Síndrome de Saúl (Gabriel Gallego)

-“Que Dios te use pero no más que a mi.”

1 Samuel 18 NTV

Saúl y David tenían puesta la misma camiseta los dos eran parte del mismo equipo. Los
dos metían goles al mismo lado, tenían el mismo objetivo.

El rey Saúl en vez de hacer equipo se negó y hasta intentó matar a David.
Saúl obedecía siempre y cuando estuviera brillando.

Lo que marcó la diferencia con David es que él estaba ungido. David se refugiaba en la
presencia de Dios. (Versículo 14 )

Debemos de dar lo mejor pero no para competir.

No se trata de competencia, se trata de servir con excelencia.
La competencia nos destruye.
Siempre habrá alguien mejor que nosotros pero eso no puede definir mi ministerio.

Consejo:
Servir y servir (con amor).
Callado
Esquivar hachazos

El amor destruye el odio.

El nos usa por amor, pero él podría hacerlo sin nosotros.