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INTRODUCCION
BIBLIOGRAFIA
Álvaro d'Ors, Elementos de derecho privado romano, Eunsa 1992, ISBN 84-
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Antonio Fernández de Buján, Derecho Público Romano, Thomson Reuters
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Antonio Fernández de Buján, Derecho Privado Romano, Iustel, 9.ª ed.
2016, ISBN 978-84-9890-202-0
Alejandro Guzmán Brito, Derecho Privado Romano, Tomos I y II, Editorial
Jurídica de Chile, Santiago, 1996, ISBN 978-956-10-1127-4
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Veintiuno de España Editores 1999, ISBN 84-323-1060-3
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ISBN 978-84-9876-291-4
Daniel Hernàndez, Filosofía del derecho, 8ª ed. (II) Fondo editorial.
DERECHO ROMANO
El derecho romano (en latín, Ius Romanum) fue el ordenamiento jurídico que rigió
a los ciudadanos de la Antigua Roma. El derecho romano, por su gran
complejidad, aplicabilidad práctica y calidad técnica, aún hoy, es la base del
derecho continental y de los códigos civiles contemporáneos, y se estudia en las
facultades de Derecho de la mayoría de países que emplean el Derecho
continental. Su importancia histórica e influencia en la ciencia del Derecho, que se
extiende también a los países de common law, se manifiesta en la pervivencia de
numerosas instituciones jurídicas latinas en la actualidad, como la hipoteca o la
teoría del contrato, y en la gran cantidad de expresiones jurídicas latinas.
En la actualidad, el derecho romano es objeto de estudio de una disciplina jurídica
internacional, la romanística, cuya sede son las facultades de derecho de todo el
mundo. En virtud de este carácter internacional, el derecho romano se cultiva en
varios idiomas, principalmente italiano («lingua franca» de la romanística), seguido
por el alemán y el español. Hasta la mitad del siglo XX hubo importantes
contribuciones en francés, pero en la actualidad esta situación ha variado a la
baja; el inglés es un idioma de uso minoritario en el cultivo de la disciplina, aunque
se acepta como idioma científico en la mayoría de las publicaciones. El español se
consolidó como idioma científico en esta disciplina a partir de la segunda mitad del
siglo XX, gracias a la altura científica que alcanzó la romanística española,
comandada por Álvaro d'Ors y continuada por sus discípulos.
El estudio del Derecho Romano se justifica por varios aspectos que a continuación
sintetizamos:
Para comenzar decido escoger todas las justificaciones porque una vez leídas
puedo decir que, a través del Derecho Romano, los principiantes del estudio del
derecho, pueden conocer los mecanismos básicos del razonamiento jurídico, los
conceptos fundamentales (propiedad y posesión, acción y excepción, capacidad,
legitimación, crédito y deuda, derecho real, dolo y culpa, responsabilidad penal,
sucesión mortis causa) que va a desarrollar, con todo detalle, en las sucesivas
materias de la carrera.
En conclusión, dicho esto pienso que, el estudio del Derecho Romano es
fundamental para los futuros abogados, los estudiantes de hoy aplicarán, todos los
días, principios y reglas del Derecho Romano, la utilidad de permitir un estudio
elemental, básico, de todo el sistema jurídico, de ofrecer una referencia sobre
cómo ha llegado a ser nuestro Derecho actual y finalmente el Derecho Romano
sirve como 'mínimo común múltiplo' para la unificación del Derecho, al ser la base
de todo el pensamiento jurídico occidental