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Conceptos Generales
Una característica fundamental, por la cual el Hombre se distingue del resto de los
animales, es la utilización del Lenguaje, y que, además, poseemos un Cerebro lo
suficientemente sofisticado para tal función.
Se estima que existen en el Mundo, unos 10.000 idiomas y dialectos. Las Lenguas
difieren en muchos aspectos, como el orden en que se disponen sustantivos y verbos.
Pero, a pesar de las diferencias de Sintaxis, desde los idiomas más complejos y difíciles
de aprender hasta las lenguas aborígenes más elementales, todas ellas son capaces de
expresar las sutilezas de la Experiencias y Emociones Humanas.
Consideremos el hecho que nunca se ha encontrado una tribu de individuos mudos.
Muchos entienden que esto es consecuencia de que el Cerebro Humano ha
desarrollado sistemas especiales de Procesamiento del Lenguaje. Estos sistemas son
los que presentamos a los niños desde el nacimiento, sin importar la cultura donde se
desarrollen. Y si el niño encuentra en su entorno un Lenguaje normal, inevitablemente
aprenderá a hablar y entender el idioma.
Ahora bien, ¿es el Lenguaje una facultad privativa de los seres humanos?
Como dijimos, el Lenguaje Humano es un sistema complejo, flexible y poderoso de
comunicación, que se relaciona con la utilización creativa de palabras de acuerdo con
las normas de un sistema gramatical.
Se ha demostrado que los animales más evolucionados, como los chimpancés y los
monos, utilizan una diversidad de sonidos dentro de su grupo social, a los efectos de
comunicar situaciones de alarma, presencia de alimento, delimitación de sus
territorios, pero no pueden hacer uso de un sistema gramatical.
Lo mismo ocurre con animales mucho menos evolucionados, como las abejas, capaces
de comunicar al resto de la colmena la localización y distancia a la que se encuentran
los alimentos, pero tampoco poseen un sistema gramatical.
Se han realizado infinidad de experimentos con animales para enseñarles a hablar. Los
chimpancés aprendieron a decir un número limitado de palabras y gestos,
demostrando que, sencillamente, tienen una muy buena memoria y que no poseen la
creatividad ilimitada que tiene el ser humano para la utilización del Lenguaje.
Además, los seres humanos cuentan con los elementos Neuroanatómicos y
Neurofisiológicos adecuados para la elaboración, utilización y expresión del Lenguaje:
el SNC y el APARATO FONADOR.
Esta Unidad estará destinada a exponer los Fundamentos Neurobiológicos del Lenguaje
y algunos de los trastornos más frecuentes de observar en la práctica diaria.
Definición
Definiremos al Lenguaje como una:” Función Neuropsicológica compleja, de origen
cortical cerebral, constituido por un conjunto de signos por medio de los cuales el
Hombre expresa su Pensamiento y comprende el de los demás”.
Tipos de Lenguaje
Como sabemos, existen tres tipos básicos de Lenguaje:
• Escrito: donde los individuos se valen de signos gráficos convencionales para
expresar sus ideas o pensamientos.
• Gestual: en este caso, los individuos se valen una serie de movimientos de
distintas partes del cuerpo, para expresar sus ideas. Es también llamada Mímica.
Estos movimientos pueden ser Convencionales (son comprendidos por todos,
como por ejemplo: levantar el dedo pulgar en manifestación de aprobación), o
Arbitrarios (sólo es comprendido por algunas personas, como por ejemplo: las
“señas” del truco).
• Oral: aquí, los seres humanos se valen de una serie de sonidos articulados que
llamamos Palabra. La Palabra es una “función coordinada por la Corteza Cerebral
y el Bulbo Raquídeo, donde se determinan una serie de movimientos para la
emisión de las vocales y consonantes que constituyen las sílabas, y estas
conforman las Palabras”. Además de estos elementos del SNC, debemos
mencionar a las estructuras que conforman el Aparato Fonador (que es una
adaptación del Sistema Respiratorio). Estas estructuras son: boca, lengua,
faringe, laringe, cuerdas vocales, glotis, epiglotis, traquea, bronquios y
pulmones, a los que se agregan unas cámaras aéreas localizadas en el Hueso
Frontal, Hueso Malar (pómulos) denominadas todas, en conjunto, Senos
Paranasales, los que ofician de “caja de resonancia”.
2. Periférico: constituido por estructuras que parten del SNC y se dirigen al Aparato
Fonador. Así tenemos:
• Nervios Periféricos: originados en los Núcleos Bulbares y se dirigen al Aparato
Fonador.
• Aparato Fonador (propiamente dicho).
Etapas del Lenguaje: Según la Teoría de la Comunicación, la relación comunicacional
se establece entre un EMISOR (quien habla, escribe o gesticula), y un RECEPTOR (quien
escucha o lee).
Podemos aplicar los Mecanismos antes descriptos a esta Teoría, y veremos que pueden
ensamblarse sin ningún tipo de dificultades.
Así, veremos que tanto el Emisor como el Receptor, atraviesan distintas ETAPAS, las
cuales son en realidad funciones cerebrales.
Entonces, el EMISOR, para poder expresar sus pensamientos, pasa por las siguientes
etapas:
1. INTELECTUAL: donde el emisor elabora aquello que quiere expresar. Sabemos que la
Elaboración del Pensamiento es una función del Área de Asociación Prefrontal.
2. MNÉSICA: donde el emisor, por un mecanismo a nivel inconsciente, debe recordar y
seleccionar los músculos que habrán de ejecutar el movimiento de hablar, escribir o
gesticular, como así también debe recordar las palabras adecuadas para expresar el
Pensamiento. Esta es una función de las Áreas Premotoras, y de la Corteza Cerebral en
general.
3. MOTORA: donde el emisor articula las palabras seleccionadas para expresar su
Pensamiento, y esta es la función del Área de Broca, que a través de las Vías Motoras o
Piramidales, envía las ordenes a los Núcleos Bulbares. Luego desde aquí, los Nervios
que se originan en estos núcleos, llevan la información hasta el Aparato Fonador.
Por su parte, el RECEPTOR, también pasa por tres etapas para captar y comprender lo
emitido:
1. SENSORIAL: es la etapa de captación del estímulo auditivo o visual (para el que
escucha o lee). Esta función depende de la integridad de los Nervios y Vías Sensitivas,
que llevan esta información hasta las Areas Sensitivas Primarias (captación) y
Secundarias (reconocimiento).
2. MNÉSICA: donde el estímulo es comparado con otros de similares características,
para lo cual se debe echar mano a los recuerdos previos, a los efectos de depurar aún
más la información. Esta función está a cargo del Área Parieto-Témporo-Occipital.
3. INTELECTUAL: donde se lleva a cabo la Comprensión del contenido del mensaje y se
procede a su Simbolización. Esta función corresponde al Área de Wernicke.
Imaginemos entonces qué ocurre cuando se establece una comunicación entre dos
sujetos, donde uno efectúa una pregunta (EMISOR), y el otro debe responder
(RECEPTOR).
Desde la emisión de la pregunta (estímulo), hasta lograr la respuesta, la información
sigue una ruta que recorre las Áreas Funcionales antes mencionadas.
Cabe aclarar que pueden darse distintas variantes de este “viaje” de la información, ya
que debemos considerar las formas de comunicación de los mudos, los sordos y
también cuando emitimos un Pensamiento sin haber sido requerido por un estímulo
externo.
EMISOR
ESTIMULO
RECEPTOR
AREA DE WERNICKE
AREA PREFRONTAL SISTEMA LIMBICO
AREAS MOTORAS
AREA DE BROCA
ARTICULACIÓN DE LA PALABRA