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Actividades de desarrollo:
2. Hizo un intento comprensivo por explicar todos los aspectos del mundo y su
origen.
Para Anaximandro la substancia originaria es lo apeiron (lo indefinido e
infinito). Sitúa el origen no el aquello perceptible por los sentidos como los
elementos, sino que en una abstracción clara que va desde lo sensible
hasta lo inteligible. Anaximandro quería significar con lo apeiron, era algo
que no tenia término, algo sin límite y sin definición. Esa materia era algo
indefinido en el sentido de que no se parecía a ninguna clase de materia del
mundo ya formado, como podía ser cualquiera de los elementos (tierra,
agua, aire y fuego).
Podemos considerar que Anaximandro toma un elemento abstracto y no un
elemento principal como la tierra, agua, aire o fuego debido a que al decir
por ejemplo que el origen está constituido por el fuego, este elemento no
podría originar a su contrario como lo es el agua. Por lo que lo lógico sería
suponer que el origen de todo debe ser algo distinto a cualquier cosa
conocida. Además debía ser algo infinito que no se agotará, garantizando
que no se acabaría el mundo por falta de ese material, en este caso el
apeiron.
3. Para Anaxímenes hay una substancia básica y originaria del mundo, piensa
que el origen debe ser algo identificable y reconocible, a pesar de esto no
cree que el agua sea el elemento que da origen al mundo ya que es débil y
pasiva para otorgarle esas cualidades, si no que es el aire, porque todos
necesitamos de este para poder vivir lo que hace a este elemento fuerte e
indestructible. Escogió el aire como principio originario, de donde procede
todo, debido a que podía convertirse en cualquiera de los otros elementos
del mundo, como mar o tierra, sin perder su propia naturaleza.
Con este planteamiento, Anaxímenes resuelve las objeciones que
Anaximandro había hecho a Tales, las cuales decían que un elemento ya
existente no puede originar a otro, como el ejemplo antes mencionado del
fuego con el agua.
Los opuestos forman una unidad, como se demostró con los ejemplos del
punto anterior, pero esto no implica que no exista la pluralidad que en algún
unto difiere y en otro se encuentra.
Cuando Heráclito habla de los opuestos en conjunto se refiere a que estos
conforman un todo, pero estos no conviven, sino que se suceden unos de
otro, como el día de la noche o vice versa.
Periodo
Presocrático