1032 Esta enseñanza se apoya también en la práctica de
Mandadles a celebrar
la oración por los difuntos, de la que ya habla la
Escritura: "Por eso mandó [Judas Macabeo] hacer este
sacrificio expiatorio en favor de los muertos, para que
quedaran liberados del pecado" (2 M 12, 46). Desde los
primeros tiempos, la Iglesia ha honrado la memoria de
los difuntos y ha ofrecido sufragios en su favor, en
particular el sacrificio eucarístico (Cf. DS 856), para que,
una vez purificados, puedan llegar a la visión beatífica de
Dios. La Iglesia también recomienda las limosnas, las
indulgencias y las obras de penitencia en favor de los
difuntos.
1471 «La indulgencia es la remisión ante Dios de la pena
temporal por los pecados ya perdonados, en cuanto a la
culpa, que un fiel dispuesto y cumpliendo determinadas
condiciones, consigue por mediación de la Iglesia, la cual,
como administradora de la redención, distribuye y aplica
con autoridad, el tesoro de las satisfacciones de Cristo y
de los santos».
«La indulgencia es parcial o plenaria, según libere de la
pena temporal debida por los pecados en parte o
totalmente».
«Todo fiel puede lucrar para sí mismo o aplicar por los
difuntos, a manera de sufragio, las indulgencias tanto
parciales como plenarias»
Para ganar una indulgencia es necesario estar en gracia
y tener intención de ganarla. Además: Confesión
Sacramental, Comunión Eucarística, rezar por las
intenciones del Papa: Padrenuestro, Avemaría y Gloria.
En el mes de noviembre, que se celebra la festividad de
los fieles difuntos, se puede lograr indulgencia plenaria:
Visitando el cementerio del 1 al 8 de noviembre.
Oyendo misa en la iglesia el día de la conmemoración de
los fieles difuntos. (día 2)
REVELACIONES PRIVADAS
(Permitida su difusión: Pablo VI en A.A.S., 58-1186)
“Agustín del Divino Corazón” - año 2010
Santa María habla sobre el Purgatorio
Las benditas almas del Purgatorio se encuentran
abandonadas por la mayoría de las creaturas en la tierra.
Ellas no pueden hacer absolutamente nada por su
bienestar, sólo rogar por la Iglesia. El recuerdo del
encuentro con Dios en su juicio particular, las lleva a
ansiar el Cielo para unirse eternamente a la Iglesia
Triunfante.
Las almas en el Purgatorio tienen que padecer mucho
por su tibieza espiritual, por la falta de compromiso que
tuvieron para promover la gloria de Dios, por su piedad
relajada, por los actos de desamor para con el prójimo.
Hijos míos: orad por aquellas almas que en la tierra eran
tenidas por santas y, aún se encuentran en el Purgatorio.
Ellas necesitan de vuestra intercesión y de vuestros
sufragios para recibir descanso en sus penas.
En el Purgatorio hay tres niveles. En el nivel más bajo
(cámara del sufrimiento), las penas son similares a las del
infierno. Allí imperan las tinieblas, y el fuego aplicado a
las almas, es en mayor o menor proporción, según la
gravedad de los pecados. En el nivel intermedio los
sufrimientos son menores, las almas experimentan
ausencia del Amor Divino causándoles angustia y deseo
por alcanzar el Amor de Dios. El tercer nivel se
encuentra muy cercano al Cielo. Allí no hay castigos,
pero las almas sufren por estar muy cercanos a Dios y no
lo han podido alcanzar en su plenitud.
Después de LA SANTA MISA, la mejor oración es EL
VÍACRUCIS: meditadlo, ofrecedlo por ellas, descansarán
de sus sufrimientos, les aliviaréis sus penas. Sed más
perseverantes en esta oración que es bálsamo de paz para
las almas que están en el Purgatorio. Las almas que
logréis liberar, os lo agradecerán, os ayudarán en
vuestras necesidades, serán vuestras intercesoras en el
Cielo. Ofreced vuestros sufrimientos, es un medio muy
eficaz para ayudar a las almas benditas.
Haced muchos sacrificios por ellas.
misas, participando del Santo Sacrificio Eucarístico.
Rezad la corona completa del SANTO ROSARIO.
Muchas almas son liberadas por medio de esta cadena de
Amor. Soy llamada: “Madre de Misericordia” por las
almas del Purgatorio, porque con frecuencia llego hacia
ellas para consolarlas, para dar alivio a sus
padecimientos. Suelo llevarme conmigo muchas almas:
en Navidad, en el día de todos los santos, el Viernes
Santo, en la fiesta de mi Asunción y Ascensión de Jesús.
Haced obras buenas en la tierra porque una vez hayáis
salido de ella, estaréis imposibilitados para actuar en
beneficio vuestro.
Las penas de las almas del purgatorio sólo son mitigadas
por Dios. Los sacrificios que hagáis por las almas del
Purgatorio, hacedlo a ocultas; que sólo lo conozca Dios,
tiene mayor mérito. Las obras buenas no se cuentan, se
guardan en la profundidad del corazón. Las obras buenas
se hacen sólo para la gloria y honra del Señor. Las obras
buenas deben pasar desapercibidas ante los ojos de los
hombres. Todo lo que hagáis en vida por las almas del
Purgatorio, os será recompensado en la vida eterna.
El sufrimiento en el Purgatorio sirve para purificar a las
almas del pecado, que requieren ser refinadas en el fuego
como oro y plata, que deben estar radiantes, diáfanas y
cristalinas para entrar en el Reino de los Cielos.
Id al Sagrario: Jesús os espera con sus brazos abiertos.
Jesús os espera para que le améis y le adoréis con ímpetu.
Allí reside el Rey del más alto linaje, el Justo Juez que
recibirá las oraciones y sufragios por las benditas almas
del purgatorio.
Medjugorje, mensaje de la Virgen
noviembre 1986
Queridos hijos, deseo invitarlos a orar diariamente por
las almas del Purgatorio. Al hacer esto ustedes obtienen
nuevos intercesores que los ayudarán a darse cuenta de
que las cosas de la tierra no son importantes, que
solamente el Cielo es a lo que deben aspirar.
 Estados Unidos, mensaje de Santa Gertrudis
agosto de 2014
Rezad diariamente por las almas del purgatorio. Hay
millones recluidas ahí que nunca creyeron en el
Purgatorio, más ahora sufren enormemente. En el
mundo de los protestantes y también en otras religiones,
si una persona llevó una vida relativamente buena, se
cree que al morir se fue al Cielo. Con mucha frecuencia,
ese no es el caso.
Año 1879 Sor María de la Cruz
Le habla un alma del purgatorio (una religiosa):
¡Ah si superas lo que sufro!. ¡Ay, reza por mí.! ¡Porque
sufro extremadamente por todo!, ¡oh Dios mío!... ¡Qué
misericordioso eres!. ¡Ay de mí!. !No te figuras que cosa
es el Purgatorio!.
¡Cuánta felicidad hay en el Cielo.! ¡Hay una distancia tan
grande entre el Cielo y el Purgatorio!. A veces tenemos
como un eco del gozo que gustan los Bienaventurados en
el Paraíso.
En el mundo nadie piensa en el Purgatorio. También en
las comunidades religiosas lo olvidamos. Por esto el buen
Dios quiere que se rece de modo especial por las pobres
ánimas del Purgatorio, que se inculque esta devoción a
los alumnos, a fin de que estos a su vez lo comuniquen al
mundo.
ORACIONES A FAVOR DE
LAS ALMAS DEL PURGATORIO
Con Licencia Eclesiástica
Jesucristo dijo a Sor María Marta Chambón :
“Cada vez que miréis al Divino Crucificado con corazón
puro, obtendréis la libertad de cinco almas del
Purgatorio, una por cada llaga.”
Al conocer de un fallecimiento
Acto de Contrición - 3 Ave Marías
Los 100 Réquiem :
Concédeles Señor, el descanso eterno, y brille para ellas
la luz Perpétua. (100 veces). Se puede rezar con un rosario y en las
cuentas grandes: Las almas de los fieles difuntos por la misericordia de Dios,
descansen en paz.
Los Salmos Penitenciales - Laudes de Difuntos Número 2
6, 31, 37, 50, 101, 129 142
Oración de Santa Getrudis
El salvador le aseguró que cada vez que se rezase, liberaría ALMAS del
1000 almas del purgatorio, extendiéndose esta promesa a la
conversión y salvación de las que aún peregrinan en la tierra. PURGATORIO
“Padre Eterno, os ofrezco la Preciosísima Sangre de
vuestro Divino Hijo, junto con las Misas que se digan
hoy en todo el mundo: por todas las almas del
purgatorio, por los pecadores de todas partes, por los
pecadores de la Iglesia Universal, por los pecadores de
mi casa y de mi familia. Amén”
Oración que libera a 15 almas del Purgatorio
(cada vez que se rece)
El Papa Inocencio VI concedió la liberación de 15 almas del
purgatorio. Aprobada por los Papas Clemente III y Benedicto
XIV con indulgencia plenaria. El Papa IX confirmó todas esas
disposiciones y añadió 100 días de indulgencia.
Acompañando a la Santísima Virgen María cuando
recibió a Jesús descendido de la Cruz:
“¡Oh Fuente Inagotable de Verdad, cómo estás tan
agotada!
¡Oh Sabio Doctor de los hombres, cómo te has vuelto
mudo!
¡Oh Esplendor de la Luz Eterna, cómo estás tan apagada!
¡Oh Amor verdadero, cómo tu hermosa figura se ha
deformado!
¡Oh Altísima Divinidad, cómo me haces ver a mí en una
tan grande pobreza!
Catecismo de la Iglesia Católica
¡Oh Amor de mi corazón, cuán grande es tu bondad!
1030 Los que mueren en la gracia y en la amistad de
¡Oh Delicia de mi corazón, cuán excesivos y múltiples
Dios, pero imperfectamente purificados, aunque están
han sido tus dolores!
seguros de su eterna salvación, sufren después de su
Señor mío Jesucristo, que tenéis en común con el Padre y
muerte una purificación, a fin de obtener la santidad
el Espíritu Santo una sola y misma Naturaleza, tened
necesaria para entrar en la alegría del cielo.
piedad de toda criatura y principalmente de las almas del
Purgatorio. Amén”
1031 La Iglesia llama Purgatorio a esta purificación final
Nota: De esta oración se puede hacer un rosario, rezando 7 cuentas, de los elegidos que es completamente distinta del castigo
y en cada cuenta una de las jaculatorias anteriores. Cada vez que se de los condenados. La Iglesia ha formulado la doctrina
recen las 7 jaculatorias, se puede contemplar una pena de la Virgen: de la fe relativa al Purgatorio sobre todo en los Concilios
sus suspiros, sus lágrimas, los besos y abrazos a Cristo, la de Florencia (Cf. DS 1304) y de Trento (Cf. DS 1820:
contemplación de sus llagas, la entrega del cuerpo para la sepultura.
1580).
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