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Vasilisa, una joven huérfana, fue acogida por una anciana. Vasilisa era muy trabajadora y hábil tejiendo, logrando crear una tela tan suave y delicada que sólo el zar la merecía. Ningún sastre se atrevió a cortar la tela, hasta que Vasilisa lo hizo y confeccionó ropas para el zar, quien se enamoró de ella y se casaron ese mismo día.
Vasilisa, una joven huérfana, fue acogida por una anciana. Vasilisa era muy trabajadora y hábil tejiendo, logrando crear una tela tan suave y delicada que sólo el zar la merecía. Ningún sastre se atrevió a cortar la tela, hasta que Vasilisa lo hizo y confeccionó ropas para el zar, quien se enamoró de ella y se casaron ese mismo día.
Vasilisa, una joven huérfana, fue acogida por una anciana. Vasilisa era muy trabajadora y hábil tejiendo, logrando crear una tela tan suave y delicada que sólo el zar la merecía. Ningún sastre se atrevió a cortar la tela, hasta que Vasilisa lo hizo y confeccionó ropas para el zar, quien se enamoró de ella y se casaron ese mismo día.
Una joven llamada Vasilisa, que estaba sola en el mundo, fue recogida por una viejecita. Vasilisa no sólo era muy guapa sino también muy trabajadora: sobre todo, hilaba y tejía con gran maestría. Un día, Vasilisa pidió lino y se puso a trabajar. Consiguió un hilo tan delicado que para tejerlo necesitó un telar especial. El resultado fue una tela tan suave y delicada que podría servir para el más bello de los vestidos, digno de un emperador. Vasilisa se la dio a la viejecita para que la vendiera. La anciana miró el tejido y se quedó admirada: —No, hija mía, no lo venderé. Sólo el zar es digno de esta tela. Se la llevaré a la corte. El zar la aceptó y despidió a la mujer colmándola de regalos. Sin embargo, cuando llegó el momento de utilizar la tela, ningún sastre quiso arriesgarse a cortar un tejido tan precioso. El zar llamó entonces a la viejecita, que le propuso a Vasilisa para hacer aquel trabajo. La joven cortó y cosió unas espléndidas ropas y, al acabarlas, ella misma se las llevó al zar. Al verla, el zar se enamoró de la joven hasta el punto de que aquel mismo día se celebró la boda. Y la viejecilla fue a vivir con ellos a palacio y todos fueron felices.
Cuento popular ruso
Marca la respuesta correcta con una X 1. Según el texto, Vasilisa era: Una princesa Una hilandera
2. Ningún sastre quería cortar la tela que hizo Vasilisa
porque se trataba de un tejido:
Especial para el zar Hecho de fino lino
Bello y delicado Hecho en un telar 3. Cuál es el animal que puede tejer como lo hace Vasilisa.
Escribo
4. Escribe otro final para la historia de Vasilisa.