La ética del cuidado de sí

Moral y ética en Foucault

La ética y la moral son términos que han sido confundidos por muchas personas e
implementado en la cotidianidad de manera errónea, pues, cada uno se refiere a
una percepción ya sea interna o externa. La moral tiene una base social, es un
conjunto de normas establecidas en una sociedad y que influye en la conducta de
las personas, en cambio, la ética actúa en la conducta desde el interior, desde la
conciencia y voluntad, trata de algún modo ser fiel a uno mismo, es particular y
único de cada ser humano, por lo que, como dice el autor del texto Víctor Florián
en su análisis de la ética para Foucault “una ética universal válida para todos,
además de pacerle "catastrófica" sería incompatible con la idea de ética planteada
como "relación con uno mismo" en las actuaciones y elección personal en la
elaboración de una estética de la existencia”.

Para Foucault el cuidado de sí mismo involucra la constitución de un saber y unas

verdades en torno al deseo y los placeres para la construcción del propio sujeto,
propone entender la ética como elaboración de una forma de relación consigo
mismo que permite al individuo construirse como sujeto de una conducta moral.

El conocimiento de si se convierte en un modo de conocimiento extensivo al

examen de conciencia la meditación, los retiros, entre otros, plantea la necesidad
de un ejercicio permanente de cuidar de uno mismo, de preocuparse, de volver
sobre sí mismo. Una actitud vigilante el cuidado implica, por lo tanto, el
conocimiento de un cierto número de reglas de conducta o principios que son al
mismo tiempo verdades y normas que ponen en relación directa al individuo con la
verdad A cambio de un trabajo serio de conversión y de transformación por el cual
se logra la posesión de sí mismo.

La ética como cuidado de si mismo compromete la libertad, es la practica de la

libertad reflexiva y en ejercicio de la misma como practica individual e
imprescindible como condición ontológica. La etapa ética no debe de ser
entendida como una razón normativa si no por el contrario es una manifestación
de un conjunto de práctica, que al potenciar la relación del sujeto consigo mismo
cultiva la existencia la verdad y la subjetiva moral, es decir, no es que, por el
ejemplo, la verdad está en el sujeto si no que se construye a través del
conocimiento del sí mismo, la etapa ética nos revela un proceso artístico de
autoconocimiento. Y con ella se puede acceder al ser es decir a la constitución de
un hombre como sujeto ético al sujeto, como obra es imprescindible el ejercicio de
la propia libertad la libertad es la construcción de uno mismo como obra realizada
entran en juego las prácticas reales o técnicas de si el estilo la elección personal
las maneras de enfrentarse de cada individuo con el mundo exterior y por esto no
es concebible que sean impuestas a todos universalmente la ética es una manera
de ser y de comportarse implica una determinada relación consigo mismo que
establece el sujeto autónomo con sujeción a sí mismo y no códigos que vengan el
exterior.

El recorrido hasta aquí presentado da cuenta de la noción del cuidado de si,

Foucault propone técnicas que posibilitan el cuidado de si mismo como una forma
de pensar, como un afán de realizar una ética estética, de tal manera que pueda
hacerse de la vida una obra de arte, en la medida que se aborda cada una de
ellas, se reconoce cómo todas están interconectadas, y cómo desde estas
prácticas se logra la subjetivación desde la etica como práctica de libertad, en
tanto el sujeto las elige o, se propone el cuidado de sí como práctica de libertad
como condición necesaria en la gestión humana de las organizaciones, las
técnicas de sí, sirven de herramientas propias de la subjetividad para lograr el
cuidado de sí en relación al cuidado de los otros.