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CARTA AL PADRE

(Franz Kafka)
¿Por qué le tengo miedo a mi papá? Es importante porque paso por momentos de
mucha ansiedad y temor cada vez que le tengo que hablar o pedir algo. La
respuesta depende de la forma como le hable, el momento en que le hable, el
estado de ánimo en el que él se encuentre para lograr que me escuche sin que
me reproche.
No hace mucho me preguntaste por qué digo que te tengo miedo. Como de
costumbre, no supe qué contestarte, precisamente, por el miedo que te tengo. Y
si, con esta carta, intento contestar a tu pregunta por escrito, lo haré sin duda de
un modo incompleto, porque, aun escribiendo, el miedo y sus consecuencias me
atenazan al pensar en ti, y porque las dimensiones de la materia exceden con
mucho los límites de mi memoria y de mi entendimiento 1.
Esa forma habitual tuya de ver las cosas la considero justa únicamente en el
sentido de que yo también pienso que eres completamente inocente de nuestro
distanciamiento. Pero yo no soy menos inocente que tú. Y esta carta ayudará a
aliviar mi alma. Escribir desahogará mi espíritu atribulado 2.
Siempre me he ocultado de ti, en mi habitación, con libros, con amigos alocados,
con ideas excéntricas; jamás te he hablado con franqueza, no he ido a ponerme
junto a ti en el templo, nunca he ido a verte a Franzensbad, tampoco he tenido
nunca el sentido de la familia, y me he desentendido del negocio y de cualquier
otro asunto tuyo; te he endosado la fábrica y luego te he dejado solo.
Si pudiera inducirte a reconocerlo, entonces sería posible, no una nueva idea
(ambos somos demasiado viejos para ello), pero sí una especie de paz, no una
suspensión, pero sí una suavización de tus incesantes reproches.
No niego cierta legitimidad en tu acusación, que aparta además un elemento
nuevo a la caracterización de nuestras relaciones. Naturalmente, las cosas no
encajan tan bien en la realidad como las pruebas en mi carta; la vida es algo más
que un rompecabezas que hay que resolver; pero con la corrección que resulta de
este escrito, una corrección que no puedo ni quiero extender hasta el detalle, se
ha logrado en mi opinión algo tan próximo a la verdad, que puede tranquilizarnos
un poco a ambos y hacernos más fáciles la vida y la muerte 3.
Bibliografía
1
El psicólogo belga Mattier, citado por Nubia Lobo y Clara Santos, afirma que “el control excesivo o el
sobreproteccionismo por parte de los padres ofrece como consecuencia para los hijos: dependencia,
sumisión, falta de iniciativa, poca voluntad, falta de concentración, nivel bajo de aspiraciones, huir de las
dificultades, no adecuación a la realidad. LOBO ARÉVALO, Nubia y SANTOS RODRÍGUEZ, Clara. Psicología
del Aprendizaje. Santafé de Bogotá, D.C.: USTA, 1998. p. 217.
2
MOORE, Thomas. El cuidado del alma. Barcelona: Editorial Urano. 2009. p. 134.
3
“Sólo existe certeza con respecto al pasado, y con respecto al futuro, la certeza de la muerte”. FROMM,
Erich. El arte de amar. Barcelona: Ediciones Paidós Ibérica, S.A., 1998. p. 18.

1
FROMM, Erich. El arte de amar. Barcelona: Ediciones Paidós Ibérica, S.A., 1998.
p. 128.
LOBO ARÉVALO, Nubia y SANTOS RODRÍGUEZ, Clara. Psicología del
Aprendizaje. Santafé de Bogotá, D.C.: USTA, 1998. p. 318.
MOORE, Thomas. El cuidado del alma. Barcelona: Editorial Urano. 2009. p. 400.

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