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VERDADEROS CRISTIANOS

Lucas 9:21-26; Mateo 16:24

Todos escucharon el llamado de nuestro Señor Jesús pero obviamente no todos


obedecieron el llamado. El llamado es a morir a uno mismo y vivir para Dios. Así mismo
ocurre hoy en día, cuando todos conocen cual es el camino de la verdad, saben que
Dios es real sin embargo prefieren seguir es sus caminos, no hacer caso al llamado, no
someter sus vidas al servicio, obediencia y sumisión al Señor. El orgullo del Hombre y la
mujer impiden que se comprometan con Dios. La importancia que le dan a sus cosas y
su vida misma impide que vivan caminando con Dios, y solo quieren que Dios les
bendiga pero no quieren darle al Señor lo que le pertenece. Mat 20:16 Así los primeros
serán postreros; y los postreros primeros; porque muchos son llamados, mas pocos
escogidos. Ap. 2:7 El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias: Al que
venciere, daré a comer del árbol de la vida, el cual está en medio del paraíso de Dios.

1- SEGUIR A JESÚS: es ser su discípulo, es hacer lo que él está mandando y quiere


para mi vida, por medio de su palabra y del Espíritu Santo. Es un privilegio que
Dios me ha dado por su gracia y bendición. Efesios 2:1 Y a vosotros os dio vida,
estando muertos en vuestros delitos y pecados,

- TOMAR LA CRUZ: símbolo de muerte, y sacrificio voluntario

Rom 8:9 Sin embargo, ustedes no viven según la naturaleza pecaminosa sino según el
Espíritu, si es que el Espíritu de Dios vive en ustedes. Y si alguno no tiene el Espíritu de
Cristo, no es de Cristo.
Renuncia a los apetitos de la carne
Gal 5:19-21 Las obras de la naturaleza pecaminosa se conocen bien: inmoralidad
sexual, impureza y libertinaje; idolatría y brujería; odio, discordia, celos, arrebatos
de ira, rivalidades, disensiones, sectarismos y envidia; borracheras, orgías, y otras
cosas parecidas. Les advierto ahora, como antes lo hice, que los que practican tales
cosas no heredarán el reino de Dios.

- EL DISCÍPULO: es para los que quieren ser discípulos, seguir a Jesús

Lucas 14:26 Si alguno viene a mí, y no aborrece a su padre, y madre, y mujer, e hijos, y
hermanos, y hermanas, y aun también su propia vida, no puede ser mi discípulo

2- ES UN COMPROMISO DIARIO: lo que cuesta al ser humano es perseverar en


una decisión
La frase cada día al llamado del Señor de tomar la cruz, indicando una renuncia
progresiva y continua al egoísmo de una vida centrada en uno mismo. No es solamente
una vez recibiendo a Jesús, sino que todos los días seremos probados para abandonar
la carrera. Todos los días habrá situaciones a las cuales debemos renunciar al egoísmo
y el orgullo y someternos a Dios.

- LA RENUNCIA DIARIA: a mis deseos carnales, mis amistades que no son


buenos
- VIVIR PARA DIOS: es vivir todos los días como cristiano y no solamente
algunos días

3- ES A TRAVÉS DEL ESTUDIO DE SU PALABRA: si le dedico tiempo a la biblia


estaré cada vez mas informado de los beneficios, de las bendiciones de las
promesas y de las responsabilidades como hijos de Dios. Y debo cumplirla no
solo conocerla, porque de lo contrario sus bendiciones no llegan.
- La voluntad de Dios se revela en su palabra para mi vida
- Darle importancia al estudio todos los días

4- SIENDO GUIADO POR SU ESPÍRITU: la unción del Espíritu, la guianza del


Espíritu santo que Dios envió en reemplazo de su hijo Jesucristo, es más que
importante para desarrollar una vida cristiana como debe ser un verdadero hijo
de Dios, un verdadero cristiano. Un verdadero discípulo. Romanos 8:9

- SIRVIENDO A DIOS EN SU CASA, AMANDO SU PRESENCIA


- ES EL QUE ME GUIARA Y ENSEÑARA SU PALABRA.

CONCLUSIÓN: seguir a Jesús en este camino de fe, es un llamado para todos pero un
privilegio de pocos, los que deciden perseverar en el llamado, los que se animan a
renunciar a uno mismo. Los que desean seguir a Dios y agradarle a el por sobre lo que
digan los demás, por sobre sus propios intereses. Poner a un lado mis propios intereses
y darle a Dios la prioridad es para los valientes en Dios. Los que se comprometen con
Dios reciben una recompensa mayor y bendición abundante. Los que se comprometen
al Servicio de Dios y dan todo por Dios siempre viven con alegría, con gozo, con paz, y
aunque pasen tormentas el Espíritu santo los fortalece y les da vigor, nuevas fuerzas.
Levantan alas como águilas porque esperan en Dios y no en los hombres. Dios les
multiplica las fuerzas cuando se cansan porque están sirviendo a Dios, no escatiman
esfuerzos para servir a Dios. Estamos llamados a ser verdaderos cristianos
comprometidos con Dios.

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