Está en la página 1de 16

Código ético

CIE

CÓDIGO DEONTOLÓGICO DEL CIE PARA LA


PROFESIÓN DE ENFERMERÍA
 
El Consejo Internacional de Enfermeras (CIE) adoptó por primera vez un Código
internacional de ética para enfermeras en 1953.
Después se ha revisado y reafirmado en diversas ocasiones, la más reciente es este
examen y revisión completados en 2005.
Las enfermeras tienen cuatro deberes fundamentales: promover la salud, prevenir la
enfermedad, restaurar la salud y aliviar el sufrimiento. La necesidad de la enfermería
es universal.
Son inherentes a la enfermería el respeto de los derechos humanos, incluidos los
derechos culturales, el derecho a la vida y a la libre elección, a la dignidad y a ser
tratado con respeto. En los cuidados de enfermería hay respeto y no hay restricciones
en cuanto a consideraciones de edad, color, credo, cultura, discapacidad o
enfermedad, género, orientación sexual, nacionalidad, opiniones políticas, raza o
condición social.
 
 
Las enfermeras prestan servicios de salud a la persona, la familia y la comunidad y
coordinan sus servicios con los de otros grupos relacionados.
EL CÓDIGO DEL CIE
El Código deontológico del CIE para la profesión de enfermería tiene cuatro
elementos principales que ponen de relieve las normas de conducta ética.
 
 
ELEMENTOS DEL CÓDIGO
 
1. LA ENFERMERA Y LAS PERSONAS
La responsabilidad profesional primordial de la enfermera será para con las personas
que necesiten cuidados de enfermería. Al dispensar los cuidados, la enfermera
promoverá un entorno en el que se respeten los derechos humanos, valores,
costumbres y creencias espirituales de la persona, la familia y la comunidad. La
enfermera se cerciorará de que la persona reciba información suficiente para
fundamentar el consentimiento que den a los cuidados y a los tratamientos
relacionados. La enfermera mantendrá confidencial toda información personal y
utilizará la discreción al compartirla. La enfermera compartirá con la sociedad la
responsabilidad de iniciar y mantener toda acción encaminada a satisfacer las
necesidades de salud y sociales del público, en particular las de las poblaciones
vulnerables. La enfermera compartirá también la responsabilidad de mantener el
medioambiente natural y protegerlo contra el empobrecimiento, la contaminación, la
degradación y la destrucción.
 
2. LA ENFERMERA Y LA PRÁCTICA
La enfermera será personalmente responsable y deberá rendir cuentas de la práctica
de enfermería y del  mantenimiento de su competencia mediante la formación
continua. La enfermera mantendrá un nivel de salud personal que no comprometa su
capacidad para dispensar cuidados. La enfermera juzgará la competencia de las
personas al aceptar y delegar responsabilidad. La enfermera observará en todo
momento normas de conducta personal
que acrediten a la profesión y fomenten la confianza del público. Al dispensar los
cuidados, la enfermera se cerciorará de que el empleo de la tecnología y los avances
científicos son compatibles con la seguridad, la dignidad y los derechos de las
personas.
 
3. LA ENFERMERA Y LA PROFESIÓN
A la enfermera incumbirá la función principal al establecer y aplicar normas aceptables
de práctica clínica, gestión, investigación y formación de enfermería. La enfermera
contribuirá activamente al desarrollo de un núcleo de conocimientos profesionales
basados en la investigación. La enfermera, a través de la organización profesional,
participará en la creación y mantenimiento de condiciones de trabajo social y
económicamente equitativas y seguras en la enfermería.
 
4. LA ENFERMERA Y SUS COMPAÑEROS DE TRABAJO
La enfermera mantendrá una relación de cooperación con las personas con las que
trabaje en la enfermería y en otros sectores. La enfermera adoptará las medidas
adecuadas para preservar a las personas, familias y comunidades cuando un
compañero u otra persona ponga en peligro su salud.
 
 
SUGERENCIAS PARA EL USO DEL CÓDIGO DEONTOLÓGICO DEL CIE PARA
LA PROFESIÓN DE ENFERMERÍA
El Código deontológico del CIE para la profesión de enfermería es una guía para
actuar sobre la base de los valores y necesidades sociales. Sólo tendrá significado
como documento vivo si se aplica a las realidades de la enfermería y de la atención
de salud en una sociedad cambiante. Para lograr su finalidad, el Código ha de ser
comprendido, asimilado
y utilizado por las enfermeras en todos los aspectos de su trabajo. Debe permanecer
al alcance de los estudiantes y las enfermeras a lo largo de sus estudios y de su vida
de trabajo.
APLICACIÓN DE LOS ELEMENTOS DEL CÓDIGO DEONTOLÓGICO
DEL CIE PARA LA PROFESIÓN DE ENFERMERÍA
 
El Código deontológico del CIE para la profesión de enfermería tiene cuatro
elementos que constituyen el marco de las normas de conducta:
la enfermera y las personas, la enfermera y la práctica, la enfermera y la profesión y la
enfermera y sus compañeros de trabajo. El cuadro siguiente tiene por objeto ayudar a
las enfermeras a poner en práctica dichas normas. Las enfermeras y estudiantes de
enfermería pueden:
• Estudiar las normas de cada elemento del Código.
• Reflexionar sobre lo que cada norma significa para cada uno. Pensar cómo puede
aplicarse la ética en el ámbito de la enfermería propio: en la práctica, en la formación,
en la investigación o en la gestión.
• Dialogar sobre el Código con los compañeros de trabajo y otras personas.
• Utilizar un ejemplo concreto de la experiencia para identificar los dilemas éticos y las
normas de conducta estipuladas en el Código. Identificar la manera en que pueden
resolverse esos dilemas.
• Trabajar en grupos para que la toma de decisiones éticas sea clara, y llegar a
consenso sobre las normas de conducta ética.
• Colaborar con la asociación nacional de enfermeras del país, compañeros de trabajo
y otras personas para aplicar de manera continua las normas éticas en la práctica, la
formación, la gestión y la investigación de enfermería.
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 DIFUSIÓN DEL CÓDIGO DEONTOLÓGICO DEL CIE PARA LA PROFESIÓN DE
ENFERMERÍA
 
Para que sea eficaz, el Código deontológico del CIE para la profesión de enfermería,
debe ser conocido por las  enfermeras. Alentamos a ustedes a contribuir a su difusión
en las escuelas de enfermería, entre las enfermeras en ejercicio y en la prensa y otros
medios de comunicación social de la enfermería. El Código debe también distribuirse
a las demás profesiones de salud, al público en general, grupos de consumidores y
grupos de elaboración de políticas, y a las organizaciones de derechos humanos y a
los empleadores de las enfermeras.
TITULO 1
DEFINICIÓN DEL AMBITO DE APLICACIÓN.
PRINCIPIOS GENERALES

ARTICULO 1°: Se establece para la Provincia de Buenos Aires el siguiente Código Deontológico al que deberán ajustarse
los farmacéuticos en el ejercicio de su actividad profesional, cualquiera sea la modalidad en que la practiquen.
El incumplimiento de algunos de los preceptos  de este Código, configura falta ética susceptible de sanción, de
conformidad a las normas legales y reglamentarias vigentes.

ARTICULO 2°: El Consejo Directivo y el Tribunal de Disciplina del Colegio de Farmacéuticos de la Provincia de Buenos
Aires, como asimismo, las autoridades de los Colegios de Partido, promoverán el desarrollo de la ética profesional,
obligándose a difundir y a velar por el eficaz cumplimiento de las normas del presente Código, conforme a sus
atribuciones legales.

ARTICULO 3°: Este Código de Ética tiene un espíritu orientador y corrector de conductas para el ejercicio de la profesión
farmacéutica. El farmacéutico en conocimiento de sus deberes y valores, tendrá pautas claras para llevar un actuar
coherente desde el bagaje de sus conocimientos científicos en el sentido de lo correcto, basado en sus principios
teológicos y éticos personales.

ARTICULO 4°: Las normas del presente Código obligan a todos los farmacéuticos en el ejercicio de la profesión, aun
respecto de aquellos que se desempeñen como funcionarios públicos, sin perjuicio del cumplimiento de las obligaciones
propias del cargo para el que fueran designados.

TITULO 2
DEL EJERCICIO PROFESIONAL. 
DEBERES DE LOS FARMACEUTICOS

ARTICULO 5°: Todo farmacéutico debe tener presente que al obtener su diploma ha contraído el compromiso de contribui
a fomentar, preservar y mejorar las condiciones de salud de los seres vivos, a la prevención y diagnóstico de la
enfermedad, al uso racional de los medicamentos, y a la protección del medio ambiente.

ARTICULO 6°: Es responsabilidad del farmacéutico cumplir y velar por el cumplimiento de las normas que regulan el
ejercicio de la profesión y  las reglas de la Deontología, por sí y por su personal dependiente o colaboradores.

ARTICULO 7°: El farmacéutico ejercerá su profesión contribuyendo a la dignidad, bienestar y salud de los pacientes,
anteponiendo las necesidades de aquellos, antes que cualquier otra propia.
Asimismo, se abstendrá de contribuir, asesorar o participar en todo tipo de prácticas o actuaciones, estén relacionadas o
no con su profesión, en que sus conocimientos y competencias sean puestos al servicio de actos que atenten contra la
vida, la dignidad humana o contra los derechos del hombre.

ARTICULO 8°: Las disposiciones de este Código no cercenan en absoluto los derechos y libertades que acuerdan la
Constitución y las leyes del país; por ello no priva al farmacéutico de actuar en el medio social, político y religioso.

ARTICULO 9°: El farmacéutico mantendrá actualizados los conocimientos científicos y técnicos en los que se sustenta su
competencia profesional, esforzándose por ofrecer una elevada calidad en todos los servicios profesionales

ARTICULO 10°: El farmacéutico no suscribirá o contribuirá a que se expidan títulos, certificados o licencias de idoneidad,
en obsequio a personas incompetentes o que no hayan cursado los estudios universitarios, ni favorecerán a quienes
visiblemente tengan el propósito de ejercer el arte de curar en conformidad con sistemas exclusivos, arbitrarios u
opuestos a los principios de las ciencias.

ARTICULO 11°: Los farmacéuticos, cualquiera sea su función, no deben concretar convenios, franquicias o contratos
tendientes a la disminución, aunque sea parcial,  de su independencia técnica en el ejercicio de su profesión.

ARTICULO 12°: Configurará falta grave la simulación de propiedad de cualquiera de lo establecimientos habilitados para e
ejercicio profesional, encubriendo la intromisión de terceros, o prestar el título o firma profesional por tareas no
ejecutadas ni supervisadas por el farmacéutico.

ARTICULO 13°: El farmacéutico que sea designado como perito, árbitro o jurado o que tenga que dictaminar sobre ofertas
o adjudicaciones, deberá guardar la debida imparcialidad, velando asimismo, por el cumplimiento en forma diligente de
las funciones y deberes asumidos.

TITULO 3
SECRETO PROFESIONAL

ARTICULO 14°: El secreto profesional es un deber que nace de la esencia misma de la profesión y constituye un derecho
del paciente. El farmacéutico y sus colaboradores están obligados al secreto profesional.-
El secreto se puede recibir bajo dos formas: el secreto explícito, formal y textualmente confiado, y el secreto implícito,
que resulta de la naturaleza de las cosas, que nadie impone y que presiden las relaciones entre pacientes y profesionales
Revelarlo sin justa causa, ocasionando o pudiendo causar un daño a tercero, configura el delito contemplado en el artículo
156 del Código Penal.

ARTICULO 15°: El farmacéutico debe proteger y salvaguardar  el derecho del paciente a la confidencialidad de sus datos,
debiendo conservar como secreto todo aquello de lo que se tome conocimiento respecto del paciente y de la prescripción
médica, como resultado del ejercicio de la profesión.-
Sin embargo, está relevado de mantener el secreto profesional en los siguientes supuestos:
cuando es acusado o demandado judicialmente en el ejercicio de su profesión;
cuando actúa en carácter de perito en un proceso judicial;
cuando sea obligado a declarar por ley;
en los casos considerados por las leyes como de denuncia obligatoria

TITULO 4
RELACIONES CON EL PACIENTE Y CON LA SOCIEDAD

ARTICULO 16°: El farmacéutico en su calidad de profesional del medicamento, es de necesaria intervención en el sistema
sanitario. Es derecho del ciudadano contar con la garantía de la intervención del farmacéutico en todos los procesos del
medicamento.

ARTICULO 17°: Cualquiera sea el ámbito en que ejerza su actividad, el farmacéutico es un profesional sanitario al servicio
de la sociedad, siendo su responsabilidad contribuir a la mejora de la salud y calidad de vida del paciente, promoviendo la
educación para la salud y el derecho a la prevención y diagnóstico de la enfermedad y a tratamientos terapéuticos
eficaces y seguros.

ARTICULO 18º: El farmacéutico tiene terminantemente prohibido contribuir, asesorar y/o participar con sus
conocimientos, en prácticas en contra de la salud o en contra de la vida de personas nacidas o en gestación.

ARTICULO 19°: El farmacéutico promoverá el uso racional del medicamento, con especial hincapié en la farmacovigilancia
y seguimiento medicamentoso del paciente, informándolo y aconsejándolo sobre su conveniente utilización.

ARTICULO 20°: El farmacéutico respetará las características culturales y personales de los pacientes, no estableciendo
diferencias basadas en nacimiento, raza, sexo, religión, opinión o cualquier otro acto de discriminación que implique un
trato diferencial.

ARTICULO 21°: Los farmacéuticos que participen en investigaciones clínicas, deberán obtener el “consentimiento
informado” del paciente para la práctica. Para que el paciente pueda conceder el “consentimiento informado” debe: a)
recibir la información del estudio a realizarse; b) comprender los beneficios y riesgos del ensayo; c) manifestar su
voluntad libre de no participar en la investigación o revocar el consentimiento sin perjuicios  d) el farmacéutico debe
respetar esa voluntad.

ARTICULO 22°: En su actuación como farmacéutico, son principios esenciales su independencia y responsabilidad
personal, las cuales lo facultan para ejercer su derecho de objeción de conciencia, siempre que se respete la libertad del
paciente, y en tanto  no se ponga en peligro la salud o la vida de aquel.- 
El farmacéutico podrá negarse, en conciencia, a dispensar cualquier tipo de medicamento, ante la sospecha de uso ilegal,
peligroso o inadecuado de los mismos, o cuando tenga indicios racionales de que serán utilizados para atentar contra la
salud o la vida de las personas. También podrá negar su intervención, cuando de ella pudiera resultar el contagio de su
propia enfermedad al paciente.

TITULO 5
DE LOS FARMACÉUTICOS EN LA ELABORACIÓN, COMERCIALIZACION, DISPENSACION Y DEMAS PROCESOS DEL
MEDICAMENTO

ARTICULO 23°: El farmacéutico ha de velar para que todas las actividades reservadas a su título , se realicen de
conformidad a la normativa vigente, controlando personalmente los  procesos de su competencia

ARTICULO 24°: El farmacéutico no  utilizará ni contribuirá a  la implementación de sistemas de canalización de las
prescripciones médicas a través de medios técnicos, informáticos, telefónicos, servicios de correo, buzones, visitas a
domicilio o cualquier otro método o procedimiento que pudiera surgir o implementarse, que en forma alguna altere la
cadena de comercialización del medicamento, y/o la capacidad de libre elección de la farmacia por parte del paciente.

ARTICULO 25°: Los farmacéuticos observarán que en los  establecimientos en los cuales ejercen la profesión,
comercialicen, distribuyan o suministren, aun a titulo gratuito, los productos destinados a la salud humana, por medio de
personas, instituciones o establecimientos no habilitados por la autoridad sanitaria, o a través de cualquier otro
procedimiento o sistema que no se ajuste a las leyes y reglamentaciones vigentes.

ARTICULO 26°: El farmacéutico no deberá comercializar, dispensar o (suministrar o administrar ) medicamentos con
fórmulas secretas, medicamentos vencidos, o adulterados o falsificados,  no aprobados para su uso y comercialización
por parte de las autoridades competentes,  muestras medicinales a título oneroso,  ni preparados magistrales realizados
en otra farmacia.
Asimismo, se abstendrá de garantizar la eficacia de un medicamento o cualquier procedimiento terapéutico.

ARTICULO 27°: Se considerará dirigismo, las acciones de  posibilitar o permitir que en las prescripciones de médicos,
odontólogos o veterinarios, se haga constar el nombre, domicilio o croquis de ubicación de la oficina farmacéutica.

ARTICULO 28°: El farmacéutico se abstendrá de entregar, suministrar o facilitar medicamentos o sustancias que sean
susceptibles de producir dependencia física o psíquica, sin la correspondiente receta, o sin adoptar  los recaudos para
aquellas, que siendo con receta médica, pudieran ser destinadas a alterar la psiquis, producir o inducir a la drogadicción.

ARTICULO 29°: Constituye falta grave la adquisición por parte del farmacéutico de drogas, medicamentos, accesorios
para la salud a personas o comercios no autorizados legalmente para su expendio.

ARTICULO 30°: Se considerará contrario a las normas éticas el anuncio y la ejecución en la práctica de la distribución de
medicamentos a domicilio, así como el anuncio y ejecución  del ofrecimiento y dispensa a través de internet y/o cualquier
otro medio

TITULO 6
RELACIONES ENTRE FARMACÉUTICOS Y  CON OTROS PROFESIONALES SANITARIOS

ARTICULO 31°: El farmacéutico se abstendrá de realizar cualquier acto o manifestación pública o privada
expresiones orales , escritas, electrónicas, informáticas y demás herramientas audiovisuales que pueda entrañar
desmérito o desprestigio para la profesión u otro colega.
Evitará además, desplazar o pretender hacerlo a otro colega, por medios que no sean los que atañen a la competencia
científica.

ARTICULO 32°: El farmacéutico establecerá relaciones de cooperación con sus colegas, ayudándose mutuamente en el
cumplimiento de sus deberes profesionales. En toda circunstancia deben dar a sus colegas pruebas de lealtad y
solidaridad.

ARTICULO 33°: Todos los farmacéuticos y especialmente los elegidos o designados para cargos políticos, directivos o para
el desempeño como funcionarios públicos, deberán ajustar su conducta y sus decisiones a las normas de este Código.
Se considerará falta ética que los farmacéuticos que desempeñen tales cargos, se valgan de su preeminencia en esa
actividad para que les reporte ventajas económicas, profesionales o de cualquier otro tipo, para si.

ARTICULO 34°: El farmacéutico se abstendrá de acordar con empresas, asociaciones, entidades, etc, condiciones
diferenciales que lleven a que los pacientes se provean en determinadas farmacias. 

ARTICULO 35°: El farmacéutico no deberá facturar servicios no prestados, ni facturar como propios, servicios prestados o
medicamentos dispensados por otros farmacéuticos, o  adulterar recetas cualquiera sea su fin.

ARTICULO 36°: Los profesionales integrantes del equipo sanitario se deben mutuo respeto y colaboración, en procura de
la mejora de la salud de los pacientes.
El farmacéutico se abstendrá de invadir las incumbencias de otro profesional del arte de curar.

TITULO 7
PRESENCIA PROFESIONAL. TURNOS

ARTICULO 37°: Constituye falta grave a las normas éticas:


la ausencia del Director Técnico o reemplazante en los horarios en que el establecimiento se encuentra en labores de
producción, horarios de funcionamiento y de atención al público, preparación y despacho o recepción de drogas y
medicamentos, o cualquier otra etapa correspondiente al proceso del medicamento.
el incumplimiento de los recaudos previstos en la Ley de Ejercicio Profesional para el caso de ausencias momentáneas o
temporarias.
la no exhibición en lugar visible e iluminado de los turnos que cumplen las demás farmacias

ARTICULO 38°: También se considerará falta grave la ausencia del profesional estando la farmacia de turno como
asimismo, la no prestación del servicio de turno.

TITULO 8
DE LA PUBLICIDAD Y DE LOS ANUNCIOS

ARTICULO 39°: El farmacéutico ha de velar para que los actos de  publicidad del establecimiento en el que se desempeña
por cualquier medio que se instrumenten, se adecuen a las normas éticas correlativas con la seriedad, decoro y
que caracterizan a  la profesión.

ARTICULO 40°: Siendo el medicamento un bien social, toda publicidad que le atribuya el carácter de oferta, promoción, o
cualquier otra calificación que desvirtúe su condición, será considerado falta ética.

ARTICULO 41°: El farmacéutico se abstendrá de realizar publicidad que pueda afectar la capacidad de libre elección
farmacia por parte del paciente.

ARTICULO 42°: Siendo la farmacia parte integral del sistema sanitario, solo resulta admisible la publicidad que tenga por
objeto la difusión de la existencia del servicio ofrecido o prestado.

ARTICULO 43°: Se considerarán reñidos con  las normas éticas los anuncios que reúnan algunas de las siguientes
características:
los de tamaño desmedido, con caracteres llamativos, o acompañados de fotografías o imágenes ajenas a la actividad
farmacéutica, o que de alguna forma induzcan al paciente a proveerse en la farmacia indicada;
los que sean exhibidos en lugares inadecuados, o que comprometan la seriedad de la profesión; 
los anuncios que por su particular redacción o ambigüedad, induzcan a  error o confusión respecto a la identidad del
establecimiento, o de las prestaciones que se brindan en el mismo, o respecto al título profesional; 
los que publiciten por cualquier medio una denominación de la farmacia que no se corresponda con la legalmente
autorizada por la autoridad sanitaria;
los que anuncien servicios médicos, bioquímicos u odontológicos;
los que mencionen regalos, sorteos, bonos, premios o cualquier otro tipo de promoción que no se halle encuadrada en
normas éticas correlativas con la seriedad que caracteriza a la profesión farmacéutica;
los que incluyan expresiones a través de las cuales se pretenda destacar la prestación de un servicio diferencial, en
desmedro de las demás oficinas farmacéuticas.

ARTÍCULO 44º: Los farmacéuticos que intervengan en las actividades de fabricación, fraccionamiento, evaluación de
calidad, almacenamiento, abastecimiento, distribución, comercialización y dispensación de principios activos,
medicamentos, medios de diagnóstico y todo otro producto de uso y aplicación en medicina humana, cuidarán de no
fomentar la propaganda tendiente a generar diferencia entre las farmacias que vehiculizan sus productos al público, o que
de alguna forma altere la capacidad de libre elección de la oficina farmacéutica por parte del público.
Constituye falta grave anunciar la entrega o suministrar medicamentos a la población desde estos establecimientos,
cualquiera sea la metodología de distribución empleada.

TITULO 9
DE LA DICOTOMIA

ARTICULO 45°: Se considerará falta ética,  la  retribución  de  porcentajes de honorarios   derivados  
prescripción   de  medicamentos,  drogas, productos químicos, accesorios para la salud, y  toda otra retribución
resultare  de  la   derivación  de ó hacia  otros  profesionales de la salud.
Asimismo, constituirá falta  grave ,  el  obsequio  de  comisiones   de   cualquier  naturaleza   a  personas
influir  en  beneficio  del  farmacéutico  (enfermeros, comisionistas,  empleados  de  hospitales, profesionales del arte de
curar,  etc.).  Se  desprende   que  cuando  un  paciente  solicite  asesoramiento  respecto  de      “ que
consultar “  por  su  afección;  no  deberá   el farmacéutico  con  su  consejo   favorecer   más  a  un profesional de la
salud  que  a  otro.-

ARTICULO 46°:  El farmacéutico no deberá participar en la preparación de fórmulas o entrega de medicamentos o drogas,
a personas para que éstas la distribuyan o de algún modo resulten intermediarios con el paciente.

TITULO 10
DE LAS RELACIONES CON LA ORGANIZACION FARMACEUTICA

ARTICULO 47°: Los farmacéuticos prestarán su colaboración con las autoridades de su propia organización para el
perfeccionamiento y el engrandecimiento de la profesión y el bienestar de los matriculados, en la divulgación de la Ciencia
Farmacéutica.
Asimismo observarán escrupulosamente las normas de buena conducta y las reglas de alta convivencia moral, evitando la
difamación, calumnia y deshonra de sus colegas en general. 
 
ARTICULO 48°: El Miembro del Consejo Directivo o del Tribunal de Disciplina que se encuentre comprendido en las
causales legales de excusación contempladas en las generales de la ley, deberá abstenerse de intervenir en el caso o
causa que motive esas circunstancias.
Asociación argentina de logopedia foniatría y audiología

PRINCIPIOS ETICOS GENERALES

Los socios de ASALFA deben promover la prevención, la recuperación, el bienestar y la calidad de vida de las
personas. Como así también, bregar por el respeto, la dignidad y el valor de las mismas, preservando y protegiendo
los derechos fundamentales.

A tal fin, deben respetar diferencias tales como: la edad, la discapacidad, la pertenencia a determinado grupo étnico,
el género, el origen nacional, la raza, la religión y la clase social.

En cualquiera de sus funciones, deben bregar por ser honestos, íntegros y respetuosos de los otros.

Los socios de ASALFA deben ser sensibles a la manera en que sus acciones puedan afectar a las personas, a los
grupos y a las sociedades, debiendo observar acciones posibles a los fines de evitar consecuencias que puedan ser
perjudiciales para otros.

En sus ámbitos de competencia, los fonoaudiólogos deben tender a su formación y entrenamiento, a mantenerse
actualizados e informados de la literatura pertinente y de las cuestiones éticas. Examinar sus valores personales, ya
que éstos pueden influir en su conducta profesional, reconocer las limitaciones y los cambios de su competencia
profesional que podrían afectar adversamente a otros, tomar las medidas apropiadas cuando no estén seguros
acerca de una decisión ética, consultar con otros profesionales y ayudar a aquellos que enfrenten dilemas similares.

Los fonoaudiólogos deben aspirar a los más elevados ideales de comportamiento ético descriptos en estos
Principios:

- Respeto por los derechos y la dignidad de las personas.


- Promoción del bienestar de otros.
- Responsabilidad social.
- Integridad.
- Competencia.
- Responsabilidad profesional.

CAPITULO I. DEBERES Y DERECHOS

De las acciones del fonoaudiólogo expresadas como obligaciones de hacer y de no hacer, considerándose falta a la
ética toda trasgresión a una obligación de hacer o el estar incurso en una obligación de no hacer

1. Guardar el secreto profesional.

2. Ajustar su desempeño dentro de los límites de su incumbencia,   interactuando con los demás
profesionales de la salud, educación,  etc., cuando la patología del paciente así lo demande.

3. Efectuar el tratamiento de las patologías vocales, teniendo como requisito indispensable en esta área el
diagnóstico previo y el control periódico del estado laríngeo por parte del profesional médico.

4. Contar con el estudio clínico otológico como requisito previo e indispensable a la aplicación de
evaluaciones audiológicas.

5. Realizar las interconsultas necesarias con los restantes profesionales de la salud, educación, etc., a fin de
que el paciente reciba la atención integral que su problemática requiere, cuando el motivo sea un síndrome o
entidad que exceda su incumbencia específica.

6. Dar por terminada la relación de consulta o tratamiento cuando no resultase beneficiosa para el paciente.

7. Tener para con otros fonoaudiólogos el respeto y la solidaridad que reflejen la armonía profesional.

8. Colaborar con sus colegas y prestarles servicios profesionales si lo solicitaren.

9. Divulgar entre sus colegas su conocimiento clínico y experiencia profesional.


10. No atender al paciente que esté siendo atendido por otro colega, salvo en las siguientes situaciones:
- Por pedido de ese colega.
- Por pedido de ese colega.

11. No emitir juicios despreciativos sobre el ejercicio de la profesión, salvo en el caso de las comunicaciones
de irregularidades transmitidas al órgano competente.

12. No delegar funciones propias de su profesión en personas carentes de título profesional correspondiente.

13. No efectuar prácticas diagnósticas o terapéuticas que sean de exclusiva competencia de otros
profesionales de la salud.

14. No prescribir medicación.

15. No aplicar terapéuticas que no se ajusten a principios científicos o que estén prohibidos por la legislación.

16. No falsear documentación.

17. No usurpar títulos y honores.

18. No ser autor o partícipe de la comisión de un delito doloso en el ejercicio profesional.

19. Los socios miembros de la C.D. de ASALFA en cualquier actividad que representen a la institución, no
deben hacerlo a nivel personal sino institucional.

20. Ningún miembro de la C.D. podrá o deberá integrar otras organizaciones que se contrapongan a los
objetivos de la sociedad a la que pertenece o representa.

21. Ningún integrante de la C.D. puede utilizar material o documentación pertinente a la institución, sin previa
autorización de aquella, para beneficio propio o de otras instituciones.

22. La C.D. de ASALFA podrá sancionar a todo socio miembro de la C.D. o socio titular o adherente, que se
aleje de las normas mencionadas con anterioridad.

CAPITULO II

El Comité de Ética tiene su sede en ASALFA, calle Córdoba 1530, 6º “19”, (C1055AAS) Ciudad Autónoma de
Buenos Aires, teléfono: 4811-2851.

Toda trasgresión al Código de Ética debe formularse por escrito y acompañarse de la documentación necesaria.

COMITE DE ETICA

El Comité brinda un servicio a la comunidad fonoaudiológica, a fin de intervenir de oficio o a pedido de un socio
de ASALFA; asesorando, creando conciencia y de ser posible, normatizando en todo lo relativo a la ética, en los
aspectos relacionados con la asistencia, prevención, rehabilitación y publicaciones.

El mismo se da en forma gratuita a los socios interesados en realizar consultas o pedidos de intervención, que
deberán remitir por nota a ASALFA - Comité de Ética - sus inquietudes y/o consultas a fin de que el mismo se
expida a la brevedad.

La existencia humana lleva siempre una impronta moral. El supuesto de la libertad es el que habilita a pensarnos
como seres que pueden conferir valor moral a sus acciones y responder con su compromiso ante ellas. Pero no
basta recordar nuestra condición de personas para caracterizar la moralidad, ya que toda acción humana de
consecuencia social conlleva una ética, es decir, normas. El fin de la ética es facilitar el recto actuar de la persona,
delimitando la bondad o la maldad de los actos. La ética no es una ciencia positiva, no describe los actos humanos
como son, sino como deben ser, por eso es una ciencia normativa. Los tres grandes principios destinados al recto
obrar humano, según la premisa ética de la recta razón son: haz el bien y evita el mal; no hagas a otro lo que no
desees te hagan y haz a los demás lo que desees hagan contigo.

Sin ingresar en las diferentes respuestas que la filosofía ha dado a lo largo de su historia acerca del origen y
fundamento de estas normas, conviene subrayar que la norma como tal aparece por la presencia de otro ser
humano. Esta presencia del otro o mejor dicho del Tú, se hace patente en lo que se conoce como ética profesional o
deontología, disciplina que se ocupa del compromiso que adquiere la persona de respetar a sus semejantes en el
trato de la profesión que ejerce.

La acción profesional no solamente debe procurar el sustento del que la realiza sino propender a la conservación de
los elementos fundamentales de la comunidad a la cual se debe. Solamente a partir de este compromiso es posible
abrigar las expectativas mutuas que generen confianza en las relaciones humanas y laborales del propio profesional.
Por esta razón ASALFA pone a disposición un Código de Ética dirigido a todos los Miembros de su comunidad con
las normativas orientadas a las situaciones que pudieren presentarse.

La Comisión de Ética no sólo intervendrá de oficio o ante pedido en los aspectos éticos de prácticas, tratamientos,
prestaciones, publicaciones, sino también creará conciencia ética a través de sus dictámenes así como de la función
educativa que tiene asignada.

Integración de la Comisión de Ética:

 Estará integrada por cuatro miembros titulares de ASALFA,  elegidos en el mismo acto eleccionario que la
Comisión Directiva.
 Uno de sus miembros se desempeñará como coordinador de dicha Comisión de Ética.
 El mismo será designado por simple mayoría de sus miembros.
 Los miembros de la Comisión de Ética permanecerán en sus funciones igual tiempo que la Comisión
Directiva a la que pertenecen.

Sesiones:

 La Comisión de Ética sesionará en forma periódica en las fechas que se designen en común entre sus
miembros.
 La Comisión de Ética se reunirá con la Presidenta de ASALFA y/o con la Comisión Directiva en las
oportunidades que así se dispongan.
 Ante situaciones de urgencia podrá convocarse a sesiones extraordinarias. Sus miembros conocerán con
anticipación la fecha a llevarse a cabo y el temario a tratar.
 Las sesiones se documentarán en un libro de Actas exclusivo de esta Comisión.

Confidencialidad:

 Los miembros de esta Comisión guardarán estricta reserva acerca de las cuestiones que se debatan en su seno,
debiendo considerar confidenciales a los asuntos que allí se traten.

Competencia:

La Comisión de Ética tiene competencia toda vez que su accionar sea solicitado por un socio titular a través de la
Comisión Directiva de ASALFA. La presentación deberá ser hecha en forma escrita, firmada y detallando
explícitamente la demanda. La Comisión se abocará a estudiar el caso y a solicitar intervención de otros
profesionales, si el mismo así lo requiere. La Comisión de Ética podrá emitir sugerencias, opiniones, consejos y
dictámenes, siempre en forma escrita y con carácter de confidencialidad. Las fundamentaciones surgidas del análisis
del caso serán presentadas a la Comisión Directiva para su devolución. La Comisión está capacitada para decidir si
una cuestión sometida a su consideración le corresponde ser tratada o no.

Dictámenes:

Todas las opiniones o recomendaciones que emita la Comisión en forma de dictamen, serán aprobadas con el voto
de la simple mayoría de sus miembros. Cualquiera de los miembros de la Comisión podrá inhibirse de intervenir en
las deliberaciones y/o en las votaciones cuando considere que se encuentra involucrado en la cuestión a tratarse o
por la existencia de un conflicto de intereses. En dictámenes que conlleven a una sanción, la misma podrá ser de
carácter transitorio o definitivo y estará relacionada al ámbito de actividades de ASALFA. Podrá ser desde una nota
con carácter de apercibimiento de orden "ético moral", a la prohibición de publicación en Fonoaudiológica, la
asistencia y/o participación en reuniones científicas o cursos de la entidad y podrán emitirse otras sanciones que se
determinarán teniendo en cuenta la gravedad y/o reiteración de las infracciones. Estas podrán llegar a la baja como
socio de la Institución.

Función educativa:
Una de las funciones de esta Comisión es crear conciencia ética en los profesionales de la salud ligados a ASALFA,
a través de su accionar:

 Dirigido a todos los socios: cursos, charlas informales, seminarios, publicidad interna de los dictámenes en
aquellos casos en que se considere conveniente.
 Dirigido a los profesionales de la salud: invitándolos a concurrir a la asociación como así también
concurriendo a las Instituciones que alberguen para desarrollar cursos, charlas, entrevistas de concientización de
la ética profesional.

También podría gustarte