dando la mano) y para que quiere ir a ese bar, todos los que conocen
ese bar saben que es propiedad de los Correa, familia indecente y corrupta, no hacen mas
que dañar nuestra zona.

Detective (Samuel):