¡Se mató un tomate! ¡Se mató un tomate! ¿Quieren que les cuente? ¿Quieren que les cuente? Se arrojó a la fuente, Se arrojó a la fuente, sobre la ensalada sobre la ensalada recién preparada. recién preparada. Su rojo vestido, Su rojo vestido, todo descocido, todo descocido, cayó haciendo arrugas cayó haciendo arrugas al mar de lechugas. al mar de lechugas. Su amigo zapallo Su amigo zapallo corrió como un rayo corrió como un rayo pidiendo de urgencia pidiendo de urgencia por una asistencia. por una asistencia. Vino el doctor ajo Vino el doctor ajo y remedios trajo. y remedios trajo. Llamó a la carrera Llamó a la carrera a Sal, la enfermera. a Sal, la enfermera. “Se mató un tomate”. “Se mató un tomate”. (Elsa Bornemann, Argentina) (Elsa Bornemann, Argentina)
¡Ay! ¡Qué disparate! ¡Ay! ¡Qué disparate!
¡Se mató un tomate! ¡Se mató un tomate! ¿Quieren que les cuente? ¿Quieren que les cuente? Se arrojó a la fuente, Se arrojó a la fuente, sobre la ensalada sobre la ensalada recién preparada. recién preparada. Su rojo vestido, Su rojo vestido, todo descocido, todo descocido, cayó haciendo arrugas cayó haciendo arrugas al mar de lechugas. al mar de lechugas. Su amigo zapallo Su amigo zapallo corrió como un rayo corrió como un rayo pidiendo de urgencia pidiendo de urgencia por una asistencia. por una asistencia. Vino el doctor ajo Vino el doctor ajo y remedios trajo. y remedios trajo. Llamó a la carrera Llamó a la carrera a Sal, la enfermera. a Sal, la enfermera.
Las aventuras de Cabeza de Fresa y Galleta de Jengibre-¡Perdidos en Nochebuena!: Cultivará la fe y la confianza de su hijo en Jesús cuando se enfrente a los desafíos de la vida!