NUESTRO CUERPO

“Gracias a este cuerpo que somos, a este continente que nos contiene, podemos vincularnos y establecer
conexiones (…) no hay experiencia de Dios y de los otros, que no ocurra en nuestro cuerpo.” Mariola López

“no el mucho saber harta y satisface el alma, sino el sentir y gustar de las cosas internamente…” (EE2)

Ver, oir, oler, gustar, tocar… (EE 66-70)

Me quedaré en la posición en la que esté cuando encuentre lo que busco; y EN EL PUNTO en el que esté (el tema, la
pregunta, la cuestión) me reposaré sin tener prisa de pasar adelante, hasta que me satisfaga. (EE76)

También la repercusión fisiológica de las mociones como las lágrimas, la inquietud o turbación o la quietud anímica y
corporal, puede ayudar a discernir la experiencia. Luis María García Domínguez LMGD

Lo corpóreo forma parte (antes, durante y después) de lo que solemos llamar experiencia espiritual. LMGD

ENRAIZAR

CENTRAMIENTO: llegar, reducir el ritmo, conectar con la experiencia presente, detectar lo primero que necesita ser
atendido, sintonizar

PREPARAR EL ESPACIO FÍSICO

PERCIBIR EL CUERPO DEL OTRO: escuchar desde la sensación, estar presente, observar, espejar/reflejar/resonar.

SER DETECTIVE DE LA EXPERIENCIA PRESENTE: mirar la persona como un todo.-cómo nos impacta -¿distintas partes
del cuerpo nos dan un mensaje contradictorio? –qué parte de su cuerpo me llama más la atención ¿dónde hay
tensión? –palabra clave para describir la sensación que me causa mirar ese cuerpo – postura – mensaje NO verbal
que transmite. IMPORTANTE: observar sus ojos, su mirada, donde pone atención, qué transmiten. RESPIRACIÓN:
acelerada, tranquila, superior, abdominal, cuándo retiene la respiración. VOZ. SILENCIOS, qué está vivo y fresco en el
relato, invitar a hacer una pausa, tiempo PRESENTE.

“El enfoque corporal refuerza lo importante que es simplemente saber estar ahí, localizando, buscando conexiones,
permitiendo que algo se intensifique, se despliegue, o nos hable. Sin embargo, sólo desde una conciencia de que no
es necesario “empujar el río”, sino sencillamente descubrir su ritmo y acompañarlo (…).” Carlos Alemany
EL ENFOQUE CORPORAL DE GENDLIN (FOCUSING) Y LOS EE. Carlos Alemany

Construcción de significados desde el “hombre interior”, interacción entre sentir y reflectir, creación de procesos de
experiencias en las que el cuerpo como organismo total aparece como el principal protagonista.

En focusing el cuerpo aparece como la referencia constante de todo el proceso experiencial de despliegue de la
vivencia personal. El PROCESO permite hacer consciente la propia existencia, para sentirse cada quien mejor, más
vital, humanizarnos e integrarnos más.

El “acto crucial interno” se presenta e implica un proceso de atención y de despliegue de la vivencia muy específico,
que está pedagógicamente estructurado en una serie de pasos y movimientos.

-Prestar atención a lo que el cuerpo siente por dentro

-captar la diferencia entre sensación corporal, sentimientos que genera, sensación nueva.

-sensación nueva integra: sensación corporal, sentimiento y tonalidad afectiva que genera, los SIGNIFICADOS que le
doy

-permitir que esa sensación nueva interactúe con diferentes símbolos (palabras, imágenes, sonidos, olores, etc)
permitiendo el surgimiento de diferentes significados para ser contrastados con la resonancia corporal que ofrecen.

-resonar corporalmente entre la sensación-sentida (nueva) y el símbolo elegido para comprobar su posible ajuste.

-ayudar desde allí a pequeños (o grandes) cambios interiores corporales (bodily felt-shift)

- percibir el cambio especialmente, abriendo preguntas, para que se afronten posibles bloqueos o se expanda el
significado encontrado

-“terminar este rato de interacción con la propia sabiduría corporal, con actitud de recibir y aceptar lo que allí
sucedió y agradecer el proceso, además de caer en la cuenta de los posibles cambios habidos.”

REPETICIÓN: “estar en contacto con el fluir de las experiencias.” Esta EXPERIENCIA DE LA EXPERIENCIA es a la vez
corporal, afectiva y cognitiva. “Es estar en contacto con el proceso que permite enfocar determinada experiencia o
situación, sentirla y finalmente asistir a su progresivo despliegue, cuando vamos interaccionando con distintos
símbolos y vamos percibiendo corporalmente los registros de dicha interacción, notando pequeños o grandes
cambios o movimientos en el cuerpo, como consecuencia de la adecuación lograda.”
“El enfoque corporal puede utilizarse para lograr diferentes finalidades
dentro de contextos distintos. Se puede tomar como una técnica terapéutica de
enfocar problemas y tensiones, para saber estar con ellos y permitir que se
cambien. Se puede orientar -igualmente- como una pedagogía de la creación de
actitudes, que integren y expresen mejor y más profundamente la relación entre lo
mental y lo corporal. Se puede utilizar como un camino para el aumento de la
consciencia personal corporalmente sentida. O puede servimos para encontrar
una mayor creatividad y una mayor amplitud y profundidad en la propia
congruencia. O sencillamente como una manera de acceder a la vivencia
positiva de uno mismo y -a partir de ahí- conectar con el fluir de la energía
vital y liberadora. Y todas estas funciones pueden darse tanto en un contexto
de rehabilitación terapéutica como en la línea de crecimiento personal y
autorrealización.

a. «somos un cuerpo»11- Este deja de ser un accidente o deja de convertirse en mero valor instrumental para llegar
a ser un cuerpo habitado y autoposeído.

b. El cuerpo es la sede de la sabiduría corporal: nuestros cuerpos tienen una sabiduría holística, que se apoya
en un sentido más inclusivo de la totalidad. Es una sabiduría que es sensorial -como registro inmediato de la
realidad-, preverbal -previa a las representaciones mentales- y globalizante, más allá del detalle y distinto de la suma
de ellos.
c. El cuerpo es el lugar de la atención corporal: Ahí, en el cuerpo, en sus diversas sensaciones, son los registros
sensibles de la realidad. Y también -y sobre todo- ahí-en-el-centro del organismo, entre el pecho y el abdomen (plexo
solar, jara, etc.), en donde se da un registro de la globalidad de la sensación que es fuente de significados y que
conlleva una sabiduría que al focalizarse se abre, se despliega.

“No pienses con tu cerebro, sino concéntrate aquí, en tus entrañas»

d. El cuerpo como vehículo de vivir el presente: encontramos el dato del inmediato presente, de cómo aquí y
ahora nos afecta la realidad sensorial y significativamente hablando. Pero ese presente está afectado por una
historia, tiene un recorrido, un sabor, una huella (pasado). que hace que ahora se viva de una determinada manera y
no de otra. Y por otra parte, de la vivencia de este presente sale apuntando una dirección significativa hacia
adelante (futuro). Esa sabiduría corporal nos ofrece la posibilidad de un contacto directo con ese presente, desde
los registros organísmicos del pasado, y con una orientación hacia el futuro, otorgando así a este presente
-corporalmente vivido- un sentido profundamente integrador.

EN LOS EE

si la experiencia de EE es fundamentalmente una experiencia de oración, ésta se prepara y se hace atendiendo muy
fundamentalmente al cuerpo. Y San Ignacio concede gran libertad respecto a las formas prácticas de hacerlo: de
rodillas, paseando, acostado, etc., porque sabe por sí mismo las posibilidades que encierra el cuerpo como elemento
de comunicación en el diálogo con Dios•.