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P U E S TA AL DÍA
Avances en el tratamiento de la insuficiencia cardíaca (II)
Unidad de Insuficiencia Cardíaca y Trasplante Cardíaco. Clínica Puerta de Hierro. Madrid. España.
A pesar de su elevada prevalencia y de la enorme car- Heart Failure: Etiology and Approach to Diagnosis
ga que supone sobre los sistemas de salud, la insuficien-
cia cardíaca es un síndrome clínico para el que no existe In spite of its high prevalence and the huge burden it
aún una definición satisfactoria. En la práctica, su diag- imposes on health care systems, heart failure is a clinical
nóstico requiere la presencia concomitante de síntomas y syndrome that has not yet been defined satisfactorily. In
signos típicos, junto con datos derivados de exploracio- actual practice, diagnosis requires the presence of typical
nes complementarias que muestren algún tipo de disfun- signs and symptoms along with data from complementary
ción cardíaca. En la presente revisión se repasan los tests that indicate definite cardiac dysfunction. In this arti-
conceptos actuales sobre la enfermedad, sus etapas evo- cle we review current concepts of the disease, stages of
lutivas, las causas más frecuentes y el valor de las dis- development, common underlying causes, and the value
tintas exploraciones para su diagnóstico. Entre estas of different diagnostic tests. Among these tests, measure-
últimas destaca la reciente incorporación de la determina- ment of B-type natriuretic peptide has proved useful for
ción de péptido natriurético tipo B por su utilidad en el cri- population screening and the differential diagnosis of he-
bado de poblaciones y en el diagnóstico diferencial con art failure. This indicator seems to be the ideal link betwe-
otras entidades clínicas. Su papel parece servir de cone- en the large population of patients in whom heart failure is
xión entre la gran población en la que existe sospecha suspected and the subgroup for whom cardiac ultra-
clínica de insuficiencia cardíaca y el subgrupo en el que sound, the most informative test in this disease, is wa-
se justifica la realización del ecocardiograma, la prueba rranted.
que más información aporta en esta situación.
Key words: Heart failure. Etiology. Diagnosis.
Palabras clave: Insuficiencia cardíaca. Etiología.
Diagnóstico. Full English text available at: www.revespcardiol.org
TABLA 3. Esquema que resume los principales factores etiológicos en la insuficiencia cardíaca, con los
ejemplos más comunes en clínica
Causas Ejemplos
Causas predisponentes
Etiológicas Cardiopatía isquémica, cardiopatías congénitas
Probablemente etiológicas HTA, diabetes, historia de fiebre reumática
No etiológicas Edad, sexo masculino, obesidad, tabaquismo
Causas determinantes
Miocardiopatías Primarias Miocardiopatía dilatada, hipertrófica, restrictiva
Secundarias Miocardiopatía isquémica, infecciosa, tóxica, metabólica
Sobrecarga ventricular De presión HTA, estenosis aórtica/pulmonar, hipertensión pulmonar
De volumen Insuficiencias valvulares, cortocircuitos
Llenado ventricular alterado Hipertrofia ventricular, estenosis mitral/tricúspide, tumores, taponamiento, pericarditis
constrictiva
Arritmias Bradicardia, taquicardia, taquimiocardiopatía
Causas precipitantes
Cardíacas Arritmias, isquemia miocárdica, fármacos inotrópicos negativos: antagonistas del calcio,
bloqueadores beta, antiarrítmicos, otros
Extracardíacas Infecciones, incumplimiento del tratamiento, embolia pulmonar, anemia, fármacos (AINE),
cirugía, esfuerzo, tóxicos
HTA: hipertensión arterial; AINE: antiinflamatorios no esteroideos.
general por un progresivo remodelado ventricular iz- De forma práctica, siguiendo el esquema de los
quierdo, que nunca han tenido datos clínicos de IC. principales libros de texto13,14, hablaremos de 3 tipos
El estadio C refleja la presencia de cardiopatía es- de causas de IC: predisponentes, determinantes y pre-
tructural junto con datos presentes o pasados de IC, y cipitantes. En la tabla 3 se resumen de forma esquemá-
el estadio D designa a los pacientes con formas seve- tica las causas principales.
ras de IC resistentes al tratamiento habitual, que re- Las causas predisponentes, también llamadas facto-
quieren medidas como infusiones continuas de ino- res de riesgo, son marcadores que se asocian con una
trópicos, dispositivos de asistencia ventricular, mayor probabilidad de aparición de IC y pueden iden-
trasplante cardíaco, etc. A diferencia de la clasifica- tificarse en la población sin cardiopatía o sin síntomas
ción de la NYHA, ésta sí refleja la progresión espera- de IC. A su vez, se dividen en etiológicas, probable-
ble de los pacientes en el curso de su enfermedad y mente etiológicas y no etiológicas.
es útil para realizar una aproximación terapéutica es- Las causas predisponentes etiológicas son las altera-
pecífica en cada fase, dirigida a enlentecer o detener el ciones estructurales, congénitas o adquiridas en las
avance de la IC. No obstante, el objetivo de este nuevo que existe una afección de los vasos periféricos, la cir-
sistema de estratificación no es remplazar, sino com- culación coronaria, el pericardio, el miocardio, el en-
plementar la información aportada por la clasificación docardio o las válvulas cardíacas, que produce una al-
NYHA, lo que aconseja utilizar ambos métodos en la teración de la fisiología normal del corazón. La
evaluación de cada paciente con sospecha de IC. principal es la cardiopatía isquémica, responsable de
más del 50% de los casos de IC en Estados Unidos15,
sobre todo en varones. Dentro de la cardiopatía isqué-
Etiología de la insuficiencia cardíaca
mica, el antecedente de infarto de miocardio es el prin-
Las enfermedades que pueden conducir a una situa- cipal factor aislado, con un riesgo de IC 10 veces su-
ción de IC son muy variadas y su reconocimiento tiene perior al de la población normal durante el primer año
gran trascendencia, pues puede modificar el enfoque tras el infarto y hasta 20 veces superior en los siguien-
diagnóstico, terapéutico y preventivo, así como condi- tes. La miocardiopatía dilatada y las cardiopatías con-
cionar el pronóstico12. Por ello, no es aceptable confor- génitas son otras etiologías predisponentes de IC me-
marse con un diagnóstico inespecífico de «insuficien- nos prevalentes en la población.
cia cardíaca» en los informes de estos pacientes, sino Las causas predisponentes probablemente etiológi-
que deben figurar tanto el tipo de cardiopatía estructu- cas se asocian con una mayor incidencia de IC, sin que
ral como los factores de riesgo que la han propiciado exista una relación causal demostrada, aunque es pro-
y, en su caso, los factores desencadenantes de la des- bable que influyan de forma «indirecta» en el deterio-
compensación aguda. ro progresivo de la función ventricular. La principal es
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la hipertensión arterial (HTA), especialmente preva- realiza una biopsia endomiocárdica, el miocardio es
lente en mujeres y en individuos de raza negra con IC. normal o presenta alteraciones inespecíficas. Como su
Según el estudio Framingham, el riesgo de IC se du- nombre indica, los mecanismos patógenos subyacentes
plica en la población que presenta HTA ligera y se se desconocen; sin embargo, cuando se investiga la
cuadruplica cuando los valores de presión arterial su- etiología con técnicas especializadas se demuestra la
peran los 160/95 mmHg. La elevación de la presión existencia de factores familiares y genéticos hasta en
arterial sistólica supone un aumento del riesgo de de- un 20% de los casos, y en otros se observan anteceden-
sarrollo de IC 2 veces superior al de la elevación de la tes de miocarditis viral o procesos autoinmunitarios.
presión arterial diastólica. La hipertrofia ventricular La miocardiopatía hipertrófica es una enfermedad
izquierda, causada principalmente por la HTA, es a su con un origen genético evidente en muchos casos
vez un factor de riesgo para el desarrollo de IC (impli- (existen mutaciones de los genes que codifican las pro-
ca un riesgo relativo 17 veces mayor que en la pobla- teínas del sarcómero), en los que se caracteriza por la
ción normal)16-18. También son causas predisponentes, hipertrofia del VI sin causa aparente. En la mitad de los
probablemente etiológicas, la diabetes mellitus y la casos se hereda con carácter autosómico dominante y
historia de fiebre reumática. La diabetes es un factor es la causa más frecuente de muerte súbita en adultos
de riesgo para la aparición de cardiopatía isquémica y jóvenes, sobre todo deportistas. La miocardiopatía res-
muchas veces coexiste con HTA o dislipemia, a su vez trictiva se caracteriza por una alteración de la distensi-
factores de riesgo coronario. El riesgo de IC en muje- bilidad cardíaca, con un rápido llenado diastólico pre-
res diabéticas es 5 veces superior al de las no diabéti- coz. Es la menos frecuente de los 3 tipos de
cas, y supera al de los varones diabéticos. miocardiopatía y conlleva habitualmente un mal pro-
En las causas predisponentes no etiológicas no exis- nóstico.
te una relación causa-efecto directa con la IC. Se han La alteración miocárdica secundaria que con más
evidenciado en análisis multivariables realizados sobre frecuencia ocasiona IC es la cardiopatía isquémica, y
amplias poblaciones y deben ser entendidas como me- lo hace mediante varios mecanismos: infarto de mio-
ros marcadores de riesgo19. Incluyen la edad avanzada, cardio, isquemia crónica, aneurisma ventricular y dis-
el sexo masculino, el sobrepeso, la cardiomegalia, la función valvular mitral. Otras menos frecuentes son
capacidad vital reducida, el consumo de tabaco, la pro- las miocardiopatías de origen infeccioso (miocarditis
teinuria y las anomalías en el electrocardiograma basal viral, enfermedad de Chagas, toxoplasmosis, micosis,
(como el bloqueo de rama izquierda y las alteraciones micobacteriosis, difteria, rickettsiosis), las miocardio-
de la repolarización ventricular). A partir de la cuarta patías tóxicas (por tóxicos, como el alcohol, y en me-
década de la vida, se estima que con cada década se nor frecuencia la cocaína, el plomo, el cobalto y el
duplica el riesgo de padecer IC; aproximadamente un mercurio, o por fármacos como la adriamicina, ciclo-
8% de los mayores de 85 años presentan IC20. El au- fosfamida, cloroquina, zidovudina, didanosina, etc.),
mento progresivo de peso aumenta el riesgo de desa- las miocardiopatías metabólicas (asociadas a diabetes
rrollo de IC en ambos sexos; la obesidad aumenta el mellitus, hipertiroidismo, hipotiroidismo, feocromoci-
trabajo cardíaco y favorece la aparición de HTA, dia- toma, enfermedad de Cushing, hipocalcemia, hipofos-
betes mellitus y dislipemia. El tabaquismo es un factor fatemia), las miocardiopatías de origen genético
de riesgo de primer orden para el desarrollo de cardio- (como las glucogenosis), las miocardiopatías asocia-
patía isquémica que, como hemos mencionado con an- das a enfermedades neuromusculares (como la distro-
terioridad, es la principal causa de IC. fias de Duchenne o Becker, la ataxia de Friedreich y la
Las causas determinantes de IC son las que alteran distrofia miotónica de Steinert), las miocardiopatías
los mecanismos reguladores de la función ventricular, asociadas a déficit carenciales (tiamina, selenio, carni-
las condiciones de carga hemodinámica y la frecuencia tina) y las miocardiopatías de origen inflamatorio
cardíaca. Pueden clasificarse en alteraciones miocárdi- (asociadas a enfermedades del colágeno, miocarditis
cas (primarias o secundarias), sobrecargas hemodiná- por hipersensibilidad y sarcoidosis).
micas, defectos de llenado ventricular, disinergia ven- Las causas determinantes caracterizadas por una so-
tricular y alteraciones del ritmo cardíaco. brecarga hemodinámica pueden deberse a una sobre-
Existen 3 patrones de alteración miocárdica prima- carga de la presión o del volumen. En la HTA y en la
ria que pueden causar IC: la miocardiopatía dilatada estenosis aórtica existe un aumento de poscarga que
idiopática, la miocardiopatía hipertrófica y la miocar- ocasiona una sobrecarga de presión en el VI, responsa-
diopatía restrictiva. ble finalmente de la aparición de IC. En las cavidades
La miocardiopatía dilatada idiopática es una enfer- derechas, la hipertensión arterial pulmonar y la esteno-
medad de ambos sexos, con disfunción sistólica de VI sis pulmonar producen las mismas consecuencias. Un
predominante, aunque puede presentar dilatación de caso especial de hipertensión pulmonar es el observa-
las 4 cámaras cardíacas. Tras una investigación clínica do en pacientes con enfermedad pulmonar obstructiva
apropiada (con frecuencia se llega a la coronariogra- crónica, que da lugar al denominado cor pulmonale,
fía), no se evidencia ninguna etiología conocida, y si se manifestado como IC derecha. Por lo que respecta a la
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sobrecarga de volumen, la hipervolemia, las insufi- en el reconocimiento de las formas moderadas o gra-
ciencias mitral y aórtica, la comunicación interventri- ves, en que los pacientes presentan profusión de sínto-
cular y el ducto arterioso persistente (en las cavidades mas y signos típicos en presencia de datos ecocardio-
izquierdas), así como la insuficiencia tricúspide o la gráficos de disfunción sistólica severa del VI. Sin
comunicación interauricular (en las cavidades dere- embargo, la situación es más compleja cuando se eva-
chas), pueden causar IC. lúa a pacientes con formas leves o sutiles de este sín-
Aquellas situaciones en las que existe un defecto del drome no acompañadas de disfunción contráctil del
llenado ventricular, como las alteraciones de la disten- VI, especialmente en mujeres y en pacientes de edad
sibilidad asociadas a la hipertrofia ventricular, la obs- avanzada, obesos o con comorbilidades. Así, según el
trucción del tracto de entrada ventricular, la hipovolemia, trabajo de Remes et al22, aproximadamente la mitad de
el taponamiento cardíaco, la constricción pericárdica y los diagnósticos de IC en atención primaria era erró-
las masas intracardíacas, pueden originar un cuadro de neo; por otro lado, una reciente publicación refiere que
IC. Asimismo, los aneurismas ventriculares también un 43% de los diagnósticos clínicos de IC realizados
pueden causar IC, pues parte del volumen sanguíneo en pacientes que acuden por disnea a un servicio hos-
expulsado durante la sístole se desplaza distendiéndo- pitalario de urgencias era «inseguro o dudoso»23.
los, sin que forme parte del volumen sistólico efectivo. Los primeros intentos de sistematizar el diagnóstico
Por otra parte, las alteraciones del ritmo cardíaco de la IC surgieron del estudio Framingham16 y se basa-
(taquicardias, bradicardias, situaciones con pérdida del ron en la presencia concomitante de una serie de crite-
sincronismo auricular) también pueden cursar con IC. rios (2 mayores o uno mayor y 2 menores) entre los
La taquimiocardiopatía es un tipo de miocardiopatía ofrecidos en un listado (tabla 4). Debido a las impreci-
dilatada que se desarrolla en pacientes con taquicardia siones y limitaciones prácticas de este sistema, surgie-
de larga evolución y es reversible si desaparece esta ron otros baremos, como los criterios NHANES o de
taquicardia. Boston, utilizados en trabajos epidemiológicos, pero
Las causas precipitantes de la IC13,14 son los factores su uso tampoco se generalizó en la clínica. Una exce-
que provocan la descompensación de una situación de lente aportación, plena de sencillez y sentido práctico,
estabilidad en pacientes con o sin diagnóstico previo de las directrices europeas2 son los criterios diagnósti-
de IC, pero con una cardiopatía estructural subyacente. cos que figuran en la tabla 5, basados en la presencia
Se dividen en causas cardíacas o extracardíacas. Las de una semiología sugestiva de IC junto con datos ob-
cardíacas son las arritmias, la aparición de una nue- jetivos de disfunción cardíaca, que en gran parte de los
va cardiopatía (la más frecuente, el infarto agudo de casos se obtendrán del ecocardiograma. Existe una
miocardio) y los fármacos inotrópicos negativos (anta- ambigüedad deliberada de los autores a la hora de de-
gonistas del calcio, bloqueadores beta, antiarrítmicos,
antidepresivos tricíclicos, adriamicina). Las extracar-
díacas son las infecciones (sobre todo las respirato- TABLA 4. Criterios de Framingham para el
rias), los fármacos que retienen sodio (especialmente diagnóstico de insuficiencia cardíaca6
los antiinflamatorios no esteroideos, de uso muy ex-
tendido), el abandono del tratamiento o de la dieta, la Criterios mayores
embolia pulmonar, el estrés físico o psíquico, la ane- Disnea paroxística nocturna u ortopnea
mia o la enfermedades intercurrentes, las intervencio- Ingurgitación yugular
Estertores
nes quirúrgicas y los hábitos tóxicos, como el taba-
Cardiomegalia
quismo y el alcoholismo. Edema agudo de pulmón
Según el estudio de Opasich et al21, las causas más Galope por tercer tono
frecuentes en una serie italiana de 324 descompensa- Presión venosa central > 16 mmHg
ciones de IC fueron las arritmias (24%), junto con las Tiempo de circulación > 25 s
infecciones (23%), seguidas de incumplimientos del Reflujo hepatoyugular
tratamiento (15%), isquemia miocárdica (14%) y fac- Criterios menores
tores iatrogénicos (10%). Edema maleolar
Tos nocturna
Disnea de esfuerzo
DIAGNÓSTICO DE LA INSUFICIENCIA Hepatomegalia
CARDÍACA Derrame pleural
Reducción de la capacidad vital en un tercio respecto
Diagnóstico de la insuficiencia cardíaca: la máxima
de la teoría a la práctica Taquicardia (> 120 lat/min)
Pérdida de > 4,5 kg en 5 días en respuesta al tratamiento
En contra de lo que podría pensarse en una enferme- (también puede ser criterio mayor)
dad tan frecuente, la IC es una entidad de difícil diag- Se precisan 2 criterios mayores o uno mayor y 2 menores. En los criterios
nóstico. Por supuesto, no existen grandes problemas menores deben descartarse otras posibles causas.
TABLA 5. Definición de insuficiencia cardíaca según TABLA 6. Valor diagnóstico de diversos datos
las guías clínicas de la Sociedad Europea clínicos en la insuficiencia cardíaca sistólica
de Cardiología para el diagnóstico y tratamiento
Sensibilidad Especificidad VPP VPN
de la insuficiencia cardíaca crónica2 (%) (%) (%) (%)
finir los síntomas típicos de IC y la disfunción ventri- VPN: valor predictivo negativo; VPP: valor predictivo positivo.
Tomada de Davie AP et al25.
cular izquierda, lo que permite no excluir del diagnós-
tico de IC a los individuos con hallazgos limítrofes.
gular y el ritmo de galope. La identificación de estos
Aproximación diagnóstica al paciente 2 últimos es de especial interés, porque implican un
con insuficiencia cardíaca peor pronóstico24.
Es interesante analizar en la tabla 6 la sensibilidad,
La historia clínica y la exploración física son los pi-
la especificidad y el valor predictivo de cada uno de
lares del diagnóstico de la IC. Normalmente, la confir-
los síntomas, signos y antecedentes clínicos en el diag-
mación o exclusión de éste proviene de diversas ex-
nóstico de la IC, según el excelente estudio de Davie
ploraciones complementarias, que además aportan una
et al25. En términos generales, tanto los síntomas como
valiosa información pronóstica.
los signos clásicos de IC pueden tener una alta sensibi-
La historia clínica debe recoger los factores de ries-
lidad (disnea) o especificidad (ortopnea, disnea paro-
go cardiovascular, los hábitos tóxicos y las enfermeda-
xística nocturna), pero no ambas a la vez4. Para mayor
des no cardíacas que puedan contribuir a la IC. Se
dificultad, es sabido que el grado de acuerdo interob-
debe poner especial cuidado en conocer con exactitud
servador, en cuanto a la presencia o ausencia de datos
los síntomas del paciente. La disnea de esfuerzo es el
clínicos de IC, es bajo26. Por ello, en la práctica se
más frecuente, aunque es muy inespecífico; formas
hace necesaria la información objetiva que ofrecen di-
más avanzadas, como la ortopnea y la disnea paroxís-
versas exploraciones complementarias. Entre las de
tica nocturna, ganan en especificidad, pero son mucho
obligada realización figuran:
menos prevalentes en la IC. La fatigabilidad es otro
síntoma muy común, pero es incluso más inespecífico
1. La analítica sistemática, que en el paciente con IC
que la disnea, y puede ser una manifestación de casi
debe incluir:
cualquier enfermedad. La historia de edema maleolar
es también muy frecuente, pero puede ser debida a
– Hemograma para la detección de anemia como
muchas otras razones; de hecho, es la primera causa de
factor precipitante.
falsos diagnósticos de IC en mujeres de edad avanza-
– Función renal y electrolitos séricos, que pueden
da, que más bien suelen presentar insuficiencia veno-
alterarse tanto por el tratamiento de la IC (diuréticos)
sa. En pacientes ya diagnosticados que ingresan por
como en casos severos con hipoperfusión renal, lo que
agudización es importante investigar la presencia de
es signo de mal pronóstico.
factores precipitantes como los descritos con anteriori-
– Transaminasas, bilirrubina y parámetros de coagu-
dad, sin olvidar las transgresiones dietéticas o terapéu-
lación (alterados en la isquemia o congestión hepáti-
ticas.
ca).
Los signos de la exploración física en estos pacien-
– Glucemia y colesterol para el cribado de los facto-
tes, al igual que ocurre con los síntomas, pertenecen
res de riesgo cardiovascular.
a 2 grupos: en primer lugar, están aquellos, como la
– Hormonas tiroideas, pues tanto el hipertiroidismo
taquicardia, los crepitantes pulmonares y el edema
como el hipotiroidismo pueden causar IC.
con fóvea, que son muy frecuentes en los pacientes
– Análisis elemental de orina que descarte proteinu-
con IC, pero también en otras enfermedades, por lo
ria, glucosuria o nefropatías.
que son escasamente específicos. En el otro extremo
– En situaciones especiales está justificada la deter-
figuran signos relativamente específicos pero sólo
minación de los valores plasmáticos de ciertos fárma-
presentes en las formas más graves de IC, como el
cos (como la digoxina, si existe sospecha de intoxica-
desplazamiento del latido apical, la ingurgitación yu-
ción o infradosificación) y la gasometría arterial en
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pacientes con edema agudo de pulmón. do de alta velocidad y breve duración, con un tiempo
2. El electrocardiograma (ECG) ofrece una impor- de deceleración muy corto, implica elevadas presiones
tante información diagnóstica y pronóstica. Un ECG diastólicas y un pronóstico más desfavorable30. En pre-
normal excluye virtualmente la disfunción sistólica de sencia de disfunción sistólica de VI, los pacientes con
VI, con una sensibilidad del 94% y un valor predictivo hipocontractilidad del ventrículo derecho presentan
negativo del 98%; por el contrario, un ECG patológico una peor evolución, por lo que es práctica habitual en
no es buen predictor de baja fracción de eyección, da- ellos determinar parámetros como la excursión sistóli-
dos la especificidad del 61% y el valor predictivo po- ca del plano anular tricúspide (TAPSE)31.
sitivo del 35%4,27. De esta forma, la presencia de un – Informa de otros datos con implicaciones terapéu-
ECG normal debe hacer pensar en un diagnóstico al- ticas: presencia de trombos, defectos con posibilidad
ternativo. El ECG permite detectar alteraciones de la de corrección quirúrgica, hipertensión pulmonar, etc.
frecuencia cardíaca (la taquicardia se asocia a un peor
pronóstico), del ritmo (fibrilación auricular) y de la Dado que la exploración es inocua, cómoda y fácil-
conducción (los pacientes con bloqueo de rama iz- mente repetible para el control evolutivo del proceso,
quierda tienen peor función sistólica y peor pronósti- es difícil argumentar en contra de la realización siste-
co). También pueden detectarse hipertrofia, ondas Q mática del ecocardiograma en cada paciente con sos-
(que apoyan el origen isquémico de la IC) y alteracio- pecha de IC. Sin embargo, esto supone una gran sobre-
nes de la repolarización (por sobrecarga, trastornos carga para el sistema sanitario, pues la prueba requiere
electrolíticos, efectos farmacológicos o isquemia). tecnología sofisticada y cara, así como un operador
3. La radiografía de tórax puede ser normal o, lo que experto, con un importante consumo de tiempo.
es más habitual, mostrar cardiomegalia, así como sig- Además, sólo un 25% de los pacientes remitidos para
nos de congestión pulmonar (hipertensión venocapilar, ecocardiograma con diagnóstico clínico de IC en aten-
edema intersticial, peribronquial, perivascular y alveo- ción primaria finalmente muestra disfunción sistólica
lar, dilatación de elementos vasculares) o derrame de VI32. Esto hace que, en la práctica, el ecocardiogra-
pleural. Es importante tener en cuenta que la presencia ma sea infrautilizado en la IC, en especial en la pobla-
e intensidad de los hallazgos radiológicos dependen de ción anciana33.
la duración y la gravedad de la IC28. Así, la ausencia Por ello, sería ideal disponer de un marcador de IC
de cardiomegalia con datos muy floridos de IC iz- como prueba de cribado de la población con sospecha
quierda es sugestiva de un proceso agudo, mientras de IC. Idealmente debería ser una exploración rápida,
que en los pacientes crónicos, los signos de congestión de bajo coste y con alto poder predictivo negativo, de
pulmonar pueden estar ausentes, aunque tengan sínto- forma que permita descartar fiablemente al importan-
mas típicos como disnea y ortopnea. La repetición de te subgrupo de pacientes con sospecha clínica baja-
la radiografía de tórax es muy útil para valorar la evo- media de IC en el que el ecocardiograma no mostrará
lución del cuadro. una enfermedad significativa. Varias de estas caracte-
4. El ecocardiograma es, sin duda, la exploración rísticas confluyen en la determinación de péptido na-
más informativa en el estudio de la IC y es la técnica triurético tipo B (BNP). Tanto el BNP como la parte
más empleada29, pues permite: inactiva de su molécula precursora, el N-terminal pro-
BNP, pueden ser determinados con rapidez y fiabili-
– Confirmar el diagnóstico de cardiopatía cuantifi- dad «a la cabecera» del enfermo. Lo más atractivo es
car las alteraciones de la función sistólica y diastólica que han mostrado una buena sensibilidad y un exce-
del VI, hipertrofia de pared, etc. lente valor predictivo negativo (entre el 90 y el
– Determinar la etiología de la IC en muchos casos, 100%), tanto en el estudio de la población general,
permitiendo diagnosticar las valvulopatías, las enfer- con baja prevalencia de IC34, como en una cohorte de
medades del pericardio, los patrones típicos de afec- alta probabilidad, como son los pacientes que acuden
ción del miocardio (miocardiopatía dilatada, restrictiva a urgencias por disnea35. Otras cualidades que hacen
o hipertrófica, o disfunción segmentaria de contractili- aún más atractiva la determinación del BNP son: su
dad, sugestiva de origen isquémico), las malformacio- capacidad para detectar formas asintomáticas de dis-
nes congénitas, etc. función del VI, tanto sistólica como diastólica, su uti-
– Aportar una importante información pronóstica: lidad para el pronóstico vital y la aparición de even-
diversos parámetros de disfunción sistólica de VI, tan- tos, y como guía para el tratamiento de la IC, etc.36-38.
to la reducción de la fracción de eyección y de acorta- La irrupción de estos péptidos está empezando a cam-
miento como el aumento de los diámetros telesistólico biar la secuencia de actuación en el diagnóstico de la
y telediastólico, se asocian con una peor evolución. IC: probablemente, su determinación quedará encua-
Similar significado tiene la presencia de insuficiencia drada entre la evaluación clínica inicial y el ecocar-
mitral significativa, que es secundaria a la dilatación diograma, que se reservará para pacientes con valores
del anillo. También la disfunción diastólica severa, con elevados4. Se trata de un campo de enorme interés y
fisiología restrictiva reflejada por una onda E de llena- actualidad, por lo que será abordado monográfica-
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mente en un posterior capítulo de esta serie. y su correlación con los síntomas en pacientes con clí-
Otras exploraciones complementarias de utilidad en nica sugestiva.
determinados pacientes con IC son: la ventriculografía
isotópica, que permite valorar con precisión la función BIBLIOGRAFÍA
ventricular izquierda y derecha, pero ofrece menos in- 1. Rodríguez-Artalejo D, Banegas Banegas JR, Guallar-Castillón P.
Epidemiología de la insuficiencia cardíaca. Rev Esp Cardiol
formación anatómica que el ecocardiograma. Está es-
2004;57:163-70.
pecialmente indicada en los pacientes con mala venta- 2. Remme WJ, Swedberg K, Task Force for the Diagnosis and Treat-
na acústica que impide obtener un ecocardiograma ment of Chronic Heart Failure of the European Society of
fiable. La indicación del cateterismo izquierdo con co- Cardiology. Guidelines for the diagnosis and treatment of chronic
ronariografías en la IC está bien establecida en las guías heart failure. Eur Heart J 2001;22:1527-60.
3. Hunt SA, Baker DW, Chin MH, Cinquegrani MP, Feldman AM,
norteamericanas de práctica clínica de 20013, que se Francis GS, et al. ACC/AHA guidelines for the evaluation and ma-
ofrecen en la tabla 7. En general, su práctica se reserva nagement of chronic heart failure in the adult. J Am Coll Cardiol
para casos de IC con sospecha de cardiopatía isquémi- 2001;38:2101-3.
ca (no necesariamente con angina típica) en los que se 4. Struthers AD. The diagnosis of heart failure. Heart 2000;84:334-8.
5. Braunwald E, Colucci WS, Grossman W. Clinical aspects of
considera que el diagnóstico de coronariopatía puede
heart failure: high output heart failure; pulmonary edema. En:
ir seguido de revascularización coronaria. La ventricu- Braunwald E, editor. Heart disease. A textbook of cardiovascular
lografía angiográfica permite visualizar alteraciones medicine. 5th ed. Philadelphia: WB Saunders, 1997; p. 445-70.
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domiocárdica, que cuando se practica de manera siste- Association classification and peak oxygen consumption in the as-
sessment of functional status and prognosis in patients with mild to
mática ofrece información etiológica en menos del moderate chronic congestive heart failure secondary to either ische-
15% de los casos. Una elevada sospecha de afecciones mic or idiopathic dilated cardiomyopathy. Am J Cardiol
en que no existe otro medio para llegar al diagnóstico 1992;70:359-63.
(miocarditis, fibrosis endocárdica, algunos casos de 11. Petrie M, McMurray J. Changes in notions about heart failure.
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