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INTRODUCCIÓN AL ECODISEÑO

La producción y uso de productos consumen recursos y generan desechos provocando


un impacto en el medio ambiente. Vivimos en un planeta con recursos limitados
que la población humana está desgastando en base a sus necesidades de consumo
y los desequilibrios que se están generando ponen en manifiesto las contradicciones
del modelo actual del crecimiento. La evolución hacia una sociedad más respetuosa
y sostenible introduce nuevas variables en donde el diseño de aquello que usamos
y consumimos ocupa un lugar fundamental.
Pensar en un proyecto, sea empresarial, personal, colectivo, demanda incorporar
herramientas y estrategias de diferentes ámbitos. Uno de ellos, que está teniendo
cada vez mayor importancia y que está interrelacionado con múltiples factores,
es la gestión ambiental.
Considerar los factores ambientales, tal como lo plantea el ecodiseño, no solamente
colabora con el medio ambiente sino que también, pensando en términos
de competitividad, ayuda a reducir costos de producción y el consumo de recursos,
optimiza técnicas de producción y de transporte, mejora la capacidad innovadora,
minimiza impactos ambientales, mejora la imagen, amplía al vida útil de los objetos
y abre nuevas oportunidades.
Diseñar de esta forma nuestros proyectos, de manera colaborativa con agentes
pertinentes y con la gestión ambiental como foco que ayudará a definir la dirección
de las decisiones que toma el diseño, es un paso certero hacia el futuro encaminado
a la necesidad de estos aspectos sobre todos los productos y servicios como elemento
de valor y distinción. Entonces mejor empezar más temprano que tarde.

¿Desarrollo sostenible o desarrollo sustentable?

Pensar el diseño a partir del desarrollo sostenible es indispensable para comenzar


a considerar los factores ambientales. De acuerdo con las Naciones Unidas,
la diferencia que existe entre desarrollo sostenible y desarrollo sustentable es que
el desarrollo sustentable es el proceso por el cual se preserva, conserva y protege
solo los Recursos Naturales para el beneficio de las generaciones presentes
y futuras sin tomar en cuenta las necesidades sociales, políticas ni culturales del ser
humano, mientras que el desarrollo sostenible es el proceso mediante el cual se trata
de satisfacer las necesidades económicas, sociales, de diversidad cultural y de un
medio ambiente sano de la actual generación, sin poner en riesgo la satisfacción
de las mismas a las generaciones futuras.
Problemas ambientales, impacto y ecosoluciones

El nuevo paradigma del desarrollo sostenible implica que los procesos económicos-
productivos que dependen de los recursos naturales, puedan mantenerse en el tiempo
sin colapsar. Implica pensar en el impacto de los procesos y estilo de vida adoptados
a mediano y largo plazo buscando el bienestar humano y calidad de vida sin destruir
los sistemas vitales de los cuales depende la sociedad.

Dentro de los principales problemas ambientales se pueden nombrar:

- La deforestación, que se ha incrementado en los últimos años muchas


veces en consecuencia de una agricultura no sostenible. En nuestro país
existen ciertas legislaciones al respecto como la Ley de Bosques Nativos
que se encuentraalrededor de 186.500 hectáreas de bosques nativos al año.
Aún queda pendiente la aprobación de Ley de humedales que se encuentra
postergada desde 2012. Este ecosistema ocupa el 21% del territorio nacional
y aún no tiene regulación. Otro problema afín que afecta a la Argentina
son los incendios producidos por la deforestación.

- La escasez de agua, ya que el 97% del agua del planeta no es consumible


y la demanda crece a pasos agigantados. Por otro lado, la calidad de agua afecta
a muchísimas personas, el agua en mal estado causa enfermedades mortales
sobre todo en niñas y niños.

- Contaminación con residuos. Los desechos sólidos van en aumento


en concordancia con el consumo. En Argentina se producen 14 millones
de toneladas por año de basura. Se estima que la mitad de estos desechos
podrían ser reciclados y aprovechados, pero solo el 6% es tratado. Estos
desechos se depositan en rellenos sanitarios y basurales que contaminan
el suelo, el aire y aguas subterráneas.

- Contaminación del aire por emisiones de CO2 y explotación de recursos.


Las fuentes de energía de Argentina son en un 87 % de naturaleza fósiles
(petróleo y gas) por lo cual junto con las industrias químicas y de hidrocarburos
con el transporte público hace muy poco sano el aire que se respira especialmente
en las ciudades.

- Cambio climático, provocado por la degradación de la capa de ozono a través


de los gases del efecto invernadero. Este efecto es producido principalmente por
los gases emitidos en plantas generadoras de luz a base de carbón, el consumo
de combustibles fósiles, la industria ganadera, el transporte, la deforestación,
entre otros. Ocasiona la desaparición de fuentes hídricas por el aumento
de la temperatura, deshielo, inundaciones, sequías, agravando la pobreza
y la desigualdad.

- Contaminación del mar y otras aguas por el vertido de desechos industriales,


pesticidas y residuos plásticos.

- Explotación minera a cielo abierto como en La Rioja, San Juan, Mendoza


y Catamarca, con suelos mayormente semiáridos, es altamente contaminante.
Contribuye a degenerar los suelos, contaminación de aguas y deforestaciones.
En base a estos problemas, ¿cómo puede ayudar el ecodiseño?

El ecodiseño puede ayudar a reducir la degradación de los ecosistemas mediante:

• El diseño de productos que limitan el uso de combustibles fósiles a través de todo


el ciclo de vida del producto.
• El diseño de productos de manera que se puedan adaptar a sistemas de recolección
y reciclaje.
• El diseño de productos que usen fuentes de energía con baja proporción de azufre.
• La restricción del transporte (logrando así la reducción tanto de óxido de nitrógeno
y de azufre) y la optimización de los sistemas de transporte.
El ecodiseño puede ayudar a reducir el impacto directo en la salud humana mediante:
• Siendo cuidadosos al elegir los materiales, muchos productos producen sustancias
tóxicas después de haber sido desechados. Estas sustancias incluyen metales
pesados, como el plomo (láminas galvanizadas, componentes electrónicos, tintes y
baterías), cadmio (tintes y baterías) y mercurio (termómetros, enchufes y fluorescentes).
• Asegurándose de que los refrigerantes, espumas plásticas y solventes que se usan
para fabricar el producto no dañen la capa de ozono o que no han sido producidos
mediante el uso de sustancias que la deterioren.
• Eligiendo materiales que no contengan sustancias orgánicas dañinas.
• Minimizando el uso de transporte por carreteras.
El ecodiseño puede ayudar a evitar reducción de los recursos mediante:
• El uso de materiales secundarios (reusados/reciclados), dando lugar así a un
aumento de la demanda por estos materiales.
• Haciendo que los productos sean reciclables y diseñando sistemas de recuperación.
En el presente el factor más limitante es la falta de demanda de productos reciclados.
• Diseñando productos que consuman menos energía (durante su fabricación y uso)
y/o que la utilicen de forma más eficiente.
• Analizando si el total de material que se necesita puede ser reducido.
• Investigando si el material elegido puede ser reemplazado por otro más abundante
en la naturaleza o renovable.

Ecodiseño, estrategias y metodología

El eco-diseño se focaliza en la minimización de impactos medioambientales en todo


el ciclo de vida, considerando su eficiencia económica y es la parada obligatoria
para quienes quieren arribar al próximo estadio: el diseño sostenible. Este último
es un concepto más amplio, ya que incorpora al proceso de producción de bienes
y servicios la dimensión social, con el fin de satisfacer necesidades reales
de la sociedad. En ambos casos podemos identificar metodologías y estrategias
que permiten reducir (o evitar, en el mejor de los casos) el impacto negativo de los
productos y servicios durante la mayor parte de las etapas del ciclo de vida, evaluando,
midiendo y buscando mejoras continuas.

Ciclo de vida del producto

El Análisis del Ciclo de Vida1 esnuna metodología integral que permite cuantificar el
desempeño ambiental de un artefacto o sistema “desde la cuna hasta la tumba”, desde
los elementos iniciales necesarios para su construcción, pasando por su producción,
distribución y uso hasta llegar a su disposición final. De este modo es un enfoque

1 En 1993, en el ámbito de la International Standards Organization (ISO) se creó el Comité


Técnico 207 (ISO/TC 207) con el objetivo de desarrollar normativas internacionales para la gestión
medioambiental. Dentro de este último, el Subcomité SC 5 desarrolló la normalización referente al
análisis del ciclo de vida. Actualmente, la norma UNE-EN ISO 14040: 2006, denominada gestión
ambiental: análisis de ciclo de vida, principios y marco de referencia, recoge las diferentes etapas
de desarrollo de esta metodología. (Sanz, 2014)
superador al del control de la contaminación durante el proceso de producción ya que
se considera la totalidad de la cadena. Este tipo de análisis favorece la evaluación de
impacto ambiental. En este ciclo podemos visualizar diferentes momentos:

Entradas: Materias primas y energía.

Ciclo:

1- Obtención y consumo de materiales y componentes. Son todas las actividades


necesarias para la extracción de materias primas y las aportaciones de energía
al medio ambiente. Los principales impactos ambientales están relacionados
con el consumo energético asociado al proceso de extracción, degradación y erosión
de tierras, emisiones de gases contaminantes.

2- Proceso y fabricación. Actividades necesarias para convertir las materias primas


y energía en el producto deseado. En la fase de fabricación, el impacto ambiental se
debe principalmente a la energía necesaria para fabricar el producto y a la generación
de residuos asociada al proceso de fabricación.

3- Distribución, venta y transporte. Se realiza el envasado y/o embalaje del mismo


para su posterior distribución.

4- Uso y mantenimiento. Utilización del producto terminado a lo largo de su vida


en servicio. La fase de uso y mantenimiento supone un elevado consumo energético
y de recursos asociados, ya que esta fase incluye desde la energía eléctrica
consumida por el producto si este lo requiere, hasta el transporte de una reparación
o un mantenimiento.

5- Sistema de fin de vida, eliminación final. Para que el círculo se complete y el ciclo
vuelva a comenzar, en este punto debería suceder el reciclaje. Comienza una vez
que el producto ha servido para su función inicial y consecuentemente se recicla
a través del mismo sistema de producto (ciclo cerrado de reciclaje) o entra en un
nuevo sistema de producto (ciclo de reciclaje abierto).

Salidas: residuos y emisiones. Gestión de los residuos.

Comienza una vez que el producto ha servido a su función y se devuelve al medio


ambiente como residuo.
La etapa anterior a todas las planteadas y que beneficia a todas las demás es el
diseño. Por ejemplo, un envase reducido o de poco peso y volumen puede llevar a
una optimización de la distribución del producto, puesto que, por ejemplo, el número
de productos transportados en un mismo camión se puede ver incrementado con una
mejora en el envase.

Un proyecto de Ecodiseño consiste en definir: ¿Con qué materiales está hecho?


¿Cómo se produce?
¿Cómo y en qué se empaca y transporta?
¿Cómo, dónde y a quién se vende?
¿Cómo se usa y se le da mantenimiento?
¿Cómo se recuperan, reciclan o disponen los desechos o partes del producto?

Algunos ejemplos de Ecodiseño


Estrategias de Ecodiseño

Silvia Barbero y Brunella Cozzo en su libro Ecodesign delinean ciertos criterios para
hacer ecodiseño:
1. Reducción del material: proyectar de acuerdo con una lógica de reducción
material significa realizar un producto con cantidades optimizadas de materiales
y energías. Presenta una doble ventaja: permite la protección de los recursos
y reduce las emisiones en el ambiente.

2. Diseño por desmontaje: Al proyectar también hay que pensar en que


algún día, mejor cuanto más lejano, el producto será reciclado y para ello deberá
ser previamente desmontado. Por ello es fundamental evitar formas y sistemas
que puedan dilatar en el tiempo los procedimientos de desmontaje, así como
hacer reconocibles los materiales de los distintos componentes para que puedan
ser fácilmente identificables y reutilizables o reciclables.

3. Monomateriales o materiales Bio: Proyectar con un solo material permite


simplificar tanto el proceso productivo como el del reciclado al final de la vida
útil. Eso sí, dadas las exigencias estéticas actuales supone para el diseñador un
gran reto. El ecodiseño suele además decantarse por el uso de materiales “bio”
que pueden ser tanto naturales como derivados de productos naturales.

Durabilidad: Un objeto es más respetuoso con el medio ambiente cuanto


mayor es su vida útil, ya que algo que aún se utiliza no ha de ser sustituido.
Por ello la utilización de formas y materiales duraderos son un principio básico
del ecodiseño.

Multifuncionalidad, reutilización y reciclaje: Estos tres conceptos son


similares pero no iguales. Un producto multifuncional es aquel que sin ninguna
modificación puede ser útil para varias funciones, lo cual multiplica sus posibilidades
de uso reduciendo las probabilidades de acabar en la basura. Un producto
reutilizable es aquel que mediante modificaciones formales o estructurales puede
volver a ser útil. Un producto reciclable depende de los materiales con los que está
fabricado, pues son estos los que prolongan su vida útil.

4. Reducción dimensional: Un ecodiseño está diseñado partiendo de las


siguientes premisas: compactar, reducir y limitar el consumo durante el transporte.
El objetivo de una proyección inteligente de las dimensiones ahorra material
y consumo durante el viaje, ya que cuanto mayor sea el número de productos
incluidos en cada viaje menor será el impacto ambiental de las emisiones de CO2.

5. Diseño de servicios: Cuando podemos decir que un objeto puede ser


sustituido por un servicio, estamos hablando del “diseño de los servicios”.
Lo que se busca es que el uso del bien nace de la necesidad de realizar una
acción y no del deseo de posesión del objeto en sí mismo. Esta fórmula sensibiliza
al usuario, ya que utilizará el servicio de forma consciente y sostenible, sólo cuando
sea necesa

6. Uso de la tecnología: El uso de las nuevas tecnologías puede mejorar


la eficiencia de los productos. Por ello, las soluciones de diseño cuyo objetivo sea
la sostenibilidad ecológica deben ser creativas y vanguardistas desde un punto
de vista tecnológico.

7. Disminución de emisiones: No sólo son efectivas en este sentido las


medidas ya mencionadas, existe además lo que se llama “diseño sistémico”, basado
en la idea de que es necesario crear nuevas formas de producción en las que los
ciclos industriales sean abiertos y estén relacionados, de forma que se generen
flujos de materiales y energías. Así todo podría tener uso y el sistema sería más
estable a largo plazo.

8. Ecopublicidad: Una buena forma de difundir la sostenibilidad es introducir el


mensaje de manera directa en los productos, integrándose como parte de su diseño.
Mochila ecológica y huella ecológica

La mochila ecológica es la cantidad de materiales utilizados en la elaboración


de un producto a lo largo de todo su ciclo de vida (extracción de las materias
primas, fabricación, envasado, transporte y tratamiento de los residuos que genera).
Es un indicador de la “Intensidad de Materiales por Unidad de Servicio” (IMPS).
Su objetivo es concienciar a los consumidores al destapar la cantidad de energía
y recursos naturales reales en la producción de un kilo de materia prima.

Mochila ecológica de algunos productos habituales:

Automóvil: más de 15 toneladas.


Camiseta de algodón negra: 4.500 Kg.
Alianza de oro: 3.500 Kg.
Ordenador: 1.500 Kg.
Bandeja de cobre: 500 Kg.
Cafetera: 285 Kg.
Teléfono móvil: 75 Kg.
Cepillo de dientes: 1,5 Kg.

Mientras que la mochila ecológica mide el impacto de los productos que consumimos,
desde la materia prima que necesitamos para fabricarlo hasta los procesos de gestión
de sus residuos, la huella ecológica determina la superficie (medida en Planetas
Tierra) que necesitamos los humanos para mantener nuestro modelo de vida.
Cuantifica cuántos planetas necesitamos para producir los recursos que consumimos
y luego absorber los desechos que esto genera.

Bibliografía:

Alcalá, F. y otros (2002) Ecodiseño: Introducción de criterios ambientales


en el diseño industrial. España.
Aguayo, F. y otros (2011) ECODISEÑO: Ingeniería sostenible de la cuna
a la cuna (C2C). Madrid.
Giuliano, G. (2014) De la cuna a la cuna : una crítica al diseño ecoeficiente,
Revista Argentina de Ingeniería Vol. III. Argentina
Sanz Adán, F. (2003/2004) Ecodiseño, un nuevo concepto en el desarrollo
de productos, Lección inaugural . Universidad de La Rioja, Argentina
Páginas web:
http://scielo.sld.cu/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S2218-36202017000100013
https://es.mongabay.com/2020/01/desafios-ambientales-argentina-2020/
https://www.a24.com/actualidad/problemas-ambientales-argentina-son-
resolverlos-02102019_SyiilHMOS
https://aida-americas.org/es/blog/el-derecho-internacional-ambiental-historia-
e-hitos
https://www.gestiopolis.com/analisis-del-ciclo-vida-producto/
https://ecoesmas.com/ecodiseno-10-principios-10-ejemplos/
http://www.cegesti.org/manuales/download_manual_ecodiseno/manual_
ecodiseno.pdf

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