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Vivienda embrujada aterroriza a vecinos

Sensor electromagnético detectó actividad paranormal


Este misterioso fenómeno desplaza al de la “Casa Matusita”
Fuertes gritos, objetos que se
mueven, cuchillos lanzados contra
ellos y focos que explosionan,
parecen testimonios de una
película, pero esto es lo que
ocurre en la vivienda, dice la
familia Barrenechea Ortiz y sus
vecinos.
Una cruz en la puerta formada
extrañamente por la luz que emite
un foco desde dentro de la casa,
da la bienvenida a lo que podría
ser la vivienda más terrorífica de
Lima, después de la conocida “casa
Matusita”, ubicada en el interior
de una quinta en la cuadra 4 del
jirón Libertad, distrito del Rímac.
Pero eso no es todo, los videntes
indican que allí están penando 3
almas.
Sus habitantes: Una pareja de
esposos y dos hijos en la noche del sábado vivieron los momentos más
horribles de sus vidas al ser aterrorizados por almas que querían hacerse
presentes, según afirmó el espiritista “Jayimi”.
“Estábamos descansando cuando la cortina empezó a quemarse de la
nada. Mientras intentábamos apagarla, se empezaron a caer las cosas”,
dijo Jorge Barrenechea Vergara (70) propietario de la vivienda hace más
de 45 años, casa que heredó de sus padres y que pasó de generación en
generación, contó.
Los más escépticos podrían dudar de lo ocurrido el último sábado dentro
de la casa embrujada, sin embargo, evidencias corroboran la realidad: las
cortinas se encuentran completamente quemadas, uno de los objetos que
cayó fue la imagen del Niño Jesús, cuya pierna quedó quebrada y la
vivienda está en completo desorden por los objetos que se mueven solos.
“Después de lo ocurrido tuvimos que dormir en la calle”, señaló Cristina
Ortiz de Barrenechea (62), quien pernoctó afuera de su vivienda con sus
dos hijos porque los espíritus no los dejaban descansar.
Al día siguiente llegó un representante de la Iglesia católica, monseñor
Oscar Aquino Pérez (75) de la parroquia San Lorenzo, quien no pudo
ingresar a la vivienda porque sentía que le caía tierra en el rostro,
señalaron los inquilinos. “Tres veces vino y no pudo hacer nada”, dijeron.
Al preguntársele al padre, la experiencia vivida, evitó declarar a los medios
de comunicación y se limitó a decir que no cree ni descarta nada.
Hasta la casa además llegó el espiritista “Jayimi”, ayer en horas de la
mañana, quien indicó que son tres fantasmas los que se apoderaron del
lugar, un adulto, una abuela y una niña. “Hay una mujer que es la abuela
del dueño de la vivienda y quiere hacerse presente”, señaló.
“El ambiente está pesado, me jala al fondo”, dijo el espiritista al
posicionarse en la sombría puerta, dispuesto a hacer contacto con los
entes.
La llamada del diablo
El dueño de la casa señaló que el último domingo fue a misa junto con su
hijo y en medio de la ceremonia sonó el celular del joven. Era una llamada
privada, lo extraño es que notaron una presencia espectral en la pantalla
del aparato telefónico que hizo que no contestaran la llamada. Al mismo
tiempo, su hija se encontraba en la vivienda y empezó a ver cómo los
objetos se movían sin motivo aparente.
“Varios aparatos eléctricos y mesas empezaron a caer sin razón, incluso
las prendas de los moradores de la casa se incendiaron sin mediar chispa o
fuego. Hasta mi refrigeradora empezó a funcionar sin estar enchufada”,
indicaron los integrantes de la familia.
Sensor registra actividad paranormal
Hasta la vivienda fantasma llegaron investigadores del Proyecto 33, un
grupo especializado en fenómenos paranormales.
Por medio de un sensor electromagnético el grupo de investigadores
confirmaron la presencia de extraños entes. Flor Meléndez, integrante de
científicos, contó que se registró, gracias a un sensor electromagnético,
actividad paranormal.
El padre de la familia manifestó que vive muchos años en esa casa y que
jamás fue tan fuerte la presencia de espíritus como se registró el último
sábado, por lo que Proyecto 33 investigará qué habría perturbado a las
almas.
Periodistas sienten presencia de
espíritus
Podría ser todo planeado, llega a
la mente de muchas personas, sin
embargo, periodistas de diferentes
medios de comunicación incluido
el nuestro, visitamos la vivienda y
comprobamos lo aterradora que
puede ser.
Un clima de frío y denso se deja notar al cruzar la puerta en cuya imagen
de luz se dibuja una cruz. Cuando todo permanece en silencio, sonidos
estruendosos empiezan a manifestarse, como si algún objeto se moviera
sin que lo hallamos notado.
Un fotógrafo recibió un golpe en la cabeza con un medicamento que de la
repisa cayó sin ser movido.
Policiales

En casa antigua las cortinas se queman solas, las almohadas vuelan y los
artefactos funcionan sin electricidad
Quinta embrujada en el Rímac

• Incluso un sacerdote fue echado de casa cuando fue a rezar


• Videntes dicen que se trata de tres almas en pena
Una nueva crónica “del más
allá” es la que se escribe en la
urbana hoja de vida de
nuestra capital. En esta
ocasión en una antigua quinta
del distrito del Rímac, que es
el centro de hechos
inexplicables donde la
familia Barrenecha – Ortiz se
ha convertido víctima de una
supuesta actividad
paranormal.
Cortinas y almohadas quemadas, televisores, mesas volteadas y un
monseñor de la Iglesia católica asustado por la tierra que extrañamente le calló
tras iniciar una oración, son actividades comunas en esa vivienda.
Un panorama cargado de una extraña vibra es la se que siente en la quinta
“Santa Rosa” ubicada en el jirón Libertad 430, que dato curioso, es la única
quinta que no tiene una imagen de un santo que proteja el bienestar de los
vecinos.
A la escena, se suman curiosos y vecinos consternados, que aseguran haber
tenido contacto con los entes que acosan a la familia, a la que describen como
una “tranquila, bien religiosa, honorable”. Ellos moran en esta vivienda hace
más de 40 años, pero sus antepasados al parecer vivieron desde tiempos
virreinales.
Cristina Ortiz de Barrenechea, de 62 años, detalló que inexplicables hechos
han llevado a su familia a pernoctar fuera de la casa. Dijo que el celular de su
hijo, Jorge Barrenechea, timbró mientras estaban en misa. La llamada era de
un número privado, pero le pidió a su hijo que no conteste.
Según la afectada por la presunta presencia espectral, a la hora de la llamada
no contestada, su hija, en casa, fue testigo de cómo empezaron a moverse las
cosas sin motivo aparente. Varios aparatos eléctricos y mesas empezaron a
caer sin razón, incluso las prendas de los moradores de la casa se incendiaron
sin mediar chispa o fuego.
El jefe de familia, George Barrenechea Vergara (70), incluso comentó que su
refrigerador, aún desenchufado, parecía funcionar.
MONSEÑOR EXPULSADO
La tensión siguió cuando el monseñor Oscar Aquino Pérez (73), párroco de la
iglesia San Lorenzo y recordado director de la agrupación “Los Toribianitos”,
se acercó hasta en tres ocasiones, pero en una de ellas, al entrar a la vivienda
fue expulsado extrañamente y hasta recibió montículos de tierra al salir de la
extraña casa.
El sacerdote en un diálogo con los periodistas no negó ni afirmó los hechos
extraños que se vivieron en la quinta.
Preocupados por sus vecinos, otros habitantes de la quinta contactaron a
investigadores de Proyecto 33, un grupo de especializado en estos fenómenos.
Flor Meléndez, miembro de esta agrupación, contó que se registró, gracias a
un sensor electromagnético, actividad paranormal; asimismo, añadió que
investigarían qué había perturbado al ente.
TRES ALMITAS
Los videntes también acudieron al lugar. Entre estos Hayimi, quien percibió
dos espíritus fuertes en la parte posterior de la casa y el de una niña en la parte
delantera.
Dijo que se trata de un hombre y una mujer adulta y una niña, al parecer una
de las almas. Según el vidente, es la abuela de George Barrenechea quien
intenta manifestarse de algún modo. Dijo que están pidiendo que recen por
ellos.
“Se necesita oficiar una misa aquí para que estén tranquilos”, precisó y añadió
que los espíritus son, efectivamente, capaces de quemar objetos y moverlos a
su antojo.

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