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REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

UNIVERSIDAD DE LAS CIENCIAS DE LA SALUD

“HUGO RAFAEL CHAVEZ FRIAS”

PROGRAMA DE FORMACIÓN DEL MÉDICO INTEGRAL COMUNITARIO

3ER AÑO – CLINICA II

“TALLER”

TUMOR
CEREBRAL
BACHILLER: DOCENTE:
DEYSIS ARGELIS MEJIA DRA. NILDA MILADO
C.I.: V- 26.408.969

San Fernando, Abril 2020

Un tumor cerebral es una masa o un crecimiento de células anormales en el


cerebro.
Existen muchos tipos diferentes de tumores cerebrales. Algunos tumores
cerebrales son no cancerosos (benignos) y otros, cancerosos (malignos). Los
tumores cerebrales puede comenzar a aparecer en el cerebro (tumores
cerebrales primarios), o el cáncer puede comenzar en otras partes del cuerpo y
diseminarse al cerebro (tumores cerebrales secundarios o metastásicos).

La rapidez con la que crece un tumor cerebral varía mucho. Tanto el índice de
crecimiento como la ubicación del tumor cerebral determinan cómo afectará la
función del sistema nervioso.

Las opciones de tratamiento de tumores cerebrales dependen del tipo de tumor


cerebral que tengas, así como del tamaño y de la ubicación.

Síntomas

Los signos y síntomas de un tumor cerebral varían en gran medida y dependen


del tamaño, la ubicación y la tasa de crecimiento del tumor cerebral.

Entre los signos y síntomas generales que provocan los tumores cerebrales se
encuentran los siguientes:

 Nueva aparición o cambio en el patrón de dolores de cabeza

 Dolores de cabeza que gradualmente se vuelven más frecuentes y más


intensos

 Náuseas o vómitos inexplicables

 Problemas de la visión, como visión borrosa, visión doble o pérdida de la


visión periférica

 Pérdida gradual de la sensibilidad o del movimiento en un brazo o pierna

 Problemas de equilibrio

 Dificultades del habla

 Confusión en asuntos diarios

 Cambios en la personalidad o el comportamiento

 Convulsiones, especialmente en personas sin historia clínica de


convulsiones
 Problemas auditivos

Causas

Los tumores cerebrales primarios se originan en el cerebro mismo o en tejidos


cercanos, como las membranas que recubren el cerebro (meninges), los
nervios craneales, la hipófisis o la glándula pineal.

Los tumores cerebrales primarios comienzan cuando las células normales


presentan errores (mutaciones) en su ADN. Estas mutaciones permiten que las
células crezcan y se dividan a una mayor velocidad, y continúen viviendo
cuando las células sanas morirían. El resultado es una masa de células
anormales, que forman un tumor.

En los adultos, los tumores cerebrales primarios son mucho menos frecuentes
que los tumores cerebrales secundarios, en los que el cáncer comienza en otro
lado y se disemina al cerebro.

Existen muchos tipos diferentes de tumores cerebrales primarios. Cada uno


recibe su nombre según el tipo de células afectadas. Por ejemplo:

 Gliomas. Estos tumores comienzan en el cerebro o la médula espinal, y


comprenden astrocitomas, ependimomas, glioblastomas, oligoastrocitomas y
oligodendrogliomas.

 Meningiomas. Un meningioma es un tumor que surge de las membranas que


rodean el cerebro y la médula espinal (meninges). La mayoría de los
meningiomas no son cancerosos.

 Neurinomas del acústico (schwannomas). Estos son tumores benignos que


se manifiestan en los nervios que controlan el equilibrio y la audición desde el
oído interno hasta el cerebro.

 Adenomas hipofisarios. Estos son, principalmente, tumores benignos que se


manifiestan en la hipófisis, en la base del cerebro. Estos tumores pueden afectar
las hormonas hipofisarias y tener efectos en todo el cuerpo.

 Meduloblastomas. Estos son los tumores cerebrales cancerosos más


frecuentes en niños. Un meduloblastoma comienza en la parte inferior trasera del
cerebro y tiende a diseminarse a través del líquido cefalorraquídeo. Estos
tumores son menos frecuentes en adultos, pero igual se forman.

 Tumores de células germinativas. Los tumores de células germinativas


pueden desarrollarse durante la infancia, cuando se forman los testículos y los
ovarios. Sin embargo, algunas veces los tumores de células germinativas afectan
a otras partes del cuerpo, como el cerebro.

 Craneofaringiomas. Estos tumores no cancerosos poco frecuentes comienzan


cerca de la hipófisis del cerebro, la cual secreta hormonas que controlan muchas
funciones corporales. A medida que el craneofaringioma crece lentamente,
puede afectar a la hipófisis y a otras estructuras cercanas al cerebro.

FISIOPATOLOGÍA
El cerebro es un órgano débil que está protegido por una estructura
rígida e inextensible, que es el cráneo. Cualquier proceso expansivo
(tumor, hematoma, quiste,…) que se encuentre dentro del cráneo va a
comprimir, por tanto, al cerebro provocando una lesión focal (zona donde
se encuentra) y una lesión global cerebral por aumento de la presión
dentro del cráneo (hipertensión intracraneal). Remitimos al lector a la
lección sobre agresión al cerebro, en que se explican los conceptos de
edema cerebral e hipertensión intracraneal.
Los tumores cerebrales tienen varias formas de crecimiento o capacidad
de aumentar su tamaño. La primera de ellas es por la propia división
celular, que a su vez puede ser de dos formas:

A) Infiltrante.- La células tumorales crecen introduciéndose entre el


tejido o parénquima cerebral y lo invaden. Suele ser la forma más
frecuente de crecer de los tumores malignos.

B) Expansivo.- En este caso el tumor está muy bien delimitado y en su


crecimiento apartaría y respetaría la estructura tisular cerebral, aunque la
comprima. Suele ser la forma más frecuente de crecer de los
tumores benignos.

Hay que tener en consideración además que el crecimiento de la masa


tumoral se pueda hacer también no sólo por la división de las células,
sino por otros mecanismos. Entre éstos destacan: 1) La generación de
contenido líquido en su interior, que es segregado por las células
tumorales; es el caso de los tumores quísticos. Por lo general suelen
ser tumores benignos, pero esta secreción hace que aumenten su
tamaño rápidamente y pueden dar la impresión de tener un
comportamiento más maligno o agresivo. 2) Otra posibilidad de aumentar
el tamaño, aunque muy rara, es que en el seno del tumor se produzca
unahemorragia, por lo que el cuadro clínico va a ser abrupto, similar a
un accidente vascular cerebral hemorrágico.

Otro concepto importante, en parte relacionado con lo anterior, es


la clasificación general existente de los tumores, según estén dentro del
propio parénquima cerebral o se generen fuera de él, denominándose
respectivamente intraparenquimatosos oextraparenquimatosos.
CLÍNICA
Los síntomas generales, comunes a todos los tumores, son dolor de
cabeza y vómitos. Se debe al aumento de la presión intracraneal
(hipertensión intracraneal). Además, el médico puede explorar el fondo
de ojo (retina) y encontrar lo que se denomina “edema de papila”, que
indica que el cerebro está sometido a una mayor presión de la normal. Si
el cuadro progresa, se pueden producir parálisis de nervios craneales
(principalmente oculares), hemiparesias o hemiplejias, disminución del
nivel de conciencia y llegar a parada respiratoria o cardiaca, todo ello
debido a lesión progresiva del tronco cerebral.
Los síntomas focales van a ser de dos tipos: A) Por irritación de las
neuronas próximas al tumor que está creciendo, provocandocrisis
epilépticas. B) Por déficit de función neuronal, dependiendo de la
región donde se localice el tumor: pérdida de fuerza o de sensibilidad en
una o varias extremidades, déficit de visión, alteraciones del lenguaje,
afectación de la memoria, afectación de funciones superiores,
inestabilidad en la marcha…
A estas posibilidades hay que añadir la circunstancia particular de que el
tumor se localice en el sistema ventricular o en la zona infratentorial
(parte inferior del cráneo). En estos casos se puede producir además una
obstrucción en la circulación normal del líquido que baña al cerebro
(líquido cefalorraquídeo [LCR]) y provocar una hidrocefalia obstructiva,
que acelera la clínica de hipertensión intracraneal.

Para poder diagnosticar y evaluar un tumor cerebral, es posible que el médico ordene una
de las siguientes pruebas de imagen:

 RMN de la cabeza: las imágenes por resonancia magnética (MRN) utilizan un


potente campo magnético, pulsos de radiofrecuencia y una computadora para
producir imágenes detalladas de los órganos, los tejidos blandos, los huesos y casi
todas las otras estructuras internas del cuerpo. La RMN proporciona imágenes
detalladas que pueden detectar anomalías en el cerebro tales como tumores e
infección. La RMN es altamente sensible para detectar tumores y para evaluar la
zonas aledañas y definir la extensión. Consulte la página de Seguridad de la
RM para obtener más información.
 RMN de la columna vertebral: al igual que la RMN de la cabeza, la RMN de la
columna vertebral utiliza un potente campo magnético, pulsos de radiofrecuencia y
una computadora para mostrar la anatomía de las vértebras que forman la
columna vertebral, como así también de los discos, la médula espinal y los
espacios entre las vértebras a través de los cuales pasan los nervios. Se puede
utilizar para detectar los tumores que se originan en, o que se han diseminado
hacia la columna vertebral y/o la médula espinal o el líquido que la rodea (líquido
cefalorraquídeo).
 RMNf cerebral: la resonancia magnética nuclear funcional (fMRI, por sus siglas en
inglés) utiliza imágenes de RMN para medir los pequeños cambios metabólicos
que tienen lugar en una parte activa del cerebro. En el caso del diagnóstico de
tumor cerebral, este examen se realiza para evaluar áreas en el cerebro
relacionadas con el lenguaje y el movimiento muscular. También se utiliza para
controlar el crecimiento y función de los tumores y evaluar los posibles riesgos de
la cirugía u otros tratamientos invasivos. Este examen complementa los detalles
estructurales de la RMN con información acerca de cuán bien están funcionando
las células del cerebro.
 TC de la cabeza: la exploración por tomografía computarizada (TC) combina un
equipo especial de rayos X con computadoras sofisticadas para producir múltiples
imágenes transversales o fotografías del interior del cuerpo. Puede detectar
tumores cerebrales, como así también ayudar a planificar la radioterapia, cuando
este es el tratamiento indicado. La TC también puede mostrar sangrado o
inflamación en el cerebro. Consulte la página de seguridad para obtener más
información acerca de la TC.
 PET y PET/TC de la cabeza: una tomografía por emisión de positrones (PET) es
un examen de diagnóstico que utiliza una pequeña cantidad de material radiactivo
(llamada radiosonda) para diagnosticar y determinar la gravedad de una variedad
de enfermedades. Un examen conjunto PET/TC combina imágenes de PET y TC
para proporcionar detalles sobre la anatomía (usando la TC) y la función (usando
la PET) del cerebro. Esta prueba puede medir la forma en que un tumor cerebral
utiliza la glucosa. También se están explorando otras sondas marcadas con
radioactividad para tomar imágenes de regiones con niveles bajos de oxígeno
dentro del tumor.
 Angiografía cerebral: este examen mínimamente invasivo utiliza rayos X y un
medio de contraste que contiene yodo para producir imágenes de los vasos
sanguíneos en el cerebro. Puede proporcionar información adicional sobre
anomalías que se observan en una RMN o TC de la cabeza, tales como el
suministro de sangre a un tumor y la forma en que el tumor está distorsionando los
vasos normales. La angiografía cerebral puede resultar ser una guia valiosa para
los cirujanos y reducir el riesgo de la cirugía. Requiere del uso de un catéter y
presenta ciertos riesgos.
 Mielografía: este examen utiliza una forma de rayos X en tiempo real
llamada fluoroscopia para introducir una aguja espinal adentro del conducto
raquídeo e inyectar material de contraste en el espacio que rodea a la médula
espinal y a las raíces nerviosas (el espacio subaracnoideo), que contienen el
líquido cefalorraquídeo. Se puede utilizar para evaluar los tumores de la columna
vertebral, meninges, raíces de los nervios, o la médula espinal, cuando no se
pueden tomar imágenes por RMN, o en combinación con una RMN.
 Biopsia: una biopsia es la extracción de tejido para examinar en el mismo la
presencia de una enfermedad. Generalmente se extrae el tejido mediante la
colocación de una aguja a través de la piel (vía percutánea) hasta la zona de la
anomalía. Las biopsias puede hacerse en forma segura con guía por imágenes
(tales como el ultrasonido, los rayos X, la TC, o la RMN) para determinar
exactamente adónde colocar la aguja y realizar la biopsia.
 Punción lumbar: también conocida como punción espinal, es una prueba de
diagnóstico guiada por imágenes, mínimamente invasiva, que consiste en la
extracción de una pequeña cantidad de líquido cefalorraquídeo (el líquido que
rodea al cerebro y a la médula espinal) o una inyección de medicamentos u otra
substancia en la región lumbar (o inferior) de la columna vertebral.
 Se pueden realizar otros exámenes por imágenes si su médico sospecha que el
tumor cerebral ha formado metástasis (se ha diseminado) en otras partes del
cuerpo. Se puede hacer una TC del tórax y abdomen para buscar el origen del
tumor cuando se sospecha que una masa cerebral podría ser metastásica (en
lugar de ser un tumor primario). Los sitios más comunes son el pulmón y el riñón.
Otros exámenes sin imágenes incluyen:

 Examen neurológico: un médico puede realizar este examen para verificar su


equilibrio, reflejos, coordinación y otros sentidos, tales como la visión y la audición.

Las opciones de tratamiento incluyen:

 cirugía: también llamada resección quirúrgica, la cirugía está indicada


generalmente para el tratamiento de tumores primarios del cerebro. Un cirujano
extirpa todo el tumor, o parte del tumor, sin causar daños graves en los tejidos
circundantes. La cirugía también se puede utilizar para reducir la presión dentro del
cráneo (llamada presión intracraneal) y para aliviar los síntomas
(llamado tratamiento paliativo) en los casos en que no se puede extirpar el tumor.
 Radioterapia: la radioterapia convencional utiliza haces de rayos X, rayos gamma o
protones dirigidos al tumor para matar las células cancerosas y encoger los
tumores cerebrales. La terapia puede ser administrada en uno o más tratamientos
durante un período de varias semanas. La radioterapia moderna se realiza
generalmente con la ayuda de la guía por imágenes e incluye la terapia arco,
la radioterapia de intensidad modulada (IMRT), la radiocirugía estereotáctica y
la braquiterapia.
 Quimioterapia: se puede recomendar la quimioterapia, o medicamentos
anticancerosos. La quimioterapia, junto con la radiación (terapia concurrente), se
ha convertido en el tratamiento estándar para los tumores cerebrales malignos
primarios. El uso de estas drogas para frenar o matar las células que se dividen
rápidamente puede llevarse a cabo antes, durante o después de la cirugía y/o
radioterapia, para ayudar a destruir las células tumorales, y evitar que regresen. La
quimioterapia puede administrarse en forma oral o mediante inyección, y
generalmente se administra en combinación con la radioterapia. También se
pueden prescribir medicamentos llamados radiosensibilizadores, ya que se cree
que hacen la radioterapia más efectiva.
 Terapia biológica dirigida: conocida también como bioterapia o inmunoterapia, la
terapia biológica dirigida es un tratamiento que utiliza el sistema inmunitario del
cuerpo para combatir el cáncer. Este tipo de terapia depende de la identificación de
marcadores en la superficie de las células tumorales.
 Una combinación de las opciones de tratamiento puede incluir cualquiera de las
opciones anteriores.

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