Galileo Galilei, un revolucionario del universo.

La tierra es una esfera y descansa en el centro del universo. Los planetas, las estrellas y el

sol giran alrededor de ella en órbitas circulares. Esta idea resume la concepción geocéntrica

de ptolomeo adoptada por la iglesia hasta el siglo XV, con el surgimiento del renacimiento y
el

humanismo se plantean nuevas teorías sobre la concepción del mundo, en especial la

singular teoría heliocéntrica expuesta por Nicolas Copernico y verificada experimentalmente

por Galileo Galilei. Verificaciones y argumentaciones que serían desastrosas para Galileo
en

su relación con la iglesia católica. Galileo nace en 1564, de carácter independiente y

espíritu

combativo, mostró siempre su interés por la ciencia, en especial por la física y la

matemática

lo que le permitió ser considerado uno de los grandes científicos del renacimiento, pero

el trabajo de Galileo no fue facil, ademas de todos los inconvenientes económicos, sus

estudios, argumentaciones y experimentaciones, molestaron a la iglesia que en su tiempo,

era

la única que poseía el conocimiento y la verdad absoluta. La Iglesia se sentía doblemente

amenazada, por un lado las pretensiones separatistas de Lutero con las correspondientes

críticas sobre los sacramentos, la concepción del pecado, el conocimiento de la Biblia y por
el

otro un grupo de estudiosos de la Ciencia que empezaban a cuestionar las teorías

aristotélicas sobre la organización del mundo atreviéndose incluso a afirmar temerariamente

que la tierra no era el centro del universo, que tenia movimiento y que giraba al igual que los

otros planetas alrededor del Sol. Afirmaciones como estas, encuadradas en aquel momento

histórico, no podrían ser más que catalogadas como herejías y todos los que las promulgan
se
 consideraban enemigos del sistema, Sistema que estaba manejado por la Iglesia, tanto en
lo

político, social, científico y cultural.

Galileo pertenecía a este grupo de estudiosos, y a lo largo de sus escritos mostró su

adhesión por la teoría heliocéntrica ganándose muchos enemigos sobre todo entre los

miembros del clero, que por medio de una serie de artimañas lograron llevarlo hasta la
Santa
Inquisición y obligarlo a retractarse de su opinión. Es posible que su espíritu religioso, pues

era un piadoso convencido, o el temor a las torturas, y lo avanzado de su edad hayan sido

factores determinantes para aceptar que estaba en un supuesto error. Sea cual sea la
razón,

Galileo arrodillado juró no volver a hablar sobre sus teorías, ni enseñarlas. Si bien esta

situación fue humillante para el hombre científico, la Iglesia ha tenido que soportar durante

siglos el peso de su equivocación, hasta el dia de hoy es criticada por sus posiciones

dogmáticas: el aborto, la eutanasia, el uso de anticonceptivos, por citar algunas, y su

constante intromisión en las políticas sociales y económicas de los pueblos.

La suerte de Galileo es compartida por otros tantos científicos, Copémico Kepler y Servet en

la misma época, Darwin dos siglos después, el común denominador de estos hombres es
su

deseo de investigar y cuando se investiga se corre el riesgo de llegar a conclusiones que

pueden desestabilizar la sociedad. Podrá ser coincidencia que la Iglesia se sienta afectada
y

caben al menos dos suposiciones, esta no ha superada el periodo del oscurantismo o entre

los grandes jerarcas cohabita un inquisidor.