Ríos

Los ríos son ese tipo de escenografías que toda la gente admira, pero pocos hacen, probablemente
por que consideran que son demasiado difíciles de realizar.

Vean esta guía. Tal vez les ayude en sus procesos creativos.

Materiales:
Material Base: una tabla de madera de 6 milímetros de espesor.
Pluma Vit, para los bordes
Arena
Pasto y cuerdas para la vegetación.
Pegamento PVA
Varniz brillante y pinturas
Una vez que tengas la tabla, del tamaño que sea, dibuja con un plumón un río, que comience por un lado de la mesa y termine en la
siguiente esquina. Vale decir, si dividimos la mesa en 4, debieramos realizar un río que termine en un lado del cuadrante 4 de la
mesa, y termine en el otro (ya que los otros dos lados del cuadrante cuatro topan con otros cuadrantes y no con el borde de la mesa.)
Una vez dibujado, córtalo con una sierra. Ls venden en cualquier librería, y son las que
probablemente debiste usar en las clases de Técnica Manual.
Cuando hayas terminado de recortar el río, secciónalo en distintas partes, para hacer más fácil
su transporte.
Una vez que hayas cortado todo, te sugiero que lijes los bordes laterales, intentando dejarlos
lo más redondeado posible. De esta manera evitas clavarte astillas y el trabajo queda mejor
hecho.
No te recomiendo lijar los bordes que se conectan con los otros segmentos del río, ya que si lo haces, quedará un pequeño declive
en las junturas.
Una vez que esté todo listo, deberás decidir si hacer los bordes de Pluma Vit, lo cual implica cortarlos y prepararlos para que
encajen con el siguiente segmento; O, en cambio, usar papel machè (papel de diario remojado con agua y cola fría). En cualquiera
de los dos casos, te recomiendo tener especial cuidado en las junturas y la coherencia con el siguiente segmento.
Para esto, puedes mantener un espesor estándar a fin de mantener la coherencia (y hacer todos
los segmentos intercambiables), o simplemente hacer cada segmento en comparación y
contacto con el anterior.
Una vez que tengas los bordes listos y todo encaje perfectamente, es hora de la pintura y los
detalles. Para esto, es sugerible que primero pongas una base, algo que impida que la pintura
sea absorbida por el papel o la madera (de otro modo pasarás horas tratando de lograr tus
colores.).

Luego, si lo deseas, puedes pegar el pasto y/o la arena en los bordes y pasarles, una vez seco
el pegamento, una capa de cola fría diluída, a fin de fijar mejor ambos elementos.
Terminado este proceso, puedes comenzar a pintar.
Los bordes, debieran ser color musgo, por lo que el verde oscuro te servirá como color base
tanto para el interior del agua, como para los declives que rodean el río. Una vez hecho esto,
mezcla colores en el borde, para pasar de muzgo a otra tonalidad en la parte que corresponde
al suelo. Para hacer esto, es recomendable pintarlo todo, primero, con un color base a elección
(café para la tierra, verde oscuro para el pasto) y posteriormente pasr pincel seco para
producir el efecto de Musgo, con verde musgo) o pasto (con verdes más claros e incluso un
poco de amarillo, claro, todo con pincel seco.).
En el caso del río, el pincel seco no es tu opción. En cambio, pinta todo de un color base, y luego, diluye los colores que vayas a
usar (no todo el envase, sino la cantidad de pintura que creas que vas a necesitar) hasta que queden casi traslúcidas. Esto es lo que
deberás pasar por sobre tu color base.
Notarás que este efecto crea distintas capas, y va tiznando el color original hacia algo más parecido al color que usas. Cada nueva
capa que pasas hará más intenso el color que usas.
Ahora debes ser creativo, y crear con distintos azules el flujo del río, distintas profundidades y esas cosas.
Cuando termines, y sientas que has creado una obra maestra, deja que se seque.
La primera impresión será de falsedad. El color es demasiado opaco para lograr el efecto de agua. Pero calmado, ahora le toca su
turno al barniz.
A lo largo de todo lo que corresponda al agua, pasa una capa de barniz brillante, la cual, una vez seca, hará que tu río tenga ese
aspecto de humedad que querías.
El resto, es terminar los detalles. Si lo deseas, puedes deshacer una cuerda de cáñamo, recoger los filamentos, recortarlos del largo
adecuado y crear malezas o juncos en los bordes del río. Puedes incluso agregar piedras y otras cosas a elección. Lo más importante
es el agua. Ahora tienes una barrera sólo salvable por vehículos graviticos, ya que todo el resto de las unidades deberá realizar un
chequeo para no quedarse estancados.