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ARGUMENTO DE LA FISCALIA

Argumento de la fiscalía

La fiscal principal del caso Marcia Clark en 2011.

En su alegato inicial, el fiscal Christopher Darden afirmó que Simpson había asesinado a su
exesposa en un ataque de celos. La fiscalía abrió su caso reproduciendo una llamada de Nicole al
servicio 911 el 1º de enero de 1989. En la misma, Nicole expresó miedo de que Simpson la
lastimara físicamente, y en el fondo se le podía escuchar gritándole. Se presentaron otros
elementos relacionados con la violencia doméstica. La fiscalía presentó también decenas de
testigos expertos para ubicar a Simpson en la escena del crimen, en temas tales como la
identificación por ADN y el análisis de huellas de calzado. Durante las primeras semanas del juicio,
la fiscalía presentó evidencia de que Simpson tenía una historia de abuso físico sobre Nicole. Alan
Dershowitz, abogado de Simpson, argumentó que solo una pequeña fracción de las mujeres
abusadas por sus parejas son asesinadas.

La fiscalía creía tener un caso fuerte pese a la ausencia de testigos conocidos del crimen y la
incapacidad de recuperar el arma homicida.37 El caso de Clark era sostenido por la evidencia de
ADN, y la fiscal esperaba una condena. Con base en la evidencia física recolectada, la fiscalía
afirmaba que Simpson manejó hasta la casa de Nicole Brown el 12 de junio con la intención de
asesinarla. Sostenían que Brown había acostado a sus dos hijos y se estaba preparando para
acostarse ella misma cuando abrió la puerta delantera de su casa luego de responder a un golpe
en la puerta o escuchar un ruido afuera. Presuntamente, Simpson la agarró antes de que pudiese
gritar y la atacó con un cuchillo. Evidencia del forense del condado de Los Ángeles establecía que
Ron Goldman llegó al portón del frente de la casa en algún momento durante el asalto, y
aparentemente el asaltante lo atacó y lo apuñaló repetidamente en el cuello y el pecho con una
mano mientras le impedía moverse estrangulándolo con un brazo. Cuando las autoridades
llegaron a la escena del crimen, encontraron a Brown boca abajo. De acuerdo a la historia de la
fiscalía, después de que Simpson terminase con Goldman, tiró la cabeza de Brown hacia atrás
agarrándola del cabello, colocó su pie sobre su espalda y cortó su garganta con el cuchillo,
dañando la arteria carótida.38 Argumentaron que Simpson dejó un "rastro de sangre" desde la
casa hasta el callejón trasero; también hubo testimonio de que se encontraron tres gotas de
sangre de Simpson en el camino de entrada cerca del portón de su casa de la calle Rockingham.39

De acuerdo a la fiscalía, Simpson fue visto en público por última vez a las 9:36 p.m. esa noche,
cuando regresó al portón delantero de su casa con Brian "Kato" Kaelin, un actor y amigo de la
familia que se estaba quedando en la casa de huéspedes de la propiedad de Simpson. Simpson no
fue visto de nuevo hasta las 10:54 p.m. (1 hora y 18 minutos más tarde), cuando salió por la puerta
delantera de su casa hacia una limusina que lo estaba esperando, a la cual había contratado para
que lo trasladase al Aeropuerto Internacional de Los Ángeles (LAX) para viajar a una convención de
Hertz en Chicago. La defensa y la fiscalía estuvieron de acuerdo en que los asesinatos ocurrieron
entre las 10:15 y las 10:40 p.m., y la fiscalía afirmaba que Simpson había manejado su Bronco
blanco durante los cinco minutos necesarios hacia y desde la escena del crimen.9 Presentaron a un
testigo en la cercanía de la calle Bundy que vio un automóvil similar al Bronco de Simpson
alejándose rápidamente del área a las 10:35.9

Allan Park, el conductor de la limusina, testificó haber llegado a la propiedad de Simpson a las
10:24 p.m. Pasando por el portón de Rockingham, no vio al Bronco blanco de Simpson estacionado
en la calle. Park testificó haber estado buscando el número de puerta, el cual finalmente encontró,
y la fiscalía presentó planos para mostrar que la posición en la que el Bronco fue encontrado en la
mañana siguiente estaba justo al lado del número de puerta (dejando implícito que Park
seguramente lo habría visto si hubiese estado ahí en ese momento).40 De acuerdo a la versión de
los hechos dada por Simpson, el Bronco había estado estacionado en esa posición por varias horas.
Mientras tanto Kaelin estaba en su casa de huéspedes y hablando por teléfono con su amigo
Rachel Ferrara. Park estacionó frente al portón sobre la calle Ashford, luego volvió manejando al
portón sobre la calle Rockingham para evaluar qué entrada sería el mejor acceso para la limusina.
Tomando la decisión de que la entrada de Rockingham era muy estrecha, retornó al portón sobre
Ashford y comenzó a presionar el timbre a las 10:40, sin recibir respuesta. Park se bajó de la
limusina, miró a través del portón de Ashford y observó que la casa estaba a oscuras salvo por una
luz tenue proveniente de una de las ventanas del segundo piso, que correspondía a la habitación
de Simpson. Mientras fumaba un cigarrillo, Park realizó una serie de llamadas desde su móvil al
mensáfono de su jefe, Dale St. John, y luego a la casa de Park, para pedirle a su madre el teléfono
de la casa de St. John, todo en un intento de obtener el teléfono de la casa de Simpson.
Aproximadamente a las 10:50, Kaelin (quien aún estaba hablando por teléfono con Ferrara)
escuchó tres golpes contra la pared externa de su casa de huéspedes. Kaelin colgó el teléfono y se
dirigió al exterior para investigar los ruidos pero decidió no ir directamente hacia el oscuro pasaje
sur desde donde los golpes se habían originado. En su lugar, caminó al frente de la propiedad,
donde vio la limusina de Park afuera del portón de Ashford.

Al mismo tiempo que Park vio a Kaelin acercarse desde el fondo de la propiedad hacia el frente,
Park testificó haber visto a un "hombre negro alto" de la estatura y constitución corporal de
Simpson entrar por la puerta delantera de la casa desde el área del camino de entrada, tras lo cual
se encendieron luces y Simpson finalmente respondió la llamada de Park. Simpson explicó que se
había dormido y que pronto saldría al portón delantero. Kaelin abrió el portón de Ashford para
permitir que Parker ingresara la limusina en la propiedad, y unos minutos después Simpson salió
de su casa a través de la puerta delantera. Kaelin y Park ayudaron a Simpson a colocar sus
pertenencias (que ya se encontraban afuera de la puerta delatera cuando Park llegó al frente de la
casa de Simpson) en el maletero de la limusina para el traslado al aeropuerto. Tanto Kaelin como
Park remarcaron en su testimonio que Simpson se veía agitado. Pero otros testigos, incluyendo el
vendedor de pasajes que ingresó a Simpson al vuelo en el Aeropuerto Internacional de Los Ángeles
y una azafata, dijeron que Simpson se veía y actuaba perfectamente normal. Testimonios
contradictorios como estos serían un tema recurrente durante el juicio.
La afirmación inicial de Simpson de que estaba durmiendo a la hora de los asesinatos fue refutada
por varios testimonios diferentes. De acuerdo a Johnnie Cochran, abogado de la defensa, Simpson
nunca había dejado su casa esa noche, y se encontraba solo mientras empacaba sus pertenencias
para viajar a Chicago. Cochran afirmó que Simpson salió por la puerta trasera para golpear algunas
pelotas de golf en la caja de arena infantil en el jardín delantero, una o más de las cuales
provocaron los tres fuertes golpes en la pared de la casa de Kaelin. Cochran produjo un potencial
testigo de coartada, Rosa López, una española ama de casa de un vecino, quien testificó haber
visto al auto de Simpson estacionado afuera de su casa en el momento de los asesinatos. Pero el
testimonio de López, que no fue presentado al jurado, fue destrozado durante el
contrainterrogatorio de Clark, cuando López fue forzada a admitir que no podía estar segura del
momento preciso en que vio al Bronco blanco de Simpson afuera de su casa.

La defensa intentó convencer al jurado de que Simpson no era físicamente capaz de llevar a cabo
los asesinatos, afirmando que Goldman era un joven en forma que luchó firmemente contra su
atacante. Simpson era un exjugador de fútbol profesional de 46 años con artritis crónica. Tenía
cicactrices en sus rodillas por viejas heridas del fútbol. Pero Clark presentó como evidencia un
video de ejercicios que Simpson había realizado unos meses antes de los asesinatos llamado El
mantenimiento mínimo de O. J. Simpson: Fitness para hombres, el cual mostraba que, pese a
algunas condiciones y limitaciones físicas, Simpson no era nada frágil.41

La fiscalía llamó a Denise; hermana de Brown, a declarar como testigo. Entre lágrimas, testificó
muchos episodios de violencia doméstica en la década de 1980, cuando vio a Simpson levantar a
su esposa y arrojarla contra una pared, luego arrojarla físicamente fuera de su casa durante una
discusión. Su testimonio estuvo marcado por una gran cantidad de objeciones de la defensa y de
conferencias junto a la barra con el juez.

La fiscalía procedió a los eventos de la noche del 12 de junio de 1994, cuando Karen Lee Crawford,
la gerente del restaurante Mezzaluna donde Brown cenó en la noche de ese domingo, fue llamada
a testificar. La misma contó que la madre de Brown llamó al restaurante a las 9:37 p.m. por un par
de lentes perdidos. Crawford los encontró y los colocó en un sobre blanco. Goldman, un mozo del
lugar, abandonó el restaurante a las 9:50 p.m. tras terminar su turno, llevando los lentes para
dejarlos en la casa de Brown.

Pablo Fenjves, vecino de Brown, testificó haber escuchado "un ladrido muy distintivo" y un "llanto
quejumbroso" de unos 10 a 15 minutos después de las 10:00 p.m., mientras estaba en su casa
mirando las noticias de las 10 en la televisión. Eva Stein, otra vecina, testificó sobre un ladrido muy
fuerte y persistente, también alrededor de las 10:15 p.m., que le impidió volver a dormirse. El
vecino Steven Schwab testificó que mientras estaba paseando a su perro en el área cercana a la
casa de Brown alrededor de las 11:30 p.m., notó un perro Akita (propiedad de Brown) perdido y
agitado arrastrando su correa. Vio que tenía patas ensangrentadas, pero tras examinarlo no
observó ninguna herida. Schwab dijo que llevó al perro a la casa de otro vecino amigo suyo, Sukru
Boztepe. El mismo testificó haber llevado al perro adentro de su casa, donde se volvió más
agitado. Boztepe llevó al perro a pasear aproximadamente a las 12:00 de la medionoche y testificó
que el perro hacía fuerza contra su correa y que lo llevó hasta la casa de Nicole. Ahí descubrió el
cuerpo de Nicole. Minutos después, Boztepe detuvo a un patrullero que pasaba por el lugar.

El oficial de policía Robert Riske fue el primer oficial en la escena del crimen. Testificó haber
encontrado a una mujer descalza con un vestido negro yaciendo boca abajo en un charco de
sangre en el camino que llevaba a la puerta delantera de su casa. Luego vio el cuerpo de Goldman
a una corta distancia, yaciendo de lado junto a un árbol y por fuera del camino. Riske dijo haber
visto un sobre blanco, que luego se descubrió contenía los lentes dejados en el restaurante por la
madre de Brown. También vio el localizador de Goldman, un guante negro de cuero y una gorra de
esquí azul ocuro en el suelo junto a los cuerpos. La puerta delantera de la casa de Brown estaba
completamente abierta, pero no habían signos de una entrada forzada ni evidencia de que alguien
hubiese entrado en la propiedad. Adentro no había nada fuera de lo normal.

El domingo 12 de febrero de 1995, una larga caravana se dirigió a Brentwood y el juez, el jurado, la
fiscalía y los abogados defensores realizaron una inspección de dos horas de la escena del crimen.
Luego se realizó una excursión de tres horas por la propiedad de O. J. Simpson en Rockingham.
Simpson estaba custodiado por varios oficiales pero no llevaba esposas; esperó fuera de la escena
del crimen dentro y cerca de un automóvil policial encubierto y se le permitió ingresar a su
mansión de Rockingham.

El detective Ron Phillips testificó que cuando llamó a Simpson en Chicago para informarle del
asesinato de su exesposa, Simpson parecía impactado y trastornado, pero no preguntó cómo
había muerto. El detective Tom Lange testificó que probablemente Brown fue asesinada primero
porque las plantas de sus pies descalzos estaban limpias, lo que significaba que había sido arrojada
al piso antes de que hubiese sangre. Este también era un punto clave que sugería que Simpson
podría haber ido a matar a Brown, mientras que aparentemente Goldman tropezó
inadvertidamente con la escena, provocando que Simpson lo asesinara también. Durante el
contrainterrogatorio del detective Lange, Cochran propuso dos hipótesis sobre lo ocurrido en la
escena del crimen. Primero, sugirió que uno, o más, traficantes de droga encontraron a Brown
mientras buscaban a Faye Resnick, amiga y huésped de la casa, una adicta a la cocaína confesa. En
la segunda hipótesis, Cochran sugirió que "un asesino, o asesinos" siguieron a Goldman hasta la
casa de Bundy Sur para matarlo.

Argumento de la defensa

Johnnie Cochran en 2001.


Simpson contrató a un equipo de abogados de alto perfil, incluyendo a F. Lee Bailey, Robert
Kardashian, Robert Shapiro, Alan Dershowitz, Johnnie Cochran, Gerald Uelmen (en ese entonces el
decano de derecho en la Universidad de Santa Clara), Carl E. Douglas y Shawn Holley. Se
contrataron dos abogados especializados en pruebas de ADN, Barry Scheck y Peter Neufeld, para
intentar desacreditar las evidencias genéticas de la fiscalía, en una época en la que recién habían
aparecido este tipo de análisis y resultaban relativamente desconocidos.42 Argumentaron que
Simpson fue víctima de fraude policial y lo que llamaron procedimientos internos poco rigurosos,
los cuales contaminaron la evidencia de ADN.38

Se dijo que la defensa de Simpson costó entre 3 y 6 millones de dólares.43 El equipo defensor de
Simpson, llamado el «Dream Team» por los reporteros, argumentó que Mark Fuhrman, detective
del Departamento de Policía de Los Ángeles (LAPD), había plantado evidencia en la escena del
crimen. Dennis Fung y Andrea Mazzola, criminalistas del LAPD, fueron objeto de un fuerte
escrutinio.

La defensa de Simpson buscó mostrar que uno o más sicarios contratados por traficantes de
drogas fueron quienes asesinaron a Brown y Goldman (haciéndole a ambos la "corbata
colombiana") porque estaban buscando a Faye Resnick, amiga de Brown, una conocida
consumidora de cocaína que no había pagado por sus drogas. Sin embargo, el juez Ito prohibió
testimonio sobre el uso de drogas de Resnick. La misma se había quedado por varios días en el
condominio de Brown hasta ingresar a rehabilitación de drogas cuatro días antes de los asesinatos.
Ito afirmó que la defensa fue incapaz de proveer suficiente evidencia directa o circunstancial para
probar que el argumento era posible, indicando: "Encuentro que la oferta de prueba referida al
motivo es altamente especulativa". En consecuencia, prohibió que Christian Reichardt testificara
sobre el problema con las drogas que tenía Resnick, su exnovia.44

La prueba

Evidencia presentada al jurado

La fiscalía ofreció evidencia circunstancial para demostrar la culpabilidad de Simpson.45

El análisis de ADN de sangre descubierta en un par de calcetines de Simpson encontrado en su


habitación probó que la misma pertenecía a Brown. La sangre tenía características de ADN que
coincidían en solo uno en 9 700 millones, con probabilidades disminuyendo a uno en 21 000
millones al juntar los resultados de las pruebas realizadas en los dos laboratorios de ADN.1745
Ambos calcetines tenían aproximadaente 20 manchas de sangre.17 La sangre produjo un patrón
similar en ambos lados de los calcetines. El Dr. Henry Lee del Laboratorio de Ciencia Forense de la
Policía Estatal de Connecticut, experto médico de la defensa, testificó que la única manera de que
tal patrón pudiese aparecer era si Simpson tenía un "agujero" en su tobillo, o si se colocó una gota
de sangre en el calcetín cuando el mismo no se estaba utilizando. Lee también testificó que el
procedimiento utilizado para la recolección de los calcetines podría haber provocado una
contaminación.46

El análisis de ADN de sangre encontrada dentro, fuera y cerca del Bronco de Simpson reveló
rastros de sangre de Simpson, Brown y Goldman.47

Se encontraron mechones de pelo consistentes con el de Simpson en la camiseta de


Goldman.47

Se encontraron varias monedas y gotas de sangre fresca detrás del condominio de Brown, en el
área donde los automóviles estaban estacionados.

El análisis de ADN de sangre en un guante izquierdo, encontrado afuera de la casa de Brown,


demostró que la misma era una mezcla de sangre de Simpson, Brown y Goldman. Pese a que el
guante estaba empapado en sangre, no habían gotas de sangre yendo hacia, o desde, el guante.
No se encontraron restos de sangre en el área del guante excepto en el propio guante.47

Los guantes contenían partículas de pelo consistentes con el pelo de Goldman y una gorra
contenía fibras de alfombra consistentes con las fibras del Bronco de Simpson.9 Una gorra de lana
negra encontrada en la escena del cimen contenía mechones de pelo afroamericano.9 Se
encontraron varios hilos de fibras de algodón color azul ocuro sobre el cuerpo de Goldman. Un
testigo presentado por la fiscalía afirmó que esa noche Simpson vestía una sudadera de color
similar.9

El guante izquierdo encontrado en la casa de Brown y el guante derecho encontrado en la casa


de Simpson resultaron ser del mismo par.48

La defensa planteó que si se comparaba la cantidad de sangre que había sido extraída de
Simpson para diferentes pruebas con la cantidad que quedaba, se podía constatar que habían
desaparecido 1,5 mililitros de la misma, afirmando que la cantidad era suficiente para enmarcar al
defendido en los asesinatos de Brown y Goldman. Gregory Matheson, testigo de la fiscalía y el
principal químico del LAPD, no discutió los cálculos de la defensa, pero tampoco se mostró
preocupado por lo que significaban. Según Matheson, las distintas mediciones de la sangre
obtenida nunca fueron exactas ya que siempre podía obtenerse más. A su vez, se plantearon
varios motivos por los que la cantidad de sangre restante podía ser menor a la originalmente
obtenida: no siempre se devolvía a su envase la sangre no utilizada y, dada la viscosidad natural de
la sangre, una cantidad considerable de la misma podía quedar adherida a los materiales con los
que entró en contacto cada vez que hubo que retirar un poco para realizar alguna prueba.49

Oficiales encontraron registros de arresto indicando que Simpson había sido acusado de golpear
a Nicole Brown en 1989. Se mostraron a la corte fotografías del rostro de Brown, magullado y
maltratado en ese ataque.

Gran parte de la evidencia incriminatoria (el guante y los calcetines ensangrentados, la sangre
dentro y fuera del Bronco) fue descubierta por el detective Mark Fuhrman, quien luego fue
acusado de perjurio por afirmar falsamente durante el juicio que no había utilizado la palabra
"nigger" (un insulto racista) en los últimos 10 años. Más tarde en el juicio, cuando el jurado estaba
ausente, alegó la Quinta Enmienda contra la autoincriminación cuando se le preguntó "¿usted
plantó o creó alguna evidenciaen este caso?".50 En una entrevista en 2016, Alan Dershowitz,
abogado de la defensa, sugirió que el detective Philip Vannatter (no el detective Fuhrman) podría
haber plantado evidencia en los calcetines, sobre la base de la presencia de un anticoagulante
descubierto en los calcetines.51 Dershowitz afirmó que el jurado podría haber concluido que si la
evidencia de los calcetines ensangrentados había sido creada por la policía, entonces otra
evidencia también podría haber sido creada.51 Testimonio experto del FBI afirmó que la defensa
exageró el significado de la presencia de anticoagulante.52

Las huellas de calzado sangrientas en la escena del crimen fueron identificadas por William
Bodziak, experto en calzado del FBI, como producidas por unos zapatos Bruno Magli
extremadamente raros y caros; solamente 29 pares de ese estilo habían sido vendidos en Estados
Unidos.9 El tamaño de las huellas, talle 12 grande (305 mm), coincidía con el talle de calzado de
Simpson.9 En el juicio penal, los abogados defensores de Simpson afirmaron que la fiscalía no
tenía ninguna prueba de que Simpson había comprado esos zapatos.9 Pero el fotógrado
independiente E. J. Flammer dijo haber encontrado una fotografía que le tomó a Simpson en 1993
que parecía mostrarlo calzando un par de los zapatos en un evento público. Posteriormente fue
publicada en el National Enquirer. El equipo de defensa de Simpson alegó que la fotografía era
adulterada. Pero luego se descubrieron y publicaron otras fotografías anteriores a 1994 que
parecían mostrar a Simpson calzando los zapatos Bruno Magli.53 Ninguna de estas fotografías se
mostraron hasta bien entrado el juicio.

Evidencia recolectada por Dennis Fung, criminalista del LAPD, fue criticada por la defensa. Fung
admitió "no haber visto unas pocas gotas de sangre en una cerca próxima a los cuerpos"; en el
estrado dijo haber "vuelto varias semanas después para recolectarlas".54

Fung admitió no haber utilizado guantes de goma al recolectar parte de la evidencia.54 Pero la
sangre examinada no contenía su ADN, dentro de los protocolos publicados.

El detective Philip Vannatter de la policía de Los Ángeles testificó haber visto fotografías de
trabajadores de la prensa apoyados sobre el Bronco de Simpson antes de que se recolectase
evidencia.54

Evidencia no presentada al jurado

En la audiencia de gran jurado llevada a cabo en junio de 1994, la cuchillería Ross entregó
recibos indicando que Simpson había comprado un cuchillo estilete de 12 pulgadas (305 mm) seis
semanas antes de los asesinatos. Se determinó que el cuchillo era similar al que causó las heridas
por apuñalamiento. Después de descubrir que empleados de la tienda habían vendido su historia
al National Enquirer por 12 500 dólares, la fiscalía no presentó esta evidencia en el juicio. Los
abogados de Simpson luego recogieron el cuchillo de su casa; se lo presentaron al juez Ito y luego
fue sellado en un sobre de manila para ser abierto solo en caso de que se lo mencionase en el
juicio. Esta no era el arma homicida: pruebas realizadas sobre el cuchillo determinaron que un
aceite utilizado en cuchillería nueva todavía estaba presente en el mismo, indicando que el
cuchillo nunca había sido utilizado. La policía buscó en la propiedad de Simpson en Rockingham en
tres ocasiones y no pudo encontrar el cuchillo. Simpson le dijo a sus abogados exactamente dónde
se encontraba dentro de la casa y el mismo pudo recuperarse.55

Jill Shively testificó ante el gran jurado de 1994 que vio un Ford Bronco blanco alejarse a gran
velocidad de la calle Bundy, con tanto apuro que casi chocó con otro automóvil en una
intersección. Shively habló con el programa televisivo Hard Copy por 5 000 dólares, tras lo cual la
fiscalía decidió no utilizar su testimonio en el juicio.

Sojourn, un refugio para mujeres, recibió una llamada de Brown cuatro días antes de los
asesinatos; Brown dijo tener miedo de su exesposo, quien creía que la estaba acosando. La fiscalía
no presentó esta información en el juicio pensando que el juez Ito dictaminaría que la evidencia
era un rumor. Además, amigos y familiares indicaron que Brown había dicho en varias ocasiones
que Simpson la había estado acosando. Brown alegaba que a todo lugar donde iba, notaba que
Simpson estaba ahí también, observándola. Sus amigas Faye Resnick y Cynthia Shahian afirmaron
que ella tenía miedo porque Simpson le había dicho que la mataría si alguna vez la encontraba con
otro hombre.

Rosey Grier, exjugador de la NFL y pastor, visitó a Simpson en la cárcel del condado de Los
Ángeles en los días siguientes a los asesinatos. Jeff Stuart, un guardia carcelario, testificó al juez Ito
que en un momento Simpson le gritó a Grier que "no pretendía hacerlo", tras lo cual Grier instó a
Simpson a que confesase. Ito dictaminó que la evidencia era un rumor y que no podía permitirse
en el juicio.

Los eventos relativos a la persecución del Bronco, y los materiales encontrados dentro del
automóvil (incluyendo el dinero en efectivo, la pistola y el disfraz), no fueron presentados al
jurado. La fiscalía no cubrió la aparente nota de suicidio de Simpson ni sus declaraciones a la
policía.

Unos meses antes de los asesinatos de 1994, Simpson completó un episodio piloto para
Frogmen, una serie de aventuras, la cual protagonizaba. Pese a que la fiscalía investigó reportes de
que Simpson, que hacía el papel de líder de un grupo de ex Navy SEALs, recibió "una importante
cantidad" de entrenamiento militar (incluyendo la utilización de un cuchillo) para Frogmen, y a que
hay una escena en la que mantiene un cuchillo sobre la garganta de una mujer, esto no se
introdujo como evidencia durante el juicio.56

El testimonio de Rosa López fue grabado en videocinta pero no fue mostrado al jurado.

Evidencia de ADN

Muestras obtenidas de huellas de calzado sangrientas alejándose de los cuerpos y del portón
trasero del condominio de Brown fueron examinadas para identificaciones de ADN. 9Las pruebas
iniciales utilizando la técnica de reacción en cadena de la polimerasa no descartaron a Simpson
como sospechoso. En pruebas de polimorfismos de longitud de fragmentos de restricción, más
precisas que las anteriores, se encontraron coincidencias entre la sangre de Simpson y muestras
de sangre tomadas de la escena del crimen (las muestras de ambas huellas de calzado y del
portón).89 Dennis Fung, criminalista de la policía, testificó que esta evidencia de ADN ubicaba a
Simpson en la casa de Nicole a la hora de los asesinatos. Pero Barry Scheck, experto de la defensa,
llevó a cabo un contrainterrogatorio de ocho días de duración, cuestionando casi toda la evidencia
de ADN. El Dr. Robin Cotton, de Diagnósticos Cellmark, testificó por seis días.17 Se examinó
evidencia de sangre en dos laboratorios indepentientes, cada uno llevando a cabo pruebas
diferentes.17 En ese entonces, la población general todavía no estaba familiarizada con la
precisión y el significado de la identificación por ADN.

Durante el contrainterrogatorio de Fung y otros científicos laboratoristas, surgió que Andrea


Mazzola, científico de la policía (quien recolectó muestras de sangre de Simpson para comparar
con evidencia de la escena del crimen) era un aprendiz que llevó el frasco de sangre de Simpson en
el bolsillo de su bata de laboratorio por casi un día antes de entregarlo como evidencia.57 Pese a
que se encontraron dos errores en la historia de realización de pruebas de ADN en Cellmark, uno
de los laboratorios utilizados (en 1988 y 1989), los errores se habían encontrado durante pruebas
de control de calidad y no habían ocurrido desde entonces.17 Una de las compañías contratadas
por la defensa de Simpson para la consultoría en relación al ADN había realizado el mismo error
que el encontrado en 1988.8 Lo que debería haber sido el punto fuerte de la fiscalía se volvió su
conexión débil, entre acusaciones de la defensa de que técnicos de la policía manejaron las
muestras de sangre con tal grado de incompetencia que hicieron casi imposible la entrega de
resultados de ADN precisos y confiables. La fiscalía argumentó que habían permitido el uso de la
evidencia de ADN por parte de la defensa para realizar sus propias pruebas, y que si los abogados
de la defensa no estaban de acuerdo con las pruebas de la fiscalía, podrían haber llevado a cabo
sus propias pruebas sobre las mismas muestras.17 La defensa había elegido no aceptar la oferta
de la fiscalía.17

El 16 de mayo, Gary Sims, un criminalista del Departamento de Justicia de Califonia que había
ayudado a establecer el laboratorio de ADN del Departamento, testificó que el guante encontrado
en la casa de Simpson resultó positivo para la comparación con sangre de Goldman.17

El testimonio de Mark Fuhrman

Mark Fuhrman en 2008.

Artículo principal: Mark Fuhrman

En marzo de 1995, el detective Mark Fuhrman testificó haber conducido hasta la casa de Simpson
para interrogarlo en la noche de los asesinatos. Tras no recibir respuesta al tocar el timbre de la
casa, la cual parecía vacía, trepó una de las paredes externas para ingresar a la propiedad.
Encontró marcas de sangre en el camino de entrada a la casa de Simpson, al igual que un guante
de cuero negro cerca de la casa de huéspedes donde se estaba quedando Kaelin. Por medio de
pruebas de ADN, luego se descubrió que el guante contenía sangre de ambas víctimas, al igual que
sangre de Simpson.9 Pese a un contrainterrogatorio agresivo por parte de F. Lee Bailey,58 en el
estrado Fuhrman negó ser racista o haber utilizado la palabra "nigger" para describir a personas
negras en los 10 años previos a su testimonio.58 Pero unos pocos meses después, la defensa
reprodujo unas cintas de audio en las que Fuhrman utilizaba el término repetidamente (41 veces
en total). Las cintas habían sido grabadas entre 1985 y 1994 por una joven guionista de Carolina
del Norte llamada Laura McKinny. McKinny había interrogado a Fuhrman ampliamente para un
guion que estaba escribiendo sobre oficiales de policía. Las cintas de Fuhrman se volvieron una de
las piedras angulares del argumento de la defensa de que el testimonio de Fuhrman carecía de
credibilidad.

Con el jurado ausente, Fuhrman fue llamado nuevamente al estrado como testigo por la defensa
para responder más preguntas sobre el descubrimiento de las marcas de sangre y el guante de
cuero que había encontrado en la propiedad de Simpson. Cuando fue interrogado por el abogado
Gerald Uelmen, Fuhrman, con su abogado a su lado, citó la Quinta Enmienda para evitar la
autoincriminación y posterior interrogatorio después de que su integridad fuese cuestionada.

Durante los argumentos finales, la fiscalía dijo al jurado que Fuhrman era un racista, pero afirmó
que esto no debía distraer de la evidencia que demostraban la culpabilidad de Simpson. El
testimonio de Fuhrman llevó a que lo acusaran por un cargo de perjurio; posteriormente no refutó
los cargos.

Los guantes

Un guante oscuro de cuero fue encontrado en la escena del crimen, y su pareja se encontró cerca
de la casa de huéspedes de Kato Kaelin, detrás de la propiedad de Simpson en la calle
Rockingham.9 Kaelin testificó haber escuchado "golpes en la noche" en la misma área alrededor
de la casa de huéspedes la noche de los asesinatos.9 Brown le había comprado a Simpson dos
pares de este tipo de guante en 1990.9 Ambos guantes, de acuerdo a la fiscalía, contenían
evidencia de ADN de Simpson, Brown y Goldman. El guante en la casa de Simpson también
contenía un mechón largo de pelo rubio, similar al pelo de Brown.9

El 15 de junio de 1995, el abogado defensor Johnnie Cochran incitó al fiscal auxiliar Christopher
Darden a pedirle a Simpson que se colocara el guante de cuero encontrado en la escena del
crimen. Previamente la fiscalía había decidido no pedirle a Simpson que se probara los guantes
porque (de acuerdo a los fiscales) el guante había estado empapado en sangre de Simpson, Brown
y Goldman,38 y había sido congelado y descongelado varias veces. El guante de cuero pareció ser
demasiado justo como para que Simpson se lo colocara fácilmente, especialmente sobre los
guantes de látex que tenía por debajo.9 Uelmen creó y Cochran repitió una frase que había
utilizado varias veces en relación a otros puntos en sus argumentos finales, "Si no cabe, deben
absolver" ("If it doesn't fit, you must acquit" en inglés). El 22 de junio de 1995, Darden expresó al
juez Lance Ito sus preocupaciones de que Simpson "tiene artritis y miramos la medicación que
toma y parte de la misma son antiinflamatorios y se nos afirmó que no la ha tomado en un día y
esto provocó hinchazón en las articulaciones e inflamación en sus manos". La fiscalía también
afirmó su idea de que el guante se había encogido por haber estado empapado en sangre y por las
pruebas que se le realizaron luego.9 Durante el juicio, la fiscalía presentó una foto de Simpson
previamente llevando el mismo tipo de guante que fue encontrado en la escena del crimen.

Los fiscales argumentaron que la presencia de sangre de Simpson en la escena del crimen era
resultado de la sangre que goteaba de los cortes en su dedo medio de la mano izquierda.9 La
policía había notado sus heridas y afirmado que las mismas se habían producido durante el ataque
fatal a Goldman. Sin embargo, la defensa mostró que ninguno de los guantes recuperados tenía
cortes. Además, tanto testigos de la fiscalía como de la defensa testificaron no haber visto cortes o
heridas de ningún tipo en las manos de Simpson horas después de ocurridos los asesinatos. La
defensa alegaba que Fuhrman podía haber plantado el guante en la casa de Simpson luego de
tomarlo de la escena del crimen. El análisis según el cual el cabello podía ser de Brown no era
seguro.9 La fiscalía afirmó que el guante no había sido movido. Hicieron notar que a la hora en que
Fuhrman llegó a la casa de Simpson, la escena del crimen en la casa de Brown ya había sido
revisada por varios oficiales durante casi dos horas, y ninguno había notado un segundo guante en
la escena. En su primera serie de testimonios, Fuhrman respondió "no" cuando F. Lee Bailey le
preguntó si había plantado alguna evidencia en la casa de Simpson. En su segunda serie de
testimonios, después de reveladas las cintas, Fuhrman citó la Quinta Enmienda cuando Uelmen le
hizo la misma pregunta.

El 8 de septiembre de 2012, Darden acusó a Cochran de manipular el guante antes del juicio.59
Alan Dershowitz, un miembro del equipo defensor de Simpson, negó la alegación, afirmando que
"la defensa no obtiene acceso a la evidencia salvo bajo condiciones controladas".

En 2016, Darden dijo que, en su opinión, los guantes sí cabían pero que Simpson llevó a cabo una
actuación.60 "Creo que la demostración de los guantes es una de las mayores escenas en una
corte en la historia estadounidense", afirmó.61

Los alegatos finales

En su alegato final, el fiscal Darden ridiculizó la idea de que oficiales de policía podían haber
querido enmarcar a Simpson. Se cuestionó por qué, si el Departamento de Policía de Los Ángeles
estaba en contra de Simpson, fueron a su casa en ocho ocasiones por llamadas sobre violencia
doméstica contra Brown entre 1986 y 1988 pero no lo arrestaron. Los arrestaron por cargos de
abuso en enero de 1989 (cuando fotografías del rostro de Brown fueron registradas). Darden hizo
notar que la policía no había arrestado a Simpson por cinco días después de los asesinatos de
1994.
Por su parte el abogado defensor Cochran sostuvo en su alegato final que estaba demostrado que
Fuhrman se había referido en varias ocasiones a afroamericanos como "niggers" y que se había
jactado de golpear jóvenes afroamericanos en su papel como oficial de policía. La técnica de
Fuhrman fue luego criticada por Robert Shapiro y por al menos un miembro del jurado, al igual
que por Fred Goldman, el padre de Ron Goldman. Cochran llamó a Fuhrman "un racista genocida,
un perjuro, la peor pesadilla de Estados Unidos y la personificación del mal". Posteriormente,
Fuhrman no refutó los cargos por perjurio, los cuales se habían originado a partir de su testimonio
en el juicio de Simpson.

Crecieron temores de que se generaran disturbios raciales a lo largo de Los Ángeles y el resto del
país en caso de que Simpson fuese condenado por los asesinatos. Se habían producido disturbios
en 1992 después de que cuatro oficiales de policía fueran absueltos por golpear al automovilista
negro Rodney King tres años antes (la golpiza a King fue filmada por un aficionado y el vídeo se
hizo viral). Como resultado, todos los oficiales de policía de Los Ángeles fueron asignados a turnos
de doce horas. La policía colocó más de cien oficiales montados para rodear la corte del condado
de Los Ángeles el día en que se anunció el veredicto en previsión de que la multitud generara
disturbios.

Veredicto

A las 10:07 a.m. PDT del 3 de octubre de 1995, O. J. Simpson fue declarado no culpable de
asesinato en ambos cargos. El único testimonio revisado fue el de Alan Park, conductor de la
limusina, quien dijo no haber visto el Bronco de Simpson afuera de la propiedad de Rockingham
cuando llegó para levantarlo (después de ocurridos los asesinatos). El jurado llegó al veredicto a
las 3:00 p.m. del 2 de octubre, tras solo cuatro horas de deliberaciones, pero el juez Ito pospuso el
anuncio.62

Antes del veredicto, el presidente Bill Clinton fue informado sobre medidas de seguridad por si se
generaban disturbios a nivel nacional como consecuencia del veredicto, para evitar que pudiera
volver a ocurrir algo como los Disturbios de Los Ángeles de 1992. Aproximadamente unas 100
millones de personas a nivel mundial miraron por televisión o escucharon por radio el anuncio del
veredicto. El volumen de llamadas telefónicas de larga duración disminuyó en un 58% y el
volumen de operaciones en la Bolsa de Nueva York disminuyó en un 41%. La utilización de agua
decreció, ya que la gente evitaba usar los baños. Se detuvo tanto trabajo que según estimaciones
el veredicto costó unos 480 millones de dólares en pérdidas de productividad.62

La Corte Suprema de los Estados Unidos recibió un mensaje sobre el veredicto durante
argumentos orales, con los jurados pasando la nota de uno a otro en silencio mientras escuchaban
la presentación del abogado. Congresistas cancelaron conferencias de prensa, uno de ellos
diciendo a los reporteros "No solo ustedes no estarían aquí, sino que tampoco yo estaría aquí".63

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